El demonio guardián.

¿Qué sabes de los Ángeles y los demonios? Los Ángeles son buenos, los demonios son malos. Pero sus vidas son muy complicadas. Perola mala suerte, el mejor demonio llamaaunode los maestros de la escuela de Ángeles y Demonios. ¿Sabes quién es el mejor demonio? El mejor demonio de esta escuela es Lucifer. Él es, por cierto, el hijo de Satanás. El chico entró en la oficina de su maestro. El profesor también era un demonio. Lucifer: ¿Por qué me llamaste? Geralt: Hay una tarea para ti. Lucifer: ¿Qué una tarea? Geralt: En el mundo de los vivos vive una niña, tienes que cuidarla. Lucifer, al escuchar la tarea, miró a Geralt con sus malvados ojos. Lucifer: No soy un ángel de la guarda. Soy un demonio. Geralt: Lucifer, eres el único que puede cuidarla y entenderla. Lucifer: ¿Por qué yo? ¿Por qué no Mimi? Además, la niña siempre entenderá a la niña. Geralt: Mimi no es una opción. Tú, solo tú puedes ayudarla. Lucifer: Vale, estoy de acuerdo. ¿Alguna información sobre ella? Geralt: Eso es lo más interesante. Se llama Vicky Walker. Tiene cinco años. En ese momento, los ojos del heredero del Infierno se ensancharon. Lucifer: Bueno. ¿Cuánto tiempo tengo? Geralt: Tienes mucho tiempo. Lo importante es que no la dejes morir. Lucifer: ¿Por qué? Lucifer: ¿Walker? ¿Es la hija de Rebecca? Geralt: Sí. Intenta hacer amigos con ella. Lucifer: ¿Por qué? Geralt: La necesitas para algo aquí. Así que no la dejes morir. Lucifer: Bueno. ¿Puedo irme? Geralt: Sí. Después de eso, el hijo de Satanás se fue a cumplir su tarea. Después de bajar a la gente, Lucifer fue a buscar a la niña Vicky. Lucifer: Bueno, ¿por qué lo hago? El chico tomó una respiración profunda y fue a verla. El heredero Infernal se acercó a la pequeña y se sentó a su lado en un banco. Lucifer: ¿Por qué una niña tan pequeña está sentada aquí sola? Vicky: Porque mi papá está en el trabajo. Y en casa me aburro de sentarme. ¿Por qué estás solo? Lucifer: también es aburrido estar solo en casa, como tú. Vicky: Me llamo Vicky. ¿Y tú? Lucifer pensó un poco y decidió decirlo como es. Lucifer: Me llamo Lucifer. Vicky lo miró con sus ojos de niño. Vicky: ¿Eres un demonio? Lucifer: Sí. Vicky: Pero el diablo no existe. Lucifer: Existe, y ahora está sentado a tu lado. Vicky:¿Qué puedes probar? Lucifer: No voy a probar nada a nadie. ¿No tienes que ir a casa? Vicky: sí, tengo que irme a casa. Tal vez nos veamos de nuevo. La niña saltó del banco y se fue sola a casa. El hijo de Satanás estaba mirando a la niña. Y después de pensarlo un poco, decidí ir con ella. Así que se levantó del banco y corrió a Vicky. Lucifer: Vamos juntos a tu casa. No hay nada que hacer. Vicky tomó su mano y se fueron a su casa. Vicky: Y si la gente me ve caminando con un extraño, ¿entonces qué? Lucifer: Digamosque eres mi hermana menor. Vicky: Entonces, ¿serás mi hermano mayor? Lucifer: Correcto. Caminaron tranquilamente, disfrutando de la belleza. Cuando llegaron a la casa, vieron que había una luz encendida. Lucifer: Vete a casa. Vicky: ¿Te irás? Lucifer: Lo siento, pero sí. Vicky: ¿Por qué no te quedas conmigo? Lucifer: ¿Necesitas que me quede? Vicky: Sí, es divertido contigo. Lucifer: Bueno. Entonces estás por la puerta. Yo soy el secreto para entrar. La pequeña sonrió y entró en la casa. Lucifer se quedó de pie por un tiempo y caminó hacia las ventanas de Walker, chasqueó los dedos y terminó en la habitación de la niña. Cuando estaba en la habitación, vio a la bebé llorando, con una marca de mano visible en su mejilla. El heredero del Infierno se acercó a ella y se sentó a su lado en la cama. Lucifer: ¿Qué pasa con tu mejilla? Vicky: lo hizo mi padre. Después de la muerte de mi madre, mi padre cambió mucho. Comenzó a beber alcohol y me golpeó. Lucifer: Vamos a la cama. Vicky: ¿Te quedarás conmigo? Lucifer: Sí. Ahora a dormir. Vicky se acostó en la cama, el diablo la cubrió con una manta y se acostó a su lado para dormir. Cuando la niña se quedó dormida, Lucifer soltó sus alas y cerró a la niña con ellas. Ella sintió algo que la envolvió. Al abrir ligeramente la cabeza, vi las plumas, que eran de color burdeos. Vicky: Son tan hermosos. Lucifer: Me alegro de que te gusten mis alas, duerme, princesa. Vicky: Bueno. Buenas noches, Príncipe del Infierno. Lucifer: Buenas noches, princesa. Así se durmieron.