Prologo.
13 de mayo de 2025, 18:08
Notas:
⚠️Advertencias⚠️
🐈⬛En varios capítulos habrá muchísimo texto.
🐈⬛Este contenido es meramente ficción, así que por favor
SEPARAR LA REALIDAD DE LA FICCIÓN.
🐈⬛Este fanfic tiene Dead Dove: do not eat. Estan bajo su propio riesgo.
🐈⬛ESTE FANFIC CONTIENE TEMÁTICA ADULTA, COMO TEMAS MUY DELICADOS QUE ALGUNOS ESPECTADORES PUEDA INCOMODAR, SI A PESAR DE QUE HAS LEÍDO LA ADVERTENCIA QUIERES SEGUIR LEYENDO ESTAS BAJO TU PROPIO RIESGO, SE CONSIDERA DISCRECIÓN. FUISTE ADVERTIDO.
🐈⬛+18 (no se permiten menores).
🐈⬛ No se aceptan comentarios negativos serán bloqueados de inmediato, si no te gusta lo que lees te pido de la forma más respetuosa que te retires, ignores o bloquees.
🐈⬛Este fanfic tiene abuso infantil, por lo tanto, si te sientes incomodo con eso, te considero saltar esas partes.
🐈⬛Este es un comunicado para mis lectores de Wattpad, en Wattpad el fanfic se subirá con censura por lo tanto habrá capitulo recortados, donde debe ir las partes explicitas, asi que les pido de la manera mas atenta posible, que tengan también su cuenta de ao3 activa, por si quieren verla sin censura, de igual forma anunciare cuando un capitulo tenga censura. Gracias.
🐈⬛Habrá escenas explícitamente sexuales y violación.
🐈⬛Habrá un poco de contenido transfóbico dentro del fanfic, por favor advierto que es parte de la trama, no se romantiza en absolutamente nada. Por lo tanto, evítense de pensar mal.
☆*゚ ゜゚*☆*゚ Arco1. Viviendo entre sueños.*☆*゚ ゜゚*☆*
¿Qué hora es?
En esos momentos se preguntó aquel can de 3 metros mientras abría sus ojos y observaba a su alrededor, se sentía adolorido en todo su cuerpo, podía sentir como sus huesos crujían por culpa del maltrato de la noche anterior que sufrió a manos de su abusador, y no quería hablar de su pobre intimidad que ardía como carne viva, sintiendo como ese asqueroso semen quemaba sus entrañas, sintiéndose sucio y lleno de agonía, porque jamás pensó en su vida que sería ultrajado de esta forma.
Quería que este infierno terminara, pero poco sabía que solo sería el principio del verdadero infierno que le esperaría. Tanto que Dogday ignorante lo ocurría detrás de esas paredes que lo mantenían atrapado en ese cuarto solo, herido, mientras era sujetado por unas cadenas la cual lo mantenían quieto sin poder moverse, mientras sus piernas a duras penas se podía sostener su propio cuerpo, además de que debajo de él se podía ver un charco de fluidos de dudosa procedencia, pero entre ellos podía detectarse un poco de sangre, la cual escurría de su cara por los golpes de su maltratador, mientras que en sus piernas solo podía sentir como estaba pegosteoso al mismo tiempo la incomodidad hacía que se sintiera como una verdadera mierda.
Pensó en arrancar las cadenas con su fuerza, pero a estas alturas ya ni siquiera podía gritar, ni siquiera tenía las fuerzas para escapar de su prisión, solo quería irse a casa y ser abrazado por sus seres amados. Estaba a punto de volver a llorar de recordar la brutalidad de la que fue sometido, cuando pudo escuchar que la puerta de metal se abría en un horrible rechinido, Dogday levanto su mirada para ver al visitante, temiendo que fuera su violador.
Cuando en sus ojos se iluminaron y sonrió de poder al fin verlo. Solo para que su sonrisa se esfumara de inmediato que, al ver a su salvador, manchado de sangre y con una sonrisa maniaca combinada con el alivio de al fin encontrarlo, fue entonces que el líder de los Smalling Critters supo que estaba pasando y en su corazón supo la respuesta de lo ocurrido.
Fue entonces que en un murmuro inseguro pregunto a su salvador...
¿Qué hora es?
—¡ES HORA DE JUGAR! —Gritaron los Smalling Critters con tanta emoción y alegría unidas, la cual después comenzaron a escuchar una canción animada siendo bastante infantil.
La escena cambio para dejar ver a los mismísimos Smalling Critters estando en un jardín bastante hermoso, las cuales estaban en un increíble picnic, todos parecían felices sin ninguna molestia o incomodidad. —Bien chicos, ahora que todos estamos reunidos, al fin podemos discutir algo muy importante. —Pronuncio Bubba Bubbaphant, aquel elefante humanoide que media casi cuatro metros de altura, afelpado y rechoncho mostrando su elegancia como su gracia, además de que poseía unos lentes.
—Espero que pueda ser rápido, porque me muero de hambre. —Contesto la linda cerdita llamada Picky Piggy quien estaba sentada abrazando su estómago, al mismo tiempo que se veía que en sus orejitas estaban decorada con unos moñitos rojitos mostrando su dulzura. Al igual que Bubba ella es alta con tan solo 3 metros la cual se veía rellenita y muy bien cuidadita.
—No eres la única que tiene hambre Picky, de hecho, yo también estoy hambrienta jiji. —Esta vez respondió con una voz melodiosa y dulce, Crafty Corn aquella unicornio tímida y un poco retraída, quien estaba a lado de Picky, ella se veía en buena forma con sus curvas y un hermoso cabello aluzado decorado con flores, pero lo que más destacaba de ella eran sus lunares en sus hombros que parecían estrellas preciosas, poseía también una altura de 3 metros.
—Bueno, ¿y que esperamos?, apresuremos esto yo tengo algo super importante que hacer hoy. —Respondió aquel pollo siendo Kickin Chicken, quien poseía unos lentes de sol y sonreía orgullosamente, mientras se acomodaba sus lentes, mostrando una altura de 3 y medio metros, la cual poseía un porte bastante egocéntrico algo que la coneja de los Smiling solo se río por su comportamiento.
—Oh si, si importante es que te mires al espejo y te comiences a adular por horas, vaya... ¡Es tan importante! —Contesto Hoppy Hopscotch quien se reía sarcásticamente de Kickin que solo había bufado, ante esa coneja deportista quien, a pesar de medir 3 metros de altura, ella poseía un físico increíble se notaba en sus fuertes piernas y aunque no estaba tan curvilínea como Picky, Crafty o con esta Bobby, aun así, podía presumir de su apariencia.
Los demás al escuchar eso solo se rieron cosa que Kickin bufo. —Me subestimas coneja tonta, no solo me dedico a embellecerme si más bien a practicar para mi siguiente competencia, ¡Ya se los dije ese trofeo de surfista será mío! — Contesto Chiken bastante optimista y con esa determinación por pensar que el premio seria suyo.
—¡¿A quién le llamas tonta, pollo tonto?! —Pregunto Hoppy a la defensiva mientras señalaba a su amigo cool.
—Bueno si el saco te queda...—Pero Kickin no pensó en retroceder, cosa que la coneja solo se sorprendió y se levantó mientras hacia ese movimiento de levantar las mangas de su camisa, aunque no tuviera como signo de pelear.
—¡Te romperé la nariz! — Pronuncio la de pelaje verde, cosa que el pollo imito sus movimientos mientras se reía, pero Bobby aquella osa de 3 metros también se levantó para separarlos, metiéndose entre ellos dejando ver su figura muy curvilínea más que sus amigas, además que resaltaba en su pecho un hermoso y tierno pelaje afelpado pareciendo algodón cubriendo su pecho.
—¡Ya basta los dos!, ¡No se romperán nada!, ¡No actúen como niños cuando tenemos que hablar de algo serio! —Dijo enojadamente la osa mientras apretaba los hombros de ambos con su fuerza, provocando que ambos chillaran del dolor por como la osa de verdad poseía una fuerza monstruosa, ambos aceptaron a regañadientes regresaron a su lugar, mientras se disculpaban.
—Bobby tiene razón, no debemos pelear entre nosotros y más cuando un amigo nos necesita. —Contesto esta vez el líder de los Smalling Critters, siendo el mismísimo Dogday el sol del equipo, que estaba entrando en escena, este tenía la altura de las hembras con su pelaje anaranjado con café, el perrito se veía un poco molesto por como sus amigos peleaban, los demás se sorprendieron de ver a su líder, pero rápidamente se calmaron, pues sus sonrisas inundaron el lugar.
—¡Líder! —Gritaron los Smalling, Dogday por su parte solo sonrió, sabiendo que todo estaba bajo orden.
Él se acercó a ellos para sentarse en su lugar, mientras movía suavemente su cola. — Bien ahora que estamos todos, por favor procede Bubba. —Dijo el can, mientras se sentaba enfrente de ellos.
Cosa que los demás estaban feliz al ver a su líder al fin con ellos. —Como dije, Catnap nos necesita, parece que está muy enfermo. —Contesto Bubba mientras alzaba uno de sus dedos, cosa que los Smalling Critters solo se sorprendieron.
—A lo mejor es porque comió algo mal. —Contesto Piggy, mientras trataba de dar una teoría, cosa que Kickin solo se rio suavemente.
—No todo se trata de comida Picky. —Respondió el pollo mientras solo bufaba y cruzaba sus brazos, cosa que la cerdita solo soltó un puchero.
Lo que provocó que los demás comenzaran a discutir sobre las teorías de lo que tenía Catnap, lo que llevo a que comenzara a tensarse la cosa, pero el líder aquel perrito al ver esto rápidamente se levantara para poner un alto. — ¡Ok, ya es suficiente! —Respondió poniéndose en medio para evitar que pasara otra cosa, algo que funciono ya que los Smalling se quedaron en silencio, pero Picky y Kickin solo se miraron molestos. — Miren, sé que todos estamos preocupados por nuestro amigo, pero no lograremos nada si nos peleamos, así que vamos todos a casa de Catnap y podremos cuidarlo. ¿Entonces que dicen? — Dogday menciono mostrando ese carisma de líder que demostraba que los Smalling al escucharlo, solo se quedaran callados, pero sonrieran, porque estos no dudarían en seguir a Dogday a donde fuera que vaya.
—¡SI! — Los Smalling Critters contestaron bastantes energéticos, aceptando la idea del can.
—¡CORTE! — Una voz ajena se escuchó provocando que los Smalling Critters volvieran a sus posiciones, y varias voces comenzaron a escucharse, siendo los humanos que se felicitaban de haber hecho un grandioso trabajo con las cámaras, al mismo tiempo que venía otro humano con bebidas para entrar al set donde se estaba rodando el nuevo capítulo de los Smalling Critters crecidos, para darles las bebidas que cada uno había pedido. —Felicidades chicos, lo hicieron increíble. —Contesto el director acercándose a los animales antropomórficos que solo sonreía cada uno por su gran trabajo.
Dogday por su parte solo suspiro aliviado que al fin habían terminado de rodar una escena, y más ahora que es su hora de salida a sí que podían descansar. Este observo el lugar mostrando que estaba en un set de grabación, además de estar en un escenario artificial donde simulaba un día soleado en un parque, la cual estaban teniendo un bonito picnic. El sol se sintió aliviado porque para ese punto su día fue bastante agotador, pero lo que le alegraba y el valor de seguir adelante aguantando ese trabajo, son sus amigos que hablaban animadamente por su gran esfuerzo.
—Eso fue genial, debería especializarme en volverme un actor famoso, con mis dotes de actuación. —Contesto Kickin mientras aun con sus gafas solares sonreía con egocentrismo y orgullo por como trataba su papel, cosa que solo Crafty se río suavemente, así que le dio un suave golpe en su hombro.
—Lo único que serás famoso será por tu ego enorme Kickin. —Menciono divertida siguiéndole la broma, al mismo tiempo que se pegaba mucho al cuerpo del macho, quien al sentir a Crafty tan cerca se sonrojo fuertemente porque podía oler su delicioso perfume jazmín.
—A-ah... pero q-que dices jeje. —Este respondió nerviosamente haciendo que los demás Smalling solo se rieron de su expresión.
—¿Es acaso lo que huele es amor? —Pregunto Bobby divertida bromeando con sus amigos, mientras juntaba sus manos y hacia una señal de corazón haciendo que los demás estallaran de risas al ver como Crafty y Kickin se sonrojaban fuertemente.
Dogday al ver esa escena tan tierna no pudo evitar enternecerse por todo lo que ellos representaban, sintiendo como su corazón estaba agradecido de tenerlos como sus amigos. Por lo que camino hacia ellos mientras pensaba en lo increíble que es su vida, sintiendo como vivía su mejor momento, moviendo su cola con energía hasta quedar enfrente de ellos, las cuales los Smalling al ver a su líder no duraron en abrir un espacio para que entrara a su círculo de conversación. —Vamos ya dejen a Crafty y a Kickin, déjenlos disfrutar su amor. —Este respondió mientras hacia esa pequeña broma, cosa que Crafty chillo super nerviosa.
—¡Dogday! —Ella exclamo su nombre cosa que Dogday solo le dio unas suaves palmadas en el hombro de la hembra.
—Jaja lo siento Crafty, solo es broma. —Dijo el sol mientras la unicornio solo bufaba y sonreía al final, aceptando su disculpa después de todo no es como si se la pasara mal, por lo contrario, ella también estaba contenta con todo esto.
—¡Chicos!, Ya pueden retirarse. —Contesto director mientras daba las ordenes que limpiaran el set para que todos pudieran irse a sus respectivas casas.
Los Smalling solo asintieron y comenzaron a caminar juntos hacia su respectivo hogar, cosa que Dogday se quedó atrás mientras observaba a sus amigos adelantarse, pero fue Kickin que lo noto y pregunto. — Dogday, ¿Qué hacer?, ¿No vienes? —Pregunto preocupado, mientras esperaba la respuesta de su amigo que solo se rio suavemente.
—Ya voy Kickin, solo es que me quede pensando en algo...—Respondió el nombrado algo que el pollo solo hizo a un lado su cabeza con duda.
—¿Sobre qué piensas? —Chicken no quería sonar entrometido, pero a ese punto se estaba preocupando, cosa que Dogday negó rápidamente mientras alzaba sus manos y hacia una señal para que no pensara mal.
—No es nada malo, es solo que estaba pensando lo afortunado que soy de estar con ustedes. —Respondió esta vez caminando para acompañar a Kickin que lo estaba esperando mientras los demás se adelantaban, el pollo solo escucho a su amigo y este soltó una risita cómplice.
—A veces me pregunto amigo mío, ¿Cómo es que siempre te mantienes positivo? —Realmente quería saber aquel ser que tenía sus gafas solares, estando feliz de escuchar las palabras de su amigo, pero no entendía porque siempre se mantenía positivo aun sabiendo que no todos los días eran fáciles y felices, en especial cuando se trataba de los científicos. Sintiendo un deje de celos por el can, pero aun así quiso saber su respuesta, para al menos querer imitarlo en su día a día y hacerlo más sencillo para él.
—Bueno eso es fácil de contestar, yo siempre sigo una serie de pasos cuando me levanto. —Dogday no dudo en contestarle a su amigo y fue entonces que comenzó a explicar su no tan secreto. —Primero que nada, al despertar siempre le digo buenos días a la vida, y agradezco que sigo estando vivito para seguir mis actividades, después solo admiro las instalaciones divertidas a mi alrededor...—Fue entonces que el sol no paro de hablar y comenzó a pensar seriamente en las palabras de su amigo.
Dogday no mentía cuando siempre se decía a si mismo por las mañanas que hoy sería un día mejor, junto con Kickin recordaron los pasillos de la fábrica subterránea enorme, observando a su alrededor muchos adultos quienes los saludaban y otros solo los ignoraban, mostrado también los colores de los muebles, las maquinas estilo caricaturesco que parecían en sus ojos tener vida, pero Dogday sabía que solo era su imaginación, pasillo limpios, aromas a frutas por como los encargados de la limpieza dejaban el lugar. Mirando enfrente suyo a sus amigos que hablaban y reían con dulzón, hasta que al fin llegaron al Playcare, un lugar hermoso a pesar de ser artificial estaba tan bien decorado, para que se sintiera acogedor varios adultos lo frecuentaban, ya que querían ver a sus respectivos niños adoptados, además de ser el paraíso de los pequeños.
Fue entonces que Dogday en un suspiro emocionante se repitió.
Hoy es un día estupendo, los niños ríen, mis amigos son felices, los adultos nos saludan.
La fábrica irradia tanta alegría y vehemencia, que no puedo pedir más ya que este día está siendo perfecto.
Un grupo de niños al ver a los Smalling Critters llegar no duraron en balancearse hacia ellos, super energéticos, en especial unos dos pequeños que se lanzaron abrazar a Dogday quien correspondió con cariño, terminaron por ser arrastrados dentro de la guardería, donde pueden estar a gustos en su hogar. Dogday vuelve a mirar a sus amigos y comienza a volver a repetir en su mente, porque se sentía tan feliz, mientras mira cada uno de sus amigos.
Siendo el primero Bubba Bubbaphant, quien parecía un poco nervioso de estar rodeado de tanto niño que buscaban su atención, para que les ayudara con la tarea y otros le platicaban lo nuevo que habían aprendido, para Dogday ,Bubba es un genio, literalmente él podía hacer cualquier cosa a la hora de aprender habilidades nuevas cuando se trata de las ramas de la ciencia, sin duda cuando estaban en problemas cuando se trataba de tener planes o ideas él les ayudaba bastante, incitándolos siempre alimentarse con conocimiento, como leer libros o hacer algo que fomente a que siempre tomen decisiones inteligentes, el sol admitía que Bubba por mucho a veces lo salvaba de aprietos enormes, como dar soluciones coherentes y concisas. A pesar de que de todo él era el que menos paciencia tenía con los niños a menudo, le daba ansiedad o terminaba por alejarse para respirar y volver con ellos, y vaya que era a menudo. Pero lo bueno es que sus amigos nunca lo dejaban solo.
En especial Picky quien en su mayoría de las veces venía a su rescate y más ahora, que en esos momentos Bubba de nuevo estaba llegando a su limite la cual comenzaba ponerse nervioso, ya que muchos niños querían de su atención. Picky Piggy era otro asunto a diferencia de Bubba, ella es muy animada y paciente, ella tomaría a uno de los niños y regañarlos por molestar a Bubba, fue entonces que se le ocurrió decirles que mejor se prepararan para comer, algo que los niños estallaron de felicidad ya que significaba probar los deliciosos platillos de la cerdita.
Picky a pesar de todo ella siempre los mantenía saludables con sus comidas, siendo la primera de todo en ser la que se preocupara por la salud de cada uno de ellos, siempre diciendo con su típica frase "Para que un cuerpo este sano, debes comer sano", con eso siempre ayudaba a todos con sus problemas físicos, a pesar de ser una gran cocinera que preparaba los platillos más deliciosos, también era una herbolaria, quien tenía bastos conocimientos sobre remedios caseros, aparte de que Dogday sentía bastante respeto y admiración como Picky le explicaba su hobbit, en especial cuando tenía un invernadero personal para sus plantas, aunque claro los científicos también buscaban mucho a la cerdita para hacer una que otra medicina.
—Jeje un poco de comida no vendría nada mal... Picky, ¿te puedo ayudar? —Pregunto esta vez el unicornio tan dulce. Dogday al escuchar su voz no dudo en voltearla a ver solo para admirar la belleza de aquella hembra, no iba a negar que Crafty Corn tenía un encanto inigualable, siendo de las demás hembras la más destacada por su hermosura, con el cabello lacio azulado adornado de flores de todo tipo de colores, que imaginaba que las niñas siempre se lo decoraban, además de que en sus hombros y parte de la espalda poseía en su pelaje blanquecino unos lunares decorando esas partes de su cuerpo, como si fueran unas hermosas estrellas que formaban constelaciones, además de poseer una buena figura curvilínea. Pero lo que de verdad admiraba de Crafty era la forma tan creativa que incitar a los niños, para hacer explotar su imaginación, no era por nada, pero Crafty ayudaba mucho también a los adultos en las decoraciones de la fábrica para hacerlo más llamativo, colorido y hermoso como ella. A pesar de ser una chica muy tímida y a veces callada, no le impedía para poder hacer su trabajo, Dogday no iba a negarlo si no fuera porque tenía sospecha que Kickin gustaba de ella, él podría intentarlo con la hembra unicornio.
—Por supuesto Crafty, nunca negare la ayuda jeje. —Contesto la cerdita con felicidad, mientras sonreía a su amiga. Pero fue la osa que al ver esta escena no dudo en soltar un gemido llena de vehemencia, para ir abrazar a ambas sin dudar alguna, no importando si atrapaba a un niño entre sus brazos.
—Awww como me encanta ver este tipo de escenas. —Contesto Bobby BearHug, aquella osa que siempre se emocionaba al ver los tratos de cualquier tipo de amor, Dogday solo negó con la cabeza con diversión ya que sabía que su amiga a veces podía ser muy mimosa, el líder solo pensó para sí mismo las cualidades que ella poseía y no iba a negar, que cuando se trataba consejos de cualquier tipo siempre acudía a ella, al ser una hembra bastante sabia. De todos ellos Bobby poseía mayor inteligencia emocional, ayudando mucho a los niños a conectar con sus emociones y tenerlas bajo control, además de que no se limitaba a solo niños porque bastante adultos también la buscaban, como si fuera un tipo de psicólogo. Esa osa también tenía su atractivo ya que de todas las hembras parecía estar más desarrollada, además de que su personalidad tan gentil, amorosa, maternal hacían que destacara tanto como si fuera una gran hermana mayor, o una madre, pero para Dogday una gran amiga la cual podía confiarle todo y nunca dudaría de sus valores, también la admiraba bastante por sus cualidades que a veces los Smalling Critters carecían.
—¡Bobby!, ¡No es justo yo también quiero un abrazo! —Fue esta vez Hoppy aquella coneja de color verdoso, quien se lanzó al grupo de chicas para unirse al abrazo, lo que hizo que las 4 rieran junto con los niños atrapado entre ellas. Hoppy Hopscotch de todos era la más noble y leal a sus amigos, a pesar de que era un poco castrante por lo impaciente que era, el sol nunca jamás dudaría de ella y la admiraría muchas veces por lo energética, además de tomar en su mayoría los trabajos pesados que los adultos no podían, su energía tan descontrolada siempre era de ayuda para los científicos que necesitaban una mano, su entusiasmo incitaba a los niños siempre ser productivos, mantenerlos sanos físicamente con ejercicios y muy entretenidos, en su mayoría se encargaba de vigilarlos junto con Bobby como de cuidarlos. Por lo que sus habilidades de niñera son simplemente innatas, tanto que Dogday a veces tenía que pedirle consejos para controlar a los pequeños. No había duda que Hoppy también es una hembra digna de admirar.
—¡Hiug!, Tanto amor me va a quemar. —Contesto Kickin Chicken quien solo hizo una seña de querer vomitar, para luego solo acomodarse sus lentes y poner sus manos atrás de su nuca, mostrando una postura bastante despreocupada. —Bueno si me permiten, este galán tiene que descansar. —Respondió con una sonrisa soberbia, caminando con ese porte lleno de egolatría. Pero era tan típico de él que Dogday solo se rio con suavidad, ver a su gran amigo demostrando lo genial que es, no es sorpresa. Kickin es simplemente así, pero a pesar de que este poseía una personalidad un poco cuestionable, a la hora de hacer las cosas para verse tan genial como siempre, el poseía una determinación que nadie más tenía a la hora de cumplir sus metas, cuando Kickin se proponía algo nadie lo detenía hasta cumplirlo, como si no le tuviera miedo a nada, siendo de todos el Smalling Critters más valiente pero Dogday sabia uno de sus secretos, y era que Kickin era el que tenía más miedo, pero el pollo le decía que era el mismo miedo que lo impulsaba en seguir avanzando, porque el miedo de defraudarlos hacia que el pollo se mantuviera recto en sus ideales.
Dogday muchas veces miraba a Kickin para encontrar valor en sus propias decisiones, y al tener un gran ejemplo a seguir hacia que Dogday también se impulsara en ser mejor líder.
Definitivamente el Can no iba a negar que tenía muy grandes amigos, las cuales amaba y podía contar sin importar que. Observando desde atrás como todos ellos caminaban dentro de sweet home, para descansar y comer juntos con los niños. Después de todos se apoyaban para seguir manteniéndose positivos y sobre llevar cada día que llegaba.
—Dogday, ¿Vienes amigo? —Pregunto Kickin de nuevo al ver a su amigo perdido en sus pensamientos, mientras mostraba una sonrisa boba.
—Si por supuesto, jeje lo siento me volví a disociar. —Contesto con mucha sinceridad el nombrado volviendo avanzar esta vez a lado de sus amigos.
Si, definitivamente la fábrica es perfecta, todo en mi mundo es grandioso, no puedo dejar de pensar en cuanto amo a mis amigos, como adoro a estos niños, en como mi vida se ve tan favorable que juro que siento que un futuro mejor nos espera.
Pensó seriamente Dogday, mientras estaba sentado en un enorme comedor, donde estaban sentados sus amigos y la mayoría de los niños, de dulce hogar. Quienes mantenían un ambiente tan positivo, mientras esperaban la comida que Picky, Crafty y algunos ayudantes de cocina se encargaban de hacer. El perrito solo se encontraba recargado sobre la mesa con sus codos y dejaba descansar su cabeza en sus manos, fue entonces que Picky junto con sus ayudantes salieron para poder depositar la comida en la mesa, cosa que los niños y los Smalling no duraron en servirse su porción, lo que hizo que el ambiente se volviera más emocionante, Dogday observo toda la escena guardando con mucho amor estos recuerdos. Pensando que no cambiaría nada de su vida, o eso pensó cuando de repente escucho unos pasos diferentes, reconociendo el peso de la pisada y los zapatos que se utilizaba por el sonido, fue entonces que el líder borro su sonrisa y se puso tenso al ver que Elliot Ludwig conocido por ser el fundador y supervisor de Playtime Co.
Quien había llegado mostrando una sonrisa ególatra, mientras entraba al lugar siendo que los niños al ver al fundador se levantaron y rápidamente lo saludaron. —¡Buenas tardes señor Elliot! —Dijeron los niños al unísono, como si fuera para ellos lo más normal del mundo saludar al fundador.
Bueno solo había una que otra excepción.
El hombre al escucharlos solo sonrió amablemente, porque nada le hacía más feliz que escuchar a sus niños saludarlo. —Buenas tardes pequeños, veo que al fin están comiendo de sus sagrados alimentos. Me alegro de eso. —Contesto mientras caminaba por el lugar, mirando a cada niño y dando a veces suaves palmaditas en las cabecitas de los más pequeños, los ayudantes de Elliot solo lo seguían y se encontraba observando la situación con indiferencia. Fue entonces que al fin llego al asiento donde estaba Dogday, aquel can que para ese momento mostraba una sonrisa fingida, pero hacia lo posible para que no se mostrara y para su suerte Elliot no lo noto. — Dogday, mira nada más que alegría verte. — El tono de Elliot se elevó a una felicidad indescifrable, mientras se ponía al lado del cachorro y su mano en su hombro. —Acabo de ver las grabaciones de hoy y déjame decirte que te has lucido, no me sorprende después de todo eres un solecito. —Contesto el hombre mientras subía su mano hasta la cabeza del perro para poder acariciarlo con dulzura.
Dogday al escuchar eso solo se rio nerviosamente mientras miraba de reojo y observaba a sus amigos, que parecían tener una mueca seria, otros indiferentes y uno que otro solo molestos. ¿Y cómo no iban a estarlos si Elliot siempre minimizaba su trabajo para deslumbrar a Dogday? —Si... de hecho todos lo hicimos increíble, después de todo el programa no sería un éxito si no fuera por mis amigos también. —Respondió el sol mostrando su gratitud y tratando de nivelar las palabras de Elliot, haciendo que los Smalling al escucharlo solo sonrieran. Cosa que el hombre solo hizo una mueca un poco indiferente, pero no quiso decir nada más, así que solo siguió acariciando la cabeza de Dogday.
—Bueno, en todo caso Dogday, debes comer muchísimo te vez más delgado de lo normal. —Elliot cambio de tema haciendo que el perrito se sorprendiera por ese comentario, sintiéndose un poco avergonzado que digiera sobre su peso el siempre comía todo lo que preparaba Picky, por lo que este miro su cuerpo sin comprender si estaba bien o mal.
—Oh, no te preocupes estoy...—Dogday quería decir otra cosa, pero Elliot solo lo interrumpió.
Para mirar mal a Picky que al notar su mirada esta se sintió acorralada, soltando sus cubiertos, poniéndose nerviosa porque no sabía que había hecho mal, para ese momento los niños se encontraban bastantes callados ya que era ley jamás hablar cuando el fundador estaba hablando, no mentiría que el ambiente se volvió tenso e incómodo. — Picky, ¿Has estado alimentado bien a Dogday? —Pregunto el fundador severamente a la cerdita que solo se tensó y trago en seco.
—Si... si lo he hecho señor, quiero d-decir... nunca falta su plato. —Respondió tímidamente mientras sudaba frio, en sus ojos se notaba un poco el pánico no queriendo arruinar el momento, ni mucho menos que Elliot la mandara a castigar. Dogday al ver esto no dudo en alterarse, como líder no iba a permitir que le provocaran una ansiedad a su amiga, por lo que jalo del brazo a Elliot para llamar su atención.
—Elliot, por favor no... Picky me ha alimentado muy bien, ella es muy buena. —El can casi rogo que parara esta escena, sintiendo pánico que el fundador cambiara de opinión, volviendo hacer que el hombre pusiera la atención al sol del equipo. Cosa que el fundador suavizo su cara y volvió a sonreír, esta vez para acariciar una de sus orejas, tocarla con sus dedos con ternura.
—Ya veo, entonces no hay problema. En todo caso Dogday, realmente te vez flaco, deberías comer un poco más. No quisiera que le pasara algo al sol del show. —Menciono preocupado para luego soltarlo, Dogday para ese punto se sentía ansioso y bastante incomodo, él realmente no le gustaba que Elliot lo tratara de esa forma, sentía que sus latidos incrementaban y una enorme inseguridad se formaba cada vez que se acercaba al fundador. No sabía si solo llorar u ocultarse porque sentir su toque en sus orejas una de sus zonas sensibles, lo hacía sentir muy mal.
—Si... no te preocupes, estaré bien. —Solo contesto el sol queriendo que se fuera y terminara, los Smalling Critters al ver esto nadie tenía el coraje de hacer algo, por lo contrario, solo miraron con asco el claro favoritismo que Elliot daba a Dogday, no por nada el perrito es el favorito del fundador, cada maldita visita a casa hogar siempre lo demostraba, sin importarle si lastimaba o sobajaba a los demás Smalling Critters, lo único que importaba es Dogday a los ojos del hombre dueño de esa fábrica.
—Picky, a partir de ahora dale doble roción a Dogday. —Ordeno el hombre mientras se separaba y comenzaba a caminar hacia sus ayudantes que los esperaban para irse.
—¡Si señor! — Contesto Picky de inmediato aun nerviosa.
—Fue un gusto verlos a todos, pero tengo trabajo que hacer a... y para los niños, pequeños no olviden sus tareas. —Se dirijo a los niños que seguían callados y nerviosos, las cuales contestaron al mismo tiempo.
—¡Si señor Elliot, que tenga buen día! —Como si fueran robots, pero era normal cuando los educaron de esa forma para dirigirse al fundador. Después de eso el fundador se fue haciendo que todos suspiraran de alivio, pero Dogday solo le dejara un horrible mal sabor de boca. Tanto que el pobre perrito comenzó a temblar y a ver un poco de borroso, odiaba sentirse de esa forma tan inseguro como si sus instintos gritaran que se alejara de ese hombre, este solo cerro sus ojos, pero de repente sintió un toque tan gentil que al abrir sus ojos fue su amiga Hoppy que había notado esta reacción de él.
—¿Dogday estas bien? —Pregunto preocupada la coneja mientras esperaba una respuesta.
—Oh si... solo, ya sabes Elliot es a veces extraño. —Contesto el nombrado mientras le dedicaba una sonrisa esta vez un poco más tranquila, haciendo que la coneja solo asintiera.
—Bueno extraño o no... tienes que comer más...—Dijo la cerdita aun estando mal de su parte, ya que odiaba que Elliot la tratara de esa forma, porque ella se levantó para irse, pero para ese punto Dogday se había levantado primero y se acercó a ella para poner su mano en su hombro como consuelo.
—No Picky, estoy bien. No hagas caso lo que el fundador diga, ya sabes cómo es él... solo hay que ignorar su comentario, además estoy muy sano y todo jeje...—Menciono el líder sonriendo dándole a Picky ese consuelo que tanto deseaba, tanto que ella solo suspiro mientras se relajaba, pero no termino ahí ya que los demás Smalling al fin pudieron hablar con más calma.
Dogday tiene razón, el fundador solo está exagerando. —Esta vez fue Bubba al hablar.
—SIP, no hay que hacerle mucho caso jiji. —Fue el turno de Bobby decir.
—Total, ¿Qué más puede hacernos?, oh si solo unos castigos y ya ajajay. —Se rio Kickin haciendo que los demás se rieran con él, ya que a pesar de todo trataban de tomarlo con humor.
—Kickin tiene razón, no hay nada de qué preocuparse. —Crafty hablo a pesar de sonar tan tímida como siempre, no iba a quedarse callada cuando su amiga la necesitaba.
La cerdita al escuchar eso no dudo en sentir una gran ternura y enternecimiento ante el consuelo de sus amigos, que sus ojos se cristalizaron. —Chicos... ¡Si tienen razón! —Menciono mientras sonrió y esta vez los niños comenzaron a halagarla, provocando que el ambiente se volviera muy animado y divertido.
Dogday al fin pudo suspirar tranquilo y estaba a punto de volver a su asiento después de ese trago amargo, cuando a lo lejos en la unión de los pasillos vio como una cola morada pasaba. Haciendo que el perro sonriera más feliz que nunca, porque eso significaba que su mejor amigo al fin había vuelto, que no dudo en caminar lejos del comedor, pero fue detenido por la voz de Kickin. — —¿Dogday a dónde vas? —Pregunto el pollo curioso por la acción de su amigo, quien movía la cola emocionada.
—Es Catnap, al fin llego, iré por él para que coma con nosotros. —Contesto el can animado, sin esperar más respuesta solo salió corriendo queriendo encontrarse con su amigo, buscando por todos lados al voltear a la dirección de los pasillos, así que mejor fue a la habitación del gato. Cuando miro entonces aquella puerta abierta en ese cuarto en específico que no dudo entrar, a pesar de mantenerse oscuro y alzar alegre. —¡Catnap! —Llamo a su amigo, la cual se encontraba adentro de esa enorme habitación adaptada para él.
Acostado en una cama enorme para gatos, rodeado de almohadas con la cara del minino, además de que la habitación poseía una decoración morada y azulada, unos que otros juguetes esparcidos de forma organizada y unos muebles que guardaban cosas que solo Catnap sabia, en ese colchón se encontraba aquel enorme gato morado la cual al escuchar la voz de su amigo, se levantó mostrando su figura imponente que a pesar que estaba oscura, aun así podía ver lo estoico que se mostraba al sentarse en cuatro patas, moviendo con lentitud su enorme cola mientras observaba con curiosidad al perrito, dejando ver por el brillo de los pasillos como destacaba su collar de media luna, fue entonces que Dogday solo se rio. —Esta oscuro...—Contesto buscando el interruptor que, al prenderlo, su amigo ya lo estaba esperando.
Aquel gato de 5 metros el más alto de los Smalling Critters, con el pelaje morado y muy reluciente tan bien cuidado que parecía que el condenado se bañaba con un Shampo especial, Dogday al verlo no dudo en correr hacia él para lanzarse a sus brazos, la cual el minino esperaba con entusiasmo al recibirlo entre sus brazos y así se abrazaron con dulzura, ambos estando felices de verse. —¡Catnap! —Volvió a decir con energía el sol.
—¡Dogday!—Respondió la luna mientras se aferraba a su mejor amigo, dejando llevar por su aroma a vainilla, mientras Dogday se perdía en su fragancia lavanda. Moviendo su colita como todo un perrito contento de ver a su persona cercana, ambos se quedaron abrazados así por un tiempo sin querer separarse. El gato no iba a negar que extraño a su amigo.
—¿Dónde estabas?, ¡estaba un poco preocupado al no verte! —Dijo el perrito al fin separarse mientras se sentaba en el colchón de Catnap, mientras el gato solo se acostó para poder estar a la altura del perrito, así podían hablar con gusto.
—Los científicos me llamaron. —No dijo mucho y tampoco quería, era un poco doloroso para él, ya que al hablar podía escucharse lo ronco y lo grave de su voz, pero era de esperarse cuando hace tiempo su caja de voz se había descompuesto por culpa de los castigos, y aun no se lo arreglaban. Siendo que Catnap le sea difícil hablar por más tiempo sin que comienza a sentir su garganta seca, y luego a doler.
El perro al escucharlo solo mostro una mueca de disgusto, por lo que este solo alzo sus manos para tomar las mejillas de su amigo y mirarlo directamente. —¿Aun esos científicos no te han arreglado? —Pregunto en un tono molesto, maldiciendo en secreto aquellos científicos que no arreglaban a su amigo, dejándolo para que sufriera en silencio. Catnap al escuchar eso solo negó con la cabeza, ya que era evidente que no iban a curarlo, después de todo era muy bien conocido por ser el Smalling Critters más rebelde y el más odiado por Elliot.
—No es tan malo... sabes que, de todas formas, no soy de hablar mucho. —Contesto la luna tratando de mirar lo positivo al asunto algo que el perrito solo bufo, y soltó a su amigo.
—Lose... pero, aun así, no quisiera que nada te causara incomodidad... por lo contrario. Mañana abogare para que te repare. —Dijo determinado el sol mientras le dedicaba una sonrisa nítida al gato, que solo negó y alzo su mano/pata para poder acariciar la cabeza de su amigo, haciendo que Dogday solo cerrara sus ojos y disfrutara de su toque, algo que jamás podría hacer con Elliot.
—No te expongas por mi culpa. —Contesto, pero Dogday aun así no iba a escucharlo, por lo que solo decidido por esa vez cambiar de tema.
—¿Ya comiste? —Pregunto el can curioso, cosa que Catnap solo negó. —Entonces vamos a comer, Picky se esmeró en cocinar algo rico jeje. —Menciono, pero Catnap solo retrocedió y se veía incomodo con la idea, cosa que el perro noto y se preocupó. —¿Pasa algo bestie?, ¿no te gusta la idea? —Pregunto sin entender que pasaba.
Pero Catnap solo negó y hablo. —No estoy de humor para convivir con los demás. —Explico sin más cosa que Dogday entendió de inmediato.
—Bueno en todo caso, no puedes quedarte sin comer. Así que déjame traer la comida y comamos juntos. —Dijo el líder mientras se levantaba y se retiraba, mientras Catnap solo asintió en silencio mientras le daba una sonrisa, este solo se acorruco y espero al can para disfrutar de su compañía.
Dogday corrió de nuevo al comedor, para mirar que solo quedaba algunos niños y aun seguían sus amigos, quienes hablaban amenamente, pero al ver al perrito llegar no duraron en llamarlo.
—¡Hey Dogday!, ¿Cómo te fue? —Esta vez fue Hoppy quien pregunto a su líder, cosa que el perrito solo rio nervioso mientras se acercaba a sus amigos abrazándose a sí mismo.
— Bueno... el no quiso venir, así que sugerí llevarle de comer. —Explico el líder.
Los demás Smalling se quedaron callados unos momentos, pero entendían el punto. —Comprendo, debió ser un día muy pesado. —Fue Bubba quien hablo.
Pero Picky solo desvió su mirada. —Me preocupa que últimamente Catnap no coma con nosotros...—Menciono la cerdita levantándose para ir por un plato extra, a lo que Crafty solo suspiro un poco cansada ya que de todos ella comprendía mucho a Catnap.
—Debe tener sus motivos, como a nosotros también nos pasa cuando no queremos hacer cosas que no deseamos. —Menciono el unicornio buscando de convencer a sus amigos de que no se preocuparan, pero por suerte todos comprendieron.
—Bueno al menos sabemos que está bien, es lo que cuenta jeje. —Dijo Bobby aquella osita que le daba otro bocado a su comida.
Los demás asintieron, por lo que llego Picky con un plato extra que le entrego a Dogday que no dudo en agradecer, para después tomar su plato a medio comer. —Bueno chicos, me retiro, ¡los veo mañana! —Contesto despidiéndose de sus amigos para irse, haciendo que los demás animales y niños se despidieran desde lejos.
Cosa que Bubba solo hizo una mueca de desagrado, que Picky noto en su amigo. —¿Te preocupa que lo hayan vuelto a lastimar? —Pregunto la cerdita dándole una suave palmada a su hombro, pero Bubba solo suspiro cansado.
—Si. —No dijo nada más solo la cerdita comprendía el malestar del elefante, mientras los demás solo se encerraron en sus respectivas burbujas, después de todo solo así podían zafarse del estrés que les causaba a veces vivir en ese lugar.
Cambiando de escena, Dogday había llegado con Catnap quien lo esperaba en su colchón, cuando miro a su amigo este solo se levantó esperándolo, cosa que el perrito se sentó a su lado y le paso su plato, Dogday noto que a lado de Catnap era tan pequeño que se reía a veces por la diferencia de alturas, el minino solo al ver la sonrisa dulce de su mejor amigo no dudo en rodearlo con su cola la cintura, como un tipo de abrazo ambos no duraron en reírse suavemente. Cuando el gato se volteo lo que hizo que el can noto que en la nuca de Catnap tenía unas horribles cicatrices, cosa que Dogday casi deja caer su plato.
—¡Catnap!, ¡¿Qué te hicieron?! —Pregunto alterado mientras dejaba su plato a lado para levantarse, tratando de tomar la cabeza de su amigo, pero el gato al ver esto se alejó mostrando su desagrado con esa acción, realmente no quería que viera eso, detestaba hablar sobre ello, él aun con el plato en sus manos solo hizo una mueca seria y tuvo que dejarlo también de lado, aunque sabía perfectamente que Dogday no lo dejaría pasar así que este solo suspiro resignado, quedándose callado unos momentos ya que realmente odiaba hablar de ello. —¿Fueron esos científicos verdad? —Esta vez el sol se adelantó queriendo saber la verdad, cuando la luna lo escucho solo asintió.
Dogday al escucharlo solo se tensó y apretó sus puños con bastante frustración. Quería llorar de coraje, gritar porque era un hecho que no toleraba que lastimaran a sus amigos, Catnap al ver su reacción solo se sintió impotente porque de nuevo se sentía culpable, como si por su culpa Dogday sufría, así que solo se acercó para tomar sus hombros. —Dogday... no importa, tú sabes cómo es aquí. Como nos tratan...—Trato de calmarlo, pero al ver a su amigo que en sus ojos se volvían cristalinos, no dudo en bajar sus orejas ansioso porque no podía ver a su amigo llorar, le dolía su pecho comenzaba a sentir ardor por su reacción. —No...n-no, no llores. —Pidió casi se transformó en un ruego subiendo uno de sus dedos y con el cuidado más minucioso limpio su mejilla para no lastimarlo con su garra.
—¿Cómo puedo llamarme líder, si veo que te maltratan? —Contesto el perrito permitiendo que Catnap lo limpiara, mientras su voz se quebraba, rápidamente negó con la cabeza queriendo volver a la realidad. —¡No!, No puedo permitir eso, hablare con Elliot y pediré que te dejen en paz. —Respondió con firmeza, pero Catnap al escucharlo se sorprendió, pero lo paro al mantenerlo quieto con su fuerza.
—¡No!, ¡Deja de acercarte a él! —Casi alzo la voz el gato, pero eso le costó porque ya comenzaba a sentir un poco de dolor en su cuello, muy normal cuando seguía teniendo ese defecto que aún no curaban, pero no le importo solo quería expresar su desagrado con la idea. —Mira no te dije nada, porque sabía cómo te pondrías además... fue. —Catnap iba a seguir hablando, queriendo contestarle quien se lo había hecho, pero ¿podían culparlo?, odiaba recordar ser experimentado y maltratado, dolía como el infierno y jodia su mente cuando pensaba en ello, en especial pronunciar el nombre de la persona que odiaba a muerte.
—¿Quién fue Catnap?, ¡por favor dime!, ¡Si es posible hare lo que sea para que te dejen en paz! —Este alzo la voz tomando los brazos de su amigo queriendo respuestas, enojado y queriendo justicia. Pero se veía a Catnap apretar sus colmillos.
—¡DOGDAY, BASTA! —Catnap cansado con esto grito le ardió sus cuerdas vocales, pero aun así sabía que Dogday no podía hacer nada ya que sabía que ir contra ese hombre, seria ir tras el fundador, abrumado por el ardor de su garganta este tosió un poco, liberando un poco de humo rojo y Dogday al recibir su grito bajo su mirada avergonzado, porque se sintió culpable de alterar a su amigo y sus lágrimas no pararon, él iba a disculparse de inmediato, pero Catnap se adelantó. —Fue Harley. —Comento haciendo que Dogday se paralizara y sintiera más rencor a ese hombre tan malo, porque después de todo no solo Catnap le había desgraciado un aparte de su vida, sino que también Dogday había sufrido por su mano.
Harley Sawyer aquel doctor y científico loco mano derecha de Elliot, ese hombre maldito y maquiavélico fue el creador de la mayoría de todos los juguetes vivos, claro que Dogday no sabía muchos detalles a diferencia de Catnap, pero sabía perfectamente que ese hombre era un ser llegado del infierno, cruel, indiferente que daño muchas veces en sus castigos o experimentos a sus amigos y a otros juguetes.
Todo los experimentos o castigos que hacía, Elliot siempre lo permitían. Dogday recuerda que una vez quiso evitar un castigo de Bobby al cometer un error, a manos de Harley, Dogday rogo a Elliot que parara, pero el fundador solo lo calmo y le dijo que no podía hacer nada, ya que Harley lo hace por el bien de todos. Nunca llegaron a nada y Bobby fue castigada terriblemente que, si no fuera por su afelpado pelaje de su pecho, se verían las cicatrices que le dejaron.
—Ese monstruo...—Susurro el perrito mientras cerraba sus ojos con fuerza, pero al ver a Catnap aun toser, rápidamente el can busco una botella de agua que el gato tenía guardado en una de las cajas, la cual paso a la luna para que bebiera y pudiera relajar su garganta. —Lo siento... no debí exaltarte. —Se disculpo, pero Catnap solo negó con su cabeza mientras terminaba de beber.
Acariciando a su amigo de la cabeza. —No importa, solo volvamos a comer. —Pidió la luna, después de eso el perrito asintió un poco desanimado ambos volvieron en sus asientos en silencio. Catnap noto la tristeza de su amigo que aún no tocaba su comida, así que solo se recargo en Dogday mientras ronroneaba un poco. Dogday al escuchar el ronroneo no dudo en alegrarse y asombrarse por lo lindo que se oía.
Suena tan genial que en sus ojos se veían brillantes. —Vale tu ganas jeje, no estaré triste. —Contesto mientras sabía que eso significaba que Catnap quería verlo sonreír.
—Funciono. —Dijo el gato morado, ambos rieron de nuevo y esta vez ya más relajados volvieron a comer, sonriendo disfrutando de su compañía mutua. Dogday también se dejó recargar en el cuerpo de su amigo mientras movía su cola como un lindo perrito.
—Sip, funciono. Catnap... ¿hoy podemos hacer pijamada? —Pregunto dulcemente el can, cosa que el gato lo pensó porque en las noches era su tiempo de trabajar como guardia de seguridad y velar por los niños, pero al final acepto porque Dogday tenía el sueño pesado así que no se daba cuenta cuando no estaba. —¡Genial! —Respondió el perrito con esa afirmación.
Bueno tal vez la fábrica no era perfecta, pero al menos estoy rodeado de las personas que amo, a pesar de las cosas malas trato de que todo sea mejor para todos. Aunque eso signifique sacrificarme a mí en el proceso...
Pensó Dogday mientras miraba de reojo a su mejor amigo quien comía con calma.
Notas:
☆*゚ ゜゚*☆*゚゜Comentario de la escritora☆*゚ ゜゚*☆*゚ ゜゚*☆*゚
Buenas tardes, noches y días mis amados lectores, aquí mi nuevo escrito que he dedicado con mucho amor. Les doy la bienvenida a "lejos de tus ideales", bueno antes que nada debo decirles, este fanfic es uno de los mas largos que he escrito y a penas es el primer arco, por lo tanto, les advierto que por ahora solo publicare el primer arco. Por supuesto gracias a una gran amiga mia y un comentario de un gran lecto y seguidor de mi trabajo, literalmente me convencieron para poder sacar mi obra antes de tiempo.
Denlo por seguro, además cuando termine absolutamente todo el primer arco, subiré ahora si el índice al final de los capítulos para que mis futuros lectores que quieran leer sepan con certeza lo que les espera uwu. Ademas mientras se publican los nuevos caps me da tiempo de trabajar en otras obras mias, como volver a mi fandom bimboier, ¡ay como extraño a ese bonito Fandom TwT!
Bueno eso seria todo de mi parte mis amados lectores, disfrute de mi obra, espero con ansias sus com