Ofrenda a la bestia

Un pueblo es acechado por una bestia que vive en las profundidades del bosque. Esta bestia en cuestión ha atacado su ganado, destruido sus barreras y desmembrado a todos los que intentaron darle caza. Así que en su desesperación deciden que tal vez una "ofrenda" pueda llegar a calmar a este monstruo. Intentan enviar a sus jovencitas más hermosas con cestas llenas de carnes rojas y pescado; pero todas regresan mal heridas y falleciendo luego de rogar por ayuda. Con la situación volviéndose crítica deciden hacer un último intento, pero esta vez en lugar de enviar a una chica, deciden entregar a un joven pastor de facciones femeninas que lo hacían ver hermoso tanto para las mujeres como para los hombres, Link. El se resiste, grita y patalea rogando para que no lo hagan, que muestren piedad. Pero la gente no lo escucha, lo tachan de egoísta y desalmado por no querer ofrecerse por el bien de la aldea a pesar de que todas esas jovencitas que ahora descansan en el panteón no dudaron en caminar directamente hacia el bosque. Link solo puede pensar en que esas pobres chicas también debieron de ser obligadas como él. Cuando finalmente es sacado del pueblo a la fuerza este se dirige con terror a lo profundo del bosque. Mientras más avanza los árboles se vuelven más grandes y espesos haciendo que la luz no pueda atravesar sus hojas dejándolo casi en una total oscuridad. Al llegar a un lago en el corazón del bosque ve uno ojos dorados asomarse fuera del agua, del lago finalmente emerge el monstruo que tanto ha aterrorizado a su gente, una criatura extremadamente alta y vagamente humanoide, pero con rasgos de un ser acuático; ojos dorados con pupilas dilatadas y colmillos tan grandes que puede sentir su piel cortarse de solo verlos. Link, aun con miedo, extiende la cesta con la comida hacia el monstruo pero este le da una manotazo la tira al suelo y se abalanza sobre el joven. El pequeño pastor llora aterrado, piensa que morirá como las jóvenes que fueron entregadas antes que él, pero en vez de romper su piel la bestia lo olfatea, lame su cuello y Link contiene algunos sonidos vergonzosos. El chico sigue siendo tocado por la criatura en formas que nadie más lo había hecho y entonces lo siente, una cosa, no, dos cosas viscosas frotándose contra su pierna. Parece que la bestia finalmente estaba complacida con la ofrenda.