Una Mala Otaku en BNHA

Hay tres razones por las que decidí hacer este examen a pesar del riesgo... 1. Para cerrar la boca de todos esos idiotas que me creían inútil. Y eso ya lo logré, mis padres y toda la agencia deben estar diciéndole a medio mundo sobre mi admisión con honores... Me encantaría viajar y verles la cara, pero no podré hacerlo. 2. Para dejar a mis padres. También ya lo hice, está noche llegarán el resto de mis cosas, desde el inicio ser parte de la UA fue su sueño, y usarme para hacerse famosos, pero, no más personas que me usan. ¡No más! 3. Porque quiero ser libre, por fin libre. Tengo 15 años, es obvio que no puedo ser independiente legalmente y lo que mis padres deciden es absoluto para mí. Pero no lo soporto, tengo la capacidad de vivir por mí misma, de lo que sea... No esperaré a que mis padres ejecuten su plan, no esperaré a que me maten por reconocimiento. ¡Primero me largo! Vamos por el siguiente paso... No saben que en medio de lo que me enviaran están parte de sus ahorros, un amiguito hecho con mi ropa la robo en la noche con éxito, junto con algunas cosas importantes para mí. Es temprano por la mañana, y antes de esto envié una carta para informarles de algo importante, por lo que me deben estar esperando. ¿no me tomará como loca la UA? Si lo hacen simplemente enviaré mi carta de renuncia, pero vine personalmente para recoger a los muñecos que me ayudaron la otra vez en el examen... no puedo dejarlos. No volveré, y no quiero que se queden esperándome... Al llegar alguien está en la puerta, ya esperándome, un hombre alto, con cabello rubio, y un gran copete. Adoro los flecos largos, por eso me hice uno ayer, pero él exagera bastante... —¿Present Mic? —pregunte quedando frente a él. —Are You Sumiye Eshima? —soltó agudamente señalándome con sus dedos y demasiada emoción. —Soy Sumiye Eshima, un gusto conocerle —saludé e hice una reverencia leve. Creo que comenzó a decir muchas cosas, pero era tan irritante que mi atención se fue a los pasillos de la escuela y en su apariencia. Realmente la serie no hace justicia a la Realidad, es impresionante este lugar. Le pedí que me llevara con el profesor que me tocaría, él dijo que estaba en la sala de maestros así que me guío a ella. Al llegar el abrió la puerta, y solté un suspiro de alivio porque al fin dejaría de oírlo gritar. —¿Usted es mi profesor? El mismo Shota Aizawa, cabello largo negro, ojos rojos, alto, ropa negra y vendas como bufanda. —Sí, Gracias Mic, yo me encargo —le dijo monótonamente algo irritado. Solo he estado unos minutos, pero realmente es pesada, te entiendo Aizawa. —Disculpe que haya venido inadvertidamente a verlo, pero es importante, mi nombre es Sumiye Eshima, un gusto conocerlo —hice una reverencia ante él educadamente y me mostró un lugar al lado para sentarme. —Shota Aizawa, profesor de la clase, tu carta lo decía, la dejaste junto a tu examen escrito... —No sabía cómo podría comunicarme con usted y ser tomada con seriedad, agradezco que no haya sido tomado como una broma —dije calmada y tranquilamente mientras me sentaba. Su lugar de trabajo está lleno de papeles y estar sentado frente a él es completamente diferente a lo que esperaba, es más interesante en persona, voz grave y esa apariencia... —Bien, que es lo viniste a decir Eshima Me sacó de mis pensamientos y saque de mi mochila una carta, con dos identificaciones para entregárselas al director. —Quiero presentar mi baja definitiva de la UA, está es la carta que lo autoriza firmada por mis padres y sus identificaciones —dije seriamente extendiendo mi mano para que las tomara. —¿Qué? —pregunto sorprendido. Suspiré y repetí firme, dejando todo en la mesa. —Quiero presentar mi baja definitiva de la UA, está es la carta que lo autoriza firmada por mis padres y sus identificaciones —¿Tus padres no vienen contigo? ¿Por qué solo me presentas esto solo tú si es tan importante para tu futuro? —miró los papeles por encima confrontando directo a los ojos. —Mis padres tienen su agencia, y necesitan que esté con ellos, no podían dejar todo de lado —dije mirando los papeles algo tensa. —Si ibas a desistir ¿Por qué presentar el examen? —tomó los papeles y los leyó. —Hubo un cambio de planes, mis padres creen que es mejor que haga otras cosas y como no pudieron venir me dieron eso. Creo que explica la situación ¿No? —recalqué algo alegre. No sé si me crea o no, pero solo vine por esto, la nota tiene una excusa buena. En ella exponen lo lejos de la escuela, la imposibilidad de pagar, su preocupación por su hija y sus deseos de que sea instruida por un héroe personalmente que acaba de pedirme como aprendiz... —Se necesitan algunas cosas que firmar y eso, pero espero que esto sea suficiente... Debo irme, le agradezco por su tiempo —me levanté de mi asiento, hice una reverencia y procedí a dar la vuelta. —Espera, no puedo dejarte ir así —me detuvo con su voz áspera. —No se preocupe, me iré directo a casa —ya acabé lo que venía a hacer, mi libertad me espera. —No es eso, debo hablar con tus padres para corroborarlo —¿No confía en mí? —pregunte sin rodeos. —Olvidaste las identificaciones, ¿Debería creerte? —me mostró su mano derecha con la que sostenía las identificaciones y ¿Se burlaba con la mirada de mí inocencia? ¿Qué es lo que hace este hombre? Me puse algo nerviosa, pero volví a verlo con incredulidad. —Me acabo de levantar para dejar la silla en su lugar y pedirle las identificaciones, ahora ¿podría dármelas? —estiré mi mano para tomarlas de forma casual, pero él las quitó de mi alcancé. —Eshima, tus padres estuvieron aquí ayer y pidieron que te cuidemos bien mientras estás aquí, deben estar en casa de tu amiga —soltó tan casual una bomba como si le hubieran contado un mal chiste. ¿Ellos qué? —Así qué ¿Por qué mientes? ¿PORQUE... PORQUE .... PORQUE DEBEN ESTAR AQUÍ?