ID de la obra: 1310

El Fantasma de la Ópera

Het
R
En progreso
3
Emparejamientos y personajes:
Tamaño:
planificada Midi, escritos 63 páginas, 21.070 palabras, 11 capítulos
Descripción:
Notas:
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Capítulo 1 - Se abre el telón

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El bullicio del público, los murmullos entre bastidores, el ruido de los artistas yendo y viniendo en todas direcciones...todo se mezcla en un murmullo que te envuelve como el agua de la marea. "¡Así que estabas aquí, ___!" Al escuchar una respiración agitada a tu espalda, te giras instintivamente. -¿Qué haces ahí parada? Ya está todo listo, la función no tardará en empezar. Vacilas, y ella da un paso hacia ti, arrugando el ceño. "¿___? ¿Te encuentras bien?" Finalmente reaccionas.-No es nada, Meg. Solo estoy algo nerviosa. Hoy es el gran día. El estreno de la nueva obra, Aníbal. Todos están en su lugar, expectantes. Para alguien nueva en el mundo del espectáculo como tú, esta es una oportunidad única. No es el papel principal..., pero es un buen comienzo. "La orquesta ya ha empezado a tocar." Meg te aprieta el hombro. -Espero que todo salga bien. "Debo irme. Gracias, Meg." La música te acompaña,respiras hondo y subes al escenario con el que siempre habías soñado, con las palmas húmedas y el pulso acelerado. Es la primera vez que eres el centro de atención de tantas personas, la cabeza te da vueltas y tu voz se vuelve temblorosa. Pero te concentras en cantar y te sumerjes en la melodía. Tras la primera estrofa te calmas lo suficiente como para empezar a mirar a tu alrededor. Parece que nadie te ha prestado atención. El centro del escenario se ilumina, llevando toda la atención hacia Carlotta, la protagonista. "¡Dios mío!" exclama un espectador. "¡Carlotta es un prodigio!" "¡La mejor soprano de París!" asiente otro. Su actuación es perfecta. Cada nota, cada gesto... Su voz resuena en todo el auditorio, el público está completamente embelesado con su voz. Y en cambio, tu interpretación se siente mediocre. ¿Alguna vez llegarás a ser como ella? Es la primera vez que subes al escenario y sin embargo, ¿por qué te sientes únicamente insignificante? Tratas de sacudir esos pensamientos fuera de tu mente; debes mantener la compostura. Seguramente el Ángel de la Música este preocupado por ti. Dejas tus preocupaciones a un lado y te sumerjes de nuevo en tu papel, tratando de transmitir lo mejor posible cada una de las emociones del personaje. Finalmente la obra termina y cae el telón. El público aplaude y grita con emoción. Estás segura de que todos ellos están conmovidos. El estreno ha sido un éxito. "¡A un lado! ¡No os quedéis ahí paradas!" Carlotta irrumpe entre varias de las actrices. "¿Cómo pueden unas cantantes tan insignificantes como vosotras carecer de disciplina?" "¡Lo siento!" balbuce una compañera. "Acabamos de bajar del escenario y... " Con un aire de arrogancia, Carlotta pasa por tu lado sin detenerse a escuchar la explicación de la chica. Ni siquiera se digna a girarse para verla. Su actuación es perfecta, pero su comportamiento no. De pronto, algo cae en tus brazos. Un ramo de rosas blancas."¡Oh, qué flores tan bellas!" Al levantar tu mirada, ves a un hombre joven y te preguntas cuánto tiempo llevara ahí parado. Mirándolo con una sonrisa, aceptas las flores y este empieza a hablar. "Espero no ser muy atrevido, pero tú actuación ha sido inolvidable, ___." "Gracias, pero..." parpadeas, confundida."¿Cómo sabes mi nombre?" Recibir flores y cumplidos en tu primera actuación...No está nada mal. "Solo he interpretado un papel pequeño, ni siquiera he estado tanto tiempo en el escenario..." "Pero recuerdo tu voz, ___,. Sigue siendo igual de hermosa que en mis recuerdos." "Gracias, pero..¿nos conocemos?" Su sonrisa se desvanece. "Así que no me recuerdas..." "Yo...lo siento..." Su mirada muestra decepción. Intento recordar, pero en ese momento una voz te llama. "¡___! Tienes que cambiarte, hay que guardar el vestuario." Es Meg, espera a que la acompañes para poder guardar el vestuario que aún llevas puesto. Miras al hombre algo avergonzada, mientras él asiente con la cabeza. "Ve, no te quitaré más tiempo. Hasta pronto." Después de hablar, se inclina ligeramente hacía ti y se despide. Rápidamente te apresuras en cambiarte el vestuario, mientras no puedes dejar de preguntarte quién era ese hombre. Había algo familiar en él. Y algo en su forma de hablar te da a entender que llegasteis a ser cercanos. "¿Qué tal el espectáculo? Sabía que lo harías bien." De repente, una voz cálida resuena en la habitación. No te asustas, porque sabes que es el Ángel de la Música quien te habla. "¡Por supuesto, Maestro!" exclamas. "¡Fue maravilloso! ¡Tengo tantas cosas que decir! Sé que me dijiste que no me pusiera nerviosa, pero..." No puedes evitar no contenerte al contarle a tu ángel todo sobre el espectáculo. De vez en cuando él responde con un asentimiento para asegurarte de que está atento a tus palabras, motivandote para que sigas hablando. Te escucha atento y pacientemente hasta el punto en que te olvidas por completo de aquellos tiempos en los que te encontrabas sola sin su compañía.    --------------------------------------------------------------- Fue hace tres meses, en una noche silenciosa. Te encontrabas en tu camerino, practicando las notas altas, que aún salían con rigidez. De repente, una bella voz se empezó a escuchar en la habitación. Al principio te sorprendiste, pero pronto te dejaste llevar por ese melodioso canto. Sonaba tan celestial y puro. "Es tan hermosa...como una voz angelical. Que registro tan amplio...es prácticamente sobrehumano." "Puedes ampliar el registro con la práctica, pero se necesitan técnicas que las personas comunes no conocen." Te sorprendiste por segunda vez, ¿acaso la voz acababa de responderte? Te apresuraste a salir de la habitación. Querías saber de quién era esa voz tan misteriosa, pero los pasillos estaban desiertos. No había ni un alma en al ópera. Solo te encuentras tú en la ópera, a estas horas ¿quién podría haber sido? Con los pelos de punta, caminas por el desordenado pasillo de un lado a otro, con la sensación de que hay algo oculto en la oscuridad... Vuelves a tu camerino, completamente en alerta ante cualquier sonido que puedas escuchar. "___, no tengas miedo, no quiero hacerte daño." La voz parece salir del espejo de cuerpo entero, pero en el solo puedes ver tu reflejo. "¿Quién eres? ¿Por qué no te muestras?" Un suspiro resuena en todo el camerino. Su voz es suave como el terciopelo. Mientras esperas su respuesta mantienes la respiración. "Disculpame. No pretendía asustarte, es solo que... Me temo que no podemos vernos frente a frente." Su voz evoca un dolor profundo. Entonces, olvidas el miedo. Ahora lo único que quieres es poder seguir escuchando su voz. "Solo quiero ayudarte. Tienes un don para el canto y no puedo permitir que se desperdicie." Sus palabras te hacen recordar aquella leyenda que solía contarte tu padre. Cuando alguien conmueve a un ángel con su música, ese ángel descenderá a su lado para protegerlo y guiarlo. En su lecho de muerte, tu padre te cogió la mano y te prometió que suplicaría para que un ángel te acompañara. "¿Eres un ángel de la música?" No responde de inmediato, y piensas que quizás no te ha escuchado, así que lo intentas de nuevo. En está ocasión, el responde a tu pregunta. "Asi es. Soy un ángel que ha venido a guiarte." Al escuchar su respuesta, tus ojos se humedecen a la vez que tú corazón se llena de conmoción y felicidad. La llegada del Ángel de la Música te da la sensación de haberte comunicado con tu padre. Nunca más volveras a estar sola. El Ángel te asegura que hará lo posible por instruirte, cuidarte y por establecer un horario fijo para enseñarte. Y antes de poder darte cuenta, ya tenéis una relación muy estrecha y le confías absolutamente todo.     -------------------------------------------------------------- "¿En qué estás pensando?" "Solo recordaba nuestro primer encuentro. En aquel entonces, subir al escenario me parecía algo imposible de conseguir." "Ahora ya sabes lo que se siente estar en el." "Así es, mi querido ángel. Pero me temo que aún no puedo decir que este familiarizada con el escenario. Después de todo, aún no..." "¿Aún no has actuado en el centro?" Con mucho tacto, el Ángel de la Música termina mi frase. "___, sé lo que te preocupa, pero no deberías darle importancia. Debes confiar en ti misma. Tienes mucho más potencial que Carlotta. Y algún día, tu voz será escuchada por todo París" "Agradezco que me consueles." Sus palabras son realmente reconfortantes para ti, sobre todo viniendo de él. "No, pronto te darás cuenta de que no es un consuelo. Ya es tarde, deberías regresar a casa. ___, quiero que sepas que estoy orgulloso de la actuación que has ofrecido esta noche. Recuerda la alegría que has sentido hoy." Las palabras del Ángel de la Música calientan tu corazón y lo llenan de cariño, no puedes sentir nada más que agradecimiento por lo mucho que se preocupa por ti. Te quedas en silencio frente al espejo, pensando todavía en él. Entonces, un grito interrumpe tus pensamientos. De inmediato escuchas un golpe, un estruendo que retumba en todo el edificio y justo después se va la luz en todo el edificio. Avanzas con miedo, palpando todo a tu alrededor, pero lo único que llegas a tocar es la fría superficie del espejo. Un destello atraviesa el espejo e instintivamente cierras los ojos. Te preguntas que es lo que ocurre. Quieres salir a averiguar que es lo que ha pasado, pero temes que lo que sea que haya ahí afuera sea aún más aterrador. Segundo a segundo sientes que el miedo te envuelve como una soga que aprieta tu cuerpo. ¿Qué deberías hacer?
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