Capítulo 3
21 de octubre de 2025, 18:42
Después de que los perros de kakashi los ayudaran a rastrear a los viajeros, ambos ninjas llegaron a la aldea que estaba más cercana a ellos. Caminaban entre las personas y miraban a los alrededores, sus locales eran pequeños pero era una calle muy comercial. Niños corriendo, hombres tirando de carretas pasaban por sus lados, personas comprando sus víveres y otras negociando cualquier pertenencia era lo que observaban.
Ambos caminaban cautelosos con sus capas puestas para ocultar que eran ninjas. No veían señal de los viajeros, no veían grupos de personas reunidas como espectadores. Se acercaban a una más que a otra persona preguntando por los artistas, pero no sabían nada. Continuaron caminando entrandose más a la aldea, cuando un niño iba pasando con sus padres contándoles con emoción que también quería aprender a hacer magia, ambos ninjas se miraron enseguida. Era posible que se refería a los artistas itinerantes.
Sakura se les acercó y les pregunto si habían visto a los artistas, le respondieron que sí, que estuvieron en la aldea por la mañana pero ya tenían mucho que se habían ido. La peli rosa les agradeció por la información. Al saber eso, los dos sabían que no tenía caso seguir buscando más en ese lugar a lo que partieron enseguida a la otra aldea que estaba a cuatro horas de ahí.
Apresuraron el paso para poder encontrarlos en el camino, saltaban entre los árboles pero el atardecer poco a poco fue opacandose por la noche. Kakashi decidió detenerse para continuar por la mañana, prendieron una fogata y prepararon una comida enlatada que llevaban con ellos. Después de comer avivaron más el fuego de la fogata y se acostaron en el suelo, ambos estaban boca arriba mirando las estrellas y la luna. Sus cuerpos estaban en sentido contrario pero la coronilla de sus cabezas estaban juntas. Kakashi tenía una mano en el pecho y la otra debajo de la cabeza y sus piernas cruzadas. La peli rosa tenía las dos manos en su pecho y las piernas también las tenía cruzadas. Se la pasaron conversando, hablaban de cualquier cosa y se reian de las historias que se contaban.
-- jajaja -- reían ambos.
-- ¿en serio hiciste eso? -- pregunto el peli plata.
-- si, no le miento.
-- Sakura quien te viera, no sabía que eras tan tremenda.
-- bueno, era una niña. Me gustaba divertirme.
-- mi estudiante haciendo travesuras con esa cara tierna de yo no fui.
-- ¿usted nunca hizo una travesura de niño? sensei -- pregunto la peli rosa, Kakashi frunció el ceño ligeramente y con voz nostálgico respondió.
-- la verdad no recuerdo haber hecho cosas así, mi niñez no fue como la de ustedes sakura. Con las guerras y las constantes amenazas estaba de una misión a otra.
Sakura quedó callada, el silencio entre ellos fue momentáneo.
-- Kakashi sensei, la espada que tiene en su casa ¿era suya?
-- No, era de mi padre... Fue lo único que mantuve conmigo después de su muerte.
-- siento que usted sabe tanto de nosotros... De nosotros sus estudiantes, pero nosotros no sabemos nada de usted -- comentó una voz suave.
-- hay cosas que es mejor no saberlas -- respondió kakashi.
El sonido del viento y de las aves nocturnas, el calor de la fogata y el cielo claro por la luz de la luna, eran los que acompañaban a los dos ninjas en esa noche tranquila.
-- están hermosas las estrellas verdad, sensei.
-- siii -- respondió con un leve suspiro.
-- ¿cree que esas personas de verdad nos ayuden?
-- eso espero, alguna respuesta nos tienen que dar.
-- quiero pedirle algo Kakashi sensei.
-- ¿que cosa?
-- cuando lo nombre Hokage ¿puedo acompañarlo? No quisiera verlo desde abajo de la torre.
Kakashi no se esperaba esa petición, esas palabras lo hizo sentir feliz.
-- ¿eso quieres?
-- sí, quiero acompañarlo.
-- para mí sería un honor tenerte a mi lado ese día Sakura -- el peli plata sonrió de oreja a oreja.
Las hojas de los árboles bailaban por el suave viento. Se escuchaba el lejano canto de los búhos que se preparaban para la caza nocturna. Sakura recordaba sus buenos momentos cuando niña.
-- jajaja -- Sakura de pronto contuvo la risa.
-- ¿de que te ríes? -- pregunto el peli plata extrañado.
-- me acordé de algo.
-- ah sí, ¿qué cosa? -- sonrió levemente.
-- cuando Naruto puso un borrador en la puerta y le cayó en la cabeza.
-- ah! Eso... Si me di cuenta. Sólo que me dejé.
-- ¿se dejó? Por qué?
-- quería saber si trabajaron en equipo
-- eso no tiene sentido.
-- si lo tenía -- respondió.
-- kakashi sensei, quiero hacerle otra pregunta.
-- Si claro, dime.
-- ¿por qué nunca me entrenó?
-- Eh?! -- kakashi quedó en blanco. Fue un cambio drástico en su conversación.
-- se que era una niña débil y sin talento... Pero incluso entrenó a Naruto cuando regreso a la aldea -- Sakura hablaba con un tono suave, no con reclamo.
-- Sa-kura... Sakura dime, ¿tienes resentimientos conmigo por eso?
-- No, la verdad no -- respondió sin titubear -- Siempre entendí que sólo usted podía ayudar a Sasuke con su Sharingan y a Naruto por los Akatsuki, es solo que... A veces me preguntaba, que hubiera sido de mi si Lady Tsunade no me hubiera aceptado como su estudiante.
-- Sakura yo nunca te hubiera dejado sola y menos en esos tres años cuando Naruto se fue. Escucha, es cierto no me dedique a entrenarte siendo tu sensei pero no porque me parecieras débil, desde niña tenias tus cualidades. Cuando supe que Tsunade sería tu maestra, sabia que lo lograrias y que estarías en buenas manos.
Sakura se quedó pensativa por un momento, mientras que Kakashi esperaba que dijera algo y que pudiera entender. Después de unos segundos de silencio tenso su estudiante habló.
-- creo que fue lo mejor, después de todo siempre quise ser ninja médico y con usted no iba hacerlo. Iba a verse obligado a dejarme con otro sensei.
-- Sakura no digas eso.
-- supongo que no estuvimos destinados para tener ese vínculo de maestro - estudiante.
-- pero eres mi estudiante.
Sakura no respondió, ella no se refería a eso.
-- sensei, no estoy molesta con usted estoy feliz que las cosas hayan pasado así. Soy discípula de la quinta, ninja médico y portadora del Byakugou No In -- dijo orgullosa.
Kakashi al escuchar sus palabras se sintió un poco afligido, la peli rosa iba a decir otra cosa pero kakashi la interrumpió.
-- si, tienes razón. Conmigo no hubieras logrado nada de eso.
Sakura noto apagada la voz de su sensei, lo que la hizo pensar que lo hizo sentir mal cuando no fueron sus intenciones.
-- sí, así es. Usted no es Tsunade para enseñarme todo eso, pero es el sensei que me aceptó, creyó en mí y me ha protegido desde siempre.
Kakashi se sorprendió al escucharla decir eso, su corazón dió un vuelco y soltó un leve suspiro.
Sakura bostezó y estiró los brazos -- ya tengo sueño, sensei.
-- duerme tranquila Sakura, yo hago guardia el primer turno.
-- gracias Kakashi sensei -- Sakura se acomodó y se quedó dormida. El peli plata se quedó despierto para vigilar, rogaba regresar a su cuerpo pronto. Porque en un momento así, de seguro se hubiera quedado dormido abrazándola a ella.
Por la mañana Sakura ya estaba despierta estuvo vigilando lo que restaba de la noche, Kakashi estaba durmiendo y no quería despertarlo porque la dejó dormir más de lo que debía. Pero él no necesitaba que lo hicieran, se despertó en ese momento y se prepararon para continuar buscando a los artistas, sin perder tiempo se encaminaron enseguida hacia la aldea donde esperaban que estuvieran ahí. De dónde habían pasado la noche no faltaba mucho en llegar, después de un rato llegaron a la aldea. Caminaban por las calles y casi no había muchas personas, era temprano y sabían que no iban a hacer su presentación todavía, era el momento y debían aprovecharlo. De pronto notaron las carretas llamativas y como Sakura las había visto las reconoció enseguida.
-- Kakashi sensei, allá están son ellos -- afirmó en voz baja
-- vamos -- respondió el peli plata. Se encercaron a un hombre que estaba bajando unas cosas de la carreta.
-- Buenos día señor -- saludo kakashi -- disculpe que lo interrumpa pero mi acompañante y yo necesitamos de su ayuda. ¿Usted es quien está a cargo?
-- si, soy yo. Pero en este momento tenemos una presentación y como puede ver, son muchas las cosas que debemos bajar.
-- le aseguro que es de suma importancia -- respondió kakashi.
-- no creo que haya algo más importante que mi show.
Sakura sacó el digen de su bolsillo y se lo mostró diciendo.
-- más importante que esto.
El señor se sorprendió al verlo -- ¿de dónde lo sacaron?
-- de eso queremos hablarle -- respondió kakashi.
Los tres se apartaron de los demás y se sentaron para hablar con más calma, el señor tenía una toalla pequeña alrededor de su cuello con el que secaba su sudor.
-- ¿dicen que lo encontraron en Konoha?
-- al parecer se les cayó y no se dieron cuenta, porque lo encontré en la calle -- respondió Sakura.
-- cómo fuí tan descuidado, ese digen sólo trae problemas. Si lo mantengo conmigo es porque ha pasado por generaciones de mi familia, tienen que devolvermelo.
-- no podemos -- se negó Sakura.
-- ¿y por qué no?
Ambos ninjas fijaron sus miradas por un momento, kakashi decidio explicarle todo.
-- ese digen hizo que nosotros cambiáramos de cuerpo.
-- no eso no es posible, ese digen nunca haría algo así.
-- no esté muy seguro. A mi estudiante y a mí nos cambió de cuerpo y es por eso que hemos venido hasta aquí a buscarlo a usted -- dijo el peli plata muy serio.
-- ¿que clase de digen es éste señor? -- pregunto Sakura.
-- escuchen, mi padre antes de morir me contó que le pertenecía a una princesa en los tiempos de la primera guerra, como su pueblo moría de hambre creó dicho digen con una magia misteriosa. El digen fue hecho para que supiera aquello lo que a una persona le hace falta en su vida, así que, la princesa comenzó a darselo a cada aldeano de su pueblo.
El hombre continuó hablando mientras que ambos ninjas prestaban atención.
-- El dije sabían que estos necesitaban comida y de alguna manera llegaba comida a la aldea así no morían de hambre, pero un día le tocó a un aldeano que estaba desdichado sentía impotencia por no ser un shinobi para acabar con la guerra porque era un hombre común. La princesa se lo entregó confiada de que éste necesitaba algo beneficioso para él y para la aldea, pero en cuanto el digen supo lo que a él le hacía falta le dió eso que tanto necesitaba, el hombre al sentir poder se volvió egoísta y se perdió en el poder de la maldad. Queriendo acabar a todo aquel que se le atravesara, quiso enfrentarse a los shinobis en la guerra pero este no tenía experiencia en combates y terminaron matandolo. La princesa se vio obligada a no usarlo más, por lo peligroso que era en manos equivocadas y por castigo de lo que hizo ese hombre, se lo entrego al hijo para que cargarán con eso y así, se lo fue pasando a sus descendientes. Que vengo siendo yo ahora su posesor, por eso deben entregármelo.
Sakura se le acerca al oído a su sensei y le susurra.
-- Kakashi sensei, este hombre no nos está ayudando en nada.
-- si, ya lo sé -- susurró.
El peliplata dirigió su palabra al señor de manera muy seria.
-- verá señor, somos shinobis de Konoha ella es la discípula de la quinta Hokage es ninja médico y encargada del hospital de la aldea de la hoja. Por mi parte, seré el siguiente hokage de Konoha, me nombrarán como el sexto dentro de unos días. Ambos tenemos nuestras responsabilidades y como shinobis está situación nos está afectando. ¿Entiende la gravedad del asunto?
El señor tomo su toalla y se limpio el sudor de su cara, sabía que era algo delicado.
-- lo lamento no puedo hacer nada -- respondió -- así no funciona ésto. El digen da lo que ustedes necesitan en sus vidas, sólo que tal vez, ustedes no saben que es o eso creo.
-- pero ¿porque a nosotros nos afectó de ésta manera? -- pregunto Sakura.
-- no lo sé... Dijeron que pasó cuando lo tomaron al mismo tiempo eh? -- se detuvo a pensar con su mano en el mentón -- Supongo que, lo que ustedes dos necesitan tienen mucho en común puede que sea lo mismo o eso creo.
-- ¿o eso creo? Ni siquiera está seguro -- comentó Sakura.
-- si mi padre estuviera vivo de seguro los hubiera ayudado más.
Ambos ninjas se miraron más confusos de lo que estaban.
-- ¿no nos puede ayudar entonces? -- pregunto Kakashi.
-- Lo siento no puedo, pero si desean pueden quedarse a ver mi presentación -- el señor se levanta para retirarse -- por cierto, en cuanto solucionen ésto devuelvanme el digen -- terminó de irse dejando a los dos solos. Sakura suspiro se sentía un poco decepcionada.
-- ¿y ahora que hacemos Kakashi sensei?
-- esto es peor de lo que me imaginaba.
Sakura se levantó de la silla -- regresemos a Konoha sensei, podemos encontrar una solución allá.
Kakashi se masajeaba la sien, tomo aire y choco sus manos en los muslos, se levanta diciendo.
-- Sakura, quedemonos aquí hasta mañana.
-- eh?!... Pero?...
-- ¡vamos! Sabes que mientras más pronto llegue a la aldea, más pronto me nombrarán Hokage. Y eso no puede pasar mientras siga en tu cuerpo, además no tenemos respuesta positiva para Tsunade.
Sakura se puso a pensar por un momento y lo único que le vino a su mente fue a Tsunade partiendo el escritorio de un golpe por haber llegado a la aldea sin solucionar nada. Sacudió la cabeza y sintió escalofríos, lo que hizo que aceptara la idea de Kakashi.
-- si Kakashi sensei quedemonos un poco más.
-- bien busquemos una posada para pasar la noche.
Caminaron por la aldea en busca de una posada, ubicaron una y entraron sin prestar mucha atención. Se acercaron a una señora que estaba en la recepción y ella en cuanto los vio entrar los recibió amablemente.
-- ¡bienvenidos! Pasen, es un placer recibirlos.
Kakashi y Sakura sonrieron al sentirse bien recibidos.
-- pero que hermosa pareja hacen ustedes dos.
-- Que? n-no señora.
-- no es lo que usted piensa.
-- n-no, somos pareja.
Ambos negaban al mismo tiempo, sus mejillas se sonrojaron.
-- como, ¿No están casados?
-- ¿casados? -- respondieron ambos.
-- si, es una posada para recién casados. Allí lo dice -- apunto el dedo al anuncio.
Ambos desviaron su mirada y vieron el anuncio que decía: posada para recién casados, el nido del amor.
Sakura miro a kakashi y le dice con desdén -- el nido del amor, ¿en serio?
El peliplata se dirigió a la señora con respeto.
-- nosotros no estamos casados. Estamos de paso, solo nos quedaremos por hoy. Puede darnos dos habitaciones, por favor.
-- ¿No lo están? Que pena -- dijo afligida -- esperen un momento -- reviso la lista de las habitaciones desocupadas -- Lo siento sólo queda una habitación.
-- ¡ Oiga eso es mucha coincidencia! -- alego sakura.
-- ¿me está llamando mentirosa señor?! -- reclamo la señora.
-- tranquilo sensei, solo será una noche -- comentó Kakashi para calmar a Sakura.
-- la jovencita es muy inteligente, muy inteligente -- dijo la señora con una sonrisa cómplice a lo que se le acerca a Kakashi al oído y le susurro -- te entiendo, yo también quisiera quedarme a sola con ese hombresote.
Kakashi la miro raro a lo que responde.
-- señora de verdad no es lo que usted piensa.
-- no te de pena, te guardaré el secreto -- Kakashi puso los ojos blancos.
-- aquí están las llaves, disfruten la estancia.
Kakashi tomo las llaves, y ambos se encaminaron a la habitación.
-- que señora tan rara -- susurro Sakura.
-- ignórala.
Llegaron a la habitación y cuando entraron quedaron sorprendidos al ver la decoración, el piso tenía pétalos de rosas que hacían un camino desde la puerta hasta la cama, en el centro de la cama había una botella de vino dentro de una hielera y dos copas, con un arreglo floral, la cama estaba llena de pétalos de rosas que formaban un corazón, cada almohada tenían una rosa, había inciensos con aromas de lavanda y velas encendidas en varios puntos de la habitación.
-- que hermoso -- expreso Sakura con los ojos llenos de brillos observando cada detalle. Kakashi también estaba sorprendido desvió su mirada para ver a Sakura y contempló la reacción de ella, aunque le dió un poco de gracia porque se veía así mismo.
-- es una pena que un verdadero matrimonio no disfrute de esto -- comentó Sakura. Kakashi tomó el vino y le dijo a la peli rosa.
-- nosotros podemos disfrutar de esto -- mostrándole la botella, ella ladeó una sonrisa se sentó en la cama, se echó para atrás y se acostó.
-- Kakashi sensei venga acuéstese, la cama está muy cómoda -- Kakashi le hizo caso y se acostó también.
-- estaba pensando, en qué debemos meditar -- comentó Sakura
-- ¿qué?
-- si sensei. Escuche, debemos buscar la solución a nuestros problemas.
-- ok?
-- y creí que meditar sería un buen comienzo.
-- no se Sakura, no me veo haciendo eso.
-- por favor sensei ponga de su parte.
-- a ver, ¿qué se te vino a la cabeza? -- se levantó y se quedó sentado en la cama.
-- quitemonos las sandalias y sentemonos en la cama en posición de mariposa.
Kakashi le hizo caso, quitaron la hielera y el ramo. Luego, ambos se sentaron de frente con sus piernas en forma de mariposa.
-- deme sus manos Kakashi sensei -- ambos se tomaron de las manos -- y ahora cierre sus ojos.
-- Sakura no me siento cómod...
-- sshi!! No hable sensei, solo concéntrece y haga lo que yo diga.
-- ¿estás segura de lo que haces?
-- hay que intentarlo, bien... Piense sólo en aquello que le hace falta en su vida, yo haré lo mismo.
Ambos tenían los ojos cerrados y estaban agarrados de manos, estaban concentradose en lo que hacían.
-- ¿siente algo? -- pregunto Sakura.
-- No.
-- concéntrece más sensei.
-- Sakura no siento nada -- Kakashi empezaba a incomodarse.
-- solo tome aire y botalo.
Kakashi no lo hizo. Cuando de pronto escucho a Sakura haciendo.
-- mmmmmmmm
-- eh, Que?... ¿Que haces? -- pregunto el peli plata extrañado, soltando las manos de Sakura.
-- estoy meditando sensei.
-- no, no lo hagas.
-- ¿por qué?
-- no me gusta.
Se tomaron de las manos de nuevo y volvieron a concentrarse, cuando Sakura volvió hacer.
-- mmmmmmm
-- ok Sakura basta -- Kakashi se bajó de la cama.
-- kakashi sensei ponga de su parte ¿puede?
-- Sakura ese mmm tuyo me molesta.
-- ¿que tiene mi mmmm?
-- es mi voz el que hace mmmm.
-- entonces haga mmmm con mi voz.
-- no voy hacer mmmm.
-- ¿por qué lo hace tan difícil Kakashi sensei?
-- Sakura no se si son ideas mías, pero desde que cambiamos de cuerpos siento que nos comportamos como...
-- ¿idiotas?
-- niños, iba a decir niños.
-- aah!!
-- ya estoy empezando a estresarme -- comentó Kakashi dándose masajes en la sien, trataba de mantenerse lo más sereno pero empezaba a perder la paciencia.
-- ya se que necesita Kakashi sensei.
-- ¿que cosa?
Sakura sacó del bolso de herramientas ninjas el libro isha isha.
-- ¡Tarán!... Esto es lo que necesita.
-- Sakura ¿lo traías contigo todo este tiempo?
-- ¿este libro cochino? Si... Iba a dejarlo en su casa, pero algo en mí me decía que lo iba a necesitar.
-- gracias Sakura -- Kakashi fue a tomarlo, pero Sakura quito su mano rápido para que no lo tomara.
-- hum um... Se lo daré si medita conmigo.
-- está bien lo haré.
-- ¡vaya! Eso fue rápido, esta más animado sensei.
-- ¿te estás burlando de mi?
Sakura y kakashi volvieron a meditar por supuesto eso no funcionó, la peli rosa tuvo que darle el libro a su sensei porque cumplió, así que se concentró en un plan b. Kakashi no quiso involucrarse y decidió salir un rato.
-- Sakura iré a tomar un baño en las aguas termales, ¿tú qué vas hacer?
-- yo iré a almorzar primero sensei.
-- bien, nos vemos después.
Kakashi salió y se encaminó a las aguas termales, como estaba en el cuerpo de Sakura tenía que entrar en el sector de las mujeres. Por suerte cuando llegó no había nadie así que aprovecho y se tomó su tiempo para relajarse. En la misma posada había un pequeño restaurante donde la peli rosa fue almorzar, llegó y pidió algo ligero para comer. Mientras comía pensó que sería buena idea darse un baño también en las aguas termales. Sakura bajaba la máscara con cautela cada vez que llevaba un bocado a su boca para no exponer el rostro de su sensei. Por otra parte, Kakashi estaba relajándose cuando llegaron cuatro mujeres en toalla, reían y bromeaban entre ellas se quitaron las toallas quedando desnudas y entraron al agua. Kakashi sonrió gustoso de lo que estaba viendo, las jóvenes estaban jugando entres ellas y hablaban de cosas de mujeres, el por supuesto prestaba atención a cada detalle. Ellas se dieron cuenta que Sakura estaba sola y decidieron acercarse a ella.
-- ¡hola! ¿Quieres compartir con nosotras? -- pregunto unas de las jóvenes.
-- si claro me gustaría -- respondió kakashi. En eso, las jóvenes se les acercaron.
-- hay que bonito cabello tienes -- dijo otra con voz melosa.
-- es verdad nunca he visto uno así -- dijo otra de las jóvenes -- eres muy linda, ¿quieres ser nuestra amiga ?
-- me gustaría si -- respondió kakashi con una enorme sonrisa.
Las cuatro jóvenes reían, sus voces eran melosas y sus risas dulces.
-- Oye y que haces aquí tan solita?
-- no estoy sola, vine con mi esposo -- respondió kakashi. Las mujeres se sonrojaron y se alegraron, les pareció muy tierno que Sakura estuviera casada.
-- no me sorprende, eres una mujer tan linda -- las jóvenes suspiraban.
-- ¿verdad que si? -- el peli plata hablaba con ellas encantado.
-- tengo una idea, que tal si jugamos un poco -- en eso tomaron a Kakashi del brazo para que jugara con ellas.
-- ¿jugar? Me parece divertido -- respondió kakashi.
-- que chica tan linda, es un amor -- decían entre ellas.
-- kakashi sensei ¡¿Que diablos está haciendo?! -- dijo Sakura que lo estaba viendo por un huequito detrás de la pared -- ¡Rayos! Cómo va a provecharse de mi cuerpo.
-- ¡ Oye pervertido! -- escucho Sakura una voz masculina detrás de ella, cuando se dió vuelta estaba un hombre con un bate en la mano.
-- ¿sabes lo que le hago a los pervertidos como tú?
-- ¿cómo yo? -- Sakura recordó que estaba en el cuerpo de kakashi -- n-no no es lo que usted piensa señor -- dijo nerviosa.
-- ¡¿que haces husmeando a las mujeres?!
-- disculpe esto es un error -- Sakura junto sus dos manos para disculparse, pero el señor se le fue encima lo que hizo que Sakura saliera corriendo. El señor corría detrás de ella con el bate en la mano.
-- ¡detengan a ese pervertido! -- gritaba el señor, Sakura utilizó su habilidad ninja para desaparecer haciendo que el señor la perdiera de vista. Escondida, apretó sus puños, presiono sus dientes y muy molesta dijo.
-- Grrrrrr... ¡Kakashi sensei voy a matarlo!
Por otra parte kakashi sabía que debía regresar, así que se despidió de las jóvenes.
-- debo irme chicas, mi esposo me espera.
-- Lastima, ojalá podamos vernos de nuevo -- respondió una de ellas.
-- no lo creo, pero fue un gusto conocerlas -- Kakashi se retiró, fue a los vestidores y de ahí fue a su habitación.
El peliplata llegó a la habitación y cuando entró, encontró a Sakura molesta sentada en la cama con la pierna cruzada, los brazos cruzados fulminandolo con la mirada.
-- eh! ¿Que pasa? Por qué tienes esa cara?
-- ¿tiene idea por lo que he tenido que pasar? kakashi sensei.
-- no se de que me hablas, pero me perturba verme sentado así.
Sakura se levantó molesta, apuntandole con el dedo.
-- Kakashi sensei ¿sabe lo mal que la eh pasado desde que estoy en su cuerpo?
-- ¿de que hablas ? Yo la estoy pasando bien.
-- ¡ Basta! No seguiré escuchando sus tonterías, es un egoísta que sólo piensa en usted -- Sakura lo apartó con el brazo para salir de la habitación.
-- ¿a dónde vas?
-- ¡Me largo! -- al abrir la puerta se dió vuelta y le gritó a kakashi -- ¡Y devuélveme mi cuerpo! -- en eso cerró la puerta con fuerza. Kakashi desde la habitación escucho a Sakura gritar desde el pasillo -- ¡Quiero mi cuerpo!
Kakashi se preocupo por ella, escucharla decir que él es un egoísta lo dejó pensando mucho. No entendía que le pasaba.
-- creo que en verdad sakura no la está pasando bien, debo solucionar ésto.
A Kakashi se le vino a su mente una idea para subirle el ánimo a su estudiante.