Tú eres yo y yo soy tú

Por la mañana Sakura sintió en su rostro la cálida luz del sol que entraba por la ventana, abrió sus ojos lentamente y sonrío al recordar la noche de pasión que tuvo con Kakashi. Se dio vuelta para darle los buenos días pero para su sorpresa no estaba, decepcionada supuso que fue a su trabajo y no quiso despertarla. Se aferró a la cama inhalando fuerte el olor masculino de Kakashi que impregnaba de las sábanas, embriagándose así de su aroma. Después de eso se levantó estirándose un poco, tomó una toalla y fue al baño a darse una ducha. Cuando terminó se colocó una camisa de Kakashi que le llegaba un poco más abajo de sus nalgas dejando expuesta sus largas y sexys piernas, salió del cuarto para prepararse algo de comer y encontró a Kakashi de espalda en la cocina haciendo ya el desayuno. Sakura sonrío al verlo, sus ojos recorrieron la amplia espalda de Kakashi deteniéndose en las claras pecas que adornaban sus hombros. Bajó su mirada poco a poco hasta llegar a sus redondas y duras nalgas, resultado de sus años de entrenamiento que se insinuaban bajo la tela del pantalón que llevaba puesto. La mirada de Sakura fue tan penetrante que Kakashi se sintió observado, cuando fue a girar su mirada, Sakura ya estaba detrás de él rodeando sus brazos para abrazarlo, sorprendiéndolo. -- Sakura, buenos días. Ya despertaste -- dijo mientras seguía cocinando. -- Buenos días -- Sakura besó su espalda -- creí que ya estabas en la oficina -- se dieron un beso en la boca. -- hice una excepción, tenía que prepararte el desayuno. -- se ve delicioso. -- siéntate ya voy a servir. Sakura fue al comedor a sentarse cuando Kakashi la miró, miró dos veces al darse cuenta de que llevaba puesto su camisa. Sonrió al verla tan sexy, sus ojos se deslizaron en como sus nalgas se le marcaban bajo la tela, una camisa negra que resaltaba más sus piernas blancas. Disfrutó del momento hasta que ella se sentó en la silla, luego se acercó llevándole el plato en la mesa. -- Espero que lo disfrutes. -- claro que sí -- inhaló un poco el aroma del plato -- huele rico. Kakashi tomó asiento y ambos empezaron a comer, mientras comía Sakura lo observaba muy tranquilo se veía tan relajado, no tenía en él una pizca de preocupación. -- ¿Pasa algo Sakura? está distraída. -- Kakashi ¿no estás preocupado? --¿ por qué lo estaría? -- bueno es que tú eres el Hokage y ahora, tú y yo estamos juntos. ¿no te preocupa el consejo? -- estaba preocupado -- pasó su lengua por sus dientes -- pero ya no lo estoy. Sakura se sorprendió ante su respuesta, ella estuvo pensando en eso desde su viaje de regreso a konoha. -- vaya... no me sacaba eso de mi cabeza y ahora que lo dices así, no sé qué decir -- llevo un bocado a la boca. -- yo sí sé qué decir -- respondió Kakashi, Sakura lo miró con curiosidad -- ¡que se vayan a la mierda! Sakura abrió los ojos como platos ante tal respuesta -- pero Kakashi. -- Sakura, quiero que las personas me vean contigo, que caminemos agarrados de mano, que sepan que eres mi mujer... Quiero presumirte y quiero demostrarle al destino que esta vez seré feliz ¿tiene eso algo de malo? Sakura estaba con la boca abierta, tenía las palabras atoradas en su garganta -- n-n- no no tiene nada de malo... al contrario estoy feliz de saberlo. -- ¿ves? ya está solucionado -- sonrío mientras masticaba. Sakura sonrió, esa actitud de kakashi le causó un poco de gracia y ternura al verlo tan decidido y emocionado. Escucharlo expresarse así sobre ella y su relación y querer demostrarlo abiertamente la hizo sentir nerviosa y emocionada a la vez, pero lo miró pícaramente y le guiñó el ojo aceptando su propuesta con una sonrisa amplia. Cuando terminaron de comer lavaron los platos y ordenaron la cocina, Sakura fue al cuarto para cambiarse de ropa al quitarse la camisa dejó al descubierto sus senos, su cuerpo esbelto lo adornaba una braga de encaje color rojo. Kakashi se le acercó por la espalda y comenzó a besar su cuello y hombro dandole suaves mordiscos, rodeo su cintura aferrando la a él. Llevo una mano a su intimidad apartando la braga con suavidad y con sus dedos comenzó a estimularla. Sakura sintió su cuerpo arder, sus mejillas estaban sonrojadas y su respiración agitada. Entre una voz agitada alcanzó a decir. -- Ka-kakashi vas tarde al trabajo. -- ha sí ? -- Kakashi con una mano la agarró por la cara apretando sus mejillas y plantó un profundo beso, la llevó a la cama sin sacar sus dedos en ella y con cuidado la tumbó boca abajo. Subió a ella apoyándose de sus brazos besándola en su cuello y nuca, Sakura se acomodó abriendo un poco sus piernas mirando de reojo al peliplata saciada de él. El estímulo que Kakashi brindaba a su intimidad la estremeció y la dilataba haciendo que se humedeciera más. Él retiró con cuidado la braga, manteniendose arriba de ella y abriendo paso entre sus piernas. Sacó su miembro del boxer y con su mano hizo movimiento de arriba abajo, llevándolo a su entrada. Sakura arqueo su espalda echando la cabeza hacia atras levantando su trasero. El vaivén de Kakashi era cada vez más fuerte, la tomó por el mentón con una mano y acercó su cara a la de ella. Escuchando sus gemidos con placer, le susurro al oído -- eres tan hermosa. Sakura ya estaba llegando a su orgasmos -- kakashi ya voy a correrme -- su voz agitada y ronca. -- hazlo -- la tomó por sus caderas penetrandola más fuerte, haciendola llegar a su climax y seguido él más atrás. Kakashi gruñó de placer a descargar todo dentro de ella sus gotas de sudor corrían por sus cuerpos, Sakura tendida en la cama recuperaba el aliento. Kakashi se limpió su frente con el pulgar lanzándose a la cama y llevando un brazo a Sakura para atraerla a su pecho agitado y su boca seca. Luego de eso, ambos se metieron al baño para ducharse el agua caía sobre sus cuerpos mientras se enjabonaban, se lavaron el cabello mutuamente y compartían besos. Al terminar secaron sus cuerpos, Sakura tendió la cama para que ambos pudieran disfrutar de un descanso. Desnudos se acostaron y abrazaron y sin más, se quedaron dormidos. El calor comenzaba a sentirse en la habitación, Sakura acalorada se apartó de Kakashi. Entre abrió sus ojos y notó el fuerte resplandor por la ventana, se levantó de golpe sobresaltada al darse cuenta que ya era mediodía. -- ¡rayos! Kakashi párate. El peli plata se sobresaltó al ser despertado bruscamente -- ¿Qué pasa? -- Mira la hora Kakashi, vas tarde al trabajo. Me sorprende que no han venido a buscarte. -- Sakura quédate tranquila, es domingo. -- ¿ Y eso qué tiene que ver? -- los domingos no trabajo. -- ¡Y hasta ahora me lo dices! -- Sakura le pegó con una almohada mientras él reía. -- ven acuéstate -- la tomó por la cintura y la aferró a él, cerrando sus ojos. -- está empezando a hacer calor. -- no voy a soltarte -- respondió Kakashi conciliando el sueño. Sakura cerró sus ojos tratando de dormir pero ya no podía, se le había espantado por el susto que llevó. quedó pensativa por un momento mientras mantenía su mirada en un punto indeterminado. -- ¿Desde cuándo los hokages tienen un día de descanso? Kakashi la escuchó y abrió un ojo que seguido a su respuesta lo cerró -- Siempre han tenido un día libre, no somos máquinas. Sakura arqueó una ceja -- creí que solo tomaban un descanso cuando tenían un tiempo libre. Kakashi manteniéndola aún abrazada respondió -- también nos tomamos un tiempo libre. Ya duérmete -- dijo manteniendo sus ojos cerrados. Sakura dejó de hablar se quedó mirando al techo y trató de no moverse para que Kakashi siguiera durmiendo, cuando ya estaba profundamente dormido Sakura se levantó con cuidado. Se colocó de nuevo la camisa de Kakashi que tenía puesta y fue a la cocina a preparar algo de comer, sin hacer mucho ruido preparó el almuerzo cuando ya estaba listo mantuvo las ollas tapadas para esperar a Kakashi que despertara para comer juntos, mientras esperaba notó el libro isha isha en la pequeña mesa rectangular que estaba en la sala. Lo tomó y decidió leerlo, «¿me pregunto qué tendrá de interesante este libro?»-- pensó Sakura, así que comenzó a leerlo sentada en el sofá. Después de varias páginas Sakura cerró el libro, miró hacia arriba y pensó « con todo el respeto que merece el maestro Jiraiya, pero ese hombre debió ser un maldito semental en la cama». Se levantó y fue a la cocina, tomó una servilleta y se limpió la nariz. -- ¿ Y qué te pareció? -- ¡ Hay Dios mío! Qué susto -- Sakura llevó su mano al pecho después de escuchar la voz de Kakashi detrás de ella. -- ha de estar nerviosa por lo que leíste -- dijo kakashi con una sonrisa pícara -- perdón no quise asustarte. Entonces, dime ¿Qué te pareció? -- me pareció -- aclaró la garganta -- entretenido. -- ¿entretenido? de todas las palabras, escogiste esa? -- basta Kakashi -- replicó sonrojada -- preparé el almuerzo ¿quieres comer ya? Kakashi estaba completamente desnudo por lo que Sakura no podía evitar desviar su mirada hacia su miembro -- Dios Kakashi ponte algo me excitas -- dijo desviando su mirada. -- jajaja Está bien, pero solo para que puedas comer tranquila. En eso, Kakashi fue al cuarto mientras que Sakura servía la comida. Kakashi se había puesto un boxer y una camisa blanca ambos se sentaron a comer tranquilamente, cuando cruzaban sus miradas sonreía y se quedaba mirando por unos segundos. -- está rico -- comentó Kakashi rompiendo el silencio. -- Gracias -- Sakura sonrío. -- ¿quieres que salgamos esta noche? hacer algo diferente o quedarnos y pasar toda la tarde aquí. Sakura levantó la ceja y llevó su dedo en el mentón pensando -- No lo sé, no había pensado en eso. -- lo que tú decidas está bien para mí -- expresó Kakashi. -- ya veremos qué pasa -- dijo Sakura. Después de comer Kakashi sacó una hamaca que tenía guardada, la guindo quedando debajo de un árbol que tenía detrás de su casa. Subió a ella y luego Sakura sentándose entre las piernas de Kakashi. El peliplata bajó una pierna y con el pie se meceaba lentamente teniendo a Sakura abrazada recostada en su pecho, la refrescante sombra del árbol y la suave brisa era perfecta para que Sakura no tuviera calor. Ella leía un libro mientras Kakashi la observaba en silencio, encontrando una paz en su simple presencia. Después de un poco de lectura Sakura cerró el libro y miró a Kakashi. -- quiero empezar a trabajar en el hospital a partir de mañana. -- pero te di un descanso. -- lo sé, pero no quiero estar sin hacer nada. Además, ya he estado mucho tiempo fuera del hospital y quiero ponerme al día. -- es verdad y ahora que eres la directora ha de tener mucho trabajo. -- mañana mismo hablaré con mi maestra. Con el paso de las horas, la tarde fue avanzando hasta que llegó la puesta de sol. Ambos decidieron que lo mejor era quedarse en casa, disfrutar de su compañía y relajarse después de las aventuras del día. Todos en la aldea esperaban con ansia la gran boda del héroe de konoha las horas se convirtieron en días y los días en semanas, los invitados pensaban en el regalo perfecto para los novios. Mientras que la frustración invadía al sexto buscando una solución para que todos pudieran asistir a la boda. Masajeando sus sienes decidió salir de su oficina a relajarse un poco, se encaminó al hospital para hablar con Sakura y tomar un descanso con ella « Espero que esté desocupada»-- pensó mientras caminaba hacia allá. En la aldea todos sabían de su relación, ya habían pasado dos meses y estaban felices por ellos, los aldeanos al verlos caminar juntos les parecía una pareja muy hermosa y atractiva. Kakashi acostumbraba a visitar a Sakura al hospital así que, cuando él llegaba el personal sabia que él se dirigía directamente a la oficina de la peli rosa. Cuando entró a la oficina no la encontró decidió quedarse a esperar un poco como solía hacer, de pronto la puerta se abrió él se dio la vuelta esperando que fuera ella la que entrara pero para su decepción era su secretaria. -- lord hokage, no sabía que estaba aquí. -- ¿Sakura está ocupada? -- Está en el quirófano operando señor -- se acercó al escritorio a dejar unas carpetas. -- supongo que tardará mucho. -- no sabré decirle, ya sabe cómo es esto. ¿va a querer esperarla? -- solo un poco. -- está bien, Hokage Sama. La secretaria se retiro con una sonrisa amable, dejando a Kakashi sólo en la oficina. El tiempo parecía amplificarse en el silencio, pero la espera no le pesó. Al fin, la puerta se abrió y Sakura se apareció, su rostro iluminandose al verlo. -- Hola cariño siento haber tardado -- se dieron un beso. En el hospital siempre le avisaban a Sakura cuando Kakashi llegaba a visitarla. -- ¿y cómo estuvo la operación? -- por suerte no hubo complicaciones -- respondió sentándose en su silla, mientras que él se recargaba en el escritorio. -- ¿Ya pensaste en algo para que todos asistan a la boda? -- no, por eso vine. Quería tomar un descanso. -- ya se te va a ocurrir algo tranquilo -- expresó Sakura con optimismo. -- eso espero. -- Si se me ocurre algo te lo haré saber. -- por favor, eso me ayudaría mucho. ¿Y ya estás desocupada? -- solo tengo 40 minutos libre, quedé en verme con Ino pero puedo dejarlo en otro momento si quieres estar conmigo. -- no te molestes, estoy de paso. Además Shikamaru no tardará en enviar a mis niñeras. -- pero Kakashi -- Sakura sonrío. -- te puedo acompañar hasta la floristería. -- Estás seguro? porque no tengo ningún problema con quedarme contigo. -- No, ya te dije que no -- respondió con su voz tranquila -- Vámonos de una vez para que te dé tiempo de hacer lo que vayas a hacer. Sakura aceptó y ambos salieron del hospital, mientras caminaban ella lo tomaba del brazo. Los aldeanos los saludaban con respeto y ellos devolvían el saludo con amabilidad. -- ¿y qué harás con Ino? -- compraremos el regalo de boda para Naruto y Hinata. -- creí que tú y yo entregaríamos nuestro regalo juntos. -- y lo haremos, pensé en decírtelo este fin de semana que estás más desocupado. -- hmm... entonces, trataré de no tener asuntos pendientes para ese día. -- gracias amor. Llegaron a la floristería y se despidieron con un beso en la boca, él con su máscara puesta. Ino pudo verlos desde adentro y sonrió, se sentía feliz por ellos y más por su amiga. Llegó el día de la boda y todos en la aldea estaban felices por los novios, Sakura estaba en su cuarto terminándose de arreglar. Esperaba a Kakashi que quedó en pasar por ella para llegar juntos a la boda cuando de pronto escuchó murmuros en la sala, abrió con cuidado la puerta de su cuarto y escuchó a su madre recibiendo a Kakashi que acababa de llegar. Ella sonrió sabía que debía terminar rápido y bajar para sacar al peli plata de esa situación pues, él fingía que le causaba gracia los juegos de palabras de su padre. Rodó los ojos y se dijo a sí misma -- debi comprar ese apartamento cuando tuve la oportunidad -- Sakura ya tenía intención de mudarse antes de que ella y Kakashi cambiaran de cuerpo, pero cuando regresó de misión de Kumogakure se llevó la sorpresa de que ya habían vendido el apartamento. Se dio los últimos retoques y bajó, Kakashi estaba conversando con Mebuki y Kizashi tranquilamente en la sala cuando deslizó la mirada hacia la escalera vio a Sakura bajar. Sus ojos se abrieron de par en par y se levantó lentamente con la mirada perdida en ella, Mebuki se llevó las manos a sus mejillas y con una gran sonrisa dijo: -- hayyy pero qué hermosa te ves hija. Su padre estaba de brazos cruzado y asentaba con la cabeza con una gran sonrisa -- si, mi hija es una hermosa mujer. Sakura sonrió al ver las expresiones de sus padres, agradecio por eso y luego miró a kakashi, se acercó a él colocandose de frente. -- y tú Kakashi ¿no dirás nada? -- Sakura se sonrojó y bajó la mirada. -- es-estás hermosísima Sakura -- respondió embelesado -- te ves... increíblemente hermosa. -- gracias -- sonrió -- y tú estás muy guapo. Sakura tenía un vestido de tiras color rojo que se ajustaba a su cuerpo, marcaba todas sus curvas con un escote dejando su espalda completamente descubierta. El vestido era largo y con un corte que dejaba una pierna descubierta, sus tacones eran rojos y su cabello recogido de lado. Un maquillaje simple pero hermoso, con brillo en sus labios que resaltaba más su sensual boca. -- ¿nos vamos? -- pregunto el peli plata ofreciendo su brazo. -- si, vamos. Pero el padre de Sakura los interrumpió con uno de sus escandalosos gritos, haciendolos esperar para buscar la cámara. Sakura miró al peli plata e hizo una sonrisa forzada mientras que Kakashi encogió los hombros. -- ¡aquí está! ¡la encontré! -- papá no hace falta que grites. -- vamos Sakura, ponte junto a Kakashi -- Kizashi llamaba al sexto por su nombre ya que él mismo Hokage así se lo pidió. Kakashi tomó a Sakura por la cintura y la acercó a él, se acercó a su oido y le susurró: -- mejor sonríe para irnos. Después de las fotos, la pareja salió tomada de manos. Cuando llegaron al lugar llamaron la atención de todos, sentían las miradas puestas en ellos. Se acercaron a saludar a sus amigos y saludaron a los Kages presentes. Cuando ya estaba por iniciar la boda todos tomaron sus asientos, Sakura sonreía feliz al ver a su amigo rubio con Hinata, sin darse cuenta apretó un poco la mano que sostenía la de Kakashi. Éste sintió y desvió su mirada en ella mirando así su sonrisa y el brillo en su mirada, la luz del sol daba a su rostro iluminándola y haciendola ver más hermosa. Sonrió levemente bajo la máscara expresando una tierna mirada, apretó la mano de ella llamando su atención ella volteó al verlo y él le dedicó una sonrisa cerrando sus ojos causando en ella un sonrojo en sus mejillas. Por la noche, los novios y los invitados estaban disfrutando de la fiesta. Sakura estaba hablando con sus amigas cuando el DJ puso una canción que hizo que Kakashi fuera a buscarla para invitarla a bailar. Se le acercó por la espalda tomándola de la cintura sin asustarla, se dirigió a las chicas y dijo: -- disculpen señoritas, pero quiero bailar esta pieza con mi novia. Las chicas sonrieron y respondieron -- Sí claro, Hokage-Sama. Sakura se sonrojó un poco y tomó a Kakashi de la mano. Fueron al centro del salón para bailar. Él colocó su mano detrás de su espalda baja y con la otra sostenía la mano de Sakura, mientras ella acercó su cuerpo a él, bailando completamente pegados. -- Esta canción me gusta, siento que es para nosotros —susurró Kakashi al oído de Sakura. Sakura cerró los ojos, sonriendo al sentir el calor de su cuerpo contra el suyo. Ambos bailaban con mucha pasión, sus cuerpos aferrándose y moviéndose al ritmo de la música. Kakashi acercó sus labios al oído de Sakura y susurró, su aliento cálido rozando su piel. -- necesito hablar contigo -- la tomó de la mano y la llevó a otro lugar lejos de los demás, asegurándose que nadie pudiera verlos. -- Kakashi ¿pasa algo? -- tranquila, solo necesitaba estar a solas contigo... Creo que aquí estamos bien. Él se detuvo y se colocó frente a ella tomó sus dos manos y las besó -- quiero darte algo. Sakura lo miró con curiosidad, vio que metió su mano en el bolsillo de su pantalón y sacó una pequeña caja. Se puso nerviosa pero no lo demostró, él la miró y sonrió. -- esto es para ti -- dijo Kakashi antes de abrirla. Sakura sonrío ampliamente -- Kakashi yo... no creí que tú... -- habló nerviosa, él la miró con ternura. -- Sakura yo te amo, te mereces esto y mucho más. Es sólo el inicio de nuestras vidas. Sakura sonrió y sus ojos se pusieron llorosos. En eso Kakashi abrió lentamente la caja, la mirada de Sakura brillaba con intensidad, su corazón latía fuerte y su amplia sonrisa se borró al ver lo que había dentro. -- Feliz cumpleaños Sakura -- exclamó el peli plata con emoción. -- ¿una pulsera? -- preguntó ocultando su decepción. -- No es una pulsera, es una tobillera. -- ¿Que? -- levantó una ceja. -- ¿Qué pasa? ¿Por qué pones esa cara, esperabas otra cosa Sakura? -- no, bueno... nada en particular. Está hermoso Kakashi, gracias. -- No te veo contenta. -- sí lo estoy, es un hermoso regalo de cumpleaños. -- en ese caso, deja y te lo coloco. Kakashi se inclinó poniendo una rodilla en el piso mientras que en su otra pierna Sakura con una sonrisa tímida posó su pie descalzo sobre su muslo. Kakashi le colocó la tobillera, rozando brevemente sus dedos a la suave piel de Sakura enviando un escalofrío correr por su cuerpo. La ayudó a colocarle el tacón y se mantuvo inclinado mientras veía como Sakura ponía su pie de punta observando su prenda en el tobillo. Levantó la mirada y sus ojos se encontraron, la intensidad de la mirada de kakashi la hizo sonrojar. -- Kakashi se ve hermoso -- expresó con una sonrisa sincera. En eso, Sakura vio como Kakashi sacó de su otro bolsillo del pantalón otra caja pequeña color rojo manteniendo su posición. Sakura sintió como su corazón de un brinco al ver que dentro de la caja estaba un anillo de compromiso. -- Kakashi -- susurró. -- Sakura, ¿te casarías conmigo? Los ojos de Sakura se pusieron llorosos, su sonrisa cada vez era más amplia. Ella asintio con la cabeza seguido de un -- sí acepto. Kakashi se levantó y colocó el anillo en su dedo, bajó su máscara y la besó apasionadamente. Ella rodeó sus brazos en su cuello correspondiendo el beso. Al separarse, Sakura miró su anillo y dijo: -- me queda perfecto. El peliplata la tomó de la mano y la miró a los ojos -- cuando estaba en tu cuerpo, aproveché de tomar la medida de tu dedo. -- Kakashi entonces, ¿has querido esto desde antes? -- así es, solo que no quería apresurarme. Sakura le dedicó una sonrisa, pero sacó el anillo de su dedo llamando la atención del peli plata. -- ¿ por qué te lo quitas? -- no sería prudente quitarle el protagonismo a los novios -- ladeo una sonrisa. -- En ese caso, déjamelo a mi. Yo lo cuido. Kakashi tomó el anillo y lo colocó de nuevo en la caja, lo guardó en el bolsillo y hecho un pequeño mechón de cabello de Sakura hacia atrás. La tomó por la cintura y la atrajo hacia él, rozo sus labios a los de ella y dijo: -- ¿ quieres ir a mi casa a celebrarlo? -- su voz fue seductora. -- Me encantaría. Él la besó sensualmente en la boca -- Entonces vamos a despedirnos. Kakashi le tenía otra sorpresa en su casa, era un pequeño pastel de cumpleaños para celebrarselo. Ambos caminaron de regreso a la fiesta, caminando uno al lado del otro. La mano de Kakashi rozo suavemente la suya. Sakura lo tomo del brazo y se apoyó en el, sintiendo la calidez de su cuerpo. Caminaba a paso lento y las luces de la fiesta daban de frente reflejando sus rostros, haciendo que su sombras se alargaran en el césped detrás de ellos. -- Kakashi, quiero que cuando tengamos nuestra casa me regales un cachorrito. -- un cachorro, eh? Está bien, le diré a Pakkun que busque un cachorro ninja. -- yo no quiero un cachorro ninja -- frunció el ceño -- quiero un cachorro común. -- Entonces, en ese caso adoptaremos uno. -- me gusta la idea de adoptar. -- oye debiste ver tu cara de decepción cuando te di la tobillera, fue divertido -- dijo en tono de burla. Sakura cruzó los brazos y torció el gesto -- Kakashi eres un tonto. Kakashi soltó risas, le gustaba molestarla la aferró más a él y le dió un beso en la cabeza. Sakura sintió como se le derretía su corazón, se acomodó en su hombro -- eres insoportable a veces -- murmuró con una sonrisa, kakashi le respondió con un beso en la mejilla. Y así, comenzaron un nuevo capítulo en sus vidas, nunca pensaron que encontrarían la felicidad de esa manera. Las siluetas de los dos enamor ados fueron perdiéndose entre el bullicio de la fiesta. Fin.