Capitulo V. El ángel roto.
20 de mayo de 2025, 14:30
Solo para parar unos segundos al escuchar la conversación que tenía Nise con Kuon, Yuri por su parte al llegar a su lado lo miraba con extrañeza al parar de inmediato solo para mirar al frente, abriendo sus ojos de golpe al escuchar las palabras de Kuon quien confesaba la "verdad" de quien habían encendido el Railgun, mostrando que en verdad Yuka estaba diciendo la verdad. Pero lo que más la impacto fue escuchar a Mayuko insultar a Shinzaki sin piedad, por no pensar en las consecuencias de sus mentiras.
En especial cuando estaban pocas personas que probablemente muchas ya habían escuchado su conversación. Habían escuchado suficiente y Yuri iba a parar a Mayuko por sus horribles palabras, pero Sniper la detuvo al poner una mano enfrente de ella para calmarla, la mujer sol estaba a punto de responder pero el francotirador fue más rápida que ella al dar un paso al frente, sintiendo que con cada paso la furia incrementaba porque al escuchar como Kuon mentía de nuevo, aunque estaba asustado al pensar que ella ya sabía que responder, era como si supiera las palabras que dijo con los demás en la reunión.
—Mayuko...—Él la llamo haciendo que la rubia volteara mostrando un poco su sorpresa, pero solo disimulo de inmediato. — Es suficiente. — Respondió mientras miraba de reojo a Kuon quien para ese punto había dejado de llorar, solo se veía en su cara roja y las mejillas hinchadas, como mostraba esos gestos tan tristes y llenos de arrepentimiento, aunque para ese punto Yuka no sabía si de verdad era genuino o solo otra mentira, a pesar que Kuon de verdad se sentía miserable por todo, por el simple hecho de ser descubierta y ese pesar al saber que Yuka había sido lastimado, no necesitaba ser un genio para saberlo.
Después de todo conocía a Yuka y sabia por su forma de actuar que estaba muy mal, así que solo prefirió desviar su mirada avergonzada. — Como sea... ya dije lo que tenía que decir. —Menciono la mujer luna bastante cansada de esto, algo que Yuri mostro desagrado.
—Mayuko, eso fue muy cruel. —Pronuncio decepcionada una de los lideres, algo que Nise al ver la molestia de Honjo se sintió abochornada por su expresión, no le gustaba hacer enojar a su amiga.
Mientras por parte de Sniper solo le dio la espalda a los demás y dijo de forma calmada. —Kuon, es hora de irnos. —Fue más una orden, algo que la chica solo asintió en silencio, como pudo salió de la cama, mostrando que su uniforme seguía bastante sucio, pero al menos parte de su cara y cabello habían sido limpiados por las enfermeras, para ayudar a cerrar sus heridas. Ella solo tomo sus zapatos y se los puso para tambalearse un poco, algo que Yuri se angustio. —¡Kuon, ten cuidado! —Menciono la chica preocupada por su amiga tratando de sostenerla, pero Kuon solo sonrió tímidamente y agotada.
—No te preocupes Yuri, estoy bien. —Respondió ante su angustia, aun así se alejó de ella y sin mirar a Mayuko fue hacia Yuka que al ver que se acercaba, comenzó a caminar hacia el departamento que compartían.
Todo el trayecto fue bastante silencioso, Yuka ni Kuon se hablaban para ese punto la chica se sentía terriblemente ansiosa y nerviosa, porque no sabía que pasaría el desconocer lo que pensaba Yuka la aterraba, quería vomitar a ese punto sus emociones turbulentas estaban haciendo que su corazón doliera, porque la idea de que Yuka terminara su relación y todo contacto con ella, la aterraba de sobre manera que provocaba que esta deseara morir en esos momentos. Fue entonces que al llegar al departamento ambos entraron sin decir mucho.
Kuon solo quería estar bien con su relación y disfrutar de sus días, pero ahí estaba parada en la sala sin decir nada y esperando una reacción del francotirador, que solo se sentó en el sofá enfrente de ella. Ambos se quedaron callados unos minutos, solo el sonido del reloj ayudaba a cortar el silencio, pero no la tensión e incomodidad que surgía entre ellos. La joven solo miraba el suelo jugando ansiosamente con sus dedos, cuando de repente fue Yuka el que hablo primero. — ¿Quién realmente eres? —Pregunto con bastante seriedad y yendo directo al punto.
La mujer se sorprendió por esas palabras tanto que levanto su mirada con mucha incredulidad, no entendiendo a que se refería que respondió. — N...no-no se a qué te refieres. — EL francotirador al escuchar esa respuesta, solo hizo que su insatisfacción y su furia aumentaran.
—No lo preguntare otra vez, quiero saber. ¿Quién eres?, mi Kuon nunca haría lo que has hecho tú. — Dijo con veneno en sus palabras, a pesar de que poseía la máscara, Shinzaki podía sentir como su mirada la mataba poco a poco, como si quemara y eso la asustaba.
Fue entonces que la chica comprendido a que se refería su amado, por lo que esta con todo el dolor de su corazón , sabiendo que tendría que enfrentar la verdad tarde o temprano, volvió a observarlo cambiando su expresión por completo, dejando ver su verdadero ser, esa señorita sol que con su brillo podía quemar todo. — Si piensas que fui raptada o remplazada, temo decirte que no es así Yuka. Realmente soy Kuon. — Esta vez ya se dejaría de formalidades, seria directa y sensata.
Kuon camino hacia el sillón enfrente de ella, donde se sentó y se mantuvo firme, sabiendo que Yuka la seguía con la mirada todo ese tiempo. — Haz de una vez tus preguntas, no soy buena contando mi vida de forma concisa. — Pronuncio siendo lo más honesta posible, esta vez no habría mentiras en absoluto.
EL francotirador estaba más irritado y herido, porque definitivamente confirmaba su miedo. Su novia sí que había mentido, pero ahora que al fin miraba la verdadera cara de la doble cara, no había de otra más que continuar aun sabiendo que la verdad podía romperlo. —Empieza contando, ¿Por qué me haz mentido todo este tiempo? — Eso fue una pregunta directa, pero era su afirmación, porque todo esto había servido como prueba.
Shinzaki le angustio saber que esa iba a ser la primera pregunta, sería muy doloroso de contestar porque sabía que al hacerlo no había vuelta atrás y Yuka la odiaría, pero no había otro camino y más mentiras no servirían, después de todo había sido descubierta, perdió en el momento que volvió a ser la diosa. —Por tener una posibilidad de sobrevivir...—Menciono de forma honesta pero continuo. — Bueno eso fue al principio, pero ahora mis prioridades cambiaron. —
—¿Es así? —Yuka para ese punto su voz sonaba escéptica, era evidente que no le creía nada a la mujer.
Kuon apretó sus labios escuchando ese tono dejando evidente que estaba nerviosa de proceder. — Se que es difícil que me creas, pero realmente digo la verdad que cambie mis objetivos. —Respondió suavemente levantando la mirada para demostrar su sinceridad, pero en vez de encontrarse con simpatía , solo noto indiferencia algo que para la chica dolió un poco.
—Ja, ¿de verdad esperas que te crea así de más?, Lo único que veo es una mujer totalmente desconocida en el cuerpo de la verdadera mujer que amo, ¿de verdad piensas que voy a creerte sabiendo que me estas dando otra cara? —Pregunto Yuka utilizando preguntas realmente duras que hicieron que el corazón de la chica se hiciera añicos, por esa horrible verdad tanto que comenzaba a sollozar en silencio, apretó su brazo con sus dedos.
—No te culpo, después de todo no solo a ti, a todos les he mentido. — Contesto Kuon en un hilo de voz en especial sabiendo que ya no tenía más que confesar. — Te lo contare todo, te pido que escuches hasta el final y no me interrumpas. —Pidió.
El francotirador solo asintió y decidido mantenerse callado. Fue entonces que Kuon comenzó su relato. — Antes de llegar aquí vivía con mis padres que como sabes son personas ricas, me crie en cuna de oro y nunca me falto nada, a pesar de tenerlo todo aun así me sentía vacía tanto que solo lo llenaba volviéndome un monstruo. —Dijo con cansancio y arrepentimiento en su voz.
—Mis padres me criaron para ser la mejor de todos, que pisoteara a quien se pusiera en contra mío. —Ella levanto su mirada con ese gesto serio, pero en sus ojos demostraban su tristeza. —No importaba a quien dañaba o molestara, mientras cumpliera con mis metas todo valdría la pena, me volví manipuladora, tome clases de actuación para dominar el arte del engaño, tanto que me gustaba lo que hacía. Fui la cabecilla del bullyng de mis compañeros de escuela, maestros u otras personas ajenas, si las catalogaba como molestos para mis planes, el dinero de mis padres siempre encubrió mis huellas. Mis padres lo sabían y aun así, no hicieron nada. — Cada relaro que contaba Kuon hacia que Yuka comenzara a asquearse, al saber que la persona que amaba con locura era una total desconocida.
O peor aún saber que era una psicópata oculta, el francotirador no podía medir el maldito asco que sentía al saber sobre la verdad de Kuon, en especial cuando ella siguió continuando su relato. —Esa fue mi vida antes... pero cambio por completo, cuando entre a este mundo, te mentí cuando dije que había llegado hace un día cuando la realidad había llegado hace unas semanas atrás, pude aprender primero las reglas de este mundo, controle lo más posible mis nuevos poderes y utilice a muchas personas como enmascarados para saber mis habilidades nuevas... —Shinzaki no se iba a guardar nada. — La última que utilice fue a ti. — Sabia que sería horrible decirlo, pero ya no quería ocultarle nada al hombre que amaba.
—Antes de conocerte el señor del que me salvaste, me acerqué a él fingiendo estar inofensiva y perdida, muy normal en mi en esos tiempos... ese hombre al darse cuenta, que podía hacer lo que quisiera conmigo, quiso aprovecharse de mí, pero a ese punto solo tenía control de los enmascarados, por lo que mis habilidades de lucha eran nulas, así que tuve que huir buscando cualquier enmascarado para defenderme. Fue entonces cuando te encontré, pero... estaba tan aburrida de controlar a los enmascarados de forma tan sencilla, que cuando te vi quise probar otro método y pensé que la mejor manera fue la manipulación. — Menciono mientras presionaba más sus dedos en su brazo, mostrando sus gestos de decepción y arrepentimiento. —Fue entonces que comencé a fingir ser la Kuon que todos conocen, de ahí todo cambio para mí. Al principio todo fue un juego, pero luego comencé a enamorarme de ti... nunca en mi vida lo había experimentado, después conocí a Yuri, Mayuko y a más personas...— Las lágrimas comenzaron a bajar por sus mejillas, mostrando que estaba arrepentidas por sus decisiones.
—Fue entonces cuando conocí el amor y amistad genuina, y me termine enamorando de esos sentimientos, me hicieron sentir realmente libres, como si el vacío que tenía en mi pecho al fin hubiera desaparecido y mientras más me daba cuenta, comenzaba a sentir mucho miedo a que me alejaran de ustedes en especial de ti, tanto que cuando estábamos en guerra con Aikawa, Yuri noto que me ponía más ansiosa y preocupada, todos pensaron que era porque me sentía asustada por la guerra, pero Yuri supo que era por otra cosa, fue entonces que me dijo unas palabras que hicieron que tomara una decisión que cambiaría mi vida. — Kuon tomo una bocanada de aire fuerte para soltarlo poco a poco, ya que tenía que calmarse porque su voz se estaba quebrando. — Kuon sé que has estado fingiendo, y sé que te da miedo lo que eres, pero la verdad esta versión de ti me encanta, eres tan independiente y única, pareces realmente feliz y libre, que no necesita ser una extensión de personas ajenas. —Menciono la joven Shinzaki.
—Así fue que decidí cambiar mi destino y para eso tenía que borrar mi pasado, porque Yuri tenía razón, soy realmente feliz y libre a pesar de todo lo que hice... así que con el pretexto de descansar, me aleje de ti y de todos, encerrándome en uno de los cuartos para dormir, ahí contacte mi poder de diosa y descubrí que podía alterar recuerdos como la esencia de las personas, una habilidad tan poderosa y rota que sabía que jamás podía utilizarlo con otros seres. Solo sería yo la primera y la última que utilizaría, fue entonces que altere mis recuerdos, selle la mayoría de mis poderes, mi antigua yo y lo que represente en ese entonces, para poder hacer que esta personalidad falsa que forme se volviera la verdadera. Es así como renací como me conoces ahora... desde que desperté, supe que me sentía tan contenta y libre que quería compartirlo con todos mi felicidad, al menos quería volverme un rayo de esperanza para todos como una nueva meta, queriendo purgar mis pecados que cometí al quitar tantas vidas y combatirlo en hacer lo contrario, darle las esperanzas de vivir. —Yuka experimentó una amalgama de emociones que revolvieron su interior como un torbellino. El peso de la confesión de Kuon resonó en su corazón, mientras sus propias dudas y temores se agolpaban en su mente. La sinceridad de Kuon, mezclada con el miedo y la determinación en su voz, le hicieron comprender la complejidad de los sentimientos que su pareja había estado guardando en secreto, pero también hacía que su ira aumentara aún más de lo que sentía, porque se sentía traicionado porque se dio cuenta que todo había sido falso, solo fue un amor incondicional por su parte y eso lo destrozo.
—Pero al saber que había borrado parte de mi memoria y alterado, sabía que no podía dejar que todo saliera a la luz porque inconscientemente sabía que todo se arruinaría, y esos miedos me hicieron que mi verdadera naturaleza se alimentara de mis inseguridades y poco a poco, comenzara a juntarse que mi mascara se estaba rompiendo. La gota que derramo el vaso y deje que se liberara todo... fue cuando nos capturaron y bueno... lo demás lo sabes. —Termino de relatar la chica, quedándose callada ya no quería continuar porque al fin había terminado.
La sala se quedó en silencio unos minutos que parecían eternos, pero fue el hombre que interrumpió. —¿Eso es todo? —Pregunto Yuka suavemente pero su voz sonaba seria y apagada.
—Si. —Respondió la chica de inmediato estando igual destrozada con todo esto.
La revelación de que Kuon había estado ocultando su verdadera identidad y manipulando sus recuerdos lo dejó sintiéndose vulnerable y engañado. Se preguntaba si todo lo que había experimentado con Kuon había sido genuino, o si había sido una ilusión creada por las manipulaciones de Kuon.
Por un lado, Yuka aún sentía un profundo amor por Kuon, arraigado en los recuerdos compartidos y los momentos juntos. Pero por otro lado, se sentía herido y enojado por haber sido engañado de esa manera, cuestionando la autenticidad de todo lo que habían construido juntos.
Se encontraba en una encrucijada emocional, debatiéndose entre seguir amando a Kuon a pesar de todo, o permitir que el resentimiento y la desconfianza se apoderaran de él. La confusión lo consumía mientras luchaba por encontrar una respuesta a sus sentimientos encontrados, sin saber si debería seguir adelante con su relación o cortar los lazos con Kuon de una vez por todas. —¿Mataste antes de haber llegado a este mundo? —Pregunto directamente Yuka queriendo saber la magnitud del abuso que provoco la chica.
Ella no quería contestar y solo soltó un suave sollozo. — Indirectamente. —Menciono sabiendo que con esto acabaría su relación.
—¿A que te refieres? —Yuka estaba confundido con su confesión pero la miro directamente.
—¿Recuerdas la chica que te Conte con la cucaracha?, yo manipule a alguien para que le pusiera ese insecto, al mismo tiempo la acose tanto de forma indirecta o directa hasta llevarla al borde del suicidio. —Dijo finalmente, algo que El francotirador sintió unas horribles ganas de vomitar y romper algo al mismo tiempo.
—Ahora entiendo que de verdad eres un maldito monstruo Kuon... entiendo porque esos enmascarados te siguieron, porque eres tan enferma como ellos para lograr conectar tus ondas con las de esos monstruos. —Respondió con resentimiento y veneno en sus palabras que hizo que la chica llorara, por que no podía soportar saber que su amado la insultara de esa forma.
—De verdad cambie. —Se defendió sabiendo que no había justificación para lo que hizo en su pasado, pero no tenia de otra más que mantener su palabra ante su cambio. —Se lo que he hecho es imperdonable y créeme que ya estoy sufriendo las consecuencias. —
—¿Sufriendo?, ¿Realmente estas sufriendo por lo que me has dicho? —Pregunto irónicamente el hombre quien comenzó a reírse como si fuera una broma tonta, era claro que estaba roto, porque de verdad toda esta situación había sido tan irreal que sus propios pensamientos lo hacían colapsar. — Me has estado diciendo todo este tiempo, que tienes el poder de controlar a cualquier enmascarado, de cambiar totalmente las reglas de este mundo. — Este miro a Kuon con rabia por las verdades reveladas. —¡Tuviste el poder todo este tiempo de evitar las peleas que hemos sufrido!,¡Pudiste ayudarnos en un puto principio, es más hasta evitar que te dispararan!, ¡HAZTA DE EVITAR LAS PERDIDAS DE NUESTROS COMPAÑEROS! —Grito eso ultimo con enojo puro, mientras apretaba sus puños con tanta fuerza, al recordar todas las muertes de sus compañeros. El dolor que sufrieron, lo que perdieron y el trauma que dejo en muchos.
Shinzaki retrocedió en su asiento y expreso un gesto de miedo por sus palabras. —¡Lose y lo siento, pero tenía más miedo que se enteraran de mi verdad, que tuve que sellar mis recuerdos y poderes antes de que todo pasara!. — Respondió rápidamente con la voz quebrada. — ¡Por favor créeme!, ¡Nunca lo hice para lastimarlos, solo quería ser feliz! —
—¡No me jodas!, ¡ ¿Realmente piensas que voy a creerte después de lo que me has dicho y hecho?! —Pregunto Yuka ya bastante cabreado para ese punto, este se levantó del sofá exasperado con todo. —La única verdad aquí, es que lo que dices es mentira. Dices que has cambiado, pero hace tan solo unas horas te cargaste un edificio completo y personas ahí sin dudar por un segundo, dices que no eres como antes, pero hace poco te escuché como mentías a Mayuko referente quien fui yo que hizo esto. —Respondió el hombre irritado, este puso su mano en su mascara tratando de controlarse. —Solo te has vuelto a proteger con más mentiras, ¿Es acaso lo único que sabes decir?, ¿Es acaso también tus sentimientos hacia mi unas mentiras? —Yuka necesitaba saberlo a como diera lugar.
Shinzaki al escuchar todo eso se sintió bastante miserable, pero lo último le destrozo el alma tanto que lloro fuerte y se levantó de golpe—¡EN ESO NO MENTÍ, REALMENTE TE AMO YUKA! — Grito expresando su amor y su dolor por ver que su amado no le creía nada.
—¡Ja!... quisiera creerte, de verdad deseo creerte, pero no puedo, ¿Cómo sé que realmente es genuino y no jodiste tus propias emociones para crear algo falso hacia mí?. — Yuka menciono cansado mientras se quitaba su mascara, dejando ver sus ojos cristalinos, hinchados de llorar en silencio, inyectados en sangre por la rabia y el dolor de ser traicionado así, su corazón punzaba y dolía con cada latido, la mujer que amaba, su dulce Kuon resulto ser una mentirosa, una farsa y una sociópata. Peor que los propios enmascarados y de los enemigos que enfrentaron. Yuka es un hombre destrozado en ese momento, su novia , la persona que mas confiaba en el mundo le había traicionado, mentido y arruinado, su corazón dolía que juraba que explotaría, ya ni siquiera la rabia servía para expresar lo que sentía. — Hemos terminado... — Esas palabras hicieron que Kuon se pusiera pálida de golpe y se detuviera. — No seré tu cómplice en esto. —
— No...no.. espe...— Ella trato de hablar pero Makoto no se detuvo.
— Te deseo una mejor vida, se que no podemos alejarnos porque dependemos de los demás para sobrevivir a este mundo, pero si tanto deseas tu felicidad no te detendré, pero que no sea a lado mío. — Menciono mientras levantaba su mascara y la dejaba caer en la mesa, mostrando que nunca más seria su ángel guardián. Mientras su mirada la veía con tanto desprecio, que Kuon no dudo en colapsar entre llantos y mocos.
Kuon rápidamente fue hacia él cuando quiso irse, aferrándose a su camisa.- ¡NO!, ¡NO!, ¡NO HAGAS ESTO YUKA REALMENTE TE AMO, NUNCA MENTI CON ESO! — Grito con desesperación, su llanto era incontrolable no quería soltarlo, el deseaba irse, y ella quería que se quedara. Shinzaki estaba destrozada e inconsolable. Temblaba y rogaba que no se fuera, su corazón estaba destruido también, la chica quería vomitar , deseaba morir al mismo tiempo.
Pero Yuka aunque deseaba una parte de él abrazarla y arrullarla para poder seguir amándola, no podía, ni siquiera creía que alguien pudiera desenamorarse tan rápido, pero él lo estaba experimentando en ese mismo instante. Ya no podía seguir mirándola , ni vivir con ella. Por lo que este tomo sus manos para apartarlo de él. — Deja de hacerlo tan difícil, si quieres quédate con el departamento, pero yo me largo de aquí. — Respondió mientras se retiraba a su cuarto, iba a encerrarse, solo quería llorar y dormir, para ese punto estaba tan cansado emocionalmente que no podía seguir con ella. Estaba destrozado y arruinado, esa mujer lo jodio bastante.
El sonido de la puerta al cerrarse resonó en el silencio de la habitación, marcando el final abrupto de lo que alguna vez fue su relación. Kuon se sintió como si le hubieran arrancado el corazón del pecho. Con un susurro ahogado, las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos, inundando su rostro con una mezcla de dolor y desesperación.
El peso de la soledad y la desesperanza se cernía sobre ella, envolviéndola en un abrazo frío y despiadado. En ese momento, Kuon se sintió perdida, como si hubiera perdido una parte fundamental de sí misma. El dolor era tan intenso que le costaba respirar, como si el mundo se hubiera desmoronado a su alrededor y ella fuera la única superviviente en un paisaje desolado, no siquiera supo cuánto tiempo paso que se quedó en la sala, ahí hecha mierda sentada en el suelo abrazando sus rodillas, mientras su cara estaba hinchada por sus lágrimas, ni siquiera había tomado un baño, estaba hecha una basura total.
Sucia, con los ojos inyectados en sangre e irritados, ropa sucia, cabello sin brillo y lleno de ceniza como de tierra, manos también llenas de mugre. El francotirador no iba a salir y ella ya no iba a hostigarlo, nunca en su vida se había sentido tan herida y horrible, que solo no quería ya estar ahí. Fue entonces que tuvo que tomar una decisión, sabía que ya no deseaba estar más en ese departamento, así que sin importarle su apariencia, ella fue a la salida y salió sin más.
No deseaba que Yuka se sintiera mal por su presencia, solo rogaba que su pelea no la escucharan nadie, fue que se perdió en sus pensamientos que ni siquiera se dio cuenta que llego al departamento de Yuri, la cual inconscientemente había llegado porque era la única que le quedaba en todo, además que tenía la confianza para poder pedirle ayuda. Así que esta toco la puerta con suavidad, rezando que por favor la escucharan. Solo paso unos segundos cuando alguien abrió la puerta, dejando ver a Mayuko, que al verla en su estado se sorprendió de sobre manera.
Tanto que la llamo preocupada. —¡ ¿Kuon?!, ¡ ¿Qué te paso?!, ¡ ¿Por qué estas así?! — Yuri al escuchar el escándalo de Mayuko ella salió, solo para ver a Shinzaki en ese estado deplorable , fue entonces que corrió hacia la chica para saber que ocurría.
Ambas mujeres hicieron que pasara y la llevaron a la sala, donde Kuon ante todo siempre estuvo callada, Yuri y Mayuko estaban angustiadas, Nise estaba en la cocina preparando un te y Yuri solo hacia lo posible para consolar a Kuon. — Kuon, ¿Qué paso? — Pregunto de nuevo Honjo estando angustiada por su amiga la cual tomaba su mano.
— El señor francotirador y yo peleamos, ahora no quiere verme y yo tampoco quiero verlo. — Menciono Kuon siendo lo más simple posible porque estaba tan fatigada emocionalmente, que ya no quería hablar más del tema solo deseaba dormir.
—¿Pero por qué? — Esta vez pregunto Mayuko trayendo las bebidas, la cual Shinzaki tomo el té con sus mano se forma delicada, y como pudo le dio un sorbo, ya que se sentía deshidratada.
La joven peli verde, solo procedió a contestar. — Por el Railgun... sinceramente ya no quiero hablar de eso, se que es mucho pedir... pero ¿Puedo quedarme esta noche?, prometo mañana irme, me cambiare a otro lugar, el señor francotirador y yo decidimos separarnos, por esa razón quiero mudarme a otro departamento de inmediato si es posible. — Menciono Kuon haciendo que Yuri y Nise se sorprendieran de sobre manera.
— Claro por supuesto, no te preocupes, Kuon somos amigas y entre nosotras nos apoyamos jeje, no se que haya pasado entre ustedes dos, pero sea lo que sea espero que todo se solucione pronto. Ya verás, pero ahora ve al baño y date una ducha, necesitas limpiarte, mientras NIse y yo acomodamos la sala para que duermas, te traeré algo de ropa al rato. — Dijo Yuri siendo lo más comprensible posible con su amiga, algo que Nise apoyo de inmediato.
Eso fue lo último que dijeron después Kuon se tomó su tiempo para irse a bañar, la pobre chica estaba un desastre emocional, mientras el agua caía en su cuerpo totalmente desnudo, empapándola totalmente mientras miraba un punto fijo, sintiendo un cansancio emocional que simplemente ya no había nada más que pudiera sentir o hacer, solo dejaba que el agua la limpiara, con la mirada perdida en sus ojos rojos, aunque no sabía si era por su llanto o por el agua, cuando al fin salió de la regadera miro la ropa que Yuri le presto para dormir, ya que su vestimenta estaba siendo lavada.
Ella la tomo con delicadeza para cambiarse y así salió del baño, con el cabello semi seco y una pijama bastante cómoda, camino hacia la sala donde Mayuko y Yuri estaban acomodando para hacer una pijamada, aunque esta se detuvo para poder escucharlas, cuando mencionaron su nombre. — Realmente nunca pensé que esos dos terminarían peleados, mucho menos del francotirador, no entiendo él le haría eso cuando siempre se mantenía cerca de ella, es más hasta envidiaba su amor de esos dos. —Respondió Honjo un poco triste por saber que su amiga estaba en esa situación tan delicada con el enmascarado.
Nise por su parte mientras se sentaba arriba del futón solo suspiro. —No sabremos qué tan grave fue lo que pasaron, para que se fragmentaran, pero espero que todo se pueda resolver. —Dicho esto, Kuon solo cerro sus ojos deseando llorar de nuevo, pero ya no había más llanto solo agotamiento y en sus ojos se notaba, así que solo salió de su escondite para presentarse ante ellas.
—Gracias por permitirme quedarme y prestarme su ropa. —Menciono Kuon tratando de dedicarles una sonrisa, pero a estas alturas no podía, simplemente ya no quería seguir fingiendo mas, pero tampoco volvería a fragmentarse gracias a su poder, cuando ya el francotirador sabia la verdad.
—Nah no te preocupes Kuon, ven vamos acuéstate , tendremos una noche divertida. —Dijo Honjo animando a su amiga que estuviera con ellas, algo que la chica hizo poniéndose entre ellas, como pudieron las tres hablaron por horas de cualquier cosa que no sea del tema del francotirador, Kuon al menos pudo sonreír un poco, pero cuando llego la hora de dormir, para la joven Shinzaki fue una tortura, cada vez que trataba de cerrar sus ojos solo veía los fragmentos de sus recuerdos de esa pelea que hicieron que se convirtieran en pesadillas, tanto que la ansiedad, el miedo de no saber que pasara después, la angustia, comenzaron a asfixiarla, tanto que se despertaba en un llanto silencioso.
La pobre no podía estaba tan acabada, su ansiedad la estaba matando y creando una agonía que su corazón se volvía más tenso e incómodo, ella se sentó y solo miro a su amiga Yuri quien dormía a pata tendida, mientras Nise a lado de Honjo parecía estar muy tranquila, descansando como si nada. Kuon envidaba tanto como ellas descansaban que simplemente en un acto de desesperación, volvió acercarse y esta vez con su mano tomo el hombro de su amiga que despertó un poco desorientada. —¿Ah...?, ¿Kuon pasa algo? —Pregunto Yuri al notar a su amiga despierta, pero podía identificar sus ojos ámbar las cuales estaban cristalinos por el llanto, aparte de tener ojeras mostrando que no podía conciliar el sueño.
—Me siento mal... ¿Puedes abrazarme? —Pregunto dulcemente la joven algo que Yuri, se sorprendió pero después le dedico una sonrisa cálida, la cual estiro su mano y acaricio su cabello con dulzura.
—Por supuesto, no te preocupes Kuon todo estará bien. — Dicho esto Kuon sin dudarlo se acercó acercándose al pecho de su amiga, y con abrazo maternal Yuri la envolvió entre sus brazos para darle el consuelo que su amiga necesitaba, gracias a eso Kuon pudo dormir mientras sus lágrimas paraban gracias a la calidez de Yuri.
Las horas pasaron y el primero en despertar fue Rika que al salir de su cuarto este fue primero al baño, y al salir en un bostezo se sorprendió al ver a las chicas en la sala, apenas el sol estaba saliendo pero lo que más llamo su atención fue a Kuon , acorrucada junto con Yuri que la abrazaba tan protectoramente, como cuando Rika lo hacía con ella siendo más joven en esos entonces, porque su hermanita había tenido pesadillas. Pero al ver como las mejillas de Kuon presentaban hinchazón y un rastro de lágrimas, este dedujo lo que estaba pasando, no quería despertarlas, asi que prefirió irse, pero Kuon al abrir sus ojos capto la presencia del chica, la cual este se estaba yendo. —Rika...—Ella susurro su nombre, algo que el muchacho se volteo algo curioso y nervioso.
Solo encontrándose la imagen de una chica frágil, con sus ojos tristes y unas ojeras notables, mientras estaba sentada sosteniéndose por sus manos que estaban en el fotón. —Buenos días...—Menciono suavemente curioso por su estado y preocupado por el mismo. —¿Paso algo con Yuka?, ¿No es así? —Pregunto realmente angustiado, porque eso significaba que su hermano también estaba destrozado.
Kuon no respondió pero asintió con la cabeza, así que subió su mano a su pecho para poder apretar un poco mostrando lo doloroso que presentaba estar en ese estado. — Ya veo...—Rika entre cerro sus ojos mostrando su compasión y su preocupación, por lo que este volvió hacia la chica para estar frente a frente sin despertar a su hermana.- — Todo estará bien. — Menciono mientras se arrodillaba y acariciaba la mejilla de la chica, la cual miro como ella dejaba caer su mejilla contra la mano del chico, y sus lágrimas volvían a salir.
—Gracias. —Dijo simple la joven Shinzaki y fue así que le muchacho se alejó, para salir del departamento, porque necesitaba saber el estado de su hermano. Mientras tanto Nise ya se había despertado a diferencia de Honjo, escuchando todo el suceso y por alguna se sintió un poco culpable, por presionar para saber la verdad, aunque tal vez era inevitable la pelea de esos dos.
Cuando Yuri al fin despertó se dio cuenta, de algo curioso era que Nise y Kuon estaban hablando en susurros, mostrando como la Shinzaki estaba un poco mejor, además que los rayos del sol ya estaban reflejando con su brillo la habitación. —Buenos días Yuri. —Dijo Nise percatándose de la presencia de su querida amiga, algo que Honjo correspondió al igual que Kuon.
Las tres chicas más animadas pasaron un desayuno calmado, y algo divertido la chica no pudo comer mucho porque simplemente no sentía apetito algo raro en ella, pero aun así logro comer lo que pudo, después de eso simplemente ya más lista y con su atuendo lavado ella por fin explico su situación. — Yuri... Mayuko... ¿Podrían ayudarme a mudarme? —Pregunto tímidamente.
—¿Realmente fue algo tan grave su pelea para que llegues a ese punto? —Pregunto Mayuko directamente, cosa que Yuri le dio un suave golpe al no nivelar su pregunta.
Kuon por un momento se quedó callada, pero respondió ante su duda. — Si... Yuka y yo hablamos de algo muy serio, y él decidió terminar las cosas entre nosotros. Digamos que fue gracias a Railgun que descubrimos cosas del uno del otro... que simplemente...—Kuon dejo de responder notando que le dolía bastante el tema, además de decir una verdad a medias, por el simple hecho de que el miedo de perder a alguien la abrumaba y rompía que no quiso decir nada más. — Es mejor así. —Dijo finalmente haciendo que Yuri suspirara muy decepcionada de como pasaron las cosas, pero era esperarse que Shinzaki no quería decir nada más.
—Está bien... solo que los lugares disponibles, son a un edificio de distancia, estarás lejos de nosotros, además de que sus cuartos son muy pequeños. —Menciono la chica explicando la situación del asentamiento.
—No importa, está bien con esa idea me gusta. Mientras más lejos de él está mejor, por el bien de ambos. —Respondió mostrando su tristeza ante sus palabras, Mayuko por su parte no dijo nada más que mirar y aceptar la decisión de la chica, Yuri se acercó y la abrazo de nuevo mientras volvía a llorar de dolor.
Mientras eso ocurría Rika estaba en el departamento de su hermano, la cual Yuka estaba peor de lo normal, no había dormida en absoluto, sus orejas se veían terrible y ni hablar su rastro de su llanto, aparte que los nudillos de sus manos se veían rojizos y en mal estado, dejando en claro que había golpeado algo duro para hacerse ese daño, mostrando su desesperación por la desesperación, ambos estaban en la habitación del francotirador. Sentados en la misma orilla , mirando la ventana que mostraba el asentamiento completo, una vista preciosa y muy buena digna del francotirador ya que así podría vigilar de forma más sencilla.
Rika por su parte acariciaba la espalda de su mejor amigo, calmándolo mientras le daba suaves palmadas en busca de relajarlo, mostrando su molestia y decepción, porque ya al fin se había enterado de la verdad. Algo que estaba sorprendido porque jamás en su vida espero que una dulce chica como Kuon, resultara ser una sociópata y mentirosa. — Debería exiliarla...—Menciono con rabia.
Pero Yuka la paro. — No lo hagas, le dije a ella que no me metería en sus asuntos, al menos déjame creer que realmente quiere vivir tranquilamente. Después de todo necesitaremos de su fuerza para el asentamiento. —Respondió que a pesar de todo seguía defendiéndola, aunque no sabía porque lo hacía a pesar de saber que le mintió y arruino su relación por eso, pero el amor no podía desaparecer de un día a otro.
Simplemente la seguía amando con locura, porque a pesar de todo estando con ella fue tan hermoso, sano y bonito que estaba confundido por todo, ella jamás hizo otra cosa en su contra. Simplemente velaba por su bien estar, aunque Yuka pensaba que solo era parte de su estrategia manipuladora, aun así el pobre no sabía qué hacer.
Rika no quería quedarse callado ni mucho no hacer algo al respeto. Pero respetaba las decisiones de su hermano. — Esta bien lo hare por ti...— Eso fue todo lo que dijo solo para sorprenderse un poco al ver que, en la ventana, que dejaba ver su hogar mostraba a tres chicas a la distancia que parecían ir a una dirección, las identifico rápidamente como su hermana, Mayuko y Kuon...
Algo que Yuka también noto y solo desvió su mirada porque no quería seguir observándola, estaba tan destrozado porque a pesar de todo su corazón agonizaba y al mismo tiempo sentía tanto amor por ella, que simplemente le dolía. — Me encargare de vigilarla... pero ahora, no te preocupes tomate unos días de descanso. —Pronuncio mientras volvía a sentarse a su lado ofreciéndole ese apoyo emocional.
Mientras los chicos se quedaban juntos en ese cuarto, las chicas habían salido se notaba que Kuon ya estaba un poco mejor, pero la realidad era que por dentro estaba rota, a pesar de que sabía que era su propio karma por sus acciones ella siguió continuando mostrando esa sonrisa suave pero fingida, para todos aquellos que la saludaban, mientras caminaba a lado de Yuri que la guiaba al otro edificio donde al llegar, Honjo se acercó con uno de los encargados. Para explicarle de forma sencilla que la joven necesitaba mudarse, algo que el hombre se sorprendió ya que era el líder de ese sector por lo que acepto de inmediato y fue hacia Kuon. — ¿Así que buscas un nuevo lugar donde quedarte? —Pregunto directamente el hombre.
Kuon nerviosamente asintió. Cosa que el hombre solo le sonrió y miro sus notas en sus manos. — Desgraciadamente las únicas habitaciones que tenemos disponibles son pequeñas, pero ven te las mostrare. — Este llevo a las tres chicas a una de las habitaciones de ese edificio, aunque claro estaba abajo por lo que tuvieron que utilizar el elevador, para bajar 2 pisos y ya que los demás estaban muy ocupados por los demás inquilinos, solo para abrir la puerta dejando ver una habitación bastante empolvada pero muy hermosa.
La habitación pequeña que pueda vivir una persona sin problemas, tenía otra pequeña habitación donde estaba el baño, además que enfrente de la habitación poseía una gran ventana donde se podía ver el exterior, de forma hermosa, algo que Kuon se quede sorprendida. — Solo tienes que quitar el polvo, pero si quieres puedo buscar otro lugar—. Pronuncio el hombre.
—Es perfecto, lo quiero. —Menciono mientras sonreía sintiendo suavemente esta alegría de tener ese espacio solo para ella. Así sería más sencillo poder tranquilizar sus emociones turbulentas, ella dio un paso adelante y fue entonces que soltó un suspiro. — Me gusta este cuarto. —Respondió después de esa noche horrible para esa pequeña mentirosa, sonrió mostrando un poco de felicidad por algo así.
El señor solo asintió, para luego acercarse a ella y hablar un poco mientras Mayuko y Yuri miraban la escena un poco aliviadas de su amiga estuviera más tranquila, fue así que pasaron las horas tanto las chicas y uno que otro enmascarado ayudaban a traer en unas cajas las cosas de Kuon , a su nuevo cuarto. Por supuesto Kuon tuvo que pedir ayuda para que recogieran sus cosas, ya que ella no tenía el valor de ir por ellas, así que sus amigas hicieron ese favor y cuando.
Aunque claro tenía tanta curiosidad de que pasaría con Yuka, fueron tantos pensamientos que solo sintió un toque en su hombro, cosa que despertó de su trance cuando miro de reojo a Yuri que había traído lo último de sus cosas, ya que Mayuko esta vez no le había acompañado. — Aquí esta lo último. — Pronuncio mientras sonreía y Kuon correspondía dulcemente, ella tomo la última caja de las manos de su amiga. —
—Yuri... am... no quería preguntar... pero...—Ella deseaba saber cómo estaba el enmascarado, cosa que Yuri noto de inmediato y solo suspiro desviando la mirada.
—Bueno... cuando fuimos por tus cosas la primera vez, nos abrió Rika... además de que el francotirador tenía su mascara y su típica ropa, además de estar en la sala fumando, pero no pude saber cómo estaba , todo este tiempo se mantuvo callado mientras fumaba...—Menciono con tanta sinceridad como podía, algo que Shinzaki agradeció y solo bajo su mirada. Realmente angustiada al saber que no había mucho que hacer.
Fue entonces que ella camino hacia la puerta tomando una decisión, ya que no podía continuar de esta forma además, si realmente se arremetía de sus actos y decisiones, necesitaba un maldito consejo para saber cómo salir del mismo abismo que ella se provocó, así que tomo la puerta de su cuarto y la cerro con seguro, haciendo que Yuri la mirara confundida. — ¿Kuon?, ¿pasa algo? — Pregunto la chica notando que estaban las dos solas, además de que su amiga solo se recargo en la puerta y alzo su rostro dejando ver sus ojos ámbar, la cual era la segunda vez al día que los miraba tan detenidamente pero esta vez había una diferencia, era que nunca pensó volver a ver esos ojos tan característicos de la otra diosa, solo una vez pudo observarlos y nunca más volvió hacerlo ya que esa oscuridad en su mirada había desaparecido.
Pero aunque esta vez fue bastante diferente, porque aunque hubiera esa oscuridad parecía ver mucha culpa, dolor y decepción de si mismo, fue entonces que Yuri supo que ella deseaba decir la verdad, asi que solo se acerco a la ventana se recargo mientras hacia una mueca nerviosa de lo que se diría. —¿Fuiste tu la que en realidad activo a Railgun, verdad? — Pregunto directamente.
Kuon simplemente asintió de inmediato por lo que no dudo ni un minuto. — Asi es... ,Yuka mintió... probablemente para salvar mi reputación, pero la realidad es que no solo fue eso lo que paso. — Menciono mientras iba hacia Yuri y se ponía a su lado a contra Luz, ambas se quedaron calladas y un poco juntas, mirando un punto fijo.
—¿Es así?, ¿Entonces cuál es la verdad? — Pregunto de nuevo Yuri cruzando sus brazos, mostrando tranquilidad.
—¿Recuerdas la vez que notaste mi verdadera personalidad? — Kuon hizo una pregunta a lo que Honjo asintió. — Bien... entonces te contare todo. — Fue asi que Shinzaki le menciono todo lo que paso, su pasado, el accidente de los enmascarados, como Yuka se enteró, su pelea y como terminaron, probablemente pasaron 2 horas cuando ella termino de relatar absolutamente todo de ella. Algo que para Yuri no se sorprendió, ya que después de todo desde que vio a Kuon desde esa vez supo que tendría un pasado, realmente turbio pero nunca espero que tanto. Ambas estaban en silencio y fue Shinzaki la que quebró eso. —¿Me odias? — Pregunto directamente.
— No... esa vez que te dije que todos podían tener segundas oportunidades, tu realmente demostraste merecer esa oportunidad, se veía que te arrepentías y aun lo haces de tus propios actos, por esa razón renunciaste ser la diosa de este mundo al sellar tus poderes y darme ventaja a mí de tomar ese puesto. — Dijo Yuri con suavidad, de verdad aunque lo intentara no podía odiar a Kuon , pasaron tan bellos momentos en su amistad, tantas cosas que simplemente no podía, además de que el pasado de Kuon si era turbio pero no podía juzgarla por lo que es ahora. O eso pensaba Yuri porque si fueran otros, evidentemente la odiarían y terminarían por exiliarla o peor matarla.
— Gracias... pero ahora... Yuka me odia, no se qué hacer a partir de este punto. — Respondió ella mientras sentía como volvía a derramar lágrimas, que para ese punto se estaba deshidratando, fue entonces que Yuri solo le dio una suave palmada a su cabeza.
— Si de verdad te arrepientes, entonces empieza a salvar más vidas de las que arrebataste...— Dijo Honjo. — Empieza en ayudar más al asentamiento, utiliza esos poderes que tienes y utilízalo para curar a los demás, ¿después de todo tú te curaste sola no es así? — Yuri para ese punto miro a su amiga, no podía juzgarla después de todo ella también ya había manchado sus manos de sangre, aunque claro fue más por defensa propia. Después solo otra diosa podría entender a otra.
Kuon la miro incrédula, algo que en sus ojos ámbar que ahora brillaban con ese fuego demoledor, comenzaba a extinguirse poco a poco ya que la agonía se estaba despejando, así que solo asintió. — Supongo que tienes razón, ya no quiero volver a lo que era antes, necesito descubrir ahora mismo lo que soy... no quiero ser más Kuon Shinzaki que mis padres criaron, ni tampoco la señorita Kuon que cree para que todos me aceptaran, tengo que volver a construirme. — Dijo determinada la joven realmente destrozada, pero teniendo esperanza de recuperarse aunque no la merezca a sus pensamientos.
Y para eso ella tenía que cambiar desde cero, pero , ¿por dónde empezar?, ella pensó seriamente. — Porque no empiezas por saber, lo que realmente te gusta hacer y disfruta. — -Respondió la mayor como si leyera su mente, pero la realidad intuía lo que pensaba su amiga.
— Es una buena idea... sabes, mis padres me educaron para gustarme ciertas cosas u odiar otras, y como la señorita Kuon solo hice que creyera que me gustaran alguna de esas cosas para construir esa personalidad que todos agradaran, además... Yuka tenía razón. — Mención con horrible tristeza, mientras juntaba sus manos.- Dijo que altere mis emociones para hacerme creer que estaba enamorada de él, pero la verdad es que no se quién soy... , ni lo que me gusta, si realmente lo amo, si odio algo, toda mi vida mentí hasta ahora, que ya no se que es real o mentira en mi. — Ella alzo su mano para mirar la palma de su mano. — Estas mentiras me han arruinado aun punto, donde no se si saldré de esto. — Dijo finalmente, mientras cerraba sus ojos, para después sentir una suave caricia en su mano, siendo que Yuri la había tomado con sus manos con delicadeza.
— Entonces inténtalo, intenta hacer las cosas diferentes, explora que te gusta, y que deseas, que odias, o si realmente lo amas, debes reconstruirte a ti misma. Además no mentí cuando te dije que te considero una amiga, solo espero que sea reciproco y no incondicional. — Menciono esperanzada de esta nueva etapa de Kuon, algo que la joven sonrió mientras correspondía al tomar sus manos.
— Lo es, eres la primera amiga en toda mi vida que he tenido, una sin mentiras, una sincera la cual deseo que siempre estes bien y querré apoyarte, cuando siempre lo has hecho por mí. — Dijo finalmente mientras sonreía ante Yuri y sus lágrimas esta vez llenas de esperanza se derramaban, para después ambas se abrazaron con fuerza, Kuon lloro en su pecho y Yuri la consoló, porque la entendía, nunca la juzgaría. Pero su momento se interrumpió con unos suaves toques en la puerta, claro que Yuri abrió dejando a pasar a Mayuko que tenía una cara de pocos amigos, por lo que esta fue hacia Kuon para reclamarle porque estaba encerrada con Yuri.
Algo típico de Mayuko que hizo que Honjo y Shinzaki se rieran ante sus delirantes ideas, fue así que las tres ayudaron a decorar un poco el cuarto de Kuon.
Aunque para Kuon era una oportunidad pare reconstruirse y saber lo que realmente sentía, para Yuka fue realmente diferente. No había ni siquiera una esperanza, felicidad o emoción ante lo sucedido, el hombre siempre supo quién era, que deseaba, quería y amaba, y fue Kuon la que eligió su corazón para amar, esa chica dulce que no dudo en volverse su ángel guardián a pesar que jamás conectaron sus ondas, era tan puro y hermoso.
Pero la cruda verdad es que todo fue incondicional por parte de Yuka, porque desde esos enmascarados todo lo que pensó que estaba bien, fue lo contrario, obviamente estaba destrozado con toda esa maldita verdad, al punto que deseaba jamás descubrirlo, fue tan repentino y de golpe que el pobre hombre no sabía cómo podía proceder después de esa traición.
Solo estuvo días encerrado, solo su hermano venia y lo cuidaba, porque Yuka estaba hecho un desastre emocional, al mismo tiempo que se había descuidado por completo, dejo crecer su barba, no se había bañado, ni siquiera había comido. La comida sabia horrible, o simplemente no tenía sabor, todo estaba mal, y ni siquiera los cigarros servían para calmar su dolor interno.
Cada día sentía que iba a explotar, ni dormir podía ayudarlo porque siempre volvía a recordar la cara de Kuon y su sonrisa, que tanto amo y ahora odiaba, ya no sabía cuánto tiempo paso, solo estaba ahí acostado en su cama, con un pantalón ligero, cajetillas de cigarro botadas, se estaba terminando su reserva especial en tan poco tiempo, se notaba su cabello revuelto y crecido, tan descuidado que simplemente la suciedad se veía, se notaba que había bajado de peso y ni hablar de sus ojeras, todo de él estaba muy mal.
Antes de que pudiera agarrar otro cigarrillo de su caja casi vacía, solo escucho como alguien abría la puerta de su cuarto oscuro, ya que hasta las cortinas las tenía cerrada no deseaba ver la luz del día, solo miro de reojo a su hermano que traía un plato de comida. Este miro el desastre que estaba su cuarto y suspiro caminando hacia la cama y dándole un manotazo a su hermano, para que dejara el cigarro. — Vas a matarte si sigues fumando así... — Menciono mientras dejaba el plato de comida en el taburete, para después abrir las persianas haciendo que Yuka se quejara en un siseo mientras cubría su rostro, mostrando lo jodido que se encontraba.
— Yuu, de verdad estoy muy preocupado por ti, se que aun te duele , pero no puedes matarte de esta forma. — Menciono Rika realmente angustiado al ver a su hermano en ese estado, por lo que Yuka solo se volteo dándole la espalda para no mirar más la luz.
— Estaré bien...— Dijo en un hilo de voz agotado, a lo que Rika solo se sentó en la cama mirando la ventana al asentamiento quienes seguían en sus actividades nuevas.
Este hizo un gesto de molestia al ver algo en particular. — Solo han pasado 5 días, y sé que no se han hablado desde entonces, pero me molesta saber... mientras tú te estas autodestruyendo, ella sale por ahí como si nada. — Respondió irritado. — Simplemente verla desde lejos con esa sonrisa hipócrita me irrita. — Rika es muy leal a su hermano, saber la verdad de Kuon y lo que hizo termino por odiarla, pero, aunque deseara hacer algo no lo hace por su mejor amigo, además de que su hermana era muy amiga de la chica, definitivamente no podía hacer nada, más en esos días que parecía que la chica era muy útil.
—¿Qué fue lo que dijiste? — Pregunto Yuka mirando de reojo a su hermano para confirmar sus palabras.
— Dije que ella ha estado saliendo como si nada. — Pronuncio señalando la ventana un punto fijo, algo que Yuka con curiosidad como pudo se levantó tambaleante para acercarse y ver a la distancia, que efectivamente Rika decía la verdad. Porque pudo ver esa cabellera que tanto conocía moverse por el viento, mientras Kuon estaba alrededor de unas personas llevando unas macetas en sus manos, era como si ella no hubiera cambiado, aun tenia esa sonrisa que conocía, seguía en su peso normal , no había rastros de tristeza en ella.
Mientras él se moría por dentro, ella simplemente era como si no le importara lo que haya pasado. — ¿Hace cuanto que esta así? — Pregunto seriamente.
— Hace 3 días, cuando salió de su nuevo cuarto, pidió ayudar más al asentamiento, le dieron parte de la labor de cuidar y enseñar a los niños, también se está encargando del huerto, muy pocas veces ayuda las enfermeras y cuidar a los enfermos o heridos, hasta donde se ayuda con lo que puede, y después cuando termina el trabajo nunca se queda a más, solo se encierra. Hay a veces que come con los demás y otras parece llevarse la comida, Yuri no me dice casi nada, lo único que sé por parte de ella es que se está esforzando mucho por ayudar a todos, la he estado vigilando y no he notado nada sospecho, solo que parece superarte. — Mención RIka sin más, estaba enojado no tenía ninguna excusa para echarla.
Yuka al escuchar eso simplemente se sorprendió, pero para mal porque comenzaba a revivir ese resentimiento hacia ella, ya que mientras él se pudría dentro de su habitación, muriendo poco a poco por sus mentiras, ella estaba como si nada y al verla sonriente con ese brillo alrededor de ella, avivaba su ira, por lo que este no pudo más y se levantó de la cama tambaleante se levantó y comenzó a caminar fuera del cuarto, Rika lo siguió preocupado. —¡ ¿Hermano a dónde vas?! — Pregunto asustado, algo que Yuka solo fue al baño y antes de cerrar la puerta respondió.
— Bueno ya fue suficiente de autocompadecerme por lo que me ha pasado, ya es hora de volver a mi vida. — Dijo para después encerrarse, unos minutos después se escuchó el sonido de la regadera, haciendo que RIka simplemente por fin sonriera bastante aliviado de que su hermano al fin saliera de ese hoyo de miseria, así que de inmediato puso sus manos para trabajar, mientras Yuka se aseaba algo que necesitaba, Honjo se encargaba de limpiar la habitación del francotirador, tomando el recogedor, escoba y hasta el trapeador, comenzando a tirar la basura y los platos sucios.
Hasta tuvo que abrir la ventana para esto, así pasaron las horas, Sniper estaba tardando y era de esperarse, porque había pasado días sin bañarse además de que tenía que afeitarse de todo el vello que se había acumulado en su cuerpo, por el descuido a su imagen. Yuka solo estaba semi desnudo con una toalla a su alrededor mientras con una tijera cortaba su cabello crecido, retomando su corte cotidiano, aunque claro se ayudaba de un espejo. Cuando al fin se cepillo se observó directamente a su cara.
Sus ojos grises mostraban estar opacos por la tristeza que tenía unas horribles ojeras, pero eso lo podía ocultar con la máscara, y su bello rostro que antes mostraba su juventud, mostraba deterioro con las mejillas hundidas, aún estaba su cicatriz en su mejilla izquierda, además se miró en su cuerpo y se odio a si mismo al verse porque había perdido masa corporal no comer, pero al menos podía ocultarlo con su ropa. Así que cuando salió para vestirse con su traje se llevó la sorpresa que su cuarto estaba totalmente limpio y en su cama estaba su típico traje y una nota de Rika, la cual este tomo suavemente y sonrió por su contenido.
"Hermano recogí tu cuarto y está la comida lista, recupérate pronto te estaré esperando afuera en la sala de reuniones que empezara dentro de unos minutos. Vales demasiado como para arruinarte por una mujer.
Tu hermano Rika."
Gracias a sus palabras Makoto tuvo la determinación de al fin vestirse, portando su típico traje negro pero esta vez con su camisa oscura, y su bufanda blanca destacando su atuendo haciendo que este se viera más apuesto de lo que ya era, pero aun así su cara seguía demacrada no quedaba nada de la belleza que lo caracterizaba como cuando Yuri se lo decía de vez en cuando como un cumplido, este miro su mascara con duda, ya no deseaba utilizarla porque solo significaba ser un ángel guardián, pero había renunciado a eso en el momento de terminar con Kuon, pero tuvo que ponérselo para ocultar ese rastro de depresivo, al mismo tiempo se colocaba su sombrero.
Fue entonces que fue a su armario que al abrirlo encontró su querido francotirador la cual abandono después de lo ocurrido, él tenía la meta de quitárselo cuando estuviera mejor. Este salió de su habitación y miro alrededor dejando ver que Rika había limpiado bien, estaba a punto de irse pero por alguna razón este miro detrás de él solo para observar la habitación cerrada que pertenecía a Shinzaki, desde que ella se fue, él nunca volvió a entrar, porque solo lo haría recordar ese dolor en su pecho que aún se sentía, así que solo lo ignoro y salio del departamento, para caminar a la sala de reuniones donde estaban los demás lideres.
Yuri, Rika, Rikuya, Nise, un hombre encargado de los huertos del asentamiento y una mujer que tenía la bata de doctora, ambos eran lideres de su respectivo sector, cuando escucharon que la puerta se abriera todos a excepción del mayor de los Honjo, se sorprendieron al ver al francotirador que al fin salía de su departamento.
La menor de los Honjo no dudo en sonreír de alegría, al ver que el hombre estuviera bien, mientras Nise solo sonrió con aprobación, pero Rikuya hizo una mueca un tanto incomoda así que solo desvió su mirada, al mismo tiempo que el hombre encargado de los huertos, hizo un gesto molesto y la mujer solo parecía indiferente ante la situación, además de que Rika miraba con orgullo a su hermano. —Sabía que vendrías hermano, ven te estaba esperando. Apenas íbamos a discutir los nuevos planes que tenemos para mejorar el asentamiento. —Dijo invitando a que pasara, ya que al final Yuka también es un líder, así que este entro y cerró la puerta detrás de él.
Las horas pasaron, pusieron a Yuka al orden del día, además de que pudieron discutir algunos problemas que estaban sucediendo en esos momentos con los demás, todo parecía normal y gracias a la mente de Yuka los demás pudieron resolver algunos de ellos, dando al fin un suspiro a esa situación ya que por parte de los Honjo estaban agradecidos de tener a Makoto de regreso para ayudar con los problemas. Aunque Rikuya pensara diferente y cuando termino la reunión, el cercano a dios se retiró primero, después siguieron los dos lideres de sector, dejando a los hermanos Honjo, Nise y al francotirador solos.
—¡Me alegra que volvieras finalmente Francotirador! —Fue Yuri la que se adelantó en felicitarlo al mismo tiempo que le daba una leve palmada a su hombro, mostrando su apoyo.
—Aunque no me guste admitirlo, también me alegra que volvieras, gracias a ti pudimos resolver estos problemas. —Esta vez fue el turno de Mayuko quien se acercó con los brazos cruzados, algo que Rika al escucharlo se ofendió un poco y contesto.
—¿Espera me estás diciendo que no serví de mucho? —Pregunto ofendido el mayor de los Honjo, algo que Nise con una sonrisa engreída volvió a responder.
—No dije eso, admito que eres muy bueno RIka. Pero simplemente las estrategias y la mente del Francotirador la necesitábamos demasiado.-Dijo como si nada alzando sus manos, haciendo que Honjo hiciera una mueca de desagrado.
—Que mala eres Mayuko chan...—Este respiro sin poder decir más, pero al ver a su hermano ahí mirando todo en silencio, solo sonrio y contesto. — Pero tienes razón, Yuu chan que bueno que viniste a buena hora. —Después de decir ambos todos rieron suavemente, por el bonito reencuentro, Yuka se sorprendió que a pesar de todo este esté volviendo a reír aunque solo un poco, por lo que se sintió aliviado de salir al fin de su cuarto.
Este solo tomaría su sombrero y lo bajaría un poco como señal de agradecimiento. —Agradezco sus palabras, prometo que me esforzare para reponer el tiempo perdido. —Dicho esto los tres no duraron en animarlo aún más, hablando de lo que sea solo por esos minutos, antes de que Yuri y Nise se retiraran , dejando a los dos hermanos solos.
Rika estaba sonriendo, pero Yuka por su parte a pesar de mantenerse tranquilo había notado ciertas actitudes diferentes por lo que este miro de reojo a su hermano y pregunto. — ¿Hay algo más que no me hayas dicho?, porque parece que Rikuya tenía mucho que decir sobre mi aparición. —Dijo esperando una respuesta.
Algo que Honjo solo hizo una mueca decepcionada por lo que diría. — Rikuya... ese idiota abrió la boca, les conto a todos a sus amigos y enmascarados sobre lo que paso con Railgun, y bueno como sabes cómo se esparcen los malditos chismes, ahora todos saber la mentira... que obligaste a Kuon a asesinar.-Dijo molesto por como su compañero hizo las cosas, pero era de esperarse cuando se notaba que tenía más apego a Shinzaki. — Ganas no me faltaron de decirles la verdad a esos idiotas.-
Pero Yuka lo interrumpió de inmediato. — Pero no lo harás... ya te lo dije, no pienso involucrarme más con ella, ni siquiera pienso decir nada mas de ella. —Respondió el enmascarado, inconscientemente protegiéndola pero lo excusaba con solo deseaba ya poder superarla y seguir adelante, aunque estaba en el proceso.
—No sé cómo es que no puedes simplemente decirles la verdad, pero bueno seguiré confiando en ti hermano. —Menciono rindiéndose, así que solo camino hacia la salida junto con su hermano.- Solo te advierto la gente te mirara con repudio, como sabrás Kuon es algo popular y bueno a pesar que todos saben que los has mantenido protegidos, de alguna forma te miran como un tonto por lastimar a Shinzaki. —Trato de decir Rika lo mas que podía, pero la verdad era que la gente normal recelaban a Yuka después de escuchar lo que obligo hacer a Kuon, la que todos sabían su protegida.
Mientras que los enmascarados lo mirarían con odio porque ellos no captaban la idea, de que Yuka le hiciera algo a su "ama". Por supuesto los enmascarados vinculados eran muy fieles a sus cercanos a dios, por eso era lógico que los mismos enmascarados se molestaran con Yuka ya que para ellos hacerlo eso a su "cercana a dios", se le considera una paria.
Todo era tan problemático, tanto que cuando salieron del edificio para ir al otro la cual poseía mayor volumen, donde la mayoría de los asentamiento estaban reunidos, ya que poseían ahí los invernaderos y era el principal ya que todos los edificios de los residentes estaban conectados a ese. Cuando salieron como Rika temía, la gente y los enmascarados comenzaron a mirar al francotirador, unos con desconfianza, otros con sorpresa, pocos con enojo por parte de los enmascarados, hasta podía escucharse los susurros de la misma gente.
Yuka al tener un oído bastante fino no se le escapo las palabras de esa gente, pudo escuchar todo y por alguna razón no le importaba lo que digieran de él. — ¿Cómo se atreve a mostrar su cara después de lo que le hizo a la señorita Kuon? —Susurraron dos mujeres entre ellas, mientras miraban con desconfianza a Yuka.
—No puedo creer, que él sea uno de tus lideres. —Dijo una persona.
—Calla, te puede escuchar, no querrás que te asesine a ti también. —Menciono otra.
—Mmm no debería tener esa mascara, no merece ni siquiera el título de ángel guardián. — Esta vez fue un enmascarado que pasaba por ahí.
Muchos chismes y rumores se escuchaban al pasar algo que Rika se molestó y paro en seco, para poder gritar con enojo ya que no soportaría escuchar más insultos a su hermano. —¡¿Qué demonios están viendo?!, ¡Vuelven a su trabajo! —Dicho esto la gente a su al redor asustados se fueron de inmediato, haciendo que Yuka soltara una risa nasal con suavidad.
—No tenías que hacer eso, realmente no me molesta en absoluto lo que digan de mí. —Dijo sinceramente el hombre, algo que su hermano se indignó.
—Pues debería, no es justo que seas tú el que tenga que pagar los platos rotos de esa mujer. —Menciono realmente molesto Rika pero Yuka levanto su mano para que se detuviera.
—Ya basta Rika, te lo dije ya no me importa a este punto, solo continuar con mi vida. —Eso fue todo lo que dijo antes de que se fuera, fue entonces de que pudiera dar otro paso escucho un grito llamándolo detrás de él que cuando se dio la vuelta, sintió un tirón y un abrazo fuerte en sus piernas.
Siedno el pequeño Uzuki, que al verlo no dudo correr hacia él y llorar de emoción al ver a su maestro, y no solo él si no varios niños que se aferraron al cuerpo de Sniper. —¡Maestro!, ¡Al fin volvió, pensé que saldría de su habitación! —Dijo el niño bastante triste mientras lloraba a moco tendido, mientras se aferraba a su cuerpo, pero se sorprendió de algo y era que sintió por alguna razón más delgado a su maestro, ni siquiera pudo preguntar porque Yuka lo acaricio de su cabeza para calmarlo.
—Tranquilo, estoy bien solo necesitaba un descanso después de mi última misión. —Dijo para después acariciar a los demás niños que estaban igual.
—Señor francotirador, los extrañamos mucho. —Dijo una de las niñas mientras lloraba y otros la acompañaban, haciendo que el francotirador se pusiera bastante nervioso porque en ese punto no sabía que hacer, porque estos comenzaban a jalarlo y abrazarlo con fuerza, cosa que RIka se rio de la tierna escena.
—Ah... RIka ayúdame—Dijo Yuka un poco ansioso por la situación porque se le dificultaba calmar a todos los niños que lo miraban con admiración a pesar de todo, pero su hermano se rio.
—Jaja para nada parece que lo tienes bajo orden Yuu chan. —Menciono divertido riéndose, algo que Yuka le dedico una mueca de desagrado a su hermano. Pero todo fue interrumpido cuando escucho un llamado que hizo que su corazón diera un hueco pero de forma negativa, porque reconocía esa voz tan bien que simplemente dolió cada latido. El mero sonido de su voz hacía que su pecho se apretara con una mezcla de anhelo y desdén, una lucha interna que lo consumía desde adentro. Porque ahí estaba luciendo tan hermoso como la vez que la vio por última vez y aunque la odiaba no pudo evitar suspirar de nuevo por su belleza , terminando por regañarse a sí mismo.
Porque enfrente de ellos a unos metros, Kuon Shinzaki estaba corriendo a su dirección y se detuvo a una distancia de 3 metros mientras ella jadeaba y re recargaba en sus rodillas. — Ah ah.. ¡Niños!, ¡No salgan corriendo así!. — Grito molesta la joven chica con los ojos cerrados jadeando mientras se recomponía, solo para levantar su mirada y esta abrió la boca con sorpresa, porque lo volvió a ver después de tanto tiempo desde se inició el contacto cero, y en ese instante, el mundo pareció detenerse. Los ojos de Kuon se cristalizaron con emociones insondables, y cuando finalmente habló, su voz temblorosa reveló la lucha interna que estaba librando. — Se-señor francotirador...— balbuceó Kuon, apenas capaz de articular las palabras antes de que la emoción lo sofocara. Desvió la mirada rápidamente, como si temiera que Yuka pudiera ver el tumulto de emociones que la invadían. Sus labios se apretaron con fuerza, conteniendo palabras no dichas y lágrimas no derramadas, ni siquira pudo decirlo bien sin trabarse y sentir que se quebraba.
Yuka se sentía como si su mundo estuviera patas arriba, un torbellino de emociones turbulentas que amenazaban con arrastrarlo. A pesar del dolor que le causaba la traición y las mentiras de Kuon, su corazón seguía latiendo con fuerza cada vez que la veía, como si estuviera atrapado en un dilema imposible de resolver, una parte de él quería alejarse, romper cualquier contacto con ella para protegerse del dolor que sabía que seguiría. Pero otra parte, la parte que aún la amaba a pesar de todo, anhelaba desesperadamente su presencia, ansiando cualquier atisbo de conexión que pudiera encontrar, pero al mismo tiempo la quería lejos de él y no tener nada más con ella.
El corazón de Yuka dio un vuelco doloroso cuando sus miradas se encontraron después de días de distancia y silencio. Había un peso en el aire entre ellos, una tensión cargada de emociones no dichas y verdades incómodas.
Cuando Kuon intentó hablar, sus palabras se trabaron en su garganta, como si incluso ella estuviera luchando por encontrar las palabras adecuadas. Su mirada se nubló con lágrimas contenidas, reflejando el dolor y la confusión que se agitaban dentro de ella. Desvió la mirada, mordiendo su labio inferior con fuerza en un intento de contener las emociones que amenazaban con desbordarse.
Para Yuka, el encuentro fue como estar al borde de un precipicio, con la tentación de saltar al abismo del amor y el dolor. Sabía que cualquier paso en falso podría llevarlo a un dolor aún más profundo, pero no podía evitar sentirse atraído hacia ella, hacia esa compleja y hermosa mujer que seguía siendo un enigma para él, por esa misma razón se sentía confundido respecto para ella.
Solo deseaba en esos momentos que ese tiempo se volviera perecedero.
Notas:
Lamento la tardanzas mis queridos lectores, la verdad tuve una situación horrible con wattpad, borro uno de mis escritos la cual trabaje por 2 años, mas de 5 mil visitas y dios mio fue un dolor terrible perderlo porque Wattpad menciono que restringi sus politicas y pautas, cabe aclarar que tuve que alejarme de la plataforma por las emociones negativas que me dejo esa experiencia. Pero ya volvi y poco a poco me estoy recuperando de ese golpe tan bajo.
Por cierto mis queridos lectores el siguiente capitulo sera tardado probablemente no lo tenga la siguiente semana, ya que el siguiente capitulo tendré que corregir muchísimas cosas como alguna que otra narrativa por lo que me llevara tiempo, eso seria todo.
Los amo mis queridos lectores y espero que hayan disfrutado del capitulo, hasta la proxima <3.
Att: Kiara.S