ID de la obra: 228

Solo un juego

Gen
G
Finalizada
6
Tamaño:
246 páginas, 111.248 palabras, 67 capítulos
Descripción:
Publicando en otros sitios web:
Consultar con el autor / traductor
Compartir:
6 Me gusta 3 Comentarios 0 Para la colección Descargar

Enfrentamiento

Ajustes de texto

Capítulo 20 Enfrentamiento

                    Varios días pasaron desde su encuentro en la enfermería y parecía que todo había vuelto a su habitual normalidad, no tuvo más contacto con la castaña y su tiempo lo dedico al 100% a reparar el armario evanescente, pero ella siempre volvía a sus pensamientos sobre todo después de un pequeño encuentro con su gato.       —¡Hey tú! —grito Draco cuando vio a Crookshanks.       El gato se detuvo mirándolo, pero en cuanto Draco se acercó este se erizo.       —Tranquilo, solo… yo… entiendo que eres bastante inteligente… ella… está bien… —el gato no respondió —no la he visto y… debo parecer un idiota hablando contigo…       Miau.       El rubio miro al gato indignado, pero continuó hablando—. Hice lo correcto… no puede estar cerca de mi yo, soy mala persona.       Miau.       —¿Debo de alejarme de ella verdad?       Miau.       Draco iba a volver a hablar cuando Blaise apareció.       —Tenemos que hablar, algo paso y… ¿Por qué estas con el gato de Granger? ¿Lo vas a torturar o algo así?       Crookshanks se erizo sacado sus garras, así que Draco se interpuso entre el gato y Blaise.       —No seas idiota… ¡el gato no se toca!       —¿Seguro?       —Habla ya… que paso…       —Es Theo el hizo algo que no creo que te guste, pero tenemos que evitar que le hagan algo en la sala común.       —Su padre es un mortífago dudo que alguien se atreva a tocarlo—, pero la expresión de su amigo no parecía denotar que eso fuera posible —¿qué hizo?       —Lo vieron en la biblioteca con Granger       Blaise empezó con los detalles, pero Draco ya no lo escuchaba solo pensaba en las tantas maneras en las que podía acabar con Theo.       —Draco me estás escuchando… ¡Granger! Jamás creí que se atreviera… pensé que estaba obsesionado con tu chica y ahora… ¿crees que están juntos?       —Blaise… cállate antes de que te mate…       Draco tomo al gato entre sus brazos empezando a avanzar seguido de su amigo.       —¿Los vas a detener verdad?       —Por supuesto—, Blaise respiro aliviado, pero Draco volvió a hablar—: porque seré yo quien lo mate…       —Estas exagerando… sé que es una sangre sucia, pero es nuestro amigo… dijimos que nos apoyaríamos sin importar que…       Crookshanks saco sus garras para clavar las en los brazos de Blaise quien se alejó adolorido y molesto—. ¡Ah! ¡Porque demonios sigues con esa cosa! No para de atacarme.       —Pues no insultes a su dueña… y no exagero, ve a las cocinas y consigue comida para Crookshanks —ordeno Draco llegando a la sala común.       —¡Por que!       —Porque lo digo yo Blaise… ve yo me encargo de Theo…              Horas más tarde Draco se encontraba en uno de los sillones de la sala común cuando Theo apareció, lo miró sentarse frente a él como si las miradas de odio no lo afectaran en lo más mínimo.       —Dejaras que se siente aquí! —grito un Slytherin indignando a unos metros de distancia.       —Así que ya te vinieron con el chisme —hablo Theo sin apartar la mirada de su amigo       —Crees que es gracioso —escupió Draco mirando fijamente a Theo.       —¡Oh si!       —Bien —dijo el rubio mientras se levantaba para irse —¡Blaise!       El moreno arrojó el uniforme del chico bruscamente contra su rostro y la sonrisa de Theo se borró.       —Agradece que te dejara al menos eso —finalizo Draco antes de irse a su cuarto al mismo tiempo que Theo tomaba su uniforme y sala de la sala común.       Cuando llegó casi la media noche Theo regresó a su cuarto ante la mirada Blaise, pero Draco estaba interesado en su libro.       —Se puede saber qué demonios le hiciste a mis cosas Malfoy! —grito el muchacho al ver todos sus libros destrozados y regados en su cama.       Draco apartó la mirada de su libro para mirar despreocupadamente a su amigo—. Fue Crookshanks —dijo para luego regresar a su lectura.       —¿Qué? —intentó preguntar, pero el gato de Hermione subió a su cama con su corbata hecho una bola en la boca—. Esa… es mi corbata.       Draco volvió a mirar por encima de su libro —No, es la nueva pelotita de Crookshanks…       Respirando pesadamente y pasando las manos por su rostro Theo miró a Blaise—. Saca a esa bola de pelos de mi cama —exclamo molesto —¡Blaise!       El moreno miró al gato con mala cara antes de hablar —a mí no me metan…       —Que valiente —se burló Draco mientras tomaba al gato entre sus brazos y se recostaba colocándolo en su pecho.       —Lo fuera si no tuvieras entrenado a esa cosa…       —Le caigo bien eso es todo…       —Y pretendes ganártela siendo amable con su gato? —preguntó Theo mientras acomodaba el desastre.       —¿Ganarse a quién? —fue ahora Blaise quién hablo.       —¿Cuándo has visto a Draco siendo amable con una mascota y más si se trata del de Hermione? —Blaise miró a ambos amigos aún sin entender, así que Theo resoplando fastidiado dijo—: ¡Hermione es la chica misteriosa!       —¡Qué! Draco… ¡Te volviste loco!       —No me volví loco… yo no necesito ganarme nada… y tú ¡Ya olvídate de ella!       Theo sonrió mirando al rubio—. Dudo que ella quiera que me aleje…       Draco se levantó abruptamente tratando de llegar hacia Theo sin éxito pues Blaise ya lo sostenía.       —Es tu última oportunidad Theo, no entres en este juego porque te juro que no seré amable.       —¡Perfecto! Porque si es por ella, yo tampoco lo seré…       Draco se zafó de Blaise para acercarse a Theo atinándole un golpe en el estómago, el cuál correspondió al instante iniciando una pelea entre ambos.       —¡Basta! ¡Protego! —grito Blaise apuntando a ambos chicos para que se alejasen—. ¡Es una sangre sucia! Que les pasa a ustedes dos… no pueden pelear así.       —Tiene razón —hablo Theo quien desistía de intentar llegar a Draco por el campo invisible que se creó—. No podemos pelear…       —Entonces aléjate de ella…       —Sabes que no puedo Draco… no hasta que esté seguro de que no la vas a lastimar…              A la mañana siguiente Draco trato de mantener la compostura con respecto a Theo, pero cuando llego la clase de pociones y los vio juntos su autocontrol se fue al carajo. Destrozo uno de los frascos de pociones en cuanto vio como Theo tomaba de la barbilla a Hermione, después de eso su humor e irritabilidad se notaban a kilómetros hasta que la encontró sola en un pasillo y no dudo en arrastrarla a un aula.       —¡Te diviertes! Cómo no pudiste conmigo ahora vas tras Theo…       —En primer lugar, fue Theo quien se acercó a mí… y segundo, lo que haga o deje de hacer con mis amigos no es asunto tuyo.       —Él no es tu amigo Granger. ¡Así que aléjate de él!       —Por qué? ¿Porque estoy enamorada de ti? Enserio pensaste que por eso tienes algún tipo de autoridad y que caería rendida a tus órdenes.       —¡Estoy tratando de protegerte!       —¡Pues no lo necesito! Y mucho menos de ti… perdiste ese derecho en el momento que te portaste como un completo imbécil en la enfermería.       —Dije la verdad, así que no me disculparé.       —No te preocupes no quiero que lo hagas, de hecho, ya no quiero nada de ti.       —¡Porque mierda complicas todo! —grito Draco al ver a la castaña alejarse y ese maldito impulso por al verla alejarse hizo que nuevamente sus palabras salieran sin ordenes —tenemos un trato.       —¡No me interesa el trato Draco se acabó!       El rubio se acercó hasta la castaña furioso —claro quieres estar libre para ir corriendo con Theo… tan desesperada estás…       Hermione no lo dudo y estampo su mano contra el rostro del rubio. Se atrevió a tocarlo y mierda que se lo merecía, después de tantas cosas que le había dicho por fin vio nuevamente ese odio en su rostro.       ‘’Ella debe odiarte, así es como debe de ser’’       Si eso era cierto porque Draco tenía esa maldita desesperación por acortar la distancia entre ambos.       —¡Qué me vas a hechizar!       Con la mano que sostenía su cabeza la acercó hasta él y la beso. A penas sintió sus labios no quiso parar, le quería y ya no podía negarlo más, la necesitaba desesperadamente así que se alejó abruptamente para irse.       Llego a la sala común tomando a Pansy del brazo para llevarla hasta su cuarto.       —¿Draco estás bien? Paso algo…       La pelinegra intentó acercarse a él, pero se esquivó—. Bese a alguien más—, fue lo único que dijo sin ni siquiera mirarla.       —¡Qué!       —Pansy lo siento…       —¡No! No te atrevas a decir lo siento… no así… esto… lo podemos solucionar…       —Pansy teníamos un trato…       —¡No! Tú lo tenías… —grito la pelinegra ya sin poder controlar las lágrimas—. Es por ella verdad… por esa chica… ¡Dime quien es!       —Para que la ataques, no, olvídalo.       —No puedes hacerme esto. ¡Yo he estado a tu lado desde el principio, en toda esta mierda!       —Lo se… lo siento, lo que menos quiero es lastimarte, pero yo ya no puedo estar contigo—, Draco paso las manos por su rostro tratando de calmarse y luego se acercó a Pansy para consolarla —podemos seguir fingiendo si eso te hace sentir mejor…       —¿Fingir? Porque… —la pelinegra se soltó del abrazo del rubio mirándole incrédula —espera, me estas dejando y ni siquiera es para estar con ella… ¿por qué?       —Quien aparte de ti se quedaría al lado de un despreciable mortifago como yo…       —La proteges, eso es tan tierno Draco —escupió la pelinegra con sarcasmo —no sabía que eras así… a no espera. ¡No lo eres!       —Sabes que te quiero Pansy, pero estar o no conmigo no cambiara tu situación, estas tan jodida como yo en todo esto, pero ella no… no puedo arrastrarla a este infierno…       —Bien, espero que cuando ella sepa quién eres realmente te odie con su vida, al menos así seremos igual de infelices.       Dicho esto, Pansy salió del cuarto del rubio de un portazo. Draco caminó hasta la cómoda de su cama, abrió el último cajón y saco esa pequeña caja de madera, la observo mientras las últimas palabras de Pansy resonaban en su cabeza.
6 Me gusta 3 Comentarios 0 Para la colección Descargar
Comentarios (0)