El descubrimiento
La serpiente se deslizaba sigilosa entre las ramas del ancestral Árbol de la Vida. Su cuerpo se acercaba peligrosamente a las raíces, pero antes de alcanzar su objetivo, una esfera de fuego impactó contra su hocico, obligándola a retroceder con un siseo furioso. En el aire, dos hombres levitaban protegiendo el árbol, ahuyentando a la criatura que intentaba devorar sus raíces. —Lo hiciste muy bien, hija. Aún debes perfeccionar un poco tu puntería, pero vas por buen camino —felicitó el hombre más alto, revolviendo cariñosamente el cabello de la joven. La muchacha de catorce años sonrió emocionada ante las palabras de su padre. —Yo contaré los frutos del lado derecho. Cariño, tú encárgate de los del lado izquierdo. Shivani, tú cuentas los del centro —ordenó con suavidad el hombre de menor estatura. Cada uno se dirigió a su zona, y Shivani empezó a contar los frutos del centro. Sin embargo, se detuvo de inmediato. Algo la había llamado… una sensación extraña, como un susurro, una conexión inexplicable. Curiosa, estiró la mano y rozó uno de los frutos. Al hacerlo, este comenzó a brillar, y en su superficie apareció lo imposible: una especie de pantalla. En ella, un anciano de barba larga y mirada sabia sostenía un objeto que hacía que las luces flotaran a su alrededor, como si controlara la misma energía del aire. Aquel anciano era Dumbledore, y aquel mundo… el “Mundo Mágico”, se convirtió en cuestión de segundos en la nueva obsesión de la jo ven adolescente.Capítulo 1
5 de julio de 2025, 12:34