Profecía//Jegulus

-Ella no tiene la culpa de que estés de mal humor, James- explica su padre, serio. -¡Ella tomó mi juguete sexual!- se queja, sentado frente a su padre, en su oficina. -¿Y que va a saber que es una vagina de juguete? ella es pequeña, James. Puedes decir las cosas más tranquilo. -Definitivamente este no es mi mes- suspira molesto- ella no debe entrar a mi cuarto. -Lo sé y la regañaremos por eso, pero esas no son formas, ¿sabes? -Sí, papá- rueda los ojos, cansado. -Dime, James, ¿alguna vez nosotros te gritamos así?- pregunta Fleamont, todavía serio. -No pero yo me portaba bien. -¡Le cortaste un mechón de cabello a tu padre mientras dormía! eras peor que ella, James. -La abuela dice que salí a ti- responde, mirando sus manos- era pequeño, no cuenta. -Ella también es pequeña y no te rompió nada, ¿es un asco que toque eso? sí, pero es pequeña y no sabe que es algo sexual, lo vio rosa con forma "de pulsera" y lo tomó, sabes lo fan del rosa que es Libra. -Sí, lo sé. Pero que no entre más a mi habitación. -No lo hará, la regañaremos por eso, pero debes calmarte, James. -Lo de Sirius me trae mal, papá. Imagínate a ti saliendo con el tío Lyall- señala, horrorizado- ¡imaginate tirarte al tío Lyall!- abre los ojos grande. Fleamont sonrie divertido y niega con la cabeza. -No puedo imaginarlo, simplemente no pegaríamos. Pero no seas tan dramático, James. Si no quieres casarte con Sirius, no lo hagas. -¡Pero está en el destino! -El destino lo construyes tu, hijo- toma sus manos, dándole su apoyo- puedes casarte con quién quieras en el futuro, ahora no, tienes diecisiete años, ahora puedes jugar al quidditch, aprobar todas las materias y hacer bromas con tus amigos. -¿Como mirar a Sirius sabiendo lo que se? -Solo olvídalo, la adivinación nunca funciona. Son tonterías- trata de animarlo- ¿qué tal si me acompañas al trabajo? tengo que buscar unos papeles. -Oh sí, amo ir a la empresa- sonrie, olvidando el tema de la profecía. -Genial- sonrie Fleamont, levantándose de su asiento y extiende los brazos para que James lo abrace- quiero que te disculpes con tu hermana y le expliques, con el lenguaje apropiado y sin revelar demasiado, por qué no debe tomar tus cosas, ¿sí?- pide, abrazando a su hijo mayor, James asiente- ella te ama, te admira y te extraña siempre, se dulce. -Yo también la amo, es mi hermanita- sonrie enternecido y deshace el abrazo, abriendo la puerta de la oficina- Li, ven- llama James, agachándose para quedar a su altura y luego le explica por qué no debe tomar sus cosas, con lenguaje apropiado y sin revelar que era realmente su juguete. Alphard mira a Fleamont y sonrie. -Eres un gran padre- besa su mejilla, Mont lo abraza por la cintura. -Sí, lo sé Jaimie, perdón- se disculpa Libra- sé que no debo entrar a tu habitación y tienes razón, ¿podrías disculparme? -¡Claro, Lib!- sonrie abrazándola. -Tú también, cariño- afirma Fleamont, robando un beso a su esposo. [...] -Y mañana es el cumpleaños de Lyall- comenta Fleamont, dejando una pila de papeles recien traidos de la empresa, sobre la mesa del comedor. -¿Qué le compraste?- pregunta James, dejando más papeles. -Amm....- piensa- de hecho nada, ¿me acompañas y vemos que podemos comprarle?- James asiente con la cabeza. -Y de paso que James se compre ropa- pide Alphard, asomándose por la puerta- la ropa ya te está quedando pequeña- explica- y tu también, Mont, cómprense ropa decente. -Pero si las camisas a cuadro son muy decentes- responden James y Fleamont, al unísono. -No, no lo son- niega Libra, pasando por el living para ir hacia el jardín. -Hasta la niña sabe que se visten horrible, vayan a comprarse algo lindo- exige Alphard, volviendo a la cocina. James y Mont asienten, sin más remedio. [...] Sábado -¿Realmente debes ir?- se queja Sirius, viendo a Remus preparar su bolso para ir a casa. -Hoy es cumple de papá, puedes venir conmigo- propone. Sirius se muerde el labio, nervioso. -Solo vi a tus padres como dos veces en la vida, sería extraño. -Claro que no, les caes muy bien. -Sí pero no dejaré a Peter. -También puede venir- se encoge de hombros. -Oh no, no- se niega Pettigrew- yo no salgo de aquí- señala su cama llena de libros y comida- de hecho, si pueden guardar silencio se los agradecería. Remus y Sirius lo miran, confundidos. -Mis padres quieren que vaya mañana para el paseo de fin de semana- explica- hoy es el único día que puedo estar tranquilo. -Oh sí, claro- asiente Remus- como quieras. -Pero Moony, íbamos a ir a pasear, lo prometiste hace una semana. -¿Cuándo? yo no prometí nada. -Sí, lo hiciste. -Pasearemos en mi ciudad, prepara el bolso y vamos- insiste, mirándolo. -¿Crees que tus padres no me odiarán?- pregunta, nervioso. -Ay Sirius, no seas bobo, nadie te va a odiar. ----------------------- -Oh, hola hijo- saluda Lyall, abrazando a Remus- tú eres... Sirius, ¿no? Remus habla mucho sobre ti- sonrie, extendiéndole una mano. -Un gusto, señor Lupin- sonrie nervioso- ¿en serio? -Como de todos mis amigos- se mete Remus, nervioso- hablo mucho de Peter también, ¿o no pa? -¿Quién?- pregunta Lyall, frunciendo el ceño. Sirius sonrie divertido, antes de que algo le pegue en la cabeza. -Ahí va tu sostén, Cissy- se burla una chica de pelo azul. -Andromeda, basta- exige Lyall, mirando a su hija menor- ¿qué es eso de andar tirando cosas? -¡Papá!- chilla Narcissa, bajando las escaleras- ¡arruinó mi sostén! -Basta, Andromeda. -¿¡Lo rompió y solo le dices basta!? ¿Dónde está papá? -Cygnus, amor- llama Lyall, mirando hacia la cocina- ¿me ayudas? -¿Otra vez lo del sostén Andy?- se queja Cygnus, entrando al living. -¡Lo deja en mi baño! -¡Porque mi baño se rompió! -Compartí con Bella sino, Cissy- trata de resolver. -Pero Bella es una amargada y no me deja pasar a su habitación. -Porque deja su ropa tirada en todas partes- explica Bellatrix, sentada en el sillón. -Papá- se queja Remus, mirando a Cygnus- ya basta, por favor. -Oh, tenemos visitas- deja su taza en la mesa del comedor y se acerca- un Black, eh. ¿Hijo de quién?- pregunta analizando el rostro de Sirius. -Un gusto, señor Lupin- sonrie Sirius, extendiendo una mano hacia Cygnus- soy Sirius aunque no soy muy afín a mi conservadora familia. -Ni me lo digas, son horribles. ¿Eres hijo de...?- pregunta, tomando su mano. -Orión y Walburga. Cygnus rueda los ojos. -Burga es un dolor de cabeza, pobre de ti- se lamenta, abrazándolo- ¿sigue lanzando crucios? Sirius balbucea, sin saber que responder. -Basta, papá- pide Remus, mirando a Cygnus. -¿Cómo...? ¿como la conoce, señor?- pregunta Sirius, cuando Cygnus lo suelta. -Oh, es mi hermana. ¡Cissy no!, dejen de empujarse. -¡Ella tomó mi maquillaje! -Lo dejó en mi baño. -Sí pero ella lo arruinó. -Lo siento- se disculpa Remus, tirando de la mano de Sirius, para llevarlo a su habitación- son muy ruidosas. -¿A dónde vamos?- pregunta Sirius. -Oh, a mi habitación, es zona libre de chicas- sonrie divertido. -Eso sonó gay- molesta Sirius, mirando el trasero de Remus. -Mira, esta es mi habitación- cambia de tema, una vez que llegan arriba. -Sí, luce como si un friki y licántropo tocara la guitarra y fumase aquí- bromea, sentándose en su cama. -Sabes que no toco la guitarra. -El bajo, perdón, mala mía- le guiña un ojo- es una linda habitación, yo pegaría fotos de chicas en ropa interior, como en casa. -Luego te preguntas por qué tu madre se enfada- sonrie divertido. -Es mi habitación, se supone que puedo hacer lo que quiera. -¡REMUS LLEGARON LOS POTTER!- grita Andy, tocando la puerta- ¿puedo pasar? -Sí, pasa. -Haremos un partido de quidditch en un rato, ¿estás dentro?- -No, gracias- responde el mayor de los Lupin- ¿tu?- pregunta, mirando a Sirius, quien asiente con la cabeza. -Bien, y... Remus. -¿Sí? -Ese suéter no te queda nada cool, actualizate, hermano, pareces un anciano. -Yo no parezco un anciano, es un look retro. -Ajá- responde, saliendo y cerrando la puerta detrás de ella. -¿Crees que luzco como un anciano?- pregunta, mirando a Sirius. -En ti se ve bien- sonrie Black, tratando de ser cuidadoso con sus palabras. Remus suspira y rueda los ojos. -Ustedes son los que se visten como carcelarios, a James le parece cool mi look. -James se viste con camisas de franela, Moony- sonrie Sirius- su opinión en moda no cuenta.