ID de la obra: 441

Profecía//Jegulus

Slash
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En progreso
41
El trabajo participa en el concurso «Harry Potter: El Capítulo Perdido»
Fechas del concurso: 26.06.25 - 13.08.25
Inicio de la votación: 12.07.25
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planificada Maxi, escritos 1.169 páginas, 340.683 palabras, 127 capítulos
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Capítulo 57

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Regulus espera a James apoyado en la pared. Pandora lo acompaña para que no se quede solo, por las dudas. -Ey, aquí estoy- sonrie James, llegando con una mochila y ropa de casa- ¿vamos?- extiende su mano, Regulus la toma. -Nos vemos el lunes, Dora- saluda Regulus, antes de entrar a la oficina de Dumbledore. -Diviértanse- mueve la mano- pero no demasiado- recuerda, frunciendo el ceño. -Yo lo cuido- promete James- nos vemos. -Adiós- saluda Dora, moviendo la mano. [...] -Hola, chicos- saluda Alphard, mirándolos emocionado. James abraza fuertemente a su padre. -Hola papi, ¿cómo estás?- pregunta James, besando su mejilla. -Bien, cariño. Ayudé a papá un poco con la empresa, Lib ha estado en lo de Cyg, los chicos no están asi que los tíos la llevan a pasear. -Sí, ella adora estar en la casa de los tíos- asiente- que rico olor ¿y papá? -Está entrando al ganado- responde, James asiente y camina hacia la cocina- ¿Reg? ¿cómo estás? -Un poco mejor- sonrie de lado-gracias por preguntar. -Me alegro, cariño. ¿Te gusta la lasaña?- pregunta, Regulus asiente- JAMES POTTER NO METAS EL PAN EN LA SALSA- grita caminando hacia la cocina. Regulus lo sigue. -Pero está rico, papá- se queja James, con un pedazo de pan en la boca, Regulus sonrie divertido. -Ya casi comemos, deja eso ahí. ¿Sirius viene?- pregunta, James se encoge de hombros. -Está acaramelado con Remus, la luna llena está cerca, están todo el día pegador y Sirius se siente misteriosamente mal. -¿A qué te refieres?- pregunta Alphard, tomando los platos. James se encoge de hombros. Alphard suspira- hablaré con él luego. Siéntense que sirvo la comida, ¿vas por papá, James? -Sí, le mando un patronus- asiente James, buscando su varita- ¿viste mi varita, Reg?- pregunta James. -Creo que la pusiste en el bolso- responde y le extiende su varita. -Expecto Patronum- pronuncia James, un ciervo sale de la varita de Regulus, quién lo mira impresionado. -Wow, es muy... imponente- opina Black. -Sí, ¿tú no...?- Regulus niega- lo siento mucho, no quise... -No importa- niega Black, tomando los cubiertos para ayudar a poner la mesa. -Siéntense, serviré la cena. James pon el pan. ¡LIBRA! ¡VEN A CENAR! La niña baja las escaleras corriendo. -¡Regulus!- sonrie la niña emocionada- ¡volviste! ¡te extrañé! -Hola Lib, sí, yo también te extrañé- sonrie, acariciando su cabello. -¿Todavía no abrazo?- pregunta ladeando la cabeza. -Perdón Lib, no- niega Regulus. -Está bien- asiente la pequeña, corriendo a su silla. Alphard termina de servir la comida y se sientan. La puerta del jardín trasero suena, Mont entra. -Hola chicos- saluda Fleamont, abrazando a James-¿cómo siguen?- pregunta, besando la mejilla de su hijo. -Bien pa- sonrie James, su padre le revuelve el cabello y se sienta en la punta de la mesa. -Reggie, ¿tú? ¿cómo te sientes?- cuestiona, tomando el vino para servirse. -Mejor, señor, muchas gracias- sonrie de lado. -Genial, ¿alguien quiere?- pregunta, mostrando la botella de vino. -Yo pa- pide James. Alphard deja un plato frente a Fleamont y uno para él, sentándose. -¿Bonito?- pregunta Fleamont, luego de servirle vino a su hijo. -Yo quiero blanco- responde, estirándose para besar su mejilla. Mont sonrie enamorado y se levanta, en búsqueda del vino blanco. -¿Reg?- pregunta James- ¿vino? -No, gracias. Me serviré agua- se estira para tomar la jarra pero James le gana y agarra la jarra, sirviéndole- gracias- susurra sonrojándose. James sonrie, bajando su mano para apoyarla en su muslo derecho. Cenan en una amena charla, bajo preguntas de como van en el colegio y alguna anécdota de Fleamont y Libra. [...] Regulus se tira en su cama, tranquilo de estar de regreso en casa. -Nada como volver, ¿no?- sonrie James, apoyándose en el marco de la puerta. Black voltea a verlo y sonrie al verlo allí. -Sí, es... es más cómodo- responde el pelinegro. -Claro que es más cómodo, no es un colegio- sonrie divertido- ¿puedo pasar? -Sí, claro- asiente Regulus. James mira a su alrededor. -Debes decorar- opina, caminando con las manos en los bolsillos. -Así está bien- responde, sentándose en la cama. -Iremos a comprar adornos luego, no es ninguna molestia. Puedes colocar cuadros, fotos, adornos que te gusten. -¿Por qué me dejarían cambiar la estética del lugar?- pregunta Regulus, mirándolo con curiosidad. -Es tu habitación, puedes hacer lo que quieras- responde James, apoyándose sobre el escritorio. -¿Y no me retarán?- cuestiona, ladeando la cabeza. -Claro que no, mientras no destruyas la habitación...- sonrie divertido, acomodando un libro de Regulus. -Nunca lo haría- responde Black. James camina hacia él y se sienta a su lado. -Debo cambiarme y luego... ¿dormimos juntos?- propone, tomando la mano del pelinegro. Black asiente- digo, para que te sientas más seguro- sonrie nervioso. -Sí, claro- acepta Regulus mientras se sonroja- primero debo bañarme y luego... sí. -¿Donde quieres? ¿en mi habitación o la tuya?- pregunta, dejando caer la cabeza en el hombro de Regulus. -En la tuya- responde, porque la habitación de James tiene su esencia, su olor. -Bien, entonces- se levanta- con su permiso, señor Regulus- hace una reverencia y toma su mano, besando sus nudillos. -Eres raro, ¿sabes?- sonrie divertido- ve, debo bañarme- señala la puerta, James asiente y sale, cerrando la puerta detrás de él. Regulus se levanta de la cama y camina hacia el baño, donde ya tiene sus productos favoritos del cabello, las toallas, la esponja, jabón corporal, todo. [...] -¿En qué piensas?- pregunta James, viendo a Regulus mantener sus ojos abiertos. -Se me acabaron los productos para la cara- responde suspirando- las cremas, los limpiadores faciales... -Mañana compramos- promete, besando su cabeza. -¿Mañana a que hora hay que levantarnos?- pregunta Regulus, apoyando sus antebrazos en el pecho de James, para observarlo bien. James sonrie al verlo; la tenue luz de la luna ilumina su cara. -A la hora que quieras- responde, afirmando sus manos en la cintura de Black, que está acostado sobre él. -Pero iremos al campo o algo así, ¿no?- ladea la cabeza, mirándolo de cerca. -Sí pero podemos ir a la hora que quieras. Solo hay una pequeña casa que es provisional asi que no podemos quedarnos mucho tiempo. Regulus asiente. -¿En que iremos?- pregunta, pasando sus dedos por la barba escasa de James. -En auto muggle- bosteza. Regulus asiente y se desliza hacia arriba, hundiendo su cara en el cuello de James, llenándose de su aroma. -Buenas noches, James- saluda, el cosquilleo de sus labios sobre su cuello lo hace reír levemente. -Buenas noches, bonito- responde James, besando su hombro. [...] Sábado -¿Y los chicos?- pregunta Fleamont, cuando vuelve de sacar al ganado y darles de comer- James dijo que vendría conmigo. -Durmiendo, juntos- responde Alphard, batiendo la mezcla de pancakes. Fleamont sonrie y niega con la cabeza. -Amasaré pan- avisa quitándose la ropa del trabajo y quedando en boxers. -Ponte algo, los chicos podrían bajar en cualquier momento- habla Alphard, no lo está viendo pero lo conoce lo suficiente para saber cada uno de sus movimientos. -Sí, ¿tengo ropa aquí abajo?- pregunta, caminando hacia la cocina para besar los labios de su esposo. Alphard suspira enamorado, abandonando la mezcla de los pancakes y hundiendo sus manos en el cabello de su hombre. -Sí, en el cuarto de lavado- responde entre besos, la boca de Fleamont baja hacia su cuello, buscando más de él- están los niños, Mont- recuerda, sintiendo las manos de su esposo masajear su trasero. Potter suspira y se aleja, besando sus labios por última vez. -En la noche lo arreglamos- sonrie coqueto, caminando hacia el cuarto de lavado. Regulus y James bajan las escaleras, charlando de algún tema random. -Buen día- saluda Regulus mirando a Alphard- ¿necesita ayuda? -No cariño, siéntense- responde, colocando la mezcla en la sartén caliente. -¿Té, Reg?- pregunta James, caminando hacia la tetera. -Sí, gracias- agradece Regulus. -Amor no encontré camisa- se queja Fleamont, saliendo del cuarto de lavado solo con un jean. Regulus lo observa boquiabierto y luego desliza su mirada hacia la espalda de James, que tampoco lleva camisa. -Creo que hay una en el sillón, si no dejaras las cosas tiradas las encontrarías, Fleamont Potter- regaña Alphard, volteando el pancake. -Perdón cariño- se disculpa Mont, robándole un beso- trato de no hacerlo, lo juro. -Lo sé, amor- suspira Alphard. James deja una taza llena de té frente a Regulus. -Gracias- sonrie Regulus. -De nada- sonrie James de regreso y va a servirse café. -Sírvele café a papá que se fue hace un rato con el ganado y solo tomó agua- pide Alphard, mirando a su hijo. -Sí, claro- asiente James, sirviendo otra taza. [...] Regulus come sus pancakes, disfrutando del delicioso sabor. -¿Cómo salieron?- pregunta Alphard, sentándose junto a Fleamont. -Exquisitos, señor Potter- habla Regulus, luego de tragar- muchas gracias, es un delicioso desayuno. -Ay cariño no agradezcas- sonrie Alphard. -Amasaré pan- avisa Fleamont mientras desayunan- ¿quieren alguno en especial? -Me da lo mismo- responde James- ¿Reg? -¿Amasará pan?- pregunta, ladeando la cabeza- es mucho trabajo. -Nos gusta el pan casero- responde Fleamont. -Y Monty tiene fuerza, asi que esa parte de la cocina se la dejo a él- sonrie Alphard, mirando a su esposo, enamorado. -Papá cocina bastante también- señala James- aunque prefiero las pastas de papá Alph, sin ofender- sonrie divertido, mirando a Mont. -Auch- exagera, tocándose el corazón- ¡mi propio hijo!- hace muecas raras, haciendo reír a su familia. -Ya sé a quién saliste- sonrie Regulus, mirando a James. -¡Y yo lo tuve nueve meses en mi vientre! ¿puedes creerlo?- señala Alphard, dramáticamente. -Pero salió lindo- señala Fleamont. -Salió a ti- responde Alphard. -Por eso- sonrie divertido. -¡Trenzas, trenzas, trenzas!- escuchan la voz de Libra, quién baja las escaleras corriendo- ¡Hola Regulus! ¿puedo trenzas?- pregunta emocionada, juntando sus manos. -Primero saludamos Lib, "Buen día, ¿cómo estás?"- recuerda Alphard. -Buen día, ¿cómo estás, Reg?- pregunta la niña, mirándolo- ¿puedo trenzas?- insiste. Regulus ríe levemente y asiente. -Primero deja que Regulus termine de desayunar, desayuna tu y luego le pides las trenzas, Lib- habla James, moviendo su mano para acariciar el muslo de Regulus. -Okey- asiente la niña, subiéndose a su silla- ¿Sirius? -Se quedó con Remus en Hogwarts- responde James- iban a volver a casa pero ambos se sienten mal y decidieron quedarse juntos. Vendrán a almorzar el domingo dijeron. -Oh- responde la niña y se encoge de hombros. -Debo hablar con él- suspira Alphard- ¿no sabes que tiene? -No, no quiso ir a la enfermería y Remus está en sus días de luna llena, asi que... -¿Sabes si se están cuidando?- pregunta Fleamont. -Sí, según lo que dijeron, sí- James se encoge de hombros. -A veces falla- habla Alphard- ¿no sabes que tiene? -Le dolía la cabeza, el estómago, se sentía como enfermo- responde James, tomando de su café. Alphard suspira. -El riesgo siempre está, hay que cuidarse, James. -Lo sé, pa- detiene James. -Quizá solo está enfermo- opina Fleamont. Alphard voltea a verlo. -Ahí desayunando está "la gripe"- Alphard señala a James. -¡Oye!- se queja James divertido- iremos al campo, quiero ver el terreno y eso. -¿A cuál? ¿a uno de los tuyos?- pregunta Fleamont. -Sí, al que me gusta- responde James. -Es un buen campo- opina Mont- es tan grande como este asi que es conveniente, no está lejos. -Hace desde el verano que no voy- lleva el tenedor a su boca, manteniendo su otra mano en el muslo de Regulus. -Yo sí fui, a hacer el mantenimiento- responde Fleamont. La charla sigue, mientras desayunan. Regulus se levanta a lavar su plato y nota que Fleamont también mantiene la mano sobre el muslo de Alphard. -Déjalo, yo lo lavo- habla James, desde su lugar. -No, está bien- termina de lavar su plato y se seca las manos- me gusta lavar los platos- sonrie- de hecho es una de mis tareas favoritas. -¿Ahora trenzas?- pregunta Libra, observándolo. -Sí- asiente Regulus. -Trae el kit de peinado, cariño- recuerda Alphard, la niña asiente y corre escaleras arriba. [...] Regulus trenza el cabello de la niña mientras James lo abraza por la espalda, apoyando su mentón en el hombro de Black. -¿Qué haces, James?- pregunta Regulus. -Quiero un abrazo- responde, besando su cabeza. -Estoy ocupado ahora- suaviza su voz, suspirando. -Lo sé ¿puedo quedarme aquí?- susurra- si quieres alejarme solo dilo, me alejaré- mueve sus manos, acariciando el estómago de Regulus. -No- niega Regulus- quédate pero quieto, intento trenzar. -Sí, bonito- sonrie James. Regulus termina la primera trenza y coloca la liga, antes de tomar la otra mitad del cabello y trenzarlo. -Ya están, Lib- sonrie Regulus, cuando termina las trenzas. -¡Muchas gracias!- exclama la niña y corre a buscar a su papá para mostrarle. Black voltea, hundiéndose en los brazos de Potter. -¿Quieres ir ahora o luego de almorzar?- pregunta James. Regulus se encoge de hombros. -Cuando gustes, primero debo cambiarme ¿crees que hará mucho calor hoy? -Sí, parece que si- responde James, besando la mejilla de Regulus- solo estaremos nosotros, puedes ponerte lo que quieras. -¿Tu qué te pondrás?- pregunta. -Un jean y una remera, supongo- se encoge de hombros. -Tienes cero moda- sonrie divertido. -No necesitas ir a la moda, necesitas ir cómodo- responde, apretando su cintura. -Bien, veré que tengo- piensa Regulus- si me dejas ir, buscaré algo que ponerme. -Claro, perdón- sonrie James- es que me encantan los abrazos. -Sí, lo noté- sonrie guardando el peine en la canasta. -Me hace sentir seguro- explica James, ayudándolo a guardar las ligas. [...] James revisa el auto mientras Regulus se viste. -No se olviden el protector solar- recuerda Alphard, mirando a su hijo con las manos engrasadas. -Dile a Regulus, yo estoy en esto, pa- pide James. -¿Revisaste la bujía?- pregunta Fleamont, entrando al garaje- es fundamental. -Sí, iré con Regulus- asiente Alphard, dando media vuelta y sube las escaleras- Regulus- llama Alphard. -Ya salgo señor- responde Black, un momento después abre la puerta- ¿sí? -No se olviden del protector solar, el repelente para los mosquitos y ¿quieres llevar comida? -Le preguntaré a James, ahora tomo todo eso, ¿tiene un bolso?- pregunta, bajando las escaleras a su lado. -Sí, ahora te doy. -James- llama Regulus, llegando al garaje. -¿Sí, cariño?- pregunta distraído. Fleamont sonrie. -Yo, yo- tartamudea, mirando sus manos, tratando de recordar lo que iba a preguntarle. -¿Preparas algunos sándwiches? para no ir a comprar luego de almuerzo- habla James, ajustando algo en el motor. -¡Eso! ¡aperitivos! ¿llevamos? -Sí, luego compramos algunas cosas más pero mejor si llevamos de casa, los sándwiches de la estación de servicio no son muy ricos, ¿los preparas?- pregunta, volteando a verlo. Regulus lo observa, lleva la remera roja en los hombros, las manos sucias y el cabello revuelto. Black asiente y camina a la cocina, sintiendo su cara hervir. -¿Dijo que sí?- pregunta Alphard- no sé que planes hará, los Potter son como "luego vemos"- los imita, moviéndose suavemente. Regulus sonrie divertido. -Sí, yo no podría. Me gusta organizar las cosas antes. -Sí, a mi también. Te ayudo, preparemos unos sándwiches. -Gracias- sonrie Regulus. [...] -A James le gusta con dos rodajas de jamón, dos de queso y luego le agrega mayonesa y tomate- comenta, mientras prepara el primer sándwich. Regulus asiente y hace uno. -¿Así?- pregunta. -Sí, genial. ¿A ti como te gustan?- sonrie Alphard, mirándolo. -No lo sé, hace mucho que no como un sándwich. Creo que probé uno cuando fuimos a tomar el té con James- se encoge de hombros. -Oh, ¿salieron?- eleva ambas cejas. -Tomamos el té en Hogsmeade, estaba con mis amigos y quisieron irse, asi que me quedé allí, justo estaba James cerca y me acompañó. -Claro- sonrie Alphard- entonces preparemos algunos simples, o con pan de semillas. [...] -Abre el refrigerador y toma todo lo que quieras, Reg- señala Alphard- fruta, agua fresca. -¿Seguro, señor?- pregunta Regulus, Alphard asiente. -Claro cariño, es tu casa, toma lo que quieras. -¿Ya estamos?- pregunta James, saliendo del garaje. -Te ensuciaste- resopla Regulus, señalando el pantalón de James- ve a cambiarte. -Sí, ahora voy- asiente Potter-¿qué falta? -Nada, ya tengo todo. Ve a cambiarte- exige Regulus. -Ya hace calor, ¿llevas algo corto o estarás elegante todo el día?- pregunta, caminando al baño a lavarse las manos. -Llevaré una muda de ropa por si me da mucho calor- sube las escaleras, en búsqueda de ello. [...] -Cargo las cosas, Reg- avisa James, abriendo el baúl. -¿Puedo llevar algo de arte?- pide, mirándolo con ilusión. -Sí, bonito- sonrie Potter- hay lugar, trae lo que quieras. James carga las bolsas y el bolso de Regulus. Black aparece con su bolso de arte, pero solo lleva algunas cosas. James lo carga al auto. -Ya estamos entonces- suspira Regulus, colocándose los lentes de sol. James abre la puerta para él y Regulus se sube. [...] -Entonces me caí del caballo- comenta James, mientras maneja. Regulus ríe. -Eras pequeño, era obvio que ibas a caer- responde Black. -Paramos a comprar algo más, ¿quieres? hay helados envasados, podemos comprar para el postre, hay galletas, lo que gustes- comenta, entrando a la estación de servicio- si quieres puedes ir mientras cargo combustible. -No, te esperaré- sonrie de lado- ¿espero arriba o abajo?- señala afuera. -Abajo mejor- sonrie James. Regulus golpea su hombro, al darse cuenta de qué habla- Potter ríe- solo bromeo, quédate aquí si quieres, tengo que aparcar luego de cargar combustible. -No sé que es combustible pero bueno- sonrie Regulus. [...] James y Regulus pasean por la estación de servicio, mientras James va agarrando productos. -¿Qué quieres Reg? tu toma lo que quieras, con confianza- sonrie James. -Estoy bien- responde Regulus. -Vamos, Reggie. Toma algo que te guste, ¿helado, galletas, snacks? -Ya llevas todo eso- señala el carrito. -Menos helado, hay que agarrarlo último. Pienso volver a la tardecita, asi que agarra lo necesario porque apenas son las once- Regulus asiente, pero no está acostumbrado a que lo dejen comprarse cosas, asi que se mantiene caminando junto a James, en silencio-toma algo que quieras, ¿sí?- pide Potter, pasando su mano por la cintura del menor. -Es que no sé que quiero- responde sincero- nunca me dejaron elegir, tampoco salía a comprar, iba Kreacher supongo. -Bueno, ahora puedes elegir. Me gusta salir a comprar, ¿a ti no?- pregunta el mayor. -Sí, pero no estoy acostumbrado a elegir, solo eso- Regulus se encoge de hombros. -Puedes llevar algo que te guste, o que quieras probar. ¿Un chocolate? eso te gusta. Regulus asiente ante la insistencia de James. [...] -Y... llegamos-James detiene el auto, luego de abrir un par de tranqueras y entrar a la finca. -Wow, es hermoso- sonrie Regulus, viendo el paisaje por la ventana. James sale del auto y le abre la puerta- gracias- sonrie, apretando suavemente la mejilla del mayor. James se sonroja levemente y cierra la puerta. -Fumaré un poco, ten- le extiende la llave de la casa- entra si quieres. Regulus toma la llave y asiente, caminando hacia la casa. James prende un cigarrillo mientras baja de a un bolso, mientras mantiene el cigarrillo en su otra mano. -Es una linda casa- opina Black cuando James llega a su lado, soltando un bolso en el piso. -Sí, es pequeña. Provisional- sonrie James, alejándose para que el humo no llegue a Regulus- terminaré de bajar todo. Regulus asiente y entra en la casa, encendiendo la luz. -James- llama Regulus, Potter deja dos bolsos más en el piso y lo mira. -¿Sí, bonito?- pregunta James, tirando el cigarrillo al piso. -¿Puedo hacer un hechizo de limpieza?- pregunta, apoyando sus manos en el pecho de James, el de lentes sonrie y suspira, pasando sus manos por la cintura de Regulus. -Si, claro- responde Potter, mirando sus labios. -Hueles horrible- hace una mueca de asco, volteando hacia otro lado. -Lo siento- se aleja James, soltando su cintura- a veces necesito- suspira, tomando la varita del bolsillo de Regulus para hacer los hechizos de limpieza- no sé donde dejé la varita- sonrie divertido. -Oh, la traje, la puse en el bolso. ¿Algún día vas a dejar de olvidarla?- pregunta, colocando sus manos en su propia cintura, como una jarra. -No creo- sonrie divertido, mirando a los objetos moverse solos, limpiando la casa- no es la mejor limpieza pero ayudará- se encoge de hombros- iré por lo que queda en el auto. -¿Qué queda?- pregunta el pelinegro- un bolso y las bolsas del supermercado. -¿Te ayudo?-pregunta Regulus. -No te preocupes, yo me encargo- besa su mejilla antes de volver al auto. [...] Luego de almorzar Regulus y James se tiran bajo la sombra de un árbol, sobre una manta. -Es un hermoso día- sonrie Regulus- no hace tanto calor. James sonrie, pasando su mano por la cintura de Regulus para atraerlo a su lado. -Sí, es porque es todo campo-responde James, el pelinegro pasa sus dedos por la barba creciente de James. -¿Qué tan grande es?- pregunta, rato después. Todavía pasando sus dedos por las comisuras de los labios de Potter. James eleva una ceja. -Muy grande- responde Potter, sonriente. Regulus frunce el ceño al verlo sonreír así. -¡Hablo del campo!- exclama, sonrojado. -Por eso, muy grande- responde Potter, riendo levemente- más de 100 hectáreas es seguro, porque está armado como el de casa, para ganado, siembra y vivienda cómoda. -Oh, eso es mucho- opina Regulus. James bosteza. -¿Vamos adentro a dormir la siesta?- propone Potter. [...] -James- llama Regulus entre sueños- no, no, ¡no te mueras!- exclama, despertando a James. -¿Reggie?- susurra Potter, acariciando la mejilla de Regulus. -¡No lo mates, madre!- se queja entre sueños, mientras llora. -Regulus- llama James- estoy bien, estás soñando- lo mueve- aquí estoy, bonito- insiste, los ojos grises se abren de a poco y lo miran asustados. -James- suspira Black, abrazándose a James con fuerza- merlín, ella te estaba torturando, yo... -Solo tenías una pesadilla, bonito- suspira James, afirmando su agarre a la cintura del pelinegro. -Fue horrible- llora en su pecho, desconsoladamente. Otro ataque de pánico comienza y James sabe el protocolo, manteniéndolo seguro entre sus brazos, le pide a Merlín que por favor Regulus mejore. Potter llora en silencio, triste por no poder quitarle la angustia a Regulus. -Dime que puedo hacer para que mejores, Reggie- pide James, besando su frente. Regulus no responde, termina por calmarse diez minutos después, bajo el aroma de James, sus besos y sus increíbles palabras de afirmación. Regulus se sienta sobre el estómago de James, limpiando sus mejillas con las mangas. -Perdón- se disculpa- siempre te pongo en esta situación- extiende sus manos y limpia las mejillas de James. Potter sonrie cálidamente, tomando su mano para besar sus nudillos. -No, no te disculpes y pasaría mil veces por esta situación si es lo que te calma, Regulus. No quiero que pases por esto solo, ¿escuchaste?- pregunta, acariciando su mano. Regulus baja la cabeza y asiente. El estómago de Regulus gruñe, hambriento-vamos a comer algo- sonrie James, levantándose con Regulus entre sus brazos. Pasan frente a un espejo y Regulus los mira allí. La imagen lo hace sonreír. Los brazos fuertes de James lo sostienen firmemente y allí, solo allí, Regulus se siente completamente seguro; entre los brazos de James.
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