ID de la obra: 441

Profecía//Jegulus

Slash
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En progreso
41
El trabajo participa en el concurso «Harry Potter: El Capítulo Perdido»
Fechas del concurso: 26.06.25 - 13.08.25
Inicio de la votación: 12.07.25
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planificada Maxi, escritos 1.169 páginas, 340.683 palabras, 127 capítulos
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Capítulo 126

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Regulus se queda paralizado, no lo esperaba. El viento que comienza a enfriarse mueve su cabello.  James lo mira suplicante mientras Regulus guarda silencio. "DILE QUE SI" exige su corazón. "Le harás daño" discute su cabeza lógica "él no merece que lo lastimen" Ante la mirada desesperada del mayor Regulus por fin logra hablar: -¿Te gusto?- tartamudea- ¿realmente te gusto?- murmura tratando de aclarar sus pensamientos. James asiente, sonrojado hasta las orejas. -Me gustas, Regulus- afirma James. -También me gustas- suelta, bajando la mirada. -¿También te gusto?- pregunta emocionado, la ansiedad comienza a convertirse en emoción. Regulus asiente. -Sí- sonrie de lado- pero no quiero dañarte, yo...- suspira mientras mueve sus manos, nervioso- fui malo y desalmado muchas veces y no quiero que sufras, no quiero dañarte a ti, a ti no. Te quiero demasiado y quiero que seas feliz aunque sea sin mi- sus ojos se llenan de lágrimas- soy un desastre y podrías encontrar algo mejor, yo, yo... yo...quizá solo es algo pasajero ¿no crees? solo te gusto porque... no sé, no soy tan feo y quizá te sientes solo o... James levanta el mentón de Regulus con sus dedos y lo mira a los ojos. Regulus guarda silencio. -Estoy enamorado de ti- admite James, mirándolo a los ojos. Regulus traga duro. -¿Y si te lastimo? ¿y si me odias?- murmura inseguro. -Nunca podría odiarte porque te amo, eres increíble Reg,y ¡me encantas!- sonrie ampliamente mirándolo con amor- me gustas desde hace mucho tiempo- habla con esperanza, sus ojos brillan- me gustas como eres. Porque estoy enamorado de ti, de todo lo que eres. "Ya no eres el mismo de antes" "date la oportunidad de decir que si" recuerda la voz de Barty en su cabeza y recuerda aquellas visiones, las cuales podrían hacerse realidad. Él podría casarse con James y ser feliz. Decide confiar y creer que él mejoró. Una sonrisa se dibuja en los labios de Regulus mientras se llena de valentía y asiente. -Sí, quiero salir contigo- acepta Black, mientras acaricia la mejilla de James. Potter sonríe ampliamente y lo abraza lo suficientemente fuerte como para que su voz suene distinta-Me aplastas, Jaimie- sonrie Regulus entre los brazos fuertes de James. -Oh, lo siento cariño, lo siento, lo siento- James se disculpa apenado, alejándose abruptamente. Regulus sonrie ampliamente y lo mira mientras sus ojos brillan como las estrellas. -James- llama Regulus tomando el anillo de promesa. James lo coloca en su dedo anular, en el que no está el anillo de sol. -¿Sí, bonito? -¿Me besarás?- pregunta Regulus, avergonzado. James sonrie ampliamente. -Me encantaría, ¿quieres que te bese?- Regulus asiente mientras su estómago se llena de mariposas. James une sus labios y lo besa suavemente. Regulus no sabe besar,  asi que mueve sus labios torpemente mientras trata de seguir los movimientos del mayor, quién tiene más práctica, asi que guía el beso. -Yo... no se hacer esto- habla Black entre besos. Las manos de James acarician la cintura de Regulus, sobre la ropa. -Aprenderás- sonrie James, moviendo sus labios sobre los de Regulus. -Deberás besarme mucho así aprendo- coquetea Black una vez que se alejan. James ríe levemente y apoya su frente en la de Regulus. -Créeme, te besaré hasta que se me caigan los labios- sonrie divertido, acariciando su cintura. -Preferiría que mi novio tenga labios- sonrie Regulus, divertido. Un extraño viento y el sonido de los caballos relinchando llama la atención de ambos jóvenes. James se levanta al sentir que algo no anda bien, Regulus le extiende la varita y se levanta.  -Detrás de mí- pide Potter apuntando al horizonte con su varita. Una sombra sale de entre las plantas. Primero creen que es un animal, hasta que se alza, humanoide, rígida y errática. -¿Melanie?- pregunta Regulus, con un nudo en la garganta. Su ex prometida le apunta con la varita- ¿qué...? La chica alza la varita, James aprieta su mano en su propia varita y lleva su brazo izquierdo hacia atrás apretando a Regulus contra su espalda. Su rostro está vacío de expresión y sus ojos están perdidos -Regulus Black. Debes volver a casa- repite ella. -Está bajo maldición o ya demente- murmura James entre dientes, retrocediendo lentamente mientras Regulus se queda helado y es arrastrado por él. -Imperius- confirma Regulus, sin dejar de mirarla- No está sola. -Ve al auto- exige James. -Debemos hacer al heredero- habla la adolescente de 14 años, buscando a Regulus con la mirada sin vida- su semen no funciona en mi, debes volver a casa. Prefiero estar contigo. Regulus siente que su estómago se revuelve. La chica lanza el primer hechizo, James se defiende. -Ve al auto- repite James- ahora, Regulus- exige en voz ronca. -No pienso dejarte solo- responde Black, temblando de miedo. -¡VETE REGULUS, HAZLO POR MI, JODER!- grita, mientras comienza el duelo- ¡ABRE EL MALETERO! El grito de James lo arranca de su parálisis. Regulus corre, se mete en el auto y busca en el maletero, no sabe qué porque no hay nada pero busca. Se encuentra, bajo sus dedos, con una tela.  "Una capa de invisibilidad" piensa, ha leído sobre eso. Regulus se coloca la capa sobre la cabeza y se acuesta en el asiento del copiloto. Regulus puede escuchar los hechizos pero no puede ver nada. Melanie lanza una maldición. James la bloquea, la desarma y la lanza contra un árbol con fuerza. No le importa herir a nadie, mientras Regulus esté bien y con él, podría hacer lo que sea.  Regulus levanta la cabeza al escuchar el golpe seco y el grito de dolor. La respiración del pelinegro se detiene cuando ve llegar a un amigo de su padre, un mago oscuro, el que se acercaba demasiado a él cuando era pequeño. Entra completamente en pánico al verlo. Tiene miedo, más miedo que antes, los recuerdos de ese asqueroso hombre llegan a su mente y se siente sucio, siente náuseas. Cuando vuelve un poco a la realidad ve a James. Ése hombre sí le ganará a James. Entra aún más en pánico y Regulus llora en silencio mientras tiembla con miedo y su respiración falla. El hombre ataca con un rayo verdoso que pasa rozando a James, un avada kedavra. "¡NO!" grita en su mente, pero no se puede mover, está en shock. "Estoy bien" tranquiliza la voz de James en su cabeza.  James logra bloquear el segundo hechizo, pero no el tercero. Un rayo impacta en su costado y lo lanza al suelo. Regulus sigue en shock, quiere correr a socorrerlo pero no puede, su cuerpo no responde. -¿Dónde estará ese niño?- la voz del horroroso hombre se escucha cada vez más cerca- ¡¿DONDE ESTÁS?!- grita enfadado- ¿no quieres la paleta de siempre?- ríe morbosamente. Regulus sabe a lo que se refiere, las nauceas se convierten en vómito, no puede moverse asi que vomita sobre su regazo mientras cierra los ojos con fuerza y llora desconsoladamente. El hombre lo busca por unos minutos más y luego se da por vencido- siempre logras escapar, pero te encontraré. Y tú, niña inservible, una sola tarea te dieron mis amigos. Te castigaremos- la toma del cabello y la arrastra fuera de la propiedad privada para desaparecer.  Un abrumador silencio rompe sus oídos, escucha los latidos de un corazón, ahora errante, que reconoce como el ritmo de James. Regulus reacciona y sale del auto corriendo, cae de rodillas a su lado y trata de despertarlo. Le ruega que despierte. -James, James- llama una y otra vez mientras llora. James está herido, la sangre brota de su costado mientras Regulus trata de despertarlo- James, cariño por favor despierta- ruega mientras cubre la herida con sus manos. Le murmura a su magia que lo abandone y vaya con James, que mantenga con vida a James. Regulus piensa que hacer. "Un patronus" recuerda una voz conocida en su cabeza "Si no lo haces, muere", una voz femenina que ya ha escuchado antes (no es su madre) y no puede reconocer. Regulus levanta la varita de James y recordando los momentos con James y el beso,  pronuncia un  -¡Expecto Patronum!- grita, mientras con su mano ensangrentada sostiene la varita de su James. El humo gris al que está acostumbrado es remplazado por una hermosa y brillante cierva, que corre en el aire alejándose. Regulus no se toma el tiempo de admirarlo, sus ojos vuelven a James y, mientras aprieta la herida con fuerza para que deje de sangrar, le vuele a pedir a su magia que abandone su cuerpo y proteja a James, que lo mantenga con vida hasta que la ayuda llegue.  Fleamont llega dos minutos después. [...] -Por favor, quiero ir- ruega Regulus, tratando de soltarse del agarre de Evan. -Nadie puede entrar a la cirugía, campeón- explica Fleamont. -Por favor- pide entre lágrimas, mirando a Alphard. Alphard acaricia su cabello y lo llama para que lo abrace. Evan lo suelta, Regulus mira a Alphard. -Sé qué sientes, cariño- murmura Alphard, abrazándolo- él está en las mejores manos del país- asegura- lo curarán y luego podrás estar con él cada segundo del día- sonrie de lado. Regulus sonrie triste solloza, abrazándose más fuerte a Alphard. -Yo lo amo- murmura- no quise que le pasara esto, soy un cobarde, debí ayudar. -No lo eres- habla Alphard acariciando su espalda- no vuelvas a decirte cobarde porque no lo eres. Tenías miedo y, conociendo a mi hijo, te pidió que te escondas. Solo seguiste órdenes. -Estoy preocupado por él, muy preocupado por él. Yo...- suspira y se aleja un poco- lo siento, usted no tendría que estarme consolando, yo soy el que pone en peligro a su hijo ¿y usted me tiene que consolar? que irrespetuoso de mi parte- mira sus manos- usted es su padre, debe estar sufriendo más que yo. -Sé que James se recuperará- habla Alphard, algo inseguro, deben mantenerse enteros para que Regulus y Sirius no caigan, a pesar que están muy preocupados por su hijo- y mi amor por mi hijo es totalmente diferente al tuyo por él- suspira- eh estado en tu lugar y sé lo que sientes. -Sirius, hijo, ¿quieres hablar?- pregunta Fleamont sentándose junto a Sirius.  Black niega con la cabeza mientras mira un punto muerto. Remus es el que llega a salvarlo. Sirius se sienta sobre Lupin y llora en silencio por horas. Regulus mira un punto muerto mientras Barty y Evan lo abrazan y luego tratan de distraerlo con alguna conversación random pero no, no pueden. La cabeza de Regulus está perdida en ese picnic romántico, la emoción del primer beso y su trágico final. Alphard y Fleamont lloran en silencio, sin poder evitarlo. [...] 1:30 AM -El actuar inmediato luego del accidente fue clave- habla el doctor, mirando a Fleamont y Alphard- la presión en la herida fue precisa y suave. La herida fue causada por magia negra, hechizos tan oscuros que a penas tenemos alguna investigación sobre ellos- explica el doctor- él está bien ahora, despertará cuando su cuerpo haya descansado. Logramos detener las ramificaciones de magia oscura, aunque hubiesen llegado a su corazón de no ser por la magia del amor.  Alphard y Fleamont preguntan algunas cosas más mientras Regulus acaricia la mano de James. -Nunca más te dejaré solo- habla Regulus- iré contigo a todos lados y no volveré a ser un cobarde- promete, abrazándose a James- lamento que haya pasado todo esto, es mi culpa, lo siento- se lamenta triste- no salimos ni por dos minutos que ya te herí ¿ahora entiendes de lo que hablo? -No creo que James piense eso- habla Sirius, que está sentado en una silla junto a la cama- y tampoco es tu culpa- asegura- espera ¿están saliendo?- pregunta, volviendo a enfocar su vista. Regulus se sonroja y esconde su cara en el brazo de James. -No te importa- responde Regulus. La atención de los hermanos Black se mueve hacia el sonido de la puerta, el doctor salió. -¿Y?- pregunta Regulus, sentándose. -Él despertará cuando su cuerpo haya descansado, debe recuperar magia. -Yo le daré la mía- habla Regulus, rápidamente. -De a poco, campeón- pide Fleamont- debes estar bien tu también. -No, no importa, quiero que James despierte. -Y si James despierta y estás decaído él se sentirá culpable por tener tu magia- habla Alphard- el doctor dijo que debemos esperar.  Regulus mira a James y suspira triste, volviendo a acostarse a su lado. -El médico dijo que actuaste muy bien- menciona Fleamont- la presión en la herida y la magia. -Era lo menos que podía hacer- responde el pelinegro, acomodando un mechón rebelde que se pega a la frente de James. [...] Lunes. -James despertará pronto- habla Alphard- ¿seguro que no quieres ir a la escuela? es tu primer día. -No- niega Regulus- yo me quedo aquí. Que los chicos vayan, yo me quedo. -Reg...- intenta Sirius- nosotros nos quedaremos, yo me quedaré y Alphard también. -Yo me quedo- corta la conversación, abrazándose a James. -Bien- acepta Alphard- pero debes comer un poco ¿sí? ayer casi no comiste y el sábado te saltaste la cena. -Y voto para que te bañes- habla Sirius- tu cabello comienza a verse grasoso, no querrás ser como Snape ¿no?. Regulus lo mira mal. -Yo me quedo aquí- repite Black, aferrándose a James. -¿Por qué no vas a traerle algo de ropa, cariño?- pide Alphard mirando a Sirius. Sirius suspira y asiente. -Si pa. -Y tráele sus productos para el cabello y para que se bañe- recuerda Alphard siguiéndolo. -Yo te comprendo- habla Remus, mirando a Regulus- cuando internaron a Sirius yo...- suspira- no podía irme, no quería irme. Y no me fui. -Yo no estaba todavía- murmura apenado, debió acompañar a su hermano en eso. -Está bien, yo lo cuidé bien- se sienta en los pies de la cama de James y lo mira- yo no salía con Sirius, nosotros... estábamos en ese limbo entre estar enamorados y tener miedo de no ser correspondidos o lastimar al otro- Regulus asiente, sabe que se siente- ¿quieres quedarte aquí?- pregunta Remus, Regulus asiente nuevamente- te quedas aquí entonces.  -La escuela no es tan importante como James- murmura el pelinegro, acariciando los nudillos de Potter. -No pensé estar vivo para escuchar eso- habla Barty, sentado en el sofá de la habitación. Evan lo codea. -Los chicos me traerán la tarea, volveré cuando James esté bien. Remus asiente. -Llámame si necesitan algo- pide Lupin mientras se levanta de la cama- hay rumores de que sabes hacer un patronus- sonrie amistosamente. Regulus sonrie de lado y asiente. -¡Ya me sale! no puedo esperar a que James despierte para mostrárselo. -¿Qué es?- pregunta Evan, curioso. -No lo vi a detalle, estaba ocupado con la herida de James- responde. Remus sonrie y revuelve el cabello de Regulus antes de salir de la habitación con su maletín de trabajo y su traje café. -Él es tan sexi- opina Barty. Regulus mira a Evan. -¿Qué? no puedo negarlo- sonrie el rubio, sacándole una sonrisa a Regulus. -¡Sonrió genuinamente!- aplauden sus amigos, emocionados. -Shh, estamos en un hospital. -La habitación es tan grande que dudo que lo que pase dentro se escuche fuera- habla Evan. -No lo digas- pide Regulus cuando Barty abre la boca- no es momento de esos chistes. Crouch bufa y se cruza de brazos. [...] Evan y Barty caminan delante del matrimonio Potter, quienes van de la mano. -Hola- saluda Fleamont con una sonrisa, todos lo saludan. -No sé como conoces tanta gente, odio la gente- repudia Alphard soltando su mano y aferrándose a su brazo. -Se llama ser sociable-sonrie Fleamont. Alphard lo mira mal- agradezco a Merlín que no lo seas, no me gusta compartir. Barty y Evan se detienen en seco al ver a la señora Rosier. Fleamont y Alphard los miran y luego hacia la mujer, que saluda a Pandora con un beso en la mejilla. -Todo estará bien- tranquiliza Fleamont- están con nosotros. -Sí, como James-escupe con frialdad Barty. -Cher- regaña Evan, apretando su mano. -Lo siento- murmura Crouch, apenado. Pandora sube al tren y la madre de los mellizos Rosier desaparece entre la multitud. -Hay que subir- habla Evan- ¿quieres subir? -Quiero a Regulus- pide Barty, con su tono caprichoso- nunca empecé un año sin él, es mi mejor amigo. -Él vendrá cuando James esté mejor- recuerda el rubio- empiezas el año conmigo- sonrie. Barty no quiere hacerlo sentir mal asi que asiente. No es que no ame a Evan, es que con Regulus tienen la costumbre de entrar juntos al tren y sentarse en el tercer vagón a la izquierda. -Manden un patronus cualquier cosa- pide Fleamont- ¿alguien quiere un abrazo?- propone. Evan y Barty niegan con la cabeza, es muy poca la gente a la que abrazan. -Mi patronus es un caballo- comenta Evan- el de Barty es una yegua. -Le hace honor al nombre- bromea Dorcas, apareciendo a su lado. -¡Cass!- exclama Barty, abrazando a su mejor amiga con su brazo sano -¿Cómo está mi bobo favorito?- sonrie la morena- -¡Mejor! aunque sigo con esta cosa en el brazo. ¿Recuerdas que te conté por carta...- comienza a charlar mientras se aleja, caminando al tren. -¿Tu como te sientes Evan?- vuelve a preguntar Alphard, por tercera vez en el día. -Muy bien señor, gracias- sonrie Rosier. -Si nos necesitan llámenos- pide Mont- y la chimenea está siempre abierta. -Quizá volvamos el fin de semana- sonrie el rubio- y seguiré con mi trabajo. -Tu despreocúpate por eso- pide Mont- el departamento estará libre a fin de año y luego comenzarás a trabajar ¿sí? descansa los fines de semana. -Gracias señor- agradece Evan, extendiéndole una mano. Alphard le extiende un sobre con dinero. -Un regalo, por si hay algo que quieran comprar o un té con amigos el viernes en la tarde. -No puedo aceptarlo, señor- se niega Rosier. -¿Le negarás algo a Alphard?- pregunta Fleamont, retrocediendo- suerte. Evan niega con la cabeza. -No es mi intención molestarlo señor pero... -Tómalo Evan, me acalambro el brazo- Alphard habla serio. El rubio toma el sobre. -Espero que James se recupere pronto- sonrie el rubio- si gustan avisarnos... estaré muy agradecido de leer la buena noticia. -Nosotros les avisaremos- asiente Fleamont y aprieta su hombro- cuídalo- pide mirando a Barty. Evan asiente. -Esta vez nada se me escapará. -Ahora tienes refuerzos- recuerda Mont- un patronus y estaré allí en un momento. El rubio asiente. -Muchas gracias por todo, en serio- agradece Rosier mirando a los Potter. -No hay de qué, son parte de la familia- sonrie Alphard. "Son parte de la familia" repite su cabeza y una sensación cálida se instala en su pecho. -Guardé condones en tu baúl- avisa Fleamont- cuídense, sé que es una edad complicada y las hormonas están muy activas- sonrie divertido, el rubio enrojece hasta las orejas, avergonzado. -No señor, yo... -No tengas verguenza, hijo- pide Mont, abrazándolo por los hombros- es normal tener relaciones, solo deben cuidarse. -¿Le diste condones sin lubricante?- pregunta Alphard, pensando en Barty. -Sabía que me olvidaba de algo- Fleamont se golpea la frente. -Les haremos llegar algunos botes de lubricante- asegura Alphard- espérenlos, es mejor aguantar un poco que luego terminar en la enfermería. Evan mira a Barty a lo lejos y sonrie. Luego asiente. -Gracias por todo, señores- agradece y los saluda antes de caminar hacia su novio con ambos baúles, uno en cada mano. Alphard y Fleamont observan al tren partir mientras mueven la mano. [...] Regulus se baña mientras Sirius y Libra pintan un dibujo de la princesa Jazmín. -Ese no es el tono de celeste- escucha a Lib mientras sale del baño, con una toalla en la cabeza. -Es el mismo celeste que usas tú. -Mentiroso oso- saca la lengua. -Mentirosa osa tu- resopla Sirius, siguiendo el juego. -Ya basta Sirius- pide Regulus, sentándose en la cama junto a James- perturbas la paz- toma su cepillo y su crema de peinar. La puerta suena. Sirius mira a Regulus. -¿Quién es?- pregunta el mayor de los hermanos Black. -Los abuelos- responde Dorea desde afuera. Libra se levanta del sillón y abre la puerta, emocionada- -¡Abuelos!- exclama la niña, abrazándolos.
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