Capítulo 37
11 de septiembre de 2025, 18:52
Para el final de la tarde, todos los omegas, a excepción de Kisaki estaban ubicados en una enorme habitación, en el décimo piso de la clínica; los médicos comprobado el reclamo y habían hecho que los alphas se turnaran para pasar tiempo con los omegas, mientras liberaban de a poco parte de sus feromonas para intentar relajarlos, para que cuando despertaran no estuvieran tan alterados.
Actualmente, Hanma, junto a Takeomi, Kakucho, Inui y Mitsuya estaban en la habitación con los omegas.
¿Quién hizo esto? _ interrogó Kazutora, mientras mirando a Shinichiro, la sala estaba ocupada por casi todos los miembros de la manada, que algunos estaban en la habitación con sus omega.
Mikey mantuvo la mirada en el suelo, pero presto atención.
Matsumoto Shu, el CEO de Ind. Matsu; uno de nuestros socios _ dijo Shinichiro.
Normalmente, no tratamos con él, ya que vive en extranjero, pero al parecer volvió a causa de la situación _ dijo Shinichiro.
Los chicos apretaron los puños.
Esto no se va a quedar así _ dijo Baji _ ellos van a pagar por esa estupidez _ dijo el pelinegro.
Claro que lo hará _ dijo Izana con la mirada fija en la enorme ventana frente a él.
Mikey se puso de pie, los chicos lo miraron y fruncieron el ceño, al ver que el rubio se dirigía hacia la puerta.
Ya vuelvo _ dijo el rubio _ voy a tomar algo de aire _ dijo, los demás fruncieron el ceño, un movimiento llamo la atención.
¿Izana? _ interrogó Mochi.
Este lugar me va a enloquecerme _ dijo el peliblanco saliendo siguiendo a su hermano menor, dejando atrás a un grupo confundido.
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Manjiro _ Mikey detuvo su caminata, si apartar la mirada de la puerta que daba la salida del hospital, Izana camino hasta estar a su lado.
Voy a matar a ese bastado, luego iré por la puta de su hija _ dijo Mikey _ no me detendrás _ Izana río.
Hermanito, no voy a detenerte _ Izana miro a su hermano menor con una sonrisa desquiciada _ haremos que ese cabrón se arrepienta de haber siquiera haberse atrevido a mirar a Kisaki _ dijo Izana, con esas palabras ambos hermanos dejaron el hospital.
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Media hora, eso fue lo que les tomó a los hermanos llegar al enorme edificio que era Ind. Matsu, el par entro y se dirigió directamente hacia el ascensor, marcando el último piso.
Buenos días, ¿en qué puedo ayudarlos? _ interrogó la omega frente al mostrador.
¿se encuentra Matsumoto Shu? _ interrogó Izana con una sonrisa.
En estos momento se encuentra algo ocupado, si quiere pue...
No es necesario _ dijo Mikey siguiendo de largo.
Oigan, señores, esperen; no pueden pasar _ el par ignoro a la omega, abrieron la puerta para ver a un hombre, hablando por teléfono, junto a una mujer que estaba sentada al lado de una joven pelinegra, la cual estaba siendo atendida por lo que parece ser un médico, mientras que un poco más atrás había un hombre en traje.
¿tú eres Shu Matsumoto? _ interrogó Izana _ ¿el hombre que ofreció a su hija esta mañana a nuestra manada? _ interrogó el peliblanco, el hombre frunció el ceño.
¿ustedes son de la manada se Shinichiro Sano? _ interrogó el par de hermanos, asintió.
¿Qué hacen aquí? _ interrogó la omega mayor
Creo que nuestro hermano se equivocó esta mañana en simplemente dejarlos ir _ dijo Izana cerrando con seguro la puerta.
Ustedes bastardos de mierda, son los culpable de que nuestros omegas, todos; este internados, inconsciente en una camilla _ dijo Mikey con la mirada oscura, mientras se acercaba hacia donde estaba el doctor y tomaba a la omega más joven de su cabello.
¡¡AAHH!! _ grito la mujer cuando Mikey quitó a su hija de sus brazos y la jalo hacia el suelo.
Tu... perra _ Mikey hizo que la omega lo mirara _ voy a matarte, por tu culpa Mis omegas no están bien _ dijo mientras fijaba su mirada en el balcón de la oficina _ acaso no te enseñaron los cabrones de tus padres a no meterse en relaciones ajenas _ Mikey camino mientras jalaba a la omega que pataleaba por la oficina.
¡¡oiga, no haga eso!! _ dijo tomando la mano de Mikey, el rubio frunció el ceño, luego de un rápido movimiento acertó un patada en la cien del médico, haciendo que este quedara inconsciente, la habitación quedo en silencio y Mikey miro a la omega a la que tenía agarrada del cabello, luego retomó su camino hacia el balcón.
Tal vez en tu próxima vida, seas más inteligente _ dijo Mikey saliendo al balcón.
¡¡¡NOOO!!! _ la mujer mayor corrió hacia Mikey con la intención de llegar al rubio, cuando sintió que era jalada del pelo, y lanzada por los aires, no paso mucho tiempo antes de que los golpes en la puerta se hicieran oír.
ABRAN LA PUERTA _ se oyó de la secretaria.
¡¡¡AAAAHHHH!!! _ el grito resonó, luego el llanto llenó la habitación cuando se dieron cuenta de que Mikey había lanzado a la omega menor hacia él vació.
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El grito de la menor hizo por fin que su padre reaccionara, no sabía que había pasado, un momento estaba despotricando la grosería de ese pequeño y lindo omega, y al siguiente, un par de alphas entraron y lo primero que hicieron fue matar a su hija lanzándola desde el piso sesenta de su edificio.
¡¡¡NOOOOO!!! _ el gruñido del alpha resonó, miro a Mikey lanzándose rápidamente hacia el menor con la intención de atacar; algo que no logró cuando fue recibido por un puño de lleno en su cara que lo mando al suelo, al mismo tiempo que escuchaba el grito de su esposa. El alpha volvió la mirada para ver a su esposa acostada, con el otro alpha peliblanco encima de ella golpeándola brutalmente, Shu paseo su vista en la oficina para ver al hombre que no hacía más que mirar al peliblanco que golpeaba a su esposa.
Ayúdala _ el beta que mirada al alpha volvió la mirada hacia Shu, luego dio un paso.
Da un solo paso y te reunirás con la perra allá abajo _ dijo Mikey llamando la atención del beta, quien se estremeció al ver los rojos ojos del rubio; dando a entender que era su alpha el que hablaba _ ¿Eres familiar? _ interrogó, el beta negó _ entonces no te metas o también te mataré _ dijo el rubio, el beta no dijo nada y retrocedió.
Mikey miro al alpha _ ¿sabes lo que tú y tus perra ocasionaron? _ Mikey se sentó sobre el alpha que estaba en el suelo y levanto el puño para luego golpear al alpha _ gracias a ustedes mis omegas _ un golpe _ todos cinco, están _ golpe _ inconscientes en una camilla; _ dos golpes y la sangre espesaba a salpicar _ mientras que un alpha de mi manada está sedado porque casi mata a la más joven de ellos por la mierda que ocasionaron _ dijo, los golpes de Manjiro era fuerte y certeros, al igual que los de Izana.
Mientras los alphas golpeaban a la pareja, ignoraban el alboroto fuera de la oficina.
En algún momento los gritos de la mujer, se detuvieron llamando la atención de Mikey y el beta, solo para ver a Izana manchado de sangre, un gran trozo de vidrio en las manos ahora, rojas y la sangre derramándose el pecho y el cuello de la omega.
Izana _ el peliblanco miro a su hermano, quien estiro la mano _ dame el vidrio _ dijo, los ojos del beta se abrieron, mientras que Izana puso el vidrio en manos de su hermano.
Justo en ese momento pasaron algunas cosas, primero, Mikey enterró el virio en el ojo del alpha debajo de él; segundo, el doctor despertó de la patada de Mikey; Tercero, la puerta serio dando paso a la policía y quinto, el grito de la secretaria al ver el resultado.
Todo al mismo tiempo.
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Mikey e Izana no se resistieron, de hecho, sonrieron cuando el doctor en la oficina confirmó la muerte de la pareja antes de ser sacados esposados de esta.
El par no agacho la mirada en todo el trayecto hacia la patrulla, tampoco la agacho cuando salieron del edificio para encontrar cámaras que se concentraron en ellos; el par de hermanos no respondió preguntas cuando los reconocieron y preguntaron qué paso, ellos solo siguieron caminando y subieron a la patrulla.