Reyes demonio

Habían algunas cosas que no les agradaban a Kouji de su nueva escuela, bueno, muchas cosas; primero están los chicos de su clase, todos habían sido malos desde el principio, y cuando se enteraron de quien era, algunos no le hablaban por miedos, y otros intentaron ser amigos solo para conseguir el agrado de su hermano; luego estaban los otros niños fuera de su clase, algunos hablaban de él, otros tenían miedo, luego estaban lo que lanzaban insultos de manera indirecta, y odiaban a su hermano. Pero también tenía cosas buenas, Sato, había descubierto que era un Santo, era amable y lo protegía; luego estaban Koishi, Naik, y Erika. Koishi y Naik, eran magos y siempre estaban preguntándole cosas, ya sea sobre su hermanos, los otros reyes demonios e incluso de Saki, luego estaba Erika, era una niña de cuarto grado, no hablaba mucho con ella, pero era amable, al igual que Sato era una santa, y ella tenía una intención clara, solo estaba el grupo por beneficio propio, todos lo sabían no era un secreto, y ese beneficio era… Hola, chicos _ saludo Kouji sentándose en la mesa donde estaban Sato, Koishi y Naik. Oye, enano _ saludo Naik _ ¿Cómo estas, te molestan los de tu clase? _ interrogó el chico Kouji negó. Todo esta normal _ dijo sentándose, luego miró en la mesa frunció el ceño. No… Buenos días _ Kouji fue interrumpido por una voz suave. Hola_ saludaron Naik y Koishi. Buenos eran hasta que llegaste _ dijo Sato, si Erika y Sato eran santos, amables con él y lo cuidaban; pero entre ellos era otro cuento, le chica miró al rubio. Cállate rubia _ dijo Mira quien habla pelo de menstruación mal teñido _ insulto el rubio, el rojizo pelo de la chica de diez años. Es natural idiota _ dijo la chica Si, aja, naturalmente teñido _ se burló Sato Ya van a pelear _ dijo Naik y luego miró a Kouji _ haz algo _ el pelinegro sonrió, y luego su sombra se oscureció un poco, de ella salió un Saki pequeño, dando un pequeño rugido llamando la atención de los chicos. La expresión de Erika cambió y sus ojos negros brillaron de felicidad. Saki-chan!! _ grito animada la niña antes de lanzarse sobre el demonio, si, esa era la razón por la que la pelirroja estaba con el grupo; su único interés era el demonio zorro, y no es que él se opusiera, le gustaba como la niña cepillaba su pelaje, en especial sus colas, incluso ha llegado al extremo de ponerle bonitos moños y darle dulces. Otra cosa que Kouji descubrió, fue que Saki puede comer comida, no fuera que lo necesitara, pero al demonio le gustaban los dulces que la niña le daba. Saki-chan, traje dangos y moños azules para hoy _ dijo poniendo una caja de dangos en la mesa. En serio todavía no entiendo como alguien tan intimidante como ese demonio se deja hacer eso por ella _ dijo Naik Los dulces _ dijeron Sato y Kouji al mismo tiempo. Se va a engordar _ dijo Koishi. Los chicos estuvieron de acuerdo, aunque no estaban seguros de di los demonio podían engordar; Kouji hizo una nota mental de preguntarse lo a su hermano. . . . El avance de las mazmorras fue algo sorprendente, pero también fue aterrador, faltaban tres horas para que las mazmorras se cerraran, cazadores habían empezado a retirarse, y no se puede decir que estaban insatisfecho, ya que los que estaba vivos a este punto había logrado pasar como mínimo siete niveles antes de irse, con algunas muestras de plantas, núcleos bastante buenos, incluso joyas y una que otra arma. Touman estaban felices y contentos, el grupo de Ámsterdam habían llegado hasta el nivel trece, y tuvieron una gran cantidad de muestras, mientras que, en Japón, llegaron al quince, luego Francia y los ángeles al catorce. Esto fue bastante divertido _ dijo Takemichi mirando como todos terminaban de abandonar las mazmorras mientras se ventilaba un poco con un abanico, por alguna razón habia pasado las últimas horas con calor, tanto que había tenido que levantarse una vez para darse un baño rápido Eso fue realmente aterrador _ dijo uno de los humanos que acompañaban a Takemichi, el demonio rio y suspiró; su cola estaba esparcida en el suelo y el se habia cambiado por ropa más liviana y fresca. Durante las dos semanas que pasaron tres juntos, los humanos vieron muchos aspectos del demonio, como el hecho de que se preocupaba mucho por los de Touman, pero aun así no intervino, lo vieron sonreír con algunos cazadores cuando pasaron el nivel y no solo eso, descubrieron que el demonio era bastante hablador, le gustaban la malteadas de fresa y las papas fritas, los humanos también tomaron más confianza y se abrieron más a Takemichi, entre los tres las dos semanas de encierro fueron bastante interesante, incluso hicieron algunas apuestas, bastantes divertidas. Solo espera a ver los otros niveles _ se burló Takemichi, los humanos temblaron un poco, el demonio rio y se pudo de pie, estaba planeando un buen baño ahora. _ Mikoto, Natsuo, ya pueden irse, fue divertido pasar el rato con ustedes, espero no les moleste que los llame la próxima vez _ dijo, los hombres sonrieron. Claros, fue divertido _ se rio Mikoto La próxima vez, traeré el pastel de chocolate que prepara mi esposa, es delicioso _ dijo Natsuo, Takemichi sonrió. En se casó chicos nos vemos la próxima, pueden dejar esto así otra persona lo limpiaran debería ir a casa y pasar tiempo con su familia y descansar _ los humanos asintieron, hicieron una reverencia a Takemichi y salieron del lugar. Eso fue divertido _ dijo Mikoto Además, tenemos una semana libre y más dinero, creo que llevaré a mi esposa a una cita elegante hoy _ dijo Natsuo _ ¿Qué harás con el dinero? _ interrogó. Pagar el semestre de estudio de mi hija, está en la preparatoria, pero presenta rasgos de ser una santa, y la verdad pago mucho en la escuela a la que va, ya que la mantiene alejada del instituto _ dijo Mikoto _ Gracias a este dinero puedo pagar su semestre y guardar el resto, mi esposa se sentirá aliviada, antes de tener este trabajo ella es la que cargaba con todo, y me estaba preocupando ya que descansa poco. Entonces con lo que sobre, sácala a un día relajante _ dijo Natsuo, Mikoto asintió. Takemichi frunció el ceño ante lo que estaban diciendo los humanos, pero se alegró de que estos nos estuvieran juzgándolo; le habían caído bien. . . . Las clases en el jardín eran bastante agradables, incluso cuando ya había pasado casi un mes desde la llegada de los dos demonios; los maestros no podían dejar de admirarlos, incluso descubrieron algunas cosas. Los descansos eran interesantes. Incluso con el pasar del tiempo y con el vínculo de Sama, Haru y los demonios se asentará, eso no evitó que estos fueran más apegados, o que durmieran en los brazos de los mayores. Los maestro también agradecieron un poco la presencia de los demonios, puede que fueran los familiares de los niños Hanagaki, pero siempre y cuando lo otros niños se comportaran y sus chicos no estuvieran en peligro, ellos mismo cuidaban un poco de los otros niños, como cuando han evitado las caída de algunos curiosos sobre los árboles o algún juego alto al atraparlos, aun cuando hay alguno que no pueden evitar. Los maestros aprendieron que Blake era bastante anticipado, y llevaba algunas pociones y ungüentos para aliviar raspones. Cuando el director le pregunto por qué lo llevaba. “Estoy a cargo de un niño imperativo de cuatro años, esos suelen meterse en muchos problemas” _ esa fue la respuesta del demonio lobo. No solo eso el lobo se aseguraba de que los niños comieran antes de reposar un momento y dejarlos correr a jugar, eso fue algo que sorprendió a los maestros. Snow, por otro lado, no era tan responsable como su compañero, este era más relajado y jugaba con los niños y corría por todo el jardín con ellos y Sama, aunque también se aseguraba que no se lastimaran. La maestro llegaron a un acuerdo de que los demonios cuidaban de los niños, solo porque estos agradaban a sus amos, y ellos estaban agradecido de esto, y la verdad eso también los calmaba, ya que siempre y cuando todo estuviera bien los demonios podrían incluso proteger a los niños de las grites si eso era necesario y aunque no lo dijeran les hacían el trabajo más fácil y podían relajarse más sin preocuparse de que los pequeños se lastimaran. Así que todo estaba bien, hasta esa mañana.