Las llaves que no utilice

El día de la Boda llego; un día soleado, despejado completamente, se podría decir que es un día muy lleno de alegría para una orquestada obra de teatro. Estaba sentada en una de las 2 mesas grandes que habían; con un vestido azul oscuro con un moño en el pelo y tacones negros; nuevamente estaba junto a mi hermano, mi padre y el señor medina; junto a la mesa de mi tía Pamela y mis primos, detrás mía están mis demás familiares; antes de que iniciara hable un rato con ellos, parece ser que pese a saber la verdad estaban entusiasmados por verse los unos a los otros, decían que era triste que la única oportunidad de verse era mediante una ceremonia forzada, pero que aun así, parecían alegres, no comprendo del todo su entusiasmo, pero supongo que mientras estén disfrutando de la compañía del otro no hay necesidad de sobre pensarlo; al otro lado de la sala note al resto de la familia de Salome, parecía ser que no estaban entusiasmados, o mejor dicho parecían indiferentes ante tan bella ceremonia y contrario a sus amigas, que pese a saber el transfundo de esta obra de teatro; parecían felices de poder verla con un vestido tan precioso Honestamente solo estaba esperando a que pasaran a la parte de la celebración, no estaba emocionada de ver esta actuación; en lo único que podía pensar en estos momentos era en el sabor del pastel; según me dijo mi padre era una combinación perfecta de 5 sabores, difícil de creer, ya que de por si la combinación de 2 sabores es difícil de lograr -Tuviste suerte con las amigas de Salome? -Con una de ellas; dijo que tendríamos una cite el próximo lunes para comer helados -No eres intolerante a la lactosa? -Si, pero solo tengo que llevar otra cosa para comer, tal vez lleve dulces de coco -Sabes por lo menos cocinarlo? -No, pero ¿qué tan difícil puede ser? -Yo te lo cocinare; tal vez eso me ayude a relajarme -Verónica, hijita ¿no quieres hacerle eso también a tu anciano padre? -Por supuesto, solo que claro los tuyos no tendrán azúcar -Excelente idea -…No puedo creer que mis hijos me crean tan blando como para no poder soportar el azúcar -No? A mí me parece algo lógica, ¿verdad Vero? -Si, lo más importante es tu salud papá -Oye vero, perdona no pude evitar escuchar, pero ya que vas a hacer dulce de coco que ¿te parecería hacerlo para el cumpleaños de tu padre? -Había olvidado que mi tío Arturo le encanta el dulce de coco -Esa es una gran idea, y tal vez podamos hacer un compartir de dulces- Mi… ¿Tío Mario?, no sé si se habrá cambiado el nombre por otro. Aún mantiene las ganas de hacer todo en grupo; aún recuerdo cuando nos llevaban al parque y por comprar pastel para mí y mi hermano, terminaban llevando pastel para todos. Ese es otro buen recuerdo de la niñez De no conocerlo a él y su novio, y me dejara llevar por sus bigote y barba bien peinado y recta; voz profunda y mirada seria estaría asustada; afortunadamente son en realidad personas muy amables y entusiastas Tome la iniciativa de planear la fiesta de mi padre junto; será una reunión saludable y familiar en un día de campo, creo que después de todo si vale la pena esforzarse. Todos parecían de acuerdo con mi idea; hasta que… -Por cierto; ¿Beatriz va a ir? – Mi prima Maria, siempre con el comentario que rompe el ambiente… -… -No crees que eso es algo impertinente? – El tío Oscar, como siempre poniéndola en su lugar -Por qué? Técnicamente aun es parte de la familia; es la madre de Vero y Benji- Aunque tiene un buen punto pudo ser más sutil preguntando -Bueno, realmente sería bueno ver a mamá; aunque ya la visité -Que?! ¡¡¿En qué momento visitaste a mamá?!!- Por qué?? De que estarían hablando -la semana pasada, fuimos a almorzar juntos- En qué momento hizo eso? Ya me puedo imaginar lo que dirá «deberías ser más como Benjamín, el sí me visita seguido» -Y porque no me dijiste? -Pensé que estarías ocupada pensando en tu divorcio y eso- de seguro se reían del hecho de que yo no la visito tan seguido Espero que mi madre no me lo eche en cara el día que la visite. -Dejemos eso para después muchachos; y bien tío Guillermo ¿qué opinas? – Maria sigue presionando -Ah, bueno si… Aunque… No sé… Podría preguntarle después de la ceremonia- Obviamente mi padre esta decaído por eso, su voz y expresión cambiaron radicalmente a una de tristeza -No te preocupes papá, yo voy a hablar con ella mañana; así que de paso le preguntare si quiere venir -Gracias vero, eres muy amable -Ven? No fue tan malo preguntar después de todo- Si no fuera tan entusiasta tal vez podría evitar ser tan imprudente -Solo tu serias tan imprudente de preguntar cosas como esas- Mi tía Pamela intentando controlar a los «niños» -No, está bien, digo ella y yo no estamos enojados- Aunque sea cierto, no tienen que preguntarle de esa manera -Verdad, ¿porque se divorciaron entonces? – Ahora mi tío Arturo está aprovechando el tema para indagar más en algo que pudo haberle preguntado a mi padre en privado -Otra vez? -Bueno… Es difícil de explicar. Verán… -Fue decisión de ella; el simplemente eligió lo que pensó que era mejor para ambos, y eso es todo lo que necesitan saber- La madre de Mauro parece ser la más sensata en esta familia -Como es que…? -Acaso soy la única que escucha a Guillermo? -Yo también lo escucho- Mi tío Arturo; pese a la edad sigue siendo el hermano más pequeño de mi padre -Tú lo único que escuchas son las cosas que la gente te repite 30 veces y eso no es por la edad, tú siempre has sido así -No es verdad, eso es porque desde que me caí de niño mientras jugaba con guille y con Laura tengo problemas de memorias y audición -Aún recuerdo eso, perdón Arturo…-Mi padre pese a los años aun es su hermano mayor Aun no entiendo su comportamiento, parece que se llevan bien aun después de no verse durante años; incluso Mauro hace eso. Tal vez debería aprender de ellos para mantener las relaciones -Bueno, bueno ya basta; escuchen que les parece esto; visitare a mi madre, intentare convencer para que venga y así todos podrán preguntarle a ella directamente; ¿les parece bien? – -Si!! Aunque esas palabras salieron de mi boca con confianza y seguridad, si mi madre fuera una persona más cerrada y reservada me sería imposible hacer que viniera; nunca supe como convencerla de hacer algo que ella no quisiera -Mi pequeño ángel, como siempre poniendo orden -Tía por favor, me avergüenza que me llames así a mis treinta -La edad no importa para el cariño que puedes tenerle a tu familia -Es verdad Verónica- El tío Oscar sabe de eso; él y mi tía Laura aun llama a mi padre el pequeño guille -Y tu papá, debes aprender que Verónica y yo no podemos a estar defendiéndote u ocultándote solo porque no quieras hablar de algo; debes aprender a decir que no -La culpa fue de la imprudente de Maria -No soy imprudente, solo me emociono demasiado -Deberías aprender a leer el ambiente, tal vez eso te ayude a ganarle en madurez a los hijos de la tía Paola, aunque sea una vez -Tú también Benjamín? No es justo eso es un dos contra uno- Tiene razón… Pero aun así… -La vida no es justa mi querida prima; por eso se tiene a la familia -Ohh!!, mira quien usa a la familia ahora para ganar una discusión; eso fue bajo Verónica-Lo siento tío Arturo, pero no podía dejar pasar la ocasión -Ya basta!! La boda está a punto de iniciar; discutiremos la pelea sobre la Madurez de Verónica y Maria después -… Está bien- Al final termino calmándose a la fuerza Las campanas sonaban, la alfombra se decoraba con tulipanes y los niños recorrían el salón saltando alegremente cantando una especie de opera; el padre veía todo con una clara cara de «si todo esto es falso, porque yo soy la única parte real?», pobre, no entiende que esta es solo una excusa de mi familia para reunirse y discutir felizmente; a decir verdad el que él sea real es el único capricho en todo esto… Quizás mi tía Pamela haya insistido en esto para que no se sintiera tan falso; o tal vez sea para que cuando le dijese a la abuela sobre esto en uno de sus destellos de lucidez el padre pudiera confirmarlo; de cualquier modo, creo que alguien podría encontrar hilarante esta escena; es como si en un juzgado un payazo fuera el juez, pero que sea el único que se toma enserio todo el juicio. Cuando todos guardaron silencio Salome y Mauro salieron juntos tomados del brazo sincronizados; el padre aún tenía esa mirada, incluso al hablar se sentía su poco entusiasmo. Las palabras que salían de ambos, aunque falsas tenían un trasfondo; no eran dos enamorados casándose, era más bien 2 mejores amigos de la infancia haciendo un tratado de amistad; incluso en sus votos no decían cosas «como amarte para toda la vida», decían «juro que, si necesito un favor, serás de las primeras 5 personas que se lo pida» o «espero que, si tienes a alguien más, me permitas ser la primera en saberlo y así aconsejarte sobre cómo era en su vergonzosa niñez»… Ese último claramente se refería a mí, no tenía que ser tan directo. Se dieron un beso esquimal una vez se dijeron los votos; en vez de arrojar el ramo fue repartiendo personalmente con una sonrisa flores a las 80 personas presentes, niños, mujeres y hombres, cuando me dio la mía además de sonreírme me vio como si fuera el motivo de su felicidad. El salón parecía animado; los niños en su mesa tranquilos, los adultos conversando alegremente entre sí. En medio de la ceremonia mientras todos decían los discursos que prepararon, no para la pareja, sino para celebrar que estaban todos juntos. Probé un poco del pastel de 5 sabores… Debo admitir que estaba delicioso, incluso mi familia me resultaba más agradable que de costumbre. Antes de terminar mi delicioso pastel y que todos habían terminado de hablar; me acerque a Salome para enseñarle la foto; ella se sorprendió y admitió la derrota; fue entonces que se me ocurrió una idea para su foto, algo para terminar esta obra de teatro en lo alto. Luego de contárselo al oído ella se levantó y tomo el micrófono y para hacerlo un anuncio ante todos -Escuchen todos!!! Verónica y yo hicimos una apuesta sobre nuestras -El reto era que si una de las dos perdía tendría que tomarse una foto vergonzosa de la otra!! -Adivinen qué? ¡¡Ella gano encontrando una foto en el álbum familiar!! -Es esta!!!- Todos parecían sorprendidos, pero a la vez se reían delo absurdo de la apuesta -Y saben qué?!!, tengo pensado cumplir mi palabra!! Es por eso por lo que necesitare de su ayuda Ella se acercó a la mesa de los niños para que la cubrieran de comida, incluso los adultos se acercaron y derramaron sus bebidas encima, incluso sus familiares; hasta yo le tire un pedazo de ese pastel de 5 sabores -Adelante! Tomen la foto -Espera -eh? -Yo también quiero salir -De veras? -No puedes verte como si hubiese sido tu idea verdad? -… -¡¡¡Vamos, tomen la foto ahora!!! Di queso -Queso!!! Espera, que me ocurre? ¿Porque no siento felicidad? Tengo una sonrisa en la cara, siento el cálido abrazo de Salome, sus manos sosteniendo las mías, todos a mi alrededor sonriendo y gozando el momento, pero… No percibo la felicidad de este momento; no encuentro la satisfacción por ganar la apuesta, en la risa de los niños, por pasar un momento agradable con mi familia, o ver a Salome tan feliz pese a perder, ni siquiera en el pastel que resulto ser delicioso me complacía, todos lo están disfrutando… ¿Que me ocurre? Este es un momento alegre, y no solo no lo estoy disfrutando. No lo estoy sintiendo… Estoy presente, no tengo ningún problema, entiendo el momento, pero simplemente no puedo palpar la felicidad… La veo, sé que está ahí, sé que debería estar feliz, pero aun así no penetra en mí; es como si mis emociones estuvieran atrapadas en un atrapasueños y no pudiesen salir y mezclarse con el ambiente para formar una sopa de felicidad; en cambio… No están aquí… No siento nada… Ni siquiera siento tristeza por no estar feliz.