Capítulo 1
13 de septiembre de 2025, 15:35
Era sábado por la mañana cuando la luz me despertó. No la del sol, sino la de un ser que flotaba en medio de mi cuarto, irradiando una calma antinatural. Decía ser un ángel. Me observó con una mirada que parecía saber más de mí que yo misma, como si pudiera ver mi alma y leerla a través de su luz. «Dios te ha otorgado un don… debes estar agradecida Ariadna Aranda», murmuró. «Controlarás la materia con la mente, como reflejo de la bondad que heredaste de tu padre, eres una de las personas elegidas para llevar a la humanidad a su destino final; cuando sea necesario sabrás que hacer… se esperan muchas cosas de ti y tus hermanos…se espera que seas alguien a la altura»
Pensé que era un sueño. Hasta que, al intentar incorporarme, me golpeé el meñique con el borde del escritorio. El dolor era real. Demasiado real.
Todo eso sonaba arbitrario. ¿Por qué yo? ¿Por qué no mi madre, que siempre fue más parecida a mi padre? ¿Qué tenía que ver la bondad con mover cosas con la mente? ¿Quién más fue elegido aparte de mí? Traté de no pensar demasiado en eso.
Todavía era de madrugada… aunque quien es ¿Aranda? Mi madre y abuela son Salmer… quizás se equivocó de persona o quizás sea un apellido que se perdió en el tiempo en el paso de las generaciones… sea como sea, le preguntare a la abuela después, ella debe tener 100 años de seguro sabe que es
Decidí probar si lo que aquel «ángel» había dicho era cierto. Empecé con algo pequeño. Me concentré todo lo que pude… y nada. Frustrada, miré a mi alrededor. Una silla de madera. Más simple, más familiar. Me enfoqué en ella. Esta vez, funcionó. Se deslizó unos centímetros sin que la tocara. Sentí un escalofrío recorrerme la espalda.
Después lo intenté con la almohada. No se movió. Entonces pensé en su composición: algodón, plumas, tela. De pronto, flotó unos centímetros. Lo entendí: debía conocer lo que intentaba manipular.
Al probar con la cama, me topé con un límite: solo podía mover lo que físicamente ya podría mover con mi cuerpo. Eso… tendría que entrenarlo.
El ruido del intento despertó a mi madre y a mi abuela, que subieron corriendo. Tuve que mostrarles lo que podía hacer. Levité la silla frente a sus ojos. Mi madre casi se desmaya. Cinco veces.
Cuando por fin dejaron de gritar, la abuela, siempre práctica, dijo: «Báñate. Desayunamos. Y luego hablamos de todo esto.»
Así que media hora después, las tres estábamos en el comedor, rodeadas de pan, café y un silencio brutal, parecía que estuviésemos enojadas con nosotras mismas…
—¿Y bien? —pregunté—. ¿Ahora qué?
-hmmm…-dijo mi abuela-que tal ser una heroína? Ese sería un buen uso de ellos… de hecho…
-no creo que que sea una buena idea, piénsalo detenidamente-dijo inmediatamente mi madre
-no creo, digo soy solo una niña-conteste- además no tengo esa mentalidad… digo entiendo que debo usar mis poderes para beneficio de los demás, pero no me veo haciéndolas a un lado a ustedes… a mis amigas o a mi vida en general, quiero vivir mi vida un poco… además está el régimen, no creo que una heroína quepa en este mundo, no ahora…
– ¡si! Tienes razón, es tu vida, eres libre de elegir… sin embargo debiste ser elegida por algo, tal vez no para ser una heroína…no ahora- contesto mi mamá con la cabeza algo agachada hasta que la alzo para decir entusiasmada- pero tal vez algún día estés lista para esa misión, cualquiera que sea… mientras tanto, procura no abusar de tus poderes, no sé si debas ocultarlos del todo… pero si deberías dejarla en un círculo de confianza, nosotras y uno que otro amigo.
-De acuerdo… supongo que tienes razón… pero mientras eso llega seguiré con mi niñez-conteste-ahora, la pregunta del millón ¿debería develar mis poderes a los demás?
-yo digo que no, digo según lo que nos contaste ahí más como tú, no sabemos quiénes o donde estén, pero eso no asegura que estén cerca. Además, nadie dice que ese ángel no te haya mentido o que haya malas personas por ahí afuera con dones como el tuyo… o peor que seas la única con poderes en este régimen mundial y que quieran usarte como una herramienta en contra de tu voluntad.
-así es querida
-ya bastante hemos tenido todo este tiempo con su propaganda y discursos vacíos, como para que te les unas a ellos…- sorprendentemente mi abuela se tomó esto muy enserio y toda su reacción aparte de lógica parecía una experiencia… tal vez suya o tal vez de alguien más cercano a ella…-yo digo que los ocultes hasta que alguien más se muestre, así no estarás sola y veremos que hacemos después de eso.
-tu abuela tiene razón… además de eso hemos estado en paz durante años, no veo porque deberías de intervenir en una pelea que no existe aún…- dijo mi madre con energía- es mejor esperar, tal vez esto no sea fácil, pero es lo más seguro para ti de momento además el régimen seguramente quiera saber de ti y entonces sí que tendrás que hacer una elección crucial en tu vida-
-de acuerdo, entonces con todas de acuerdo, mientras vemos que sucede, les importa si practico un poco, digo, aunque no vaya a usarlos en público, debería estar preparada para cualquier cosa-argumente inocentemente-además que quiero ver mis límites y capacidades
-de acuerdo, nosotras te ayudaremos en lo que nos sea posible querida, solo no rompas la casa-dijo mi abuela con una sonrisa-
-mmmm, tal vez deberías leer las historias que hay en los comics, películas, series y demás para inspirarte-argumento mi madre
-De acuerdo, de acuerdo… solo… déjenme pensarlo en mi cuarto, debo pensar más cosas… las veré de nuevo en el almuerzo, ¿bien?
Luego de toda esa exposición volví a la cama y decidí descansar para poder procesar todo esto. Es demasiado, me pregunto que pasara de aquí en adelante; debo buscar más información sobre ese ángel, después de almorzar preguntare más acerca de lo que saben. También olvide preguntar por Aranda, porque el ángel me llamo así? Mire como lo mire llamarme por un apellido que no es el mío, así sea uno perdido en mi familia es algo extraño.
Es más, aceptaron esto demasiado rápido es algo que debo preguntar después; eso sin mencionar que debo practicar, no me gustaría ser descubierta antes de tiempo, me pregunto si debería decirles a mis amigos, quizás no, pero sería muy complicado ocultarlo. Lo peor no sería eso, seria, que voy a hacer cuando este en público y necesite usar mi don para defenderme;
Como reaccionaria el régimen; digo de momento nos ha llevado a una paz mundial durante unos 200 años y no ha habido muchos problemas, pero, no tolerar lo que no conocen, espero que pueda lidiar con esto a su debido tiempo; solo espero que no decidir entre mi familia y el mundo, elegiría a mi familia, pero no sé si podría asegurar que le gane al mundo sin perjudicar a mi familia; lo que sí es seguro es que no se los pondría fácil.
Quizás deba pensar en que si hay gente como yo sería bueno tener aliados, no creo que sea difícil encontrar a alguien que elija entre el mundo y su familia.
Ahora que lo pienso esto no hizo más que ponerme los nervios de punta, mientras más lo pienso, más miedo y más preocupaciones aparecen, ojalá solo este exagerando. Debo preguntar más, la abuela, que bueno que les dije.
Aunque bueno tampoco es como si tuviera más opciones. Digo ¿Quién no se daría cuenta que vive con alguien con superpoderes? Tendrías que ser muy descuidado o estar desligado de la realidad…Bueno, de momento estoy agradecida porque ellas se lo hayan tomado bien… aunque es muy raro… es bueno saber que cuento con ellas.