Marta y Fina

Ante el mensaje de auxilio de Cata,muy princesa,muy en su estilo,Elsa entró en acción,en realidad se daba cuenta de que le comía a Cata en la mano. Abrió varias puertas del Laberinto,hasta que encontró al colega adecuado. -Mario tío préstame tu BMX. Mario era otro pijo reciclado,el padre era bancario y se le notaba. -¿A cambio de cuántos canutos? Elsa se vacío los bolsillos de los jeans negros,y literalmente se los echó encima. -¿Para qué la quieres princesita? A Elsa le jodía un montón,que la llamarán así a cuenta de su pasado pijo ,pero que le iba a hacer. No valía la pena contestar a la provocación. Elsa fue a lo positivo. -A darme una vuelta por los barrios pijos. -Han suspendido la rave. -No jodas dijo Mario,eso ha sido la Ayuso. -No sé quién ha sido,pero hay colegas heridos en el Doce de Octubre,podías ir a verlos. -Y tú de turismo. Elsa no quería que nadie supiera nada de su crush con la pija. -Anda dejámela,que tenemos pique la semana que viene en el Templo de Debod,skates contra BMX,nos tenemos que cambiar los trastos,va a ver más hostias,contra el suelo quiero decir. -La tienes aparcada justo a la salida,pirada. -Te traeré chupa chups,niñato. En el general se respiraba un buen rollo en El Laberinto,todos estaban en el mismo barco. Elsa se apresuró a montar en la diminuta bicicleta,y enfiló hacia el Barrio de Salamanca. -Estas jodidas BMX van muy bien para los trucos,pero para ir deprisa van desmadradas y no avanzas. Tras mucho esfuerzo,se plantó delante del chalet de Cata. Elsa se sabía los sospechosos habituales de las viviendas pijas,vallas,perros y alarmas. Aparcó la bici entre unos matorrales,lanzó una manta que llevaba preparada sobre la valla,escaló y se sentó a horcajadas con la gruesa lana amortiguando los pinchos. Varios perros se acercaron,en este casó les lanzó comida basura,pero se la empezaron a zampara satisfechos. Las alarmas en los chalets pijos eran para fardar delante de los amigos,siempre estaban desconectadas Saltó con cuidado al mullido césped,y entonces la vio. Una lucecita en una ventana rodeada de flores:rosas,pensamientos y nomeolvides,como en toda película americana que se precie,un árbol crecía debajo de la ventana,se puso unos guantes de goma y pies de gato y comenzó a trepar. Cuando llegó a la altura de la ventana el alma se la calló a los pies,Cata hecha una bolita en la silla de estudiar llorando,y una bandeja con leche y galletas María sin tocar. Dio unos golpecitos en el cristal,y Cata levantó la mirada,su cara se iluminó,el sol después de la tormenta,abrió la ventana de para en par,y la besó.Elsa casi se cae de la impresión. En seguida se puso en su rol de malota. -Nos vamos a pirar de aquí pero ya,princesita,agárrate a mí y no tengas miedo. -Yo nunca tengo miedo,dijo Cata con firmeza. Tengo que preparar una mochila con ropa y... -No tienes que preparar nada,te vienes al Laberinto,allí estarás segura, y tenemos de todo. Descendieron por el chopo con cuidado,y tocaron suelo. Los doberman se entretenían con las French fries,alcanzaron le verja,y escalaron,Elsa se maravilló de la destreza de Cata. Llegaron a la BMX. -Anda Cata,súbete al eje de la rueda trasera. En seguida salieron velozmente. -Elsa,dijo Cata. -¿Qué pasa pija? -Pasa que tengo la regla y necesito compresas. -La jodimos. -¿Y dónde encontramos una farmacia de guardia? Cata sacó su móvil,con el chinito rosa colgando -Calle Narváez 58 -Corre tía que están a punto de cerrar Una princesita,con la regla a pie cambiado,mandona y marisabidilla. ¡Estoy bien jodida! En ese momento se dio cuenta de que estaba enamorada de Cata de pies a cabeza,y que no había vuelta atrás.