ID de la obra: 1292

Oveja Negra

Het
PG-13
En progreso
2
Emparejamientos y personajes:
Tamaño:
planificada Maxi, escritos 60 páginas, 30.432 palabras, 5 capítulos
Descripción:
Notas:
Publicando en otros sitios web:
Prohibido en cualquier forma
Compartir:
2 Me gusta 0 Comentarios 0 Para la colección Descargar

Capítulo 2: Oveja Negra

Ajustes de texto
Misato Katsuragi no era una mujer feliz, y así lo demostraba su forma de conducir que era bastante más peligrosa de lo que por sí ya era normalmente. Pasaba semáforos en algunas ocasiones con luz roja, sin mostrar ninguna deferencia por los escasos peatones o automóviles que circulaban por las calles, a tan altas horas de la madrugada. “Maldito Kaji” masculló la morena, tomando una curva con un rechinido de neumáticos. Pisó el embrague y pasó el cambio, acelerando aún más su deportivo, emprendiendo rumbo a un sector no muy recomendable de la ciudad fortaleza. Ella no había tenido un buen día. Para empezar, por culpa del trabajo hacía muchas horas que no pegaba un ojo, y esa mañana en vez de ir casa a dormir, tuvo que aguantar una de las tradicionales “reuniones/regaño” del Comandante Ikari, luego soportar durante horas las estupideces de los Comandantes de las Fuerzas de Defensa Estratégicas de Tokio-3, en su reunión mensual de coordinación. Luego de eso tuvo que escuchar a Ritsuko parloteando algo sobre los factores de regeneración de los EVA y que al parecer Asuka había bajado su índice de sincronización porque se le juntó un resfriado con su periodo, o algo por el estilo; y cuando al fin creía que podía tomar un respiro, tuvo que revisar una montaña de quejas de la comunidad por las actividades de los EVA, que más que proteger, en realidad parecían querer destruir la ciudad. Bueno, a esas alturas siendo ya las 3:00 de la madrugada mandó todo al demonio y se fue a su departamento a tomar un par de cervezas y dormir, pero nada más entrar recibió una llamada urgente de Kaji; y aquí estaba ahora, cansada y muerta de sueño yendo directo a la boca del lobo, y sin haber tomado una miserable cerveza aun. “Maldito Kaji” masculló por enésima vez, llegando a la dirección que le había indicado el hombre de la coleta. Estacionó su automóvil como solo ella sabía hacerlo, frente a un bar de mala muerte situado en lo que parecía ser el peor sector de la ciudad. Nada más bajar del automóvil unos sujetos que estaban fuera del bar conversando, al verla, prácticamente la violaron con la vista. Misato estrechó los ojos, cerró la puerta del deportivo de un fuerte golpe y caminó hacia la entrada del bar mientras los sujetos comenzaron a acercarse a ella con sonrisas lascivas en el rostro. No llegaron muy lejos. — Piérdanse — escupió Misato, sacando suSIG-Sauer P220 dela pistolera bajo su brazo izquierdo, apuntado a la cabeza del más próximo de los sujetos, los cuales echaron a correr despavoridos en todas direcciones, más por la cara de furia de Misato que por el arma que los apuntaba. La mujer guardó su arma y abrió las puertas de par en par, parándose ahí como si fuera un vaquero del viejo oeste norteamericano ingresando a una cantina. Analizó el lugar con la mirada y no era muy distinto de lo que se había imaginado al verlo desde afuera. Era un bar de mala muerte en toda la regla, con escasa gente adentro, imaginaba que por las altas horas de la madrugada. Misato entró y caminó entre las mesas buscando al causante de que estuviera en ese lugar y lo encontró en una mesa al fondo del local, algo apartada del resto en un lugar no muy iluminado. Kaji le hizo una seña para llamar su atención y ella fue hasta donde estaba el hombre, echó atrás una silla junto a él y se sentó con evidente fastidio y un buen par de ojeras. Casi como por acto de magia un mesero se materializó y puso una botella de cerveza y un vaso frente a la mujer. Esta pasó del vaso y se empinó la cerveza y la bebió de un trago ante el mesero, que levantó una ceja al ver como la mujer dio de baja la botella en cosas de segundos para dejarla luego totalmente vacía, con un fuerte golpe en la mesa. — Traiga dos más — señaló el hombre de la coleta al mesero, que asintió con la cabeza y retiró la botella vacía, yendo prontamente por lo que le habían solicitado. Kaji miró a la mujer frente a él, que no parecía estar en uno de sus mejores momentos y no pudo evitar hacer un comentario con una sonrisa burlesca — ¿Tuviste un mal día? — ¡Vete a la mierda! — bufó Misato — Van a ser las 4:00 de la madrugada y para tu información, no he dormido en 24 horas. Recién había llegado al departamento y estaba por acostarme cuando me llamaste y me hiciste conducir por media ciudad para venir a este antro. Más te vale que lo que tengas que decir sea realmente importante. — Lo es — respondió el hombre con repentina seriedad, lo que hizo que ella levantara una ceja. El mesero llegó con las dos cervezas solicitadas y las dejó sobre la mesa, mientrasKaji apagó el cigarrillo que fumaba en un cenicero, haciendo tiempo hasta que el hombre se retiró. El hombre de la coleta paseó la vista por el lugar, cerciorándose de que nadie les estuviera prestando atención y pudiera hablar con tranquilidad. Esta actitud de por sí ya tenía un tanto intrigada a la mujer, la cual comenzaba a pensar que efectivamente Kaji tenía algo realmente importante que decir. Entonces este se acerca un poco a ella para hablar casi en un susurro. — ¿Has oído hablar de “MAJESTIC 12”? Misato miró al hombre frente a ella con la sorpresa pintada en el rostro, pero no pasó mucho para que esta expresión fuera reemplazada por enojo; no, más bien furia. La mujer se levantó de la mesa apenas conteniendo las ganas se plantarle un puñetazo en la cara a ese idiota, por haberla hecho atravesar medio Tokio-3 para semejante estupidez. Estaba por largarse cuando él la sujetó de un brazo. — ¿A dónde vas? — preguntó kaji, sorprendido por la reacción de la mujer. — ¡¡A casa!! — respondió Misato, fastidiada — Eres un verdadero idiota. No puedo creer que me hayas hecho venir a este lugar en mitad de la noche para esto. He tenido un día de mierda. Todo lo que quiero es dormir y tú ahora me sales con esta estupidez. — Por favor, siéntate y escucha lo que tengo que decir — dijo Kaji, tratando de calmarla. — No, escúchame tú. Yo no... — ¡¡Siéntate!! — dijo el hombre entre dientes, mirando a Misato con una seriedad y fuerza que la mujer nunca antes había visto. Esta actitud del hombre ante ella, la hizo recuperar un poco la calma y volver a sentarse; aunque renuentemente. Al igual que lo hiciera la mujer momentos antes, Kaji pasó del vaso y echó un trago a su cerveza directo de la botella. Volvió a pasear la vista por el lugar para cerciorarse que no hubieran llamado demasiado la atención de los pocos comensales del local. Por fortuna estaban todos metidos en sus propios asuntos. Hecho esto, volvió su mirada a la mujer, que ahora parecía haberse calmado un poco, por lo que decidió retomar la conversación. — Bien, ahora que ya estás un poco más calmada, dime: ¿Qué es lo que sabes de “Majestic 12”? Misato bufó por lo bajo ante esa pregunta y rodó los ojos en evidente señal de fastidio. ¿Kaji realmente pretendía seguir con esta idiotez? Al devolver la mirada al hombre, pudo ver su rostro de total seriedad, esperando una respuesta igualmente sería. Exhaló con cansancio al percatarse de que está locura parecía ir realmente en serio. Miró fijamente al hombre frente a ella por un momento, antes de contestar con resignación. — “Majestic 12”, también conocida como “MJ-12”; es una organización secreta de Estados Unidos que secreó en 1947 luego de la caída del OVNI de Roswell, en Nuevo México. Supuestamente, con el correr de los años se transformó en algo más que un simple consejo encargado del asunto OVNI. Se postula que en la actualidad el MJ-12 es una especie de gobierno en las sombras con su propia agenda. Claro, si tú realmente crees todas esas idioteces y teorías locas conspirativas con enanitos verdes provenientes del espacio exterior. Majestic 12 es un mito. Un invento de Nerds fanáticos de los OVNI, que no tienen nada mejor que hacer con sus vidas — finalizó Misato, aún molesta, mirando acusadoramente a Kaji con ojos estrechos. — ¿Y si te dijera que el Majestic 12 no es un mito? — apuntó él, con bastante seriedad. Ciertamente esto no es lo que Misato esperaba escuchar del hombre sentado frente a ella. ¿Majestic 12 no era un mito? Eso no podía ser verdad; ¿o sí? La pregunta estaba implícita en el rostro de Misato, a lo que Kaji asintió y se acercó un poco antes de hablar. — Majestic 12 es tan real como NERV — señaló el hombre, haciendo que Misato levantara una ceja en sorpresa. Kaji continuó — Los primeros días de Julio de 1947, un objeto volador con forma de disco, se estrelló en un rancho en Nuevo México. El día 9 de Julio el periódico local informaba en su titular que Las Fuerzas Aéreas habían capturado un platillo volante en un rancho de la región de Roswell. El día siguiente los mismos militares, que habían afirmado que habían recuperado los restos de una nave extraterrestre, se retractaron, diciendo que se trataba de un globo meteorológico. Mostraron unas fotografías bastante chapuceras para probar la nueva historia. — Eso todo el mundo lo sabe. Puedes encontrar cientos de reportajes y videos en internet contando esa historia; y bastante mejor que tú — reclamó impaciente Misato. — Es necesario dejar claro ese punto para lo que sigue — señaló Kaji con un poco de molestia en la voz por la interrupción, antes de continuar — Contra todo lo que puedas creer, el incidente de Roswell fue real. Los militares efectivamente recuperaron los restos de una nave alienígena, junto con los cuerpos sin vida de varias “Entidades Biológicas Extraterrestre”. Cuando fue informado de todo esto, el Presidente Harry Truman ordenó a su Ministro de Defensa, James Forrestal, la creación de un comité especial para que se encargara de la situación. Así, el 24 de Septiembre de 1947, se dio marcha a la operación “Majestic 12”. — Nuevamente, información que cualquiera que no tenga nada mejor que hacer puede encontrar en internet — apuntó Misato. — Déjame terminar y luego has tus preguntas — dijo Kaji entre dientes con algo de molestia. Misato respiró pesadamente y echaba un buen trago a su cerveza. Necesitaba calmarse para no salir inmediatamente de ese lugar; no sin antes golpear al idiota que tenía al frente. — Está bien. Continúa — dijo ella, no muy convencida. — Como iba diciendo, el Majestic 12, que estaba conformado por 12 hombres, entre militares y hombres de ciencia, pasó a controlar todo lo referente al fenómeno OVNI, y a poco andar su trabajo se hizo bastante arduo. En los años que siguieron al incidente de Roswell, hubieron decenas avistamientos, encuentros, caídas y recuperaciones de naves extraterrestres, hasta que finalmente lograron contactar con una raza alienígena a medidos de los años 50. Esta raza, de una contextura muy similar a la nuestra, no quería hacer un intercambio de tecnología con la raza humana, ya que ellos afirmaban que usaríamos ese conocimiento para destruirnos. En cambio, ellos abogaban por el desarme nuclear y nos alentaban a que aprendiéramos a vivir en armonía cuidando nuestro planeta. Obviamente este mensaje en extremo pacifista no le cayó muy viene a la gente del Majestic 12, y rechazaron cualquier tipo de acuerdo con ellos. Fue en ese momento que apareció otra raza alienígena: “Los Grises”. — De acuerdo Agente Mulder. Suficiente de teorías conspirativas por hoy — dijo la mujer, bastante molesta, interrumpiendo al hombre de la coleta en medio de su exposición, ya que no veía a donde iba con todo eso. Misato estaba a punto de largarse de ese lugar, pero de pronto hizo un repentino silencio, inspirando profundamente en resignación, antes de añadir. — ¿Sabes? Sé que todo esto no es más que una soberana estupidez, pero haré caso omiso a las enormes ganas que tengo golpearte y largarme de este mugroso antro, y te seguiré el juego por un momento. Ahora, supongamos que lo que me estás diciendo es verdad. Que Majestic 12 y los hombrecitos grises de verdad existen. ¿Por qué me cuentas esto a mí? — lo cuestionó ella con una mirada estrecha. — ¿No crees nada de lo que he dicho, verdad? — preguntó Kaji, mirando seriamente a la mujer. — ¿Cómo podría? Todo esto que me cuentas parece sacado del argumento de un mal capítulo de “The X-Files”. Estás tratando de convencerme de que esta locura del Majestic 12 es real, tal como lo hacía Mulder con la Agente Scully con sus teorías locas — estalló Misato. — Y si mal no recuerdas, luego Mulder demostraba que tenía la razón, haciendo que Scully se tragara sus palabras — añadió Kaji, haciendo que Misato estrechara los ojos. — Kaji, estoy cansada y con sueño. Si realmente no me explicas de una vez a qué viene toda esta broma del Majestic-12, me voy a retirar de aquí y no te voy a hablar en un mes — dijo Misato en forma amenazante. — Se nota que estás cansada. Si estuvieras en tus cinco sentidos ya habrías hecho la conexión. — ¡¿Cuál conexión?! — preguntó Misato irritada, ya harta de todo esto — ¿Si esa organización realmente existe, qué rayos tiene que ver con NERV? — Los Ángeles — fue la respuesta de Kaji, como si fuera lo más obvio del mundo. — ¿Los Ángeles? — preguntó Misato de vuelta, genuinamente sorprendida. — Piénsalo solo por un momento; hemos estado peleando contra esos Ángeles por cerca de un año. ¿No te has preguntado realmente qué son esas cosas? ¿Por qué vienen a la tierra? Y más importante que eso; ¿de dónde vienen? Solo en ese momento, Misato pareció hacer la conexión que Kaji había mencionado. Las palabras dichas por su ex–amante, comenzaban a resonar en su mente con un cariz muy distinto. Por primera vez desde había llegado a ese bar de mala muerte, la Directora de Operaciones de NERV sintió que esa charla aparentemente sin sentido, sonaba menos disparatada y absurda. Es más, ahora parecía tener un peso bastante grande. — Kaji… tú… — comenzó Misato, pero fue interrumpida por el hombre frente a ella. — Déjame terminar lo que tengo que decir y lo podrás comprender mejor. Misato miró al hombre con seriedad y asintió, prestando real atención por primera vez en la noche. — Como iba diciendo; a mediados de los años 50, y luego de rechazar el primer contacto, Majestic 12 hizo contacto con otra raza alienígena: Los Grises. Estos, a diferencia de la raza anterior, no opusieron grandes problemas para compartirnos su tecnología. Obviamente, Majestic 12 firmó un tratado con ellos, obteniendo tecnología a cambio de experimentación controlada con humanos, que Los Grises realizaban en una instalación subterránea en la base de “Dulce” en Nuevo México. Con el correr de los años, el Majestic 12 fue ganando mucho poder, hasta convertirse en un gobierno en las sombras, mucho más poderoso que el país al que supuestamente sirven. Es así, como fruto del tratado con Los Grises; que tuvo varios altibajos, este grupo finalmente pudo crear una Agenda Secreta; un plan que han estado madurando desde el siglopasado, para asegurarse la dominación mundial y un lugar de privilegio en lo que sea que estén tramando con sus amigos alienígenas. Y así siguieron las cosas hasta el día que ocurrió el Segundo Impacto. Eso lo cambió todo. Kaji hizo una pausa para tomar un trago de cerveza, ya que al parecer se le había secado la garganta. Por su parte Misato agradeció el alto, ya que eso le daba algo de tiempo para digerir toda esa información. Luego de que el hombre de la coleta dejara a un lado la cerveza, la mujer lo miró con impaciencia y este continuó, no sin antes darle una seria mirada a la mujer. — Debes entender Misato, que no estamos solos en el universo. Hay otras formas de vida mucho más avanzadas que nosotros allá afuera. Una de ellas ya tiene un trato bastante beneficioso con un grupo muy poderoso de este planeta, y obviamente no vieron con muy buenos ojos la intromisión de una nueva raza alienígena, que apareció en el tablero de juego causando el Segundo Impacto. Misato abrió los ojos en sorpresa ante esa declaración del hombre de la coleta. Eso no podía ser verdad. Estaba por decir algo, pero Kaji se le adelantó. — Si, lo entendiste bien — afirmó Kaji — Me refiero a la raza del alienígena que NERV mantiene encerrado en el Dogma Terminal. A la criatura que NERV usó para experimentar, mezclando su ADN con ADN humano, creando un hibrido humano/extraterrestre que nosotros conocemos como EVANGELION. Ante esto, solo cabe preguntarnos: ¿Cómo crees que el Majectic 12 se tomó todo esto? Misato sintió que se le paraban los pelos de la nuca. Esa afirmación de Kaji era bastante potente. Una afirmación que remecía todo en lo que ella creía. Una afirmación que cambiaba su percepción de mundo, y de NERV para siempre. De ser verdad, eso explicaría una de las grandes interrogantes que rondaban su mente desde el inicio: ¿Qué eran realmente los EVANGELION? — Como decía — continuó Kaji — Los Grises no son la única raza alienígena en la galaxia. Hay otras razas, y una de ellas hizo contacto con nosotros en los albores de la humanidad. Hay pruebas de esto a lo largo de toda nuestra historia. Una raza a la que se conoce como “Los Ancestrales”, que de paso, eran antiguos enemigos de Los Grises. Obviamente esto cayó en el radar del Majestic 12, pero todo apuntaba a que esta raza había terminado su contacto con la tierra hace milenios, por lo que lo dejaron estar. Pero en sigilo, SEELE financiaba expediciones que se abocaron a buscar evidencias de lo contrario, y cuando las encontraron, montaron una entidad para investigarlas. Así fue como nació el Instituto GEHIRN. Ellos financiaron la expedición de tu padre, que dio con Adán, el primer hombre; que en realidad era un Ancestral que había permanecido dormido en la Antártica. ¿Qué hacia este ser ahí? No lo sé. Pero tu padre lo descubrió y SEELE decidió usarlo para sus planes, dejando todo en manos de la organización que ellos crearon para actuar como su brazo operativo y tapadera: NERV. — ¿Me quieres decir que lo que mi padre descubrió en la Antártica, era un maldito extraterrestre? — preguntó una descompuesta Misato. — Así es — afirmó el hombre de la coleta, que al ver la cara descompuesta de su acompañante, sacó un paquete de cigarrillos, ofreciéndole uno. Esta negó con la cabeza. El prendió su cigarrillo, le dio una calada, y miró a la mujer fijamente antes de volver a hablar. — Para ese momento SEELE ya había ganado bastante poder. Aun así, al Majestic 12 no le hubiera sido muy complicado deshacerse de ellos con ayuda de sus amigos Los Grises, que estarían más que encantados de acabar con todo lo que estuviera relacionado con sus antiguos enemigos. Pero las cosas no eran tan simples. Pese a su alcance, Majestic 12 no tenía realmente claro cuáles eran las intenciones de SEELE. El cómo y por qué usarían al Ancestral. Es por eso que decidieron montar una estrategia para tener vigilado a SEELE, y sobre todo, a NERV.

***

Misato hizo un alto a sus recuerdos de esa noche y se puso de pie, incapaz de quedarse ahí sentada en ese momento. Su cabeza era un hervidero de ideas. Se abrazó a si misma mirando la ciudad desde la terraza, tratando de asimilar nuevamente todas aquellas cosas dichas por Kaji esa noche. “Extraterrestres” pensó para si la mujer. Jamás en su vida imaginó que Kaji le saldría con algo semejante. Tal como le dijo esa noche, era como sacado de un capítulo de “The X-Files”, pero las pruebas esgrimidas por Kaji esa noche, más todo lo que ella había logrado investigar luego de eso, solo confirmaban lo dicho por su ex-amante en ese bar de mala muerte. Los extraterrestres eran reales y estaban entre nosotros. Misato respiró pesadamente negando con la cabeza. Era una completa locura, pero pese a todo, esa locura era tan real como el centro comercial donde estaba en ese momento. La mujer paseó la vista por la terraza, y vio a toda esa gente ahí, viviendo sus vidas tan tranquilamente, ignorantes a todas las cosas que pasan ante sus narices. Aceptando con total naturalidad a los “Robots” EVANGELION, que pelearon en las calles de esa misma ciudad contra criaturas extrañas, a las que les habían dado el nombre de “Ángeles”. ¿De verdad? ¿Es que nadie más aparte de ella se preguntaba realmente de qué iba todo eso? No pudo evitar una pequeña sonrisa. Si toda esa gente supiera que esos supuestos “Robots gigantes” eran en verdad híbridos humano/extraterrestres, y que habían luchado contra verdaderos extraterrestres en las calles de esa ciudad, seguramente se les caería el pelo de la sola impresión. Verdaderamente, la ignorancia de toda esa gente era una bendición. Había cosas que realmente era mejor no saberlas. Pero ese era un lujo que ella no se podía permitir. Necesitaba conocer las respuestas, es por esto que buscó la verdad, hasta que finalmente la encontró. Desgraciadamente, las respuestas que encontró al final del camino no eran para nada las que esperaba; y para bien o para mal, ahora debía vivir con ese conocimiento. Vivir con el miedo a lo que estaba por venir, al cumplimiento de “La Agenda”. Misato no pudo dejar de sentir un escalofrío recorrerle espalda ante el peso de toda la verdad que ahora conocía. Aquí no solo estaba involucrada la raza de Los Ancestrales, a la que tuvo acceso SEELE, también están Los Grises, y “La Agenda” que estos seres tenían para la tierra junto con el Majestic 12. Misato estrechó los ojos. — Majestic 12 — susurró Misato. Como si no fuera poco el tener que aceptar que los extraterrestres eran reales y estaban entre nosotros, también estaba el hecho de que esta organización, que hasta hace no mucho creía un invento de los fanáticos de los ovnis, se había vuelto una dolorosa realidad, ya que fueron ellos los causantes directos de lo ocurrido en los corredores de NERV con Mana, pero sobre todo, los causantes de lo ocurrido con Shinji.

***

Las alarmas comenzaron a sonar en la cabeza de Misato ante las palabras de Kaji, que hacían alusión a que el Majestic 12 mantenía vigilada a NERV. Pese al escepticismo y las dudas que rondaban su cabeza, y que de paso remecían todas sus creencias, no tuvo más opción que hacer todo esto a un lado. La afirmación del hombre frente a ella, hizo que su rango como Directora de Operaciones de NERV saliera a relucir, tomando el control de la situación. — ¿Qué quieres decir con que tienen vigilado a NERV? — cuestionó la morena. — Los Grises tienen un trato con Majestic 12, y ambos tienen una agenda para la tierra. Los primeros no quieren perder su laboratorio de experimentación, y los segundos no quieren poner en riesgo su trato; sea cual sea. Pero no pueden darse el lujo de desbaratar SEELE, sin tener claro qué es lo que van a hacer con El Ancestral. Sin tener clara la agenda de SEELE, la mejor opción es tener vigilado a NERV — afirmó Kaji mirando a la mujer con seriedad. — ¿Qué? ¿Nos están vigilando? — preguntó una incrédula Misato. — Efectivamente — afirmó el hombre de la coleta — Majestic 12 inició una férrea vigilancia sobre NERV. Cuando finalmente se enteraron a grandes rasgos de lo que estaban tramando, montaron una operación para infiltrar uno de sus agentes en lo más profundo del aparataje de NERV, sin levantar ninguna sospecha. Este agente lleva casi un año infiltrado, mandando información en forma regular a sus jefes, y está en la posición ideal para desbaratar todo NERV de una sola vez, cuando el Majestic 12 le dé la orden de actuar. Misato miró a Kaji con espanto ante esa afirmación. Eso no era posible. Los controles que aplicaba NERV en la contratación de personal eran feroces. Se verificaban todos los antecedentes de arriba abajo; luego, si no había nada irregular, debían pasar por dos filtros más, cada uno más exhaustivo que el anterior. Lo que decía el hombre frente a ella simplemente no era posible. — Si esto es alguna especia de broma, creo que ya se te ha pasado la mano, Kaji. Puedo intentar creer todo eso del Majestic 12, Los Grises y Los Ancestrales. Parece una locura, pero dentro de esa locura hay cierta lógica. Lo reconozco. Pero esto de un espía en NERV… — dijo la mujer. — Por desgracia no es una broma. Hablo muy en serio. Majestic 12 tiene un agente infiltrado en NERV — volvió a afirmar el hombre, mientras Misato sentía que todo el sueño se le había espantado de pronto, y se encontraba repentinamente al ciento por ciento. Nuevamente las implicancias de lo que estaba diciendo Kaji eran muy serias. Dejando de lado la revelación del Majestic 12, los Grises y su supuesta conexión con el ser que estaba en el Dogma Terminal; todo lo concerniente respecto a los EVA se manejaba de forma endemoniadamente estricta. Precisamente el que hubiera alguien dentro de NERV pasando información, cualquiera esta fuera, era muy preocupante. Misato miró la cerveza frente a ella, y la hizo a un lado. Era hora de ponerse serios con este asunto. — Bien. Si todo lo que me estás contando es verdad, y dado a que manejas información privilegiada, como para conocer toda esta conspiración, supongo que, como mínimo, conoces, o al menos intuyes quién podría ser este supuesto agente. Kaji asintió casi imperceptiblemente con la cabeza a las palabras de Misato, percatándose de que la mujer estaba finalmente atenta a la información que le estaba entregando. La volvió a mirar con seriedad antes de hablar. — Bien, todo lo que te he contado hasta aquí, es la parte fácil. Lo verdaderamente complicado comienza ahora — dijo él, haciendo que Misato levantara una ceja — Si tus creencias se remecieron al revelarte la existencia del Majestic 12 y su trato con una raza alienígena, la información que estoy por entregar, realmente te moverá el piso y podría desmantelar por completo tu vida. Así que debes escuchar con mucha atención y analizar con calma todo lo que expondré antes de hacer un juicio. Misato arrugó el entrecejo ante estas palabras, pero afirmó con la cabeza. Kaji le dio una nueva calada a su cigarrillo, y lo apagó en el cenicero a medio consumir, con el rostro un tanto compungido, lo cual extrañó un poco a la mujer. El hombre permaneció en silencio por unos segundos más; que a Misato le parecieron horas, hasta que levantó la vista y habló otra vez. Era hora de lanzar la bomba y ver que tantos daños causarían las esquirlas. — Misato… ¿has oído hablar del “Programa OVEJA NEGRA”? — preguntó Kaji. — ¿Qué? — fue lo único que pudo articular la mujer con la cara desencajada, ya que fue totalmente descolocada con esa pregunta. — Por la expresión de tu rostro deduzco que no — comentó Kaji, con una pequeña sonrisa — Bien, “Oveja Negra” era el nombre que se le dio a un programa encubierto de la CIA, que se implementó a mediados de los años 90 del siglo pasado. Estaba destinado a reclutar niños de entre cuatro a cinco años de edad, los que secuestraban desde orfanatos o situación de calle. Eran niños sin familia, sin pasado, completamente abandonados por el sistema; por lo que si un día uno de ellos desaparecía, nadie nunca lo notaría. Una vez reclutados, eran llevarlos a un complejo donde eran entrenados para convertiros en Operativos Encubiertos. El rostro de sorpresa de Misato era impagable, por lo que Kaji metió la mano en su chaqueta y sacó su teléfono móvil. Luego de buscar algo en el aparato, se lo tendió a la mujer. Ante los sorprendidos ojos de la Directora de Operaciones de NERV se podía ver la fotografía de unos niños amarrados a unas especies de camillas, con cascos con cables en sus cabezas y un montón de sensores, jeringas y mangueras conectadas a distintas partes de sus cuerpos. Pasó a la siguiente fotografía y vio más niños en lo que parecía ser un campo de tiro, practicando con fusiles de francotirador. Pasó a una siguiente imagen y vio a otros niños sometidos a distintos tipos de torturas. Cada nueva imagen que veía era más horrorosa que la anterior, donde los niños eran sometidos a vejámenes inimaginables. Misato sintió que se le revolvía el estómago con las últimas imágenes, a la vez que se llevaba una mano a la boca.    — El “Programa Oveja Negra” era de carácter experimental. Hicieron un sinfín de vejaciones con esos niños, desde lavado de cerebro, adoctrinamiento, uso de drogas experimentales de control mental, programas de entrenamiento con realidad virtual, entrenamiento militar y torturas. Todo esto con el fin hacerlos insensibles y fuertes. Querían máquinas de matar que pudieran emplear cada vez que fueran requeridos. — Esto es horrible — dijo Misato, asqueada sin poder ver más imágenes, devolviendo el móvil a Kaji, que lo guardó en un bolsillo de su chaqueta. — Sí. Lo fue. La mayoría de los niños no resistieron y murieron durante el entrenamiento. Fue en este punto que ocurrió el Segundo Impacto, por lo que CIA debió poner atención a otros asuntos más importantes, y el “Programa Oveja Negra” fue cancelado. Los niños que aún estaban con vida fueron eliminados. Misato miró a Kaji con el rostro aun algo descompuesto por las horribles imágenes que vio, pero había una pregunta implícita en sus ojos. Kaji asintió. — Majestic 12 sabía sobre la existencia del “Programa Oveja Negra” y lo observaban con interés, por lo que lograron hacerse con toda la información una vez el programa fue desechado. Estos, al igual que la CIA en su momento, vieron el enorme potencial que podía ofrecer este programa. Luego, fruto de su investigación, y al intuir lo que pretendía NERV con los EVA, el Instituto Marduck y los niños elegidos, Majestic 12 decidió retomar el programa para usarlo a su favor. Lo mejoraron con tecnología extraterrestre, nuevos métodos de adoctrinamiento y entrenamiento militar, pero el fin seguía siendo el mismo. Crear niños espías que una vez activados, fueran a su vez verdaderas máquinas de matar. Mis fuentes señalan que Majestic 12 logró sacar adelante el programa, y en la actualidad, tienen a varias Ovejas Negras diseminadas por todo el mundo, que no superan los 15 años de edad y son tan capaces como el mejor de los agentes. Obviamente este es un valor agregado, ya que el objetivo principal del “Programa Oveja Negra” era uno muy específico. Uno que atañe directamente a NERV. El rostro de completo horror de Misato fue suficiente para que Kaji se percatara de que la mujer había hecho finalmente la conexión correcta. El rostro de la mujer era ahora una máscara cenicienta, como de un muerto en vida, producto de la revelación de esta nueva y terrible maquinación. Misato intentó hablar, pero las palabras se negaban a salir de su boca. Finalmente y luego de varios intentos, pudo articulas unas inseguras palabras. — Kaji… tú… me estás queriendo decir que… — Así es Misato. Hay una Oveja Negra en NERV — afirmó Kaji con mortal seriedad. Misato sintió que un escalofrío le recorría la espalda. Esto no era para nada lo que esperaba al acudir a esta cita con Kaji. Todo parecía tan irreal. Majestic 12, su trato con inteligencias alienígenas y luego el “Programa Oveja Negra”. Le costaba creer todo eso, pero las fotografías que Kaji le había enseñado no parecían trucadas. Todo lo dicho por el hombre frente a ella, estaba muy bien armado, y por la seriedad que tenía, no le parecía que fuera una tomadura de pelo. Por muy increíble que pareciera, esto era real, lo que la llevaba al verdadero motivo de toda esta exposición de Kaji: La Oveja Negra. Bien visto, la idea era realmente buena. ¿Quién iba a sospechar de un niño que no tiene ni 15 años? Podía pasar desapercibido sin levantar ninguna sospecha, sobre todo con el nivel de acceso que dicho niño tenía en NERV. El problema era saber quién era. Solo había 3 personas en NERV que encajaban con el perfil de una Oveja Negra, específicamente tres niños. Tres Pilotos EVA, para ser más precisos. Misato miró a Kaji como preguntando lo obvio, y este asintió con la cabeza. Misato se masajeó las sienes con manos temblorosas. Solo había 3 posibilidades. Primero estaba Rei, pero al pensar ella la descartó de inmediato. Rei Ayanami había crecido dentro de NERV, vigilada por el Comandante Ikari en persona y por Ritsuko, que sometía a la chica a exámenes constantes desde que tenía memoria. La sola idea era imposible, entonces solo quedaban dos opciones. — ¿Asuka? — preguntó Misato, casi en un susurro, a lo que Kaji negó con la cabeza. — Asuka creció bajo la férrea tutela de su padre y acompañando en forma muy seguida a su madre en la Rama Alemana de NERV — apuntó Kaji — Asuka fue designada como Piloto EVA cuando era una niña, momento en que comenzó su entrenamiento. Prácticamente creció dentro de la Rama Alemana de NERV, y yo mismo la conozco desde niña. Es imposible. Misato sintió como un nuevo escalofrío le recorría la espalda. Lo dicho por Kaji era totalmente cierto, era imposible que Asuka fuera reclutada en semejante programa. De ser así, solo quedaba una opción. Con temor y dolor en su corazón, la mujer la hizo audible. — ¿Shinji? — Así es… Shinji. Él es la Oveja Negra — afirmó un mortalmente serio Kaji.

***

Misato se cubrió el rostro con las manos ante ese recuerdo, el momento en que Kaji le reveló la verdad oculta de Shinji. Una verdad que en un primer momento se negó a creer, pero luego Kaji, con cada argumento, con cada afirmación, lo iba haciendo cada vez más irrefutable. La mujer quedó de pie por un momento, antes de volver a su mesa, para tomar asiento y coger la carpeta que descansaba ahí. Al abrirla, hizo a un lado la información de Mana y pudo ver la fotografía de Shinji. Sintió como el corazón se le apretaba al recordar al chico, lo mucho que significó para ella, y como Kaji le había contado paso a paso, como él creía que ese reservado niño, fue convertido en un arma, como fue convertido en una Oveja Negra.

***

Habían pasado largos minutos desde que Kaji expuso la verdad de Majestic 12 y del “Programa Oveja Negra”. Misato aún estaba con la cabeza gacha, sujetando su cerveza con ambas manos, pero sin hacer el menor gesto por beber un trago. Solo estaba ahí, tratando de digerir todo lo que el hombre le acababa de revelar. Ciertamente no era algo fácil. De pronto ella levantó la cabeza y miró fijamente a Kaji. — No puede ser. Todo lo que me has contado es una completa locura. Solo tienes unas cuantas fotografías que bien pueden ser trucadas, y un lindo argumento que está perfecto para una película de ciencia ficción de Clase B, pero sin ninguna prueba real que respalde tus palabras — señaló Misato. — Es verdad. No tengo ninguna prueba concluyente de todo lo que te he dicho, salvo las fotografías que te mostré. Para mí fue exactamente lo mismo cuando mi contacto me dio esta información, pero mientras más le daba vueltas, más sentido le encontraba, y más me convencía de que la forma para probar que toda esta conspiración es real, se encuentra frente a nosotros — insistió Kaji. — ¿Dónde? — lo cuestionó Misato. — Shinji — respondió él con decisión, haciendo que Misato se tensara por un momento, pero luego le devolvió una dura mirada al hombre de la coleta, antes de responder. — Estás equivocado. Shinji no puede ser una de esas supuestas Ovejas Negras. Él siempre ha estado vigilado. Nunca fue raptado por nadie, ni tampoco desapareció misteriosamente. Su historial de vida puede ser rastreado hasta su nacimiento. Lo que planteas no solo es una locura. Es simplemente imposible — sentenció Misato, sin poder aun digerir todo eso. — Estás olvidando algo importante. Shinji tuvo un accidente de tráfico unos años antes de ser llamado a Tokio-3 por el Comandante Ikari. Un accidente que lo mantuvo en coma por dos años. Misato se tensó nuevamente ante esa afirmación de Kaji. Es cierto que Shinji fue víctima de un accidente automovilístico. Iba con su tío camino a la escuela cuando un sujeto perdió el control de su automóvil, saltó a la vereda y los embistió. Ambos escaparon de la muerte solo por milagro. El tío de Shinji quedó hospitalizado por dos meses, y luego de eso tuvo que aprender a caminar otra vez. Por su parte, Shinji se llevó la peor parte. Sufrió un traumatismo craneal severo, que lo tuvo al borde la muerte por semanas, hasta que fue estabilizado pero cayendo en un coma profundo del que no se sabía si podría despertar. Finalmente recobró la conciencia dos años después del accidente. — No veo por donde ese accidente donde Shinji por poco y muere, pueda hacer una conexión con todo esto — señaló Misato con cautela. — A que fue un accidente demasiado conveniente, con Shinji incapacitado por dos años. Tiempo más que suficiente para lavarle el cerebro, adoctrinar y entrenar a una Oveja Negra — afirmó Kaji. — Eso no tiene sentido. Shinji estuvo por dos años en la cama de un hospital… ¡¡EN COMA!! — estalló Misato, ya oficialmente cabreada. Kaji le hizo un gesto a la mujer para que bajara la voz, a la vez que miraba alrededor, cerciorándose de que ninguno de los comensales ahí presentes había reparado en el berrinche de la morena. Lo bebidos que estaban, sumando al alto volumen de la horrible música ambiental, ayudaron bastante. Volvió a mirar a la mujer, que lo observaba con una mirada estrecha. Saltaba a la vista que esta había comenzado a levantar barreras ante lo que le habían revelado. De hecho, la mujer era un mar de ideas en su cabeza. Había sido mucha información en muy poco tiempo, pero esta nueva revelación era algo que en verdad no sabía cómo procesar. — Escúchame. Yo no vine aquí a presentarte esto así sin más. Hice una pequeña investigación, que me arrojó muchas dudas razonables con respecto al accidente de Shinji. Te las voy a presentar y luego quiero que me des tu sincera opinión, sin prejuicios. ¿Está bien? — preguntó Kaji. Ante esta propuesta, la Misato calló considerándolo durante unos momentos. Todo esto aún le parecía una locura, pero la información de Kaji era coherente, si lo analizabas sin prejuicios. Pero lo de Shinji no podía ser; aun así, ¿y si era verdad? ¿Qué pasaría si Shinji fuera realmente una Oveja Negra? Sabía que como Directora de Operaciones de NERV no podía prejuzgar. Era su deber escuchar lo que Kaji tenía que decir, si esto revelaba un fallo en la seguridad del Geo-Frente y de NERV. Asintió finalmente con la cabeza, y el hombre se preparó para exponer sus indagaciones. — Para empezar, pese a ser un día de semana, solo hubo un testigo directo del accidente de Shinji; el conductor del automóvil que lo atropelló. Las primeras personas que llegaron al lugar lo hicieron más de un minuto después. Esto de por sí ya es curioso para un día de semana en una calle relativamente transitada. Ahora, algunas personas que estaban cerca de ahí, vieron pasar una camioneta negra a gran velocidad desde el lugar del accidente. Con esto tenemos que nunca nadie vio realmente el accidente y hay indicios de una camioneta que estaba ahí de la que nunca nadie más supo. ¿Me sigues? Misato asintió con ojos estrechos. — Shinji fue llevado a un hospital que curiosamente es el mejor en todo Japón en el área de neurocirugía, y además, uno de los mejores del mundo. Ese fue el motivo por el que Shinji nunca fue trasladado al Área Médica de NERV. Estaba en el mejor centro hospitalario posible, y con los mejores doctores en la especialidad. Además que por el estado en que se encontraba, era imposible trasladarlo sin riesgo de muerte — argumento Kaji, dándole una seria mirada a la mujer. Misato apretó los labios, pero asintió con la cabeza. Kaji continuó. — Aquí lo interesante; por la fuerza del choque, el rostro de Shinji estaba tan deformado, que era imposible reconocerlo. ¿Qué fue lo que garantizó que era él realmente? Exámenes de sangre y ADN. Ahora, al no haber en ese lugar un nivel de seguridad como que hay en el Área Médica de NERV, estos exámenes pudieron ser fácilmente cambiados por los del verdadero Shinji, que fueron tomados en un lugar próximo, para luego ser llevados al hospital. — ¿Qué es lo insinúas? — preguntó Misato con ojos estrechos. — Que el chico que estuvo en coma por dos años en ese hospital, no era Shinji. Era otro chico al que hicieron pasar por Shinji. Un chico de fisionomía similar al que le hicieron cirugía plástica para que se pareciera al verdadero Shinji. — ¡Eso es una locura! — estalló Misato. — Nada que gente muy poderosa dispuesta a proteger un trato con una raza alienígena, no esté dispuesta a hacer. No hay que ir demasiado lejos para ver cosas similares. El mismo Proyecto EVA es un ejemplo de que el fin justifica los medios. Misato le dio una fuerte mirada a Kaji, pero este levantó la mano para acallarla. Aún no terminaba. — Hace dos años que Shinji salió del coma y su recuperación ha sido francamente milagrosa. Como su cuerpo estaba totalmente atrofiado por falta de movilidad, comenzó un tratamiento kinesiológico, que no dio muy buenos resultados en un inicio. ¿Qué hicieron entonces? Se les ocurrió sumar clases de Yoga al proceso de recuperación, lo cual fue dando muy buenos resultados. Poco después agregaron clases de artes marciales. Hasta ahí nada fuera de lugar. Todo apuntaba a que Shinji pudiera recuperar fuerza y la completa movilidad en su cuerpo. El que el chico supiera artes marciales era además provechoso a los ojos del Comandante Ikari, teniendo en cuenta que su hijo dentro de poco estaría dentro de un EVA, peleando a muerte contra los Ángeles. Misato estrechó nuevamente los ojos ante esta afirmación, pero Kaji pasó de ella, y continuó. — Como fuere, Shinji tomó muy bien las clases de artes marciales, ya que al parecer le gustó bastante esta disciplina, pero… ¿No te parece extraño que a su edad, ya sea cinturón negro en Karate y que ahora esté muy avanzado en Taekwondo? — No si es disciplinado y es capaz de seguir un riguroso entrenamiento — afirmó Misato. — Aun así, no deja de ser llamativo que Shinji llegara tan lejos en Karate y Taekwondo en solo dos años. Además no le costó absolutamente nada asumir el entrenamiento militar al que lo sometieron al ingresar a NERV. De hecho, lo ha llevado mejor de que se podría esperar — añadió Kaji con suspicacia. — Eso es porque Shinji se esforzó mucho para recuperar la movilidad de su cuerpo. Me comentó una vez que se sintió aterrado luego del salir del coma y no poder moverse. Por eso se esfuerza tanto, para no sentir eso otra vez. Además a él le gustan las artes marciales — apuntó Misato. — Pero por mucho que le gusten, eso no parece ser suficiente para explicar su acelerado progreso. Esto reafirma para mí que nunca perdió la movilidad de su cuerpo. Todo esto bien pudo ser preparado para no hacer tan sospechosas sus nuevas habilidades — dijo Kaji con astucia. Misato hizo una mueca ante eso último. Había cierta lógica en la afirmación. Entonces Kaji continuó. — Otro punto es que antes del accidente a Shinji no le iba muy bien en sus estudios. Pero cuando salió del coma, logró nivelar sus estudios en solo un año y ahora es uno de los mejores de su clase. Por otro lado tenemos su desempeño como Piloto EVA. Cuando está en tierra, es algo reservado, pero habrás notado ciertas actitudes que indican que es más de lo que aparenta. Además, a los mandos del EVA-01, su forma de pelear no se condice con la de un principiante. Misato tuvo que conceder eso último. Shinji arriba del EVA-01 podía llegar a comportarse como alguien totalmente distinto; frió y hasta cierto punto, calculador. Por otro lado, no podía dejar de recordar esa vez que se lanzó con el EVA-01 a esa caldera volcánica para salvar a Asuka. Lo hizo sin vacilación, sin dudas y si ninguna protección. Tampoco podía olvidar el ataque del Quinto Ángel, cuando el sistema de mira automática del EVA-01 falló y Shinji disparó por sí mismo el Fusil de Positrones, dando justo en el blanco. Él lo había atribuido a la suerte y así lo asumieron, pero ahora, ante todos estos nuevos antecedentes, ya no sabía qué pensar. — Podría seguir dando ejemplos — continuó Kaji — Pero a estas alturas tú ya deberías haberte dado cuenta. Durante esos dos años esta gente perfectamente pudo entrenar a Shinji mientras lo cubría un doble, y cuando estuvo listo hicieron el cambio. Analízalo Misato. Sé que si lo piensas con calma, verás muchas cosas que has pasado por alto, pero viéndolas ahora desde otra perspectiva, sabiendo ya la existencia de las Ovejas Negras, no las puedes dejar pasar. Misato guardó silencio por unos momentos, analizando toda la información. Pese a su disconformidad con todo esto, el idiota de Kaji no dejaba de tener razón. Aunque no le gustara la idea, el muy maldito había levantado un caso lo sufrientemente sólido, pese a sostenerse solo en su palabra y evidencia circunstancial. Aun así, esto no es algo que ella, como Directora de Operaciones de NERV, podía dejar pasar. Debía investigar esto y llegar a la verdad, sea cual fuere. — Está bien Kaji. Lograste sembrar la semilla de la duda en mí. Como supongo que ya tienes un plan de acción, llegados a este punto: ¿Qué es lo que haremos? — cuestionó Misato. — Lo primero es seguir sin cambios por ahora, y no decir nada de esto hasta tener las pruebas que necesitamos. Si logramos demostrar la existencia de las Ovejas Negras, lo demás caerá por su propio peso — afirmó Kaji. — Parece lógico — señaló Misato — Obviamente mantendré toda esta locura de los extraterrestres y el Majestic 12 en reserva. Si el Comandante Ikari se llega a enterar de esto, me mandaría a encerrar en un manicomio. — Tampoco olvides que ese hombre también esconde cosas, Misato. Si bien trabaja para SEELE, y debe seguir la agenda entregada por estos, nada le impediría seguir una agenda propia, que se aleje totalmente de los deseos SEELE — señaló Kaji, a lo que la morena no pudo más que concordar. — ¿Qué hay de Shinji? — preguntó ella, con repentina seriedad. — Esa es la parte más delicada del asunto. Debes ser extremadamente cuidadosa. No debes olvidar que Shinji fue programado por el Majestic 12 para cumplir una misión. Si él llegara a sospechar algo, te mataría sin dudarlo y luego podría llevar a cabo un plan de contingencia, que solo Dios sabe a dónde nos llevaría. Desde ahora no debes olvidar en ningún momento, que estás ante un espía y un asesino entrenado — afirmó un mortalmente serio Kaji. Con renuencia, Misato debió asentir con la cabeza, pensando que las cosas en su vida no serían lo mismo de ahora en adelante, ya que era probable que estuviera viviendo con el enemigo en su misma casa, lo cual no la ponía en peligro solo a ella, sino que también a Asuka. — Bien, escucha — dijo Kaji, para llamar su atención — Esto es lo que haremos…

***

Misato salió de sus recuerdos pensando en su antiguo protegido y cómo esa noche cambió su percepción sobré él. Tomó la fotografía de Shinji y la contempló con tristeza. Hasta ese momento ella aún no creía todas las cosas dichas por Kaji. Era todo demasiado irreal, pero lo que le dijo sobre Shinji… eso era totalmente diferente. Ella había deseado que Kaji estuviera equivocado. Recordó cuando esa madrugada manejaba su vehículo de vuelta al departamento con la firme intención de probarse a sí misma que todo lo dicho esa noche por el hombre de la coleta estaba errado. Se probaría ella misma y a todos los demás, que Shinji era totalmente inocente de lo que lo estaban acusando. Tristemente la verdad estuvo del lado de Kaji. Una rebelde lágrima escapó de uno de los ojos de Misato, mientras negaba con la cabeza, contemplando la fotografía del chico que llegó a querer como si fuera parte de su familia; un chico que tristemente era todo lo que decían de él. Finalmente, y con el dolor de su alma, debió reconocer que Shinji, efectivamente, era una Oveja Negra. Continuará... _______________________________________________________________ Notas del Autor: El presentecapítulo resultó ser bastante denso, pero creo que resultó muy interesante con toda la información que entrega. También se aleja del canon de Evangelion, con la intromisión del “Majestic 12” y su trato con “Los Grises”, pero tampoco es tan descabellado. Si lo analizan bien, los Ángeles no vienen de la tierra, por lo que en estricto rigor, son extraterrestres. Tampoco puedo dejar de señalar que este capítulo es el origen de toda esta historia. Lo escribí hace muchos años y lo deje ahí, siendo solo un pequeño prólogo de una historia que nunca escribí, hasta que decidí retomarlo, dándole un enfoque distinto en su argumento, y su forma de contar la historia, ya que está siendo contada desde la perspectiva de Misato. Eso es todo por ahora. Saludos y nos leemos.
2 Me gusta 0 Comentarios 0 Para la colección Descargar
Comentarios (0)