ID de la obra: 266

Drabbles de ángeles y demonios

Slash
G
En progreso
1
Promocionada! 0
Tamaño:
planificada Mini, escritos 26 páginas, 12 capítulos
Descripción:
Publicando en otros sitios web:
Consultar con el autor / traductor
Compartir:
1 Me gusta 0 Comentarios 2 Para la colección Descargar

Gabriel

Ajustes de texto
Notas:
—Esto le romperá el corazón... —Lo sabemos, María, pero es algo que se tiene que hacer. —No estoy tan seguro de esto, Padre. Él no se merece esta traición. —No es una traición, hijo de Dios, solo es un... Uhh... Cambio en la jerarquía. —Metatron, no estás ayudando. Las puertas de la sala del trono se abrieron y el ángel mensajero de largos cabellos entró con la cabeza en alto. —Señor, estoy aquí para servirle, si ha solicitado mi presencia para que esparza su palabra lo haré con gusto. —Oh no. No puedo ver esto, es demasiado —Maria se cubrió los ojos, no queriendo presenciar el desastre que iba a seguir. —Gabriel, mi leal ángel mensajero, me has servido incluso en esta época donde ya no tenemos contacto directo con los mortales. Enviando mis mensajes a otros reinos divinos y a los ángeles de menor jerarquía. Pero... —Dios tuvo que detenerse un momento, preocupado por lo que iba a seguir— los dioses discutimos un tema muy importante en la última reunión. Y hemos pensado que sería mejor crear nuestra propia red de mensajería instantánea y ya no depender solo de nuestros espíritus y dioses mensajeros. La cara de Gabriel se puso pálida de golpe e incluso Jesús desvío la mirada por no poder soportar ver la angustia en el rostro del ángel. —Entonces... ¿Ya no me necesita?... —No es que no te necesite, aún seguirás trabajando como arcángel guerrero, pero tu cargo de mensajero será retirado. Gabriel agachó la cabeza mientras su cuerpo temblaba ligeramente. —Oh... Ya veo, al menos pude servirle durante todos estos milenios y se lo agradezco, mi señor... —No te angusties Gabriel, todavía serás de nuestros ángeles más respetados —afirmó Metatrón al ver lo triste de la escena. —¡Si, es verdad Gabriel! Tu excelente trabajo nunca será olvidado, por ejemplo siempre recordaré la felicidad que sentí cuando me diste la noticia de mi embarazo milagroso. Jesús estuvo de acuerdo con su madre. —¡Exacto! Y siempre serás querido en el cielo, seguirás siendo parte de los siete arcángeles e incluso tu legado será recordado gracias a las pinturas en la tierra. —Pero yo no quiero pinturas... —Gabriel levantó la cabeza dejando ver su rostro empapado en lágrimas— Quiero servir al propósito para el que fuí creado... La visita de un ángel llorando siempre era demasiado para soportar y los cuatro pilares del cielo no supieron cómo reaccionar al ver al arcángel en este estado. Como pudo se secó las lágrimas con su manga. —Lo siento. No debería renegar, su palabra es ley para mi. ¿Pero al menos me puedo quedar con mi trompeta para anunciar el apocalipsis? María no pudo soportarlo más. Corrió para sujetar las manos del arcángel y exclamó con fuerza —¡Gabriel, no te atormentes! Dios bien lo dijo, es algo que todavía están pensando. ¡No es oficial todavía! Metatrón fue tomados por sorpresa por las acciones de María pero se unió a ella sin dudar. —¡Así es, solo estábamos probando las aguas en caso de que procediera el cambio! —¡Si, si, totalmente! —exclamó Jesús también buscando consolar al ángel— Fue como una prueba divina, así como las que se le impusieron a Job. En la siguiente reunión se retomará el tema y mi padre puede hablar en defensa de tu trabajo. ¿Verdad, padre? Los cuatro pares de ojos se centraron en el Dios sobre su trono. Si estuvieran en épocas del antiguo testamento nada lo haría cambiar de opinión pero la paternidad lo había ablandado. —Si. Pediré a los otros dioses que reconsideren la decisión por respeto a los leales mensajeros como tú. El rostro de Gabriel cambió de una profunda tristeza a una gran alegría. —¡Oh, ya veo! Gracias, mi Señor, lamento haber armado un espectáculo de lastima frente a usted. Pero confío en su juicio y sé que tomará la mejor decisión para el cielo. Pero seguiré trabajando con dedicación hasta la siguiente reunión para probar que soy digno de mantener el trabajo para el que fuí creado —hizo una reverencia antes de marcharse volando con una sonrisa en su rostro. —... Somos las entidades más importantes en el cielo... —dijo Dios con voz cansada— y ninguno tuvo la fuerza de voluntad para jubilarlo... —Eso hubiera sido muy bajo, padre, él no se lo merece. Hubiéramos sido peor que Judas de haberlo hecho. En la siguiente reunión de los dioses se decidió no implementar la mensajería instantánea. Pues absolutamente todos los dioses se enfrentaron al mismo problema cuando le dieron la noticia a sus mensajeros. Al parecer todos se habían ablandado con el paso de los milenios.
Notas:
1 Me gusta 0 Comentarios 2 Para la colección Descargar
Comentarios (0)