Capítulo 15: No Me Lo Vuelvas a Decir
6 de julio de 2025, 22:24
Ron lo esperaba al final del pasillo, los brazos cruzados, la mandíbula apretada.
Harry lo vio desde lejos, supo lo que venía.
—¿Qué pasa? —preguntó con frialdad.
Ron no lo saludó. No sonrió.
Solo dijo:
—Tenemos que hablar. Ahora.
Harry se detuvo, firme.
—Habla.
Ron se acercó, los ojos inyectados de frustración.
—¿Qué demonios estás haciendo, Harry? ¿Estás saliendo con Malfoy? ¿Con él?
Harry no respondió. Solo lo observó.
Ron apretó los puños.
—No lo ves, pero él te está usando. Siempre lo ha hecho. Te está manipulando, metiéndote en su mundo podrido. Y tú... tú lo estás permitiendo.
Harry seguía callado.
—¡Él es un Malfoy! —gritó Ron, sin disimulo—. ¡Su familia ayudó a Voldemort! ¡Tú viste lo que hizo, lo que fue! No puedes olvidar eso solo porque ahora te mira bonito.
Harry lo fulminó con la mirada.
No con decepción. Con peligro.
—Tú no sabes nada de él.
—¡Sé suficiente! Sé que es frío, arrogante, egoísta. Que te está alejando de todos. De Hermione. De mí.
Harry dio un paso hacia él.
—No me está alejando. Yo me alejé. Porque ustedes nunca me habrían dejado tener algo que no encaja en su mundo moral de blanco y negro.
Ron retrocedió un poco.
Harry no terminó.
—¿Y sabes qué más? Draco no me manipula. No juega conmigo. No finge entenderme para que me quede.
Draco me ve. Me acepta. Todo. Incluso lo que ustedes prefieren ignorar.
Ron escupió:
—¿Y si te está usando? ¿Y si solo quiere arrastrarte con él? ¿Si te lleva a su misma oscuridad?
Harry sonrió. Pero no fue una sonrisa amable.
—¿Y si no me está arrastrando? ¿Y si esa oscuridad siempre fue mía… y él solo me enseñó a no tenerle miedo?
Silencio.
Ron lo miró como si no lo reconociera.
—No eres el mismo.
—Exacto —susurró Harry—. Ya no soy el niño que necesitaba su aprobación para sentirse amado.
Ron negó con la cabeza, furioso, dolido.
—Vas a perderlo todo por él.
Harry lo miró con una calma gélida.
—Entonces lo perderé.
Pero no pienso perderlo a él.
Y se fue.
Dejó a Ron allí, solo, sin respuestas, sin poder entender en qué momento Harry Po
tter se volvió alguien a quien ni siquiera podía seguir llamando amigo.