Un hospedaje imprevisto
10 de julio de 2025, 4:51
INT - POSADA - NOCHE - KAMIYAMA, DOMINIO TOKUSHIMA
1656年2月XX日 - Actualidad - (Prefectura de Tokushima)
https://en.wikipedia.org/wiki/Tokushima_Domain
https://es.wikipedia.org/wiki/Distrito_de_Katsuura#/media/Archivo:Tokushima-katsuura-district.svg
La posada está mayormente desangelada. Situada a diez minutos del pequeño pueblo de Kamiyama justo en la dirección hacia Tokushima y el castillo en el que reside el Damiyo. Es noche cerrada, una breve lluvia azota la región y ha empapado las ropas de quien parece ser el único cliente.
La puerta principal es golpeada firmemente. Un hombre y su única hija son los que dirigen el lugar pero el anciano no es quien se levanta de la cama sino que es su hija, YUKI. La puerta se entreabre pero su pie bloquea el paso a SHINPI.
YUKI
¿Quién va? Estas...no son horas.
SHINPI
Siento la premura pero necesito un sitio donde pasar la noche.
YUKI
No nos quedan camas.
Es mentira, no confía en aquel extraño pero por mas que lo intenta no consigue mas que discernir unos pocos detalles de sus facciones ocultas bajo la oscuridad de las nubes que cubren la luna casi llena.
SHINPI
Pero tendrá un fuego, me basta con un sitio donde calentar mis empapados huesos.
Su voz suena convincente y se aparta suavemente de la puerta antes de llevar su mano a la bolsa que cuelga de su cinto.
SHINPI (CONT'D)
Pagaré el precio de su mejor habitacion y me marcharé antes de que llegue el alba.
Yuki duda, pero al final se aparta.
YUKI
Está bien. Pasa, puede sentarse frente a la chimenea.
Shinpi da una formal reverencia, mucho más formal de lo esperado antes de avanzar al interior. Deja sus geta en la entrada aunque mantiene su sombrero de paja y su capa aún puestas.
YUKI (CONT'D)
¿Desea algo de comer? No tenemos mucho pero puedo conseguirle algo.
SHINPI
Si puede ser algo caliente lo agradecería, ¿y tienes algo de aguja e hilo?
YUKI
¿Aguja e hilo? Eh, sí. Sí. Puedo darte algo.
Yuki desaparece de aquel modesto salon, sería el equivalente de una pudiente casa pero dentro no hay muebles demasiado cuidados. La chimenea se mantiene en pie, una pila de troncos descansan al lado y con cierto esfuerzo añade un trozo mas al fuego, dejando que las llamas chisporroteen.
Shinpi se sienta y aparta aquel sombrero, lo pone a un lado, está empapado pero se secará mucho más rapido que el resto de sus ropas. Su pelo está recogido en un gran moño y sus facciones ahora iluminadas por el brillo del fuego denotan más de lo que cualquiera esperaría.
Estira las manos hacia el fuego y trata de calentar los dedos.
YUKI (CONT'D)
Sólo quedaba un poco de miso con arroz. Traigo también algo de sake y la aguja y el hilo.
Una pequeña bandeja es depositada a su lado y este lo agradece. Hurga en sus bolsillos y le ofrece un par de monedas de plata.
SHINPI
Por las molestias. Irrumpir en plena noche no es plato de buen gusto.
YUKI
M-muchísimas gracias. No acostumbramos a tener clientes tan generosos.
Él ríe suavemente, dándole la razón antes de quitarse aquella capa, un jadeo ahogado escapa de sus labios e inspira profundamente. Yuki se sobresalta.
YUKI (CONT'D)
¿Se encuentra bien...?
SHINPI
No es nada...grave. Creo. Seguro. Me hirieron, hace unas horas, no es mortal pero no puedo suturarme con sólo un brazo.
Shinpi retira aquella capa, intenta ponerse más comodo y la mira.
SHINPI (CONT'D)
Sé que es mucho pedir pero...
YUKI
Tranquilo, parece...un tajo bastante feo, pero nada que no tenga arreglo. Y si me da otra moneda...
El accede, quizás estaba siendo estafado pero aunque la herida no fuese grave al final toda hemorragia expuesta al aire era un problema.
YUKI (CONT'D)
Voy a tener que abrirte la parte de arriba.
Al recibir una confirmacion, Shinpi abre la parte superior de su ropa exponiendo una piel húmeda y sus hombros, uno de los cuales estaba teñido de aquel claro rojo.
YUKI (CONT'D)
No me dijiste tu nombre, ¿verdad?
Empapa aquella aguja en el sake y luego toma la taza entre sus manos. Shinpi se presenta mientras mantiene la cabeza gacha, inclinada a un lado para que tenga todo el acceso que pueda a la herida y la luz del fuego.
SHINPI
Me llaman Shinpi, supongo que me pega. ¿Y tu?
YUKI
Yuki. Esto te escocerá un poco, Shinpi.
Cuando el líquido translucido toca su piel todo su cuerpo se tensa. El alcohol limpia la sangre sucia pero, sobretodo, burbujea sobre la herida y tras unos segundos ese fuego líquido desaparece lentamente.
YUKI (CONT'D)
Notarás unos pinchazos.
Mucho mas agradables que sentir aquel fuego, sin duda.
YUKI (CONT'D)
¿Cómo te han hecho esto?
SHINPI
Me rodearon no muy lejos de aquí, en plena noche.
De nuevo aquella mujer etérea que siempre está con el aparece a su lado y se tumba en el tatami al lado opuesto de aquella posadera. Siendo solo perceptible para aquellos ojos que la observan mientras este intenta ignorar el dolor.
YAE
¿Mintiendo de nuevo? Pensé que el engaño era sólo cosa de los mios.
SHINPI
En plena noche, y por la espalda.
(masculla)
Mi prioridad era vivir así que no pelee mucho, aproveche la lluvia y les dejé atrás. De no haber encontrado este sitio no se que habría hecho.
YUKI
Los caminos son cada vez mas inseguros, y eso que el señor Hachisuka ha subido los impuestos por 'más protección'.
Bufa y niega con la cabeza mientras atraviesa aquella piel con cuidado y delicadeza.
YUKI (CONT'D)
Voy a ajustar los puntos, esto dolerá.
Shinpi cierra los ojos y vacía sus pulmones; así es mas fácil que el dolor se escape pues no hay aire que pueda usar para rebotar por su pecho y cuando deja de sentir aquella incipinte presión, respira aliviado.
SHINPI
Gracias. No se si habría podido hacerlo sólo. No bajo la lluvia al menos.
YUKI
Aprovecha lo que queda de fuego. Si se le calan los huesos sobretodo si tiene pensado...
Shinpi retira con dificultad las mangas del kimono, este cae a peso contra el desgastado tatami. Se inclina contra el fuego, el dolor y los músculos congelados entumecen su mente, sus dedos se abren y cierran contra el calor de las llamas.
YUKI (CONT'D)
Espera. ¿Eres...una mujer?
SHINPI
¿Hmm? ¿Que...?
Voltea para mirarla pero es cuando se da cuenta de que, efectivamente, ya no tiene aquella ajustada prenda encima. Su pecho no esta desnudo sino cubierto; desde el inicio de su vientre hasta las axilas, su figura ahora es menos andrógina y masculina pues aun con aquellas vendas su busto era bastante apreciable.
SHINPI (CONT'D)
Mierda. Oye, no...busco problemas. Por favor.
Yuki la observa, mira en dirección al interior de la posada, a aquella puerta entreabierta en la que está su anciano padre. Se retira y sigilosamente la cierra sólo para volver. La posadera regresa y sus pasos se aceleran al verla intentar levantarse.
YUKI
Tranquila. No diré nada, pero esas vendas no te servirán de mucho, las tienes empapadas. Quítatelas.
SHINPI
Gracias.
Yuki se arrodilla tras Shinpi, ayudando a que esta retire las vendas. Poco poco aquellas tiras van descendiendo, su piel respira aliviada y numerosos tajos, cicatrizados se alargan por su espalda mostrando un perturbador reflejo de su pasado.
YUKI
Todas estas heridas...¿Qué te ha pasado para estar así?
SHINPI
La vida.
Shinpi se encoge de hombros, lleva su diestra a su cabello y retira aquel nudo que lo mantenía preso. Una larga melena desciende hasta la altura de su redondo busto y respira aliviada.
SHINPI (CONT'D)
Y el camino de la espada.
YUKI
No es el mejor para una mujer.
Lejos de ofenderse, ella niega.
SHINPI
Yo ya no soy una mujer.
Sus ojos se clavan en Yae quien se encuentra mirando las llamas chisporrotear cual niña pequeña. Ella, en cambio, desliza las espadas enfundadas de su cinto al suelo, sientiendose extrañamente libre.
SHINPI (CONT'D)
La mujer que pude haber sido la arrancaron de mi; vacía, rota.
Yuki asiente, en silencio, antes de retirar aquellas vendas y tirarlas al fuego.
YUKI
¿Llevas mucho viajando?
SHINPI
(asiente)
Y no creo que vaya a terminar pronto. Tengo demasiado que hacer.
YUKI
Imagino que por eso finges ser un hombre.
Yuki coge el kimono arrugado del suelo y lo coloca frente a un tendero que deja a una distancia prudente del fuego.
SHINPI
Los hombres lo tienen todo: la libertad de hacer lo que deseen, de tomar sus decisiones e ir a donde quieran. No podría viajar sin que uno me acompañe y ya pasé demasiados años bajo ese yugo.
Disfrazarse era la manera de moverse en un mundo de hombres; no por vergüenza, ni envidia, sólo por comodidad y eficiencia.
YUKI
Y lo del hombro...supongo que no fue como me lo contaste.
SHINPI
(bufa y niega)
No. Pero es mejor que no lo sepas. No puedes mentir si no conoces la verdad. Es mejor así.
Entonces Yuki repara en una especie de acessorio que cuelga de uno de los bolsillos de la ropa tendida frente al fuego.
SHINPI (CONT'D)
Si alguien llegase a preguntar no intentes protegerme.
Shinpi observa a Yuki y cuando ve aquella pieza de orfebrería, rectangular, no mas de una pulgada de anchura, casi tan largo como la palma femenina que la sostiene. El objeto parece un colgante, pulido y cuidado de un color dorado intenso. Contra el fuego se aprecia claramente una pieza de plata pulida, cubierta del antaño liquido ahora solidificado que protege un emblema muy reconocido.
YUKI
Este kamon lo reconozco.
SHINPI
¿Ah si?
Claramente Shinpi parece más nerviosa de lo que se muestra.
YUKI
Los Fujiwara. ¿Qué clase de relación tienes con ellos para poseer un emblema como este?
Shinpi extiende la mano y recibe de vuelta aquella pieza de orfebrería antes de ponersela en torno al cuello.
SHINPI
Les serví, hace mucho. No creo que fuesen capaces de reconcerme así, ahora. Mi padre estaba obsesionado con el honor y el deber hacia ellos. Yo sólo era una herramienta más.
Una extraña sonrisa aparece en su rostro, Shinpi mira sus manos, curtidas y maltratadas por el camino y la espada pensando cuanto se habría enfadado su padre al tenerlas descuidadas, divirtiendose ante lo rídiculo de aquel mero pensamiento.
YUKI
¿Viviste en esas casas lujosas?
SHINPI
¿Como una igual? No. No. Pero he visto como se vive dentro y este sitio...créeme, es mucho mejor que cualquier de esos palacios.
Yuki bosteza, no porque no le interese escuchar lo que dice sino porque se ha despertado en plena madrugada. Se frota un ojo con gesto cansado.
SHINPI (CONT'D)
Deberías dormir, ya te he molestado bastante. No te preocupes por mañana, mantendré mi promesa y me habré marchado tan pronto como amanezca.
Shinpi sujeta una de las vainas de sus katanas contra el suelo mientras se sienta frente al fuego. Cierra los ojos y aunque no ve como Yuki se retira, finalmente, sí que escucha los pasos mullidos por aquellos calcetines gruesos desaparecer hacia el fondo de aquella instancia.
Yae entonces se pone a la misma altura, sentada junto a Shinpi quien ha empezado a desenvainar las espadas para limpiar cualquier resto de sangre, secándolas. Esta apoya su cuerpo contra ella mientras ambas miran el fuego danzar frente a sus ojos.
SHINPI (CONT'D)
(susurrando)
El castillo Tokushima está a medio día, llegaremos para la celebración.
YAE
¿Voy a poder divertirme por fin?
SHINPI
Lo suficiente como para que sacies tu sed. Necesitaré que nos lleves hasta el lider del clan.
YAE
¿Crees que te dejarán pasar así como así?
SHINPI
Ya lo escuchaste: le encantan las mujeres, el festival es una excusa para dar un banquete y que pueda probar a las mejores mujeres que considere. ¿Qué humano es capaz de resistir tus encantos?
Yae sonrie, sus dientes blancos y afilados relucen contra la luz del fuego.
SHINPI (CONT'D)
Sólo devuelveme el control antes.
YAE
¿Y como saldremos de allí? Una vez estemos dentro si alguien se da cuenta...
SHINPI
Necesitaré algo más que tus encantos, por eso tendrás que alimentarte bien. Conseguiremos algun caballo y desapareceremos de su vista.
YAE
Deberías de dormir un poco.
SHINPI
No estoy....
YAE
No intentes engañarme...sabes que sé perfectamente lo que sientes en todo momento. No seas orgullosa y hazme caso, no me hagas ser la voz de la razón de las dos.
Shinpi da un cabeceo suave antes de envainar la espada. Las coloca junto a su cuerpo, lentamente se tumba en el suelo, está frío pero el fuego frente a ella lo compensa. Yae acaricia los cabellos marrones de la contraria mientras sus nueve colas danzan, meciendose dulcemente y Shinpi finalmente cae rendida ante el cansancio.