ID de la obra: 441

Profecía//Jegulus

Slash
R
En progreso
41
El trabajo participa en el concurso «Harry Potter: El Capítulo Perdido»
Fechas del concurso: 26.06.25 - 13.08.25
Inicio de la votación: 12.07.25
¡Vote por el trabajo que más le guste! Puede votar una vez al día.
Tamaño:
planificada Maxi, escritos 1.169 páginas, 340.683 palabras, 127 capítulos
Descripción:
Publicando en otros sitios web:
Consultar con el autor / traductor
Compartir:
41 Me gusta 0 Comentarios 0 Para la colección Descargar

Capítulo 54

Ajustes de texto
-Estás bien, nadie puede hacerte daño- repite nuevamente, acariciando el cabello de Regulus con una mano y sosteniéndolo por la cintura con la otra. Regulus sigue llorando desconsoladamente. James mira a los slyterins, moviendo la cabeza en señal de que se retiren. Los amigos de Regulus salen de la habitación y James lleva a Regulus a la cama, sentándose allí con el pelinegro en brazos. -Estoy aquí, Regulus- recuerda James- tus padres no pueden acercarse a la magia Potter. -¿Y si mandan a uno de esos amigos que nos miraban raro?- pregunta Regulus, tragando con fuerza. -Nadie te hará daño- afirma James, besando su mejilla. Regulus asiente y deja caer su cabeza en el hombro de James, sentándose por completo sobre él para abrazarlo fuerte- yo te cuido. [...] -¿Y James?- pregunta Sirius, cuando Remus se acuesta a su lado, después de la segunda ronda- ya es muy tarde, tendría que haber vuelto- habla preocupado. -Debe estar bien- responde Lupin, Sirius toma el mapa, Remus se lo arrebata de las manos. -Yo lo busco, ve a lavarte, te hará daño- habla el más alto señalando su ojo rojo, en donde acabó sin querer, Sirius asiente, caminando desnudo hasta el baño. Remus abre el mapa y busca a su primo "James Potter "Regulus Black" en los dormitorios de slytherin y en una posición que la suelen interpretar como sexo. Cierra el mapa rápidamente. -Ya no me duele demasiado, ¿encontraste a James?- se estira para tomar el mapa, pero Remus lo detiene, tomándolo del cabello. -¿Quieres jugar otro rato?- gruñe en su oído, Sirius voltea, sonriéndole coqueto. -Es tarde, señor Lupin- comenta, jugando con el cabello rebelde que se pega al sudor de la frente de su novio. -Entonces lo resolveré solo- se tira en la cama y se lleva una mano a su miembro, masturbándose. Sirius lo mira con una ceja arriba. -Uno rápido y luego buscamos a James- responde Sirius, inclinándose. -Es grande, déjalo que haga lo que quiera- concluye el castaño, tomándolo del cabello mientras cierra los ojos al sentir la cálida lengua de Black. [...] Remus bosteza, dejando caer su cara en el plato vacío. -¿Qué pasa, Moons?- pregunta James, estirando su mano para acariciar su cabello. -Me debes una- responde Lupin, enderezándose. -¿Ahora qué?- cuestiona, confundido. -Anoche Sirius intentó buscarte en el mapa, no estabas en la habitación. -Oh- se rasca la nuca- ¿y? -Lo detuve y te vi muy cerca de Regulus en las habitaciones de slytherin- lo mira con ambas cejas arriba- sabes lo que es muy cerca para el mapa. -Él tuvo una crisis y me quedé a dormir con él- señala Potter, sirviéndose café. -Vamos James, si te estás teniendo sexo con el hermano de tu mejor amigo ten el coraje de decirlo- responde Remus, cansado- soy tu primo, tenemos confianza. -No estoy teniendo sexo con nadie, Remus. Realmente fui porque tenía una crisis. -Bien- suspira el castaño. -¿Sirius no lo vio o si?- pregunta luego de un momento, mirando a su primo. -Si solo fue por acompañarlo ¿por qué importaría?- responde Lupin, malhumorado por haber dormido dos horas. -Porque tu novio es un dramático que hará un drama y luego Regulus se alejará de mi y no encontrará un espacio seguro y... saldrá mal- mueve sus manos, nervioso. -Él no lo vio pero me debes dos condones y varias horas de sueño- responde restregándose los ojos. -Oh, que gran sacrificio- sonrie divertido- aunque las horas de sueño se te notan y lo otro también- señala su cuello. -Sí, además tengo que organizar el club de ajedrez- resopla, cansado. -Yo te ayudo- propone James, mirándolo con una sonrisa. -¿Tu?- eleva una ceja y se ríe, tomando del café de James- no sabes organizar ni tu cabello, menos podrás organizar el club de ajedrez. -¿Alguien dijo club de ajedrez?- pregunta Lovegood, sentándose junto a Remus, con una sonrisa- ¡mañana es nuestra última reunión! no puedo creerlo. -Nunca entenderé por qué te gusta el club de ajedrez- responde James, mirándola divertido. -Es que hay chisme y té, tienes el cabello muy desordenado hoy- señala, mirando a Potter- en fin, ¿por qué parece que dormiste en un pozo anoche?- pregunta mirando a Remus, mientras se sirve té. -Porque durmió en un pozo anoche- se burla James, Lovegood lo mira, descifrando el doble sentido. -Cierra la boca porque no te ayudo más- se queja Remus, mirándolo mal. -No sé que pasó específicamente pero estoy con la criatura mágica- mueve las manos, sacándole una carcajada a Remus. -La bibliotecaria me dijo que hiciste ayer, quiero agradecerte- sonrie James. -Que vieja chismosa- se queja la de rulos, tomando una galleta- no importa, estabas... comprometido con el estudio. -No estoy entendiendo- acota Remus. -No importa- responde James. -No, si importa. Fui yo el que durmió dos horas asi que ahora me cuentan, no volvieron ¿o sí? -Regulus me ayudó a estudiar ayer y la bibliotecaria quería sacarnos porque nos abrazamos- explica James, Remus eleva una ceja- ya, yo tampoco dormí demasiado, no me presiones- se queja, cansado. -Sí pero no tienes que organizar el club de ajedrez- rodea los ojos. -Oh, yo te ayudo- propone la chica, emocionada- o yo lo hago, como quieras. -Gracias- suspira Remus, abrazándola- al fin alguien con cerebro que si puede ayudarme. -¡Oye!- se queja James- Cookie, él me dijo que no puedo organizar mi cabello menos podré organizar lo del club. -No seas malo, solo tiene cabello ondulado y no sabe cuidarlo- se estira, tocando el cabello de James- está reseco; pídele a Regulus que te ayude, él sabe de eso también- sonrie. Remus asiente, chocando los cinco con la ravenclaw. -Tu también sabes, ¿por qué me mandas con Regulus?- pregunta- ¿me odias? -Nunca podría odiarte pero luego de Hogwarts no te seguiré cuidando, James Potter. -Tu no me cuidas, soy un hombre que se puede cuidar a sí mismo- alza el mentón. -Un hombre que no se lavó la cara, tienes baba ahí- señala la chica. -¿Donde?- pregunta, tocándose la cara. -Donde siempre James, siempre babeas del mismo lado- responde la de rulos, levantándose de la mesa- luego de las clases te ayudo con el club- mira a Remus, quién asiente. -Gracias- responde Lupin, volviendo a su café- ¿saliste rápido de slytherin? ¿qué pasó? ¿Crouch te quiso morder?- pregunta divertido. -No, hizo demasiadas preguntas y no lo soporto demasiado, nunca sé cuando bromea y cuando debo preocuparme por mi integridad física y mental- unta una tostada con queso. -Sí, es... complicado- responde Remus. -Hoy no asistiré a las clases en la tarde, ¿copias por mi?- pide, mordiendo su tostada. -¿Debo falsificar tu letra y copiarte todo yo?- se queja- ¿otra vez?- resopla. -Sí, por favor- junta sus manos- llagaré justo para el entrenamiento. -Bien- suspira Remus- ¿a donde vas? -Acompañaré a Reggie a terapia- responde- solo deseo que pueda mejorar, me duele verlo así- tuerce la boca, angustiado. Remus asiente. -Es difícil, Sirius también llora, él... no quiere molestarte porque estás con Regulus pero también recuerda sus traumas. -Dile que me hable, puedo con ambos- responde James. Remus eleva una ceja- no de esa forma ¿por qué mal piensan todo lo que digo?- resopla. -Porque lo dices raro, y no, no tendrás a mi chico- habla serio. -No me interesa de esa forma- recuerda James- y mis padres si lo llevaron a la psicomaga, pero solo fue una semana y luego se negó a seguir con su terapia- comenta James. -Es que es difícil James, Sirius pasó por algo muy similar a lo de Regulus pero él debía mantenerse callado y fuerte para no preocupar a su hermano, por eso esconde todo con chistes y bromas, porque se siente mal. James suspira y asiente. -Sí, lo sé, él... debes convencerlo de que acepte ayuda- pide Potter. -Dice que ya están gastando mucho en Regulus y no quiere ser una carga para tus padres, le pedí que acepte que yo pague y se negó rotundamente, amenazó con cortar conmigo si seguía insistiendo- suspira, sirviéndose un poco de futa- insistí y realmente se enojó, soy su apoyo, no quiero que me pierda o perderlo, podría terminar mal. -Lo hablaré con mis padres hoy, ellos podrán explicarle que no es una carga y que no estamos gastando mucho porque no es un gasto cuando se trata de salud. -Exacto- asiente Lupin. Sirius y Regulus entran por la puerta del gran comedor, charlan entre ellos en francés. Sirius se sienta junto a Remus y Regulus da la vuelta para sentarse junto a James. -Oui, j'ai aussi peur qu'elle apparaisse, mais les Potter seront là pendant les vacances- habla Sirius, sirviendo té para ambos -Ouais, je sais, ça me fait me sentir mieux d'avoir James à mes côtés, je n'essaie pas de te le voler ou quelque chose comme ça- responde Regulus. Remus y James los miran confundidos, sin entender de lo que hablan. Sirius sonrie y asiente. -Si tu veux dormir dans la même chambre que lui... c'est très bien, je sais qu'il ne dépassera pas ses limites ni ne te mettra mal à l'aise ; Mais mon premier réflexe est de veiller sur toi, Reggie- habla Sirius. -Oui, je sais, tu as toujours pris soin de moi et j'apprécie ça, mais je sais que tu as aussi tes traumatismes et que tu essayes de les surmonter. Je suis reconnaissante à Lupin d'être là pour toi, car nous... avons perdu un peu de notre lien de frères- menciona Regulus, sintiendo la mano de James posarse sobre su muslo, acostumbrado. -Remus est incroyable, oui- sonrie enamorado- et merci de m'avoir dit que tu avais eu un épisode hier soir, j'aime savoir comment tu te sens- sonrie Sirius. -Realmente no entiendo de qué hablan- menciona James, confundido. Regulus sonrie y apoya su mano sobre la de Potter, que descansa en su muslo. -Nada muy interesante- responde el menor de los Black. -Las vacaciones, como nos sentimos en general, tratamos de charlar- explica Sirius- hoy tenemos entrenamiento, ¿no?- cambia de tema. -Sí, luego de clases aunque no iré a las clases de la tarde. Si no llego estás a cargo, no dejes que Lene se pinte las uñas mientras intentas dar el entrenamiento. -Haré lo posible- sonrie Sirius. -¿Qué te sirvo?- pregunta James, mirando a Regulus, quién no tiene muchas intenciones de desayunar. Black suspira. -Tostadas, gracias- responde- aunque no tengo mucha hambre, James- lo detiene a la segunda tostada, Potter asiente. Remus capta la atención de Sirius charlando sobre algo que no escucha mientras lo sienta en sus piernas y coquetean, como usualmente. Sirius le da la espalda a la mesa, asi que James se centra en Regulus, moviendo su mano, para acariciar suavemente su muslo. -¿Cómo te sientes hoy?- pregunta suavemente en voz baja, observándolo untar una tostada con mantequilla de maní. -Mucho mejor, gracias por ayudarme- sonrie, volteando a verlo mientras se lleva la tostada a la boca. -No hay nada que agradecer- recuerda James, mirándolo a los ojos- hoy me fui temprano porque tus amigos volvieron a la habitación y Crouch me da algo de miedo- sonrie divertido estirando su mano libre para limpiar la mantequilla de maní de la comisura de sus labios- tenías...- muestra su dedo y luego lo limpia en una servilleta. Regulus asiente. -Hoy tienes entrenamiento- cambia de tema- ¿quieres que trate de ir solo?- pregunta inseguro, tomando la mano de James que está sobre su muslo, para entrelazarla con la suya. Cuando está cerca de James no recuerda que debe ser un Black, que debe mantener su apariencia de frío y serio, su magia simplemente se rinde ante la hermosa sonrisa de Potter. -No, no- niega rápidamente con la cabeza- iré contigo, el entrenamiento no es tan importante, Sirius puede quedarse a cargo si no llego. -¿Dices que soy más importante que un entrenamiento?- sus ojos brillan. -Claro que lo eres, ¿qué es esa pregunta?- frunce el ceño, confundido. -Es que a ti te importan mucho los entrenamientos- se encoge de hombros, mordiendo nuevamente su tostada- odio desayunar ¿sabes? James sonrie divertido y aprieta suavemente su mano. -Sí, lo sé. Y los entrenamientos son importantes para mi, pero menos que mi familia y amigos. -Extraño los pancakes de tu casa- se queja Regulus, en tono caprichoso. -Nuestra casa- corrige James- esa jalea te gustará- señala la jalea que probó ayer. [...] Regulus llora mientras se abraza a James, que no puede escuchar de qué hablan pero lo abraza firmemente, dándole su apoyo al pelinegro. La mujer responde algo y siguen charlando por dos horas. -¿Todo bien?- pregunta James, cuando Regulus le quita el hechizo. Black asiente, volviendo a hundir su cara en el pecho de Potter, mientras aspira su aroma, llenándose de paz. -Sí- responde con simpleza y se aleja, secándose las lágrimas con sus mangas. James las limpia con sus pulgares y besa su frente. Al final del pasillo, en la sala de espera, Alphard, Fleamont y Libra los esperan. -Hola chicos- sonrie Mont- no pude llegar antes, lo siento- se disculpa mirando a Regulus. -No se haga problema- responde Black. -Pensábamos ir a tomar un helado, el calor ya se siente, ¿no?- sonrie Alphard, mirando a los adolescentes. James mira a Regulus. -¿Quieres helado?- pregunta James. -¿Llegas al entrenamiento?- pregunta Black, James mira su reloj y asiente- entonces sí- asiente Regulus, tomando su mano. -Vamos de inmediato- sonrie Fleamont, tomando a Lib en sus brazos y haciendo algunas vueltas y morisquetas. [...] -¿Todo bien, cariño?- pregunta Alphard, mientras caminan por el parque, James y Fleamont van corriendo carreras con Lib. -Un poco mejor que ayer- responde sincero, comiendo su helado. -Me alegra, cariño. Sabes que puedes hablarme cuando sea ¿no?- Regulus asiente- que calor- se queja. -Sí, bastante- asiente Regulus. -¿No compramos ropa de verano? ¿o no quieres ponerte ropa de verano? -Yo...- mira su helado, cabizbajo- no me siento cómodo con mi cuerpo. -Lo comprendo, Regulus. Yo también pasé por eso- asiente Alphard- pero me desmayé varias veces por el calor, hay que buscar un punto medio, alguna ropa ligera que te haga sentir cómodo y no sea tan calurosa. Regulus asiente y se mantienen en silencio por unos minutos. -¿Cómo se dio cuenta que estaba enamorado del señor Fleamont?- pregunta de la nada, la idea de estar enamorado de James sigue dando vueltas en su cabeza. -Bueno- sonrie- no lo sé, fue... complicado para mi aceptar que me gustaba alguien genuinamente. Traía las ideas Black y la exigencia de casarme con una sangre pura millonaria, pero...encontré una paz en Monty que nunca había tenido, puedo hundirme en sus brazos mil millones de veces y nunca me aburriré. Él es increíble, es un gran hombre, caballeroso, divertido, esa chispa que tiene me hace sentir vivo, él es- suspira enamorado- no puedo decirte como me enamoré pero puedo decirte cada cosa que amo de mi esposo- sonrie ampliamente- uno no se levanta un día y dice "me enamoré" solo... se va dando. Pero por "señales"... tu corazón late rápidamente, sientes como cosquillas en el estómago, no dejas de pensar en esa persona, tienes pánico de que le ocurra algo e imaginas tu día a día a su lado. Regulus sonrie y baja la mirada. -Eso es muy hermoso, señor- responde el adolescente. -Cuando creas estar enamorado, escucha a tu corazón y él sabrá la respuesta- concluye Alphard. -Mierda se hizo tarde- se queja James, deteniendo su paso. Él ya terminó su helado, Black sigue comiendo lentamente el suyo- debo volver- avisa, mirando al pelinegro. -Voy contigo- asiente Regulus. -Aparézcanse en casa y toman la chimenea- resuelve Mont- nos vemos el finde. James asiente. -Gran idea- se acerca a Regulus y lo abraza por la cintura, antes de pronunciar el hechizo. -Los amamos- saludan los Potter, al unísono. James y Regulus sonríen antes de desaparecer. [...] Potter se cambia rápidamente en el vestuario, mientras Regulus lo espera con el protector de pecho y el casco. -Ya me puse el pantalón- avisa James, dejándolo entrar. Ambos están apurados. Black ata el cabello de James para que le sea más fácil vestirse y Potter se coloca la camisa "07 Potter" se lee en su espalda- Ya estoy, gracias. -Sí, y que te rompa el pecho una bludger- responde Black, hablando sarcásticamente- mueve los brazos, te ayudaré con eso. James hace caso y termina saliendo del vestuario luego de que Black lo aprobara. -Debo ir, ya estoy diez minutos tarde. -Entrena mucho- sonrie, colocándole el casco. -Quédate cerca- pide quitándose el casco para besar su mejilla y luego volviéndoselo a poner para correr al campo de quiddich y tomar su escoba, ascendiendo en el aire. -James, ahí estás- sonrie Sirius, en el aire- ¿todo bien? -Sí, genial- responde Potter- RECUERDEN QUE ES UN ENTRENAMIENTO, PUEDEN PREGUNTAR LO QUE SEA, ¿ESTUDIARON LA JUGADA?- grita, hablando con su equipo. Regulus lo mira mientras sube la grada, con su helado en mano, al cual le puso un hechizo para que no se descongele. Lupin y Lovegood están sentados allí, organizando algo. -Hola- saluda Regulus, sentándose junto a Remus. -Hola Regulus- saludan los castaños. -¿Qué hacen?- pregunta. -Organizamos la ultima juntada del club de ajedrez- responde la de rulos. Regulus asiente y no dice nada más. [...] -Muy buen entrenamiento, chicos- sonrie Potter, quitándose el casco y tronándose el cuello- hay que mejorar algunas técnicas, Sirius, Frank y Lene, pero en general muy bien. Tomen agua y hagan los estiramientos, nos vemos el miércoles. Lupin y Lovegood bajan las gradas, seguidos por Black. -Hola- sonrie Regulus, mirando a James- fue un gran entrenamiento. -Sí, hay algunas cosas que pulir- responde, quitándose los guantes- es tarde, toma mi abrigo, te resfriarás- señala uno de sus buzos, sobre el bolso. Regulus asiente y camina, a tomar el abrigo. -Entonces listo, me encargaré de los bocadillos- escucha la voz de Lovegood. -Genial, cookie- responde Remus. -Ey chicos- saluda Sirius acercándose ellos- ¿viniste a ver a James entrenar?- sonrie, codeando a la chica. -Aprenderé todos los idiomas del mundo para decirte en cada uno de ellos que no volveré con James- suspira la ravenclaw, acomodándose los lentes. -Vino a ayudarme con la reunión del club de ajedrez- explica Remus- tu querías que viniera y yo tenía que organizar eso. Regulus vuelve hasta James, ya con el buzo puesto. James sonrie enternecido. -Te queda muy grande- estira su mano apretando suavemente la mejilla de Black. -No, tu eres demasiado grande- se queja Regulus, cruzándose de brazos. -La genética, supongo- se encoge de hombros y bosteza, mientras hace sus estiramientos. -Gracias por acompañarme hoy y lo de anoche- agradece, jugando con las mangas del buzo, que le queda estúpidamente grande. -Un placer- responde James, sonriente. -Los chicos te agradecen también por lo de anoche, yo... no puedo detener mi cabeza cuando comienza a pensar. -No te preocupes, bonito. Me gusta poder ayudarte- le guiña un ojo, tomando su escoba- vamos, ya casi es la hora de la cena- extiende su mano, Regulus mira a su alrededor, ya no hay nadie allí. La toma, caminando a su lado. [...] Miércoles. Hoy es un día especialmente difícil para Regulus. Anoche no pudo dormir casi nada y James lo sintió en su magia, asi que decidió hacerle una sorpresa. Potter no durmió, preocupado por Black, asi que se levantó más temprano y preparó sus pancakes caseros, con la receta de papá Mont. -Muchas gracias por dejarme usar la cocina- agradece James a los elfos- son muy amables, esto lo pondrá muy feliz a Regulus. Toma un plato lleno de pancakes y camina al gran comedor, donde encuentra a Regulus sentado en la mesa de gryffindor, charlando con su hermano mayor, nuevamente en francés. James deja el plato frente a Regulus y Black levanta la mirada, observándolo curioso. -Buen día, sentí que no dormiste anoche, hice los pancakes que te gustan- sonrie cálidamente, sentándose a su lado. -¿Hablas en serio?- pregunta, sonrojándose levemente. -Sí, sé que te gustan y... no dormí asi que...- se rasca la nuca- estaba aburrido y me gusta cocinar, si no los quieres...- estira su mano, Regulus aleja el plato. -Claro que los quiero, son míos, no los toques- lo mira mal. James sonrie divertido y eleva las manos, luego las baja coloca su mano derecha en el muslo izquierdo de Black -Todo tuyo, Reg- responde Potter. -¿Qué?- pregunta Sirius, entrecerrando los ojos. -El desayuno- aclara James. -Ah, más te vale- lo señala con la cuchara. Regulus se estira y toma la miel. -Hoy tenemos entrenamiento- recuerda James, mirando a su mejor amigo. -Sí, ojalá no llueva Remus dice que hay viento de tormenta- se encoge de hombros. Regulus lleva el tenedor a su boca y cierra los ojos, sintiendo el delicioso gusto. -Gracias- sonrie Regulus mirando a James. Sus ojos brillan, emocionados. James devuelve la sonrisa y aprieta suavemente su muslo. -De nada- responde James, mirándolo con amor.
41 Me gusta 0 Comentarios 0 Para la colección Descargar
Comentarios (0)