ID de la obra: 622

El alma gemela de Professor Chaos

Slash
NC-17
En progreso
2
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planificada Maxi, escritos 46 páginas, 18.195 palabras, 6 capítulos
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Capítulo 3

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Después de que se presentara, Kenny intentó no mirar al recién llegado con demasiada intensidad. No era la primera vez que sentía atracción instantánea por alguien, pero nunca antes una mirada lo había hipnotizado tanto. Afortunadamente, parecía que Leopold también se sentía atraído por él porque lo miraba disimuladamente cada vez que daba un sorbo a su café. Esos pocos segundos que el otro invertía en apreciarlo eran como combustible para la autoestima de Kenny, que había caído en picada debido a la indiferencia de Chaos. La tercera vez que Kenny sorprendió a Leopold fingiendo no estar mirándolo, sonrió y decidió iniciar una conversación diciendo que era un cliente habitual y que nunca había visto a Leopold en la cafetería antes. Entre sonrisas y miradas tímidas, su acompañante le dijo que era la primera vez que visitaba Tweeks’ Bros. Su oficina estaba a un par de calles, pero casi siempre estaba ocupado y siempre usaba el servicio de entrega a domicilio. Se sorprendió al descubrir que un lugar tan popular fuera tan pequeño. Cuando Kenny dijo que estaba agradecido de que el lugar fuera pequeño porque de lo contrario no habrían tenido la oportunidad de compartir mesa y conocerse. Leopold se sonrojó y tartamudeó una respuesta incomprensible, parecía que no esperaba que Kenny fuera tan directo. Pasaron la siguiente hora hablando de cosas triviales. Kenny nunca había congeniado tan rápido con alguien. Las palabras salían de su boca sin filtros y su acompañante sonreía con cada una de ellas, haciendo que Kenny experimentara una sensación cálida y agradable en el pecho. La gente solía decir que sentirías una conexión instantánea e inexplicable con tu alma gemela en cuanto la conocieras. Si no fuera porque sus ojos no brillaban, Kenny habría creído que estaba en presencia de su pareja. Frunció la nariz inconscientemente. Por supuesto, su mente tenía que divagar sobre las almas gemelas. Antes del “incidente”, apenas pensaba en eso, y ahora estaba relacionando una ligera atracción con las almas gemelas. Claro, Leopold tenía una sonrisa linda, era su tipo y, hasta ahora, su personalidad era lo bastante tolerable como para considerar la idea de invitarlo a salir. Pero era obvio que estaba exagerando sus sentimientos porque estaba… ¿triste? Bueno, ahora no se sentía triste. No tenía razón para estarlo. De hecho, iba a pedirle el número de teléfono a Leopold porque la estaba pasando bien. Cuando lo pidió y el otro aceptó sin dudar, McCormick sonrió y pensó "que se joda Chaos". Kenny era un buen partido y podía ligar con quien quisiera. Mientras que el profesor no era más que un hombre malvado, cuya opinión no importaba. Sin embargo, cuando Kenny estaba en medio de anotar el número de Leopold en su teléfono, el sonido de un fuerte estruendo, seguido del escaparate de la cafetería rompiéndose en mil pedazos, lo detuvo. Ante el repentino sonido, el cuerpo de Kenny se movió por puro instinto. Saltó frente a Leopold, le agarró la mano y actuó como su escudo. —¿Estás bien? —preguntó al mismo tiempo que analizaba la bola metálica que había roto la ventana, reconociéndola de inmediato como una de las bombas de humo del Profesor Chaos. —Eh… sí… —respondió Leopold atónito. Luego frunció el ceño, mirando la bomba de humo que había causado el alboroto. A Kenny le pareció extraño que Leopold se viera más desconcertado y curioso por la aparición repentina del proyectil que asustado, a diferencia de los otros clientes, que ya habían comenzado a correr hacia la salida de emergencia. Leopold le había contado que era un adicto al trabajo que apenas veía las calles o hablaba con la gente. Así que conocía los constantes ataques de Chaos a la ciudad, pero probablemente nunca había estado en medio de uno y no era consciente del peligro en el que estaban. —¡Por favor! ¡Tengan cuidado! ¡No empujen! —Tras el mostrador, Tweek intentaba calmar a los clientes que corrían mientras señalaba la salida de emergencia. Craig no estaba por ninguna parte, lo que significaba que Super Craig aparecería pronto. —Ven conmigo. —Kenny apretó la mano de Leopold y lo arrastró hacia la entrada principal. Ese camino estaba despejado porque tenían que saltar la bomba de humo para llegar a la puerta, y eso parecía peligroso, pero Kenny sabía que tenían tiempo suficiente para salir antes de que la bomba explotara. A diferencia de intentar salir por la salida de emergencia donde todos estaban en pánico. Afortunadamente, Leopold no se resistió. Siguió a Kenny y saltó la bomba sin hacer ningún comentario. Por supuesto, cuando llegaron a la calle, Leopold no pudo permanecer callado más. Exclamó un —¡¿Qué demonios?! —que sonó tierno en comparación con la grosería que Kenny murmuró por lo bajo. La calle que hacía unos segundos tenía gente caminando y viviendo un día normal, se había convertido en un avispero recién golpeado. Gente corriendo, autos chocando y bombas de humo esparciéndose por todo el pavimento. Kenny tiró de Leopold de nuevo y corrió con él hacia el lugar más seguro que pudo localizar. Mientras corrían, vieron a los secuaces robóticos de Chaos luchando contra Toolshed y Human Kite, y al General Disarray en lo alto de un edificio pequeño, con armadura, lanzando bombas de humo por todas partes. Kenny odiaba la idea de dejar a su compañero, pero necesitaba convertirse en Mysterion. Así que, cuando llegaron a su destino y las bombas explotaron, fingió perderse. Se estremeció al escuchar a Leopold gritar su nombre con fuerza. Pero no tenía tiempo que perder, lo ignoró y se escondió en el callejón más cercano para cambiarse. Para su sorpresa, cuando volvió, descubrió que Leopold todavía estaba en medio de la calle, intentando encontrarlo a pesar del humo, jugueteando con sus manos y pareciendo un niño pequeño que había perdido a sus padres. —Hey, tienes que salir de aquí —dijo Kenny mientras caminaba hacia él. Leopold dio un salto hacia atrás, asustado por la voz, y adoptó una postura de batalla, poniendo espacio entre ellos. Sin embargo, en lugar de parecer amenazante, Kenny pensó que seguía pareciendo un niño perdido. —Está bien. Estoy aquí para ayudar —continuó diciendo Mysterion, haciendo gestos con las manos para asegurarle a Leopold que no era una amenaza. Leopold bajó las manos con vacilación, pero todo su cuerpo seguía tenso—. Soy Mysterion. —Kenny sabía que tal vez Leopold no sabía nada sobre su apariencia, pero quizás su nombre le sonara. —Lo sé —respondió Leopold con un tono frío y extrañamente confuso. —Este lugar no es seguro; tienes que irte —Kenny intentó escoltar a Leopold, pero él negó con la cabeza y dio otro paso atrás, asegurándose de mantener una distancia prudente entre ellos. Cuando Kenny preguntó qué pasaba, todavía confundido y preguntándose por qué Leopold estaba actuando de manera completamente diferente a antes, el otro se quedó unos segundos en blanco antes de cubrirse el rostro con las manos. —Lo siento… Perdí a alguien —dijo con voz temblorosa y apagada. Claramente bajando sus defensas. Al principio, Mysterion no supo cómo reaccionar, luego le dio una palmada en el hombro para calmarlo al tiempo que pensaba que los civiles tenían reacciones muy extrañas en situaciones peligrosas; Leopold teniy la más extraña de todas. Como respuesta a su acción, Leopold cerró la distancia entre ellos y lo abrazó con fuerza. —Necesito tu ayuda —susurró en su oído, haciendo que a Kenny le recorriera un escalofrío. —Tranquilo, te ayudaré a encontrar a quien buscas—dijo Mysterion. Leopold había escondido el rostro en su cuello y estaba presionando su cuerpo contra el suyo. Era suave y cálido, y su cabello olía bien, así que Kenny no pudo evitar corresponder el abrazo. —Mysterion, tú… ¿qué estás haciendo? —Cuando Kenny apartó la mirada de Leopold, encontró a Super Craig y Wonder Tweek mirándolo algo divertidos y confundidos. Leopold se tensó y Mysterion lo oyó murmurar algo que no pudo entender. —¿De qué se trata este ataque? —Mysterion ignoró la pregunta y dio una palmada en la espalda de Leopold, sin importarle si Craig y Tweek encontraban extrañas sus acciones. Claro, Mysterion normalmente no era amigable con los civiles, pero sí se preocupaba. —No lo sabemos, los intercomunicadores de Human Kite y Toolshed no funcionan. —¿Quién es él? ¿Necesitas que lo cure? —Tweek hizo un gesto con la mano para invocar sus poderes de sanación. —¿Estás herido? —Mysterion frunció el ceño y apartó a Leopold con suavidad. Por un breve momento, Leopold clavó las uñas en la ropa de Mysterion, como un gato, pero finalmente dio un paso atrás y miró a Wonder Tweek como si, en lugar de proponer curarlo, estuviera amenazando con golpearlo. —¡Estoy bien! No… estoy bien. —Oh… —Tweek se desinfló, Craig frunció el ceño y Leopold volvió a tensarse. —Está bien —Mysterion intentó calmar a Leopold abrazándolo, parecía bastante incómodo con los otros superhéroes cerca, y Kenny tenía un impulso antinatural de protegerlo—. Ellos están aquí para ayudar. Super Craig y Wonder Tweek, has oído hablar de ellos antes, ¿verdad? —S-sí… —Leopold comenzó a juguetear con sus manos otra vez—. Tengo que ir a buscarlo… —Sacudió la cabeza y comenzó a caminar hacia atrás, sin atreverse a quitarles la mirada de encima a los superhéroes. —Espera. —Kenny no permitiría que Leopold siguiera deambulando por esa zona peligrosa buscándolo—. ¿Eres tú Leopold? —¿Sí? —respondió el aludido antes de tropezar solo. —De camino aquí, ayudé a un tipo que te estaba buscando. ¿Es él a quien buscas? Se llama Kenneth. —¡Sí! ¡Sí, es él! —Lo llevé a un lugar seguro; no tienes de qué preocuparte. —¿Lo hiciste?... ¡Oh! ¡Gracias! —dijo Leopold con una pequeña sonrisa y se parecía más al joven con el que estaba en la cafetería, más seguro y cómodo con su presencia. —Ahora debería llevarte a salvo a ti también. Fue difícil renunciar a la compañía de Leopold; cuando lo hizo, Kenny sintió como si le hubieran hecho un agujero en el pecho. La razón por la que se sentía así era porque era poco probable que volviera a ver a Leopold. No había escrito su número. Era increíble que un encuentro tan breve lo hubiera hecho sentir así, e incluso más increíble que después de semanas sin dar señales de vida, Chaos apareciera ahora, arruinando su oportunidad de tener una cita. Mysterion iba a hacer que el villano pagara. Sin embargo, cuando Wonder Tweek, Super Craig y Mysterion llegaron al lugar donde sus compañeros superhéroes estaban luchando, Mysterion descubrió que Chaos no estaba por ningún lado. Human Kite y Toolshed les explicaron que estaban haciendo una patrulla rutinaria —estaban espiando a Kenny— cuando vieron al General Disarray. Aún no sabían dónde estaba Chaos ni qué estaba tramando. —Ríndete, General, claramente estás superado en número —dijo Human Kite al villano, que aumentó el ataque con bombas e intentó llamar a más secuaces robóticos. Solo estaba retrasando su inminente derrota. Q —¡Hey! ¿Por qué cinco contra uno? ¡Eso no es algo muy heroico que digamos! ¡Bravucones! —Cuando Mysterion oyó la voz de Chaos, se giró tan rápido como pudo y vio al profesor al otro lado de la calle. Calamity Heidi y el Joker Mexicano estaban con él. —Profesor, lo siento, no quise que esto pasara —el general estaba bastante feliz de ver que había llegado refuerzo. —No te preocupes, sé que no es tu culpa. Ellos son los que siempre están inter… —Chaos estaba a punto de empezar un discurso, pero Mysterion le lanzó un pedazo de una bomba de humo recién explotada. —¡Hey! ¿Qué te pasa? —Chaos esquivó el proyectil por pura suerte y estaba indignado de que Mysterion lo interrumpiera. Kenny estaba bastante enojado. ¿Cómo se atrevía Chaos a aparecer ante él? ¿Viéndose tan tranquilo después de haberlo hecho sentir paranoico, miserable y un poco inseguro todos esos días? Como respuesta, Kenny se abalanzó sobre Chaos y todos comenzaron a pelear. Mysterion y Chaos generalmente evitaban pelear entre sí sin un plan. Chaos era un luchador a distancia y Mysterion era un luchador cuerpo a cuerpo, así que bajo ciertas circunstancias podían poner al otro en serios problemas. Además, si Wonder Tweek y Super Craig estaban cerca, Chaos siempre los atacaba a ellos. Pero ahora Kenny tenía una NECESIDAD de patearle el trasero al villano. Desafortunadamente para él, Chaos estaba haciendo un gran trabajo manteniendo la distancia y lo había golpeado en varias ocasiones. —Oh, ¿qué pasa, Mysterion? ¿Por qué estás tan enojado conmigo? —preguntó Chaos después de un fuerte golpe que derribó a Kenny. En el suelo, Mysterion frunció los labios y apretó los puños, incapaz de creer que Chaos lo estuviera venciendo. Intentó calmarse. Su estilo de lucha y estrategia dependían de que estuviera concentrado y ahora decir que estaba furioso sería quedarse corto. —Podría acabar contigo ahora —dijo Chaos, rodeándolo—. Ninguno de tus amigos está prestando atención. Kenny resopló. —Pero aunque arruinaste algo muy, MUY importante que estaba haciendo, sí ayudaste. Así que solo voy a golpearte un poco más y me iré. No puedo seguir perdiendo el tiempo contigo. Mysterion apretó los dientes. Por supuesto, Chaos tenía mejores cosas que hacer que estar con él, o buscarlo… o lo que fuera. —¿Qué planeas ahora? ¿Qué estabas haciendo? No voy a dejar que lastimes a alguien. —Mysterion sabía que el Profesor Chaos adoraba dar monólogos; alentarlo a hablar le daría tiempo a Kenny para recuperarse. Chaos sonrió y se arrodilló junto a Mysterion mientras aplaudía emocionado. —Te lo diré. ¿Quieres saberlo? —Miró a todos lados—. Pero no deberías decirle a nadie sobre esto. Chaos estaba completamente loco. ¿Cómo era posible que él fuera su alma gemela? —Tuve una cita hoy. Era guapo, divertido y, oh, tan apuesto. —¿Una cita? —Kenny sintió la garganta seca—. ¿Y tu alma gemela? —No pretendía preguntar eso, pero no pudo evitarlo. La pregunta salió de sus labios sin permiso. —Él era… —Chaos interrumpió sus palabras y sacudió la cabeza, al mismo tiempo que murmuraba—: estúpido, no seas estúpido… —Luego preguntó en voz normal—: ¿Qué… qué pasa con él? —¿Por qué estás en una cita…? ¿Por qué no has buscado a tu alma gemela? —Bien, ya estaban hablando de eso, y probablemente nunca tendría la oportunidad de preguntar otra vez. El Profesor Chaos detuvo sus movimientos e inclinó la cabeza, confundido, luego se encogió de hombros. —No puedo acercarme a él. —¿No puedes? —No, no. —El villano lo pinchó en el pecho y lo electrocutó un poco con cada toque—. ¿Por qué actúas como si no supieras por qué? Kenny intentó detenerlo, pero estaba intrigado y esperando una respuesta, así que soportó el dolor. Chaos suspiró. —Ustedes siempre están sobre él, vigilando, no puedo ir y simplemente decir “hola”. No puedo dejar que descubras mi identidad secreta, tonto. Además… —Chaos se mordió el labio y Kenny encontró esa acción atractiva. Se preguntó cómo se vería Chaos detrás de su casco y las gafas—. No estoy interesado. Esas últimas palabras, sin embargo, lo hicieron dejar de preguntarse. —¿Por qué no? —Una vez más, no pudo detener su boca. —Yo no salgo con gente “normal” —dijo Chaos, poniéndose de pie antes de usar sus poderes para electrocutarlo un poco más—. En fin, nos vemos, Mysterion. Adiós. Mysterion sintió sus músculos convulsionarse y doler por la descarga eléctrica. Unos segundos después, cuando sintió que sus músculos dejaban de tensarse, resopló otra vez. Bueno, al menos la razón de Chaos para no buscarlo no era que él no fuera atractivo. Chaos solo pensaba que no valía la pena poner en riesgo su identidad secreta por su alma gemela civil. ¿Por qué no había pensado en eso? Era obvio que tener a Kyle y Stan vigilando cada uno de sus pasos disuadiría a Chaos de acercarse. Si tan solo supiera que Kenny era todo menos normal. Mysterion casi sonrió, pero terminó frunciendo el ceño. "¿Una cita? ¿Chaos dijo una cita?" pensó alarmado. Su alma gemela, Chaos, tuvo una cita con otra persona. Cuando hace apenas unos días, se enteró de la existencia de Kenny, su alma gemela. ¿Que pasaba por la mente de Chaos?
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