Marta y Fina

Elsa llegó al Laberinto corriendo,en este caso una granizada real se abatía sobre Madrid. Patada en la puerta y para dentro,se fue a toda prisa a la sala del lector de dvds,una tele de las antiguas y un triste reproductor que funcionaba a golpes. Buscó entre las estanterías de películas,y allí estaba When Marnie was There,nostalgia Yuri,mientras pensaba en lo que no quería pensar. Y si Cata no era la pija,estaba claro que Sol era la emo,pero podía haber una tercera pija,no,estaba divagando. Ese arcoiris andante,el beso robado,solo podía ser Cata. ¡Y la jodida emo colgada de ella! La película de anime seguía desarrolladose,la amistad mágica e inquenbantrable entre dos niñas,separadas por las mareas de unas marismas. ¿Sueño? ¿Realidad? Sacó un canuto del bolsillo del pantalón. Solo quería olvidar,olvidar para siempre. La película,como cuando tenía doce años,la hizo llorar.las pocas lagrimas que le quedaban,algo de emo tenía ella también entonces,las modas... Entre una emo y una pija,atrapada en un pantano de amor. Tenía la mente encasquillada como las inútiles Browning de los villanos de Tintín. Apago el reproductor. Se fumó otro canuto y otro y otro. Cata la pija. Sol la emo. Estoy bien pero que bien jodida. Los canutos le provocaron un duermevela,recuerdos inconexos,primeras comuniones de amiguitas,aguantando los porrazos de los maderos en las manis. Me estoy volviendo loca. Cata apereció en la habitación como un fantasma,y luego desapareció,la granizada había parado,el frío se coloba por las infinitas rendijas del Laberinto. Sol Sáez,Sol Sáez,Sol Sáez,en la emo estaba la respuesta,pero también el miedo,la rival,que podía hundir a Cata hacia el abismo con su ultrarromanticismo y capacidad de generar pena. Los canutos acabaron por tumbar a Elsa,la película seguía como una cinta sin fin,un ciclorama,un carrousel...